Partida Rol por web

Heridos y más muertos que vivos, los supervivientes del grupo lograron llegar a la costa, donde les espera el bricbarca pirata y su bandera roja ondeante. Cuando llegaron, lejos de alegrarse el resto de marinos, se quedaron dudando debido a que no escuchaban rugidos procedentes de la chalupa que se aproximaba, sino todo silencio. Esto les desazonó. Sin embarco, una vez junto al casco de Le Sauvage, amarraron bien la chalupa y la elevaron por un costado.

Finalmente, os apeásteis del barco y tocásteis de nuevo la cubierta del Capitán. Allí, vuestro amigo Phillip os saludó (de hecho fue el más efusivo), mientras que un más que impaciente Merc os esperaba impaciente y malhumorado... Sin embargo, cuando vio sacar los dos cofres se alegró, se atusó el bigote sonriendo y toda la tripulación lanzó "vivas" y alguna que otra salva con cañones y disparos... Después se acercó a los cofres, los tocó y sonrió a carcajadas, casi desencajándose... parecía no echar de menos al malogrado Chandock, pues ni preguntó por él.

-Chandock ha muerto. Y también los que faltan. Una tribu entera de indios nos atacó y a punto estuvimos de morir todos. Y a los que cogieron vivos, por lo que vimos de lo que les hicieron, más les valdría haber muerto.-Lucía contó todo esto como si estuviese dando el informe de la misión, sería dificil notar en su cara o en su voz un rastro de rabia o amargura. Pero quería que el capitán supiera por lo que habían pasado, a donde los había mandado. Preocupación inútil, desde luego, al capitán le importaban un ardite cualquier cosa que no fueran los dos cofres.

Juan se quedo callado, espereando a ver que decia el capitan, quizas habria mas aventuras, pero esperaba que no fueran como esta, nada de Vudu, en cuanto pudiera, se enrolaria en otra tripulacion, se recordo en que se lo tenia que decir a sus nuevos compañeros, por si se ivan con el, pero no penso mas en ello, eso seria cuando llegaran a un puerto, si esk llegaban....

Ahí estábamos de nuevo. Vuelta a la falta de espacio e intimidad, al pan de bizcocho con gusanos, ratonado, duro y mal remojado, el agua cenagosa y desabrida, la grita y el olor de los marineros, el comezón de la ropa lavada con agua salada, el sueño inquieto sobre una tabla y con una rodela por almohada, siempre a cuerpo gentil bajo el sol, el calor, la lluvia y el relente de las frías noches en el mar. Perdida la oportunidad de ser ricos y poderosos. Quizás para siempre. Esa fortuna que a veces el mar hace posible. Muy pocas veces, y para quien se arriesga y lo intenta... 

Me alegré cuando Lucía empezó a dar explicaciones al capitán, pues malditas las ganas que tenía yo de hacerlo. Sólo esperaba que no se ofendiera laFleur porque una mujer tomara la iniciativa en su barco. Yo por mi parte, me sumé al mutismo de Juan. Pero con orgullosa cara de satisfacción. ¡Ahí estaban -ante mis ojos- los jodidos cofres! 

PNJOTIZADO.

Esa isla es el infierno, capitán... -dijo el doctor. No he visto en mi vida tales heridas atroces como las que vimos ahí, ni siquiera mientras operaba a dos contendientes en una misma camilla tras su lucha...

Tragó saliva y esperó la decisión del capitán. No quería añadir mucho más, sino olvidar de su cabeza el haber dudado si abrir o no los cofres, si llevárselos a otro lugar y saquearlos...

En esos momentos, pese a que no lamentó en absoluto la muerte del contramaestre, LaFleur ordenaró proteger en el camerino de especias y alimentos los cofres y levar anclas inmediatamente, poner rumbo a la Tortuga y abrir un barril de ron para celebrarlo. Los piratas festejaban su buena suerte y su nueva fortuna alegremente, bailando entre si y volviendo a disparar hacia las nubes, en medio de cánticos marineros no muy recomendados para un niño de temprana edad...

Sin embargo en medio de la improvisada fiesta que se había alargado más de lo habitual, al caer la noche en su nuevo rumbo a Tortuga,  os llevásteis una sorpresa; mientras os encontrábais en cubierta bebiendo, riendo, hablando con el resto o brindando sin tapujos, vísteis algo terrorífico...:

... De la misteriosa trampilla que había en cubierta, aquella por la que un día alguno de vosotros se internó destapando una sospecha que ninguno se atrevió a comentar con claridad, salieron los tipos que tenía encerrados LaFleur, de los cuales dos lucharon y perdieron la vida en el asalto en alta mar. Ahora parecían tener un aspecto más blanquecino, mortífero, tenue y desgastado...: ¡¡ERAN ZOMBIES!!

Los zombis del Capitán, tras abrir la escotilla rápidamente, subieron a cubierta y, sin ninguna expresión en sus rostros muertos, empezaron a atacar a los desprevenidos piratas, los cuales a estas alturas, muchos de ellos estaban borrachos y cargados de ron su estómago tal como un tonel o un barril entero... LaFleur, que se encontraba en popa, se atrincheró detrás de un falconete, junto al timón, dispuesto a lanzar una nube de metralla contra aquél que se acercara hasta él.

¡¡¡ JA JA JA...!!!, ¡¡¡ JA JA JA JA JA!!! -reía sin descanso el Capitán.

La verdad es que Ricardo y sus compañeros no tenían mucho que brindar, pues pocos eran los amigos que había entre la tripulación, y poco se fiaba de ese avieso capitán de mirada torva. Por ello buscó a sus compañeros con la mirada, incluido al pelirrojo artillero -si es que todavía era de fiar-, e instó a arriar la barcaza. A Phillip y a Juan. Él, Tony y Lucía irían a por uno de los cañones, para dispararlo.

-Nos iremos en la barcaza aprovechando la confusión reinante -dijo Ricardo a sus primeros compañeros en llegar-, mientras trataré de dejar un regalito a este malnacido, hija de tusona y tiburón.

Pese a que no me gusta dejar a la suerte de los dados el hecho de que los jugadores hagan o no una acción, tirad todos lo siguiente:

• 1d2. Si sale 1 habréis bebido en la fiesta. Si sale 2, no.
• Si sale un uno, lanzad 1d20 para "Fortaleza física" (CON) o en su defecto únicamente "Constitución", para ver si el efecto del alcohol os hace mella en vuestro cuerpo. Si no la superáis, estaréis borrachos. Si, lo estaréis xD, y en todas las tiradas de algunos atributos tendréis malus:

• -3 en tiradas de FU
• -4 en tiradas de AG
• -5 en tiradas de INtuición
• -5 en tiradas de PRE

Suerte.

PNJOTIZADO.

 Ni una gota xD

Lucía maldijo al capitán y a sus engendros levantados de los infiernos, mientras sacaba la pistola y corría junto a Ricardo, que al contrario que otros de los marineros estaba lo suficientemente sobrio para poder plantarle cara a aquellas criaturas.

-Si matamos al capitán, a lo mejor esas malditas bestias no tendrán a quién las mantenga vivas. Intentemos matarlo a él antes de destruir todo el barco. Vosotros disparais mejor que yo, podeis haceros cargo de esto solos, yo intentaré ir a por los cofres. A lo mejor podemos amenazar al capitán con echar por la borda lo que haya en ellos.

Lucía se giró para echar a correr hacia la sala de las especias, rezando porque los demás no murieran mientras tanto. Y rezando también por sí misma, que buena falta le haría.

Esta situación era muy diferente de la anterior. Mucho más crítica. El tiempo de reacción era perentorio. No era momento de intentar. Era momento de hacer. Y la diferencia entre intentar matar al capitán y bajar el esquife y disparar el cañón lo ejemplificaba a la perfección. Primero, porque matar al capitán era algo que el viejo lobo de mar se esperaría -tenía un falconete para atestiguarlo- y lo otro no. Y yo prefería verlo ahogarse en su codicia que ver sus tripas desparramadas por cubierta.

Pero Ricardo no tenía tiempo de dar tantas explicaciones. Simplemente miró fijamente a Lucía por unos instantes. Con esos ojos que se tornaban de escarcha cuando lo llevaban los Demonios, y parecían gritar a voces ¡Haz lo que yo diga! ¡Y ya! O quítate del medio, acompañado del gesto siniestro de su cara, crispados los labios en una mueca feroz, desabrida.

-¡Olvida los cofres, mujer!¡Y haz lo que te he dicho!

Después, y por instante graba la situación reinante en el barco a estas alturas de la felonía, mientras espera que sus compañeros muevan el culo de una puta vez.

Ricardo la detuvo cuando Lucía ya iba a empezar con su plan. Lucía le miró un momento, furiosa, pero se volvió para echar a correr hacia los cañones. Pero aún el que accediese a cumplir sus órdenes, y la batalla y la muerte a su alrededor,  no salvaron a Ricardo de recibir sus protestas airados, y mientras iban a por los cañones, atentos para quitarse de en medio cuanto antes a cualquiera que se interpusiera en su camino, Lucía le dejó bien clara su opinión.

-¡Maldito testarudo!¡Intentaba salvar el barco, no quiero tener que nadar hasta Tortuga! Vamos a por tu cañón, entonces, aunque sea sólo para despejarnos el camino al infierno

Juan si habia bebido en la fiesta, le hacia falta para olvidar el dinero que habian desechado y se lo habian dado a ese mago negro, en fin a lo echo, pecho, asi que en el primer puerto se piraria, se lo comentaria a sus amigos.... en eso estaba mientras tobaba ron con los marineros llegando casi a moverse mas que el barco, pero no llego a caerse como algunos de sus compañeros, y eso le salvo, pq cuando empezaron a aparecer los zombis, se le quito la tonteria de un plumazo, escucho a JUan y dijo: - Yo usaba el cañoncito de la barcaza para rebentarle esa boca de laFleu, si el cae, el Vudu se habra acabado, no quiero alejarme y dejarle todo el puto dinero que le hemos traido para que ahora nos lo arrebate con esa estupida risa, y cuando sube a la barcaza intenta girar el cañonzito y apuntar a LaFleu y dispararlo contra la zona en la que este intentando matarle....

¡Eh vosotros! -gritó a Lucía, Juan, Thorge y Ricardo-, ¡¡Vamos!! ¡¡Vamos!! ¡¡Vamos!! ¡No tenemos todo el día!

Allí estaba Phillip, en un lateral, soltado las amarras con otros dos marinos que harían descender poco a poco la chalupa que antes habían subido. Con ellos estaba el pequeño niño que se mareaba y se asustaba con las horribles historias de pirata y sangre que contaban tiempo atrás en alta mar... Phillip tiraba y tiraba de las cuerdas y manipulaba las poleas contrapesando todos los nudos con cuidado, mientras vigilaba la contienda entre los zombies y los piratas borrachos.

La entrada a camarotes estaba ocupada por los cuerpos tratándose de golpear de aquellos seres con los hombres, por lo que Lucía no podía atravesar justo el espacio de la batalla.

Obviamente, la mayoría de marinos, excepto vosotros estaba completamente ebrios, por lo que no eran rival para los casi veinte muertos vivientes, que vestian con ropas de marinos, pañuelos, parches, sombreros de pico y portaban armas de fuego... El rugido de la batalla era atronador, entrechocando espadas contra arcabuces usados como espadas, o culatas de improvisados cuchillos contra filos de verdad...

En esos momentos otra carcajada del malvado LaFleur hizo resonar en los oídos de todos los presentes desde la popa, a lo cual se le sumó un rostro desencajado y furioso... En esos momentos, apuntó a la multitud y disparó el cañón con metralla contra la multitud.

¡¡¡B   O      O        O           O   O   O   O O O O O O OOMMMM!!

Resonó en cubierta... En esos momentos, como si fueran granos de arena soplados por un huracán, los piratas y zombis que estaban en la dirección del cañón fueron empujados hacia atrás; muchos de ellos, del gran impulso, fueron trasladados hasta caer por la borda, dejando un gran hueco libre en cubierta, mientras que otros marinos se dolían de las numerosas esquierlas clavadas... A los no-muertos, parecían no afectarle cada uno de los pequeños metales incrustados en su piel...

Vosotros os percatásteis de este hecho, por lo que en el disparo os cubrísteis donde pudísteis, intentando esquivar el ataque. Incluso Lucía parecía haber leído el pensamiento del Capitán momentos antes, por lo que incluso logró empujar a unos de los zombis que andaban por allí de forma mareada hacia la dirección del disparo, haciendo que una gran esquirla en la trayectoria le cortara la cabeza y su cuerpo cayera desplomado a las maderas y tablones... Sin embargo, el doctor fue herido en la contienda...

me giro a mis compañeros y digo: - esta es la ocasion de matar a ese cerdo de Leflau que nos ha querido matar, acabemos con el de una vez por todas!!!!

y girando el cañoncito le disparo a donde esta lafleu reventando lo que este al lado...

Emmm....estoo...Juan...

...¿qué cañon?

(no hay baterías en cubierta colocados (lo hubiera dicho), únicamene el de LaFleur de popa. La chalupa está bajándose al agua, asi que tampoco... rectifica el post ;D )