Partida Rol por web

Al acercarse el hombre con las jarras, Traul aprovecha para preguntarle. Disculpa, ¿Sabes donde necesitarían los servicios de un aventurero?

-Bien, sin duda alguna será una dama digna de conocer, pero me estaba preguntando yo si nosotros podríamos participar con vosotros en esas tareas que tenéis que realizar, un poco de ayuda no os vendría mal, supongo.

Cruzo los brazos y me acomodo un poco más en la silla observando la gente que hay en la sala y esperando que aparezca esa mujer a la que se refiere Dimdel. 

Espero que vayamos juntos y podamos repartir las ganancias...

Capté la sonrisa y el rubor del tabernero

Oh, otro baboso, lo que hay que sufrir por tener un cuerpo tan perfecto y una cara tan bonita.

Pero me interesaba para mis fines. Vamos allá me animé.

Me levante sensualmente, dejando que mi mano cayera y rozara mi pecho de una manera sutil, casi casual. Me llevé los dedos a mis labios, les di un beso y se lo llevé a su mejilla. Sonreí, de una manera sencilla, casi virginal y le dije

Es usted muy amable por traernos las cervezas volví a sonreír mientras me ruborizaba levemente.

Como le ha dicho mi compañero, ¿no sabrá de alguien que necesite aventureros? Me vendría taan bien... añadiendo un leve suspiro a la palabra "tan" y alargándola intencionadamente, mientras uno de mis dedos recorría su mentón

Dimdel mantiene su cara burlesca, más bien era su cara siempre. Toma un poco de su cerveza, se limpia la boca y dice.

- Amigo, sin ofender, pero es un tema que tenemos que arreglar nosotros, no creo que algo salga bien de seguir reclutando gente... lo que si me parece es que realicemos alguna misión juntos, una que nos encomienden y podamos realizar como buen equipo!... Seamos una mano, un puño! Cada uno si pega por separado se rompería cada dedo, en cambio si golpeamos todos juntos destruimos la faz de nuestro oponente... eh?

Dimdel vuelve a tomar su birra, se la lleva a la boca, y mirando a los comenzales con la vista a travez del vaso dice. - Salud!

a mi me parece bien, yo esperare hasta que acabeis lo que teneis que hacer, pero acambio me teneis que dar una fecha y una hora para reunirnos de nuevo y darme vuestra palabra de que acudireis yo aceptare dicha fecha y nos volveremos a encontrar entonces

Bueno pues parece que tras urgar entre mis ropas he podido encontrar algo que pudiera servirve para estropear las cervezas de nuestros "amigos"...

Tras oir las palabras de Dimdel y las inquietudes de Mai-Cor y de Mordrogath añadí:

-Caballeros, como bien dice mi amigo Dimdel, tenemos una cuestión pendiente con nuestra querida Issa. Si todo sale bien hoy mismo acabaremos nuestro cometido y mientras lo hacemos no habrá ningún problema por ir buscando uno nuevo desde este mismo instante.

Cogí mi cerveza y tras beber un par de sorbos volví a mencionar:

-De hecho en cuanto bebamos todos un par de cervezas estaría dispuesto a preguntar al tabernero por algún trabajillo para comenzar nuestra amistad...

-¿Podemos saber que cuestión tenéis con esa tal Issa?. Vamos a trabajar juntos y aunque ese trabajo no beneficie a nosotros -digo señalando a Mordrogath-no estaría de más saber de que trata.

Rechazo la cerveza con un gesto ya que es demasiado temprano y no hay nada que celebrar aún.

- Oh vaya, dijo mirando a Snit e ignorando a Traul. Quizá puedas servirme de ayuda. Necesito hacer una cosa muy importante. Pero es algo, digamos de caracter muy personal, no me gustaría que todo el mundo se enterara. Dijo mirando al resto de la taberna. Si quieres puedes venir allí atrás, dijo señalando donde tenía la barra y la cocina. Allí podría explicarte qué es lo que necesito. Extrañamente de sus palabras no había connotaciones sexuales. Al hombre se le notaba nervioso, probablemente por tus insinuaciones, pero quizá aquello que quería de verdad parecía una cuestión personal.

Dimdel mira a Argot, y le guiñe un ojo. Después de eso le susurra. - Es el momento... A lo que vinimos y luego nos vamos con nuestros nuevos amigos, Issa no llega.

Interesante pensé intrigada

Está bien, después de usted, por favor. Le sigo

Cuando el tabernero pasó delante, guiñé el ojo a Traul, esperando que entendiera que quería que me esperara

Traul se queda esperando a su compañera y atento por si esta se encuentra en un problema. Esta sentado en tensión, pues no sabe nada de las intenciones de aquel hombre con su compañera.

Blahg sonríe más que satisfecho con lo que ha conseguido y toma de la mano a la preciosa Snit y le dice: - Por favor, acompáñeme. Seguido de esa frase la jovencita le sigue y ambos se meten al interior de la taberna. No lográis escuchar nada más de lo que allí sucede. 

Ahora la posada se encuentra vacía. Puesto que Blahg es el único tabernero que hay ahora mismo en el local.

- Mi nombres es Blagh, señorita. ¿Cuál es el suyo? Puedo confiarle uno de mis mayores secretos, verdad? Pareces una mujer de absoluta confianza.

Parece que el posadero tenia una misión. Lo cierto es que podíamos haberle preguntdo anoche cuando llegamos, pero primaba descansar y por otro lado, ya teníamos algo que hacer, así que...

Me mantengo a la espera de que Mordrogath o Dimdel digan algo, ya que si las cosas siguen así, me marcharé solo si hace falta.

Mucho gusto, Blahg, mi nombre es Snitdije mientras cogía con mis dos manos la mano del tabernero.

Su primer instinto fue confiar en mí, por eso me trajo aquí. Fiese de su instinto, y dígame cuál es su secreto, quedará aquí, entre nosotros añadí un pequeño apretón a su mano, para darle más confianza