Partida Rol por web

Maldita sea, ¿dónde se habría metido aquel tipo? Zila observó, si alguien hubiese entrado en aquellas ruinas calcinadas habría dejado huellas en la ceniza, manchando tal vez la calle de haber marchado, aunque la lluvia no ayudaría mucho, esperaba que no hubiese calado todavía demasiado y poder encontrar así algún rastro.

Entre los escombros Zila descubrió que efectivamente hubo gente que ya registró la zona, e incluso con animales y todo. Había algunos sitios, como muebles y demás que sin duda habían sido abiertos después de incendiarse todo. En caso de que hubiese habido algo estaba claro que ya se lo habían llevado. Sobre Ankus, no sabía ni quien era, así que era difícil saber si había rastros de él o de cualquier otra persona.

Allí ya no quedaba nada, ni nadie. Decidió volver a la catedral de Pelor, quizás hubiese vuelto allí.