Partida Rol por web

Turno 008

Gwalin tomó asiento gustoso y mirando al posadero pidió dos cervezas.

-Posadero, traeme dos jarras de cerveza -dijo sin saber si le había oído o no.

Luego miró al hombre y suspidró cuando le preguntó por lo que le había pasado.

-Llevo todo el día intentando buscar a Agranil y a su gente -dijo pesadamente, como si solo el hecho de pensar lo que había sucedido le cansara-. Pero no saqué nada de información y eso que me moví más que las alforjas de una mula coja. Ni aquí, en esta misma posada; ni en el cuartel, donde casi me arrestan; ni en la puerta de entrada, donde me dijeron que no me lo dirían ni aunque lo supieran; ni sobornando a un pequeñajo...¡por cierto!, el bribón de él no ha cumplido con el trato...maldito mocoso...

-Pues eso una tortura de día...grrmmmmmm -terminó con un gruñido mientras negaba con la cabeza.

-¿Cómo os llamáis? si no es intromisión -preguntó el enano viendo que nuevamente estaba hablando demasiado.

Turno 008B

- Fragulf me llamo. Dijo algo tímido pero sin reducir la voz como hizo anteriormente. Aún sorprendido por las noticias, que le habían preocupado bastante, su mente corría. Había varias posibilidades, pero que no le dieran esos datos tenía su aquel. - ¿Y por qué busca un veterano luchador enano a un comerciante humano?

Los comerciantes pueden ser víctimas de muchas maneras, pero si la guardia no le daba información, sería por algo en concreto y empezaba a sospechar la razón, en la cual, el mismo tenía que ver. Por otro lado, no se imaginaba quién había podido ser quién había tratado con el enano por la información, pero eso me hacía pensar que había sido víctima de una pequeña estaba. - Macho, creo que te han timado.

- La cerveza esa me va a durar. Pensaba temeroso del alcohol que el brebaje contenía.

Turno 008

-¿Que por qué lo busco?, pues para que va a ser, para enrolarme en su grupo -dijo y después levantó su jarra y bebió casi un tercio de su contenido.

-Lo malo es que no sé por qué no me dicen donde está o si está o algo. Sabes, yo he trabajado mucho tiempo de guardia y no trataba a la gente así. Les escuchaba y luego de buenas maneras les decía que no podía ser. Lo mejor era cuando se ponían tozudos y los agarraba, los levantaba y los lanzaba al fango donde retozaba la piara jajajajaja -rió de buena gana el enano, quien tras esto bebió otro tercio de su jarra.

-Bueno, y tú ¿de dónde vienes? -preguntó Gwalin sin tapujos.

RESOLUCION TURNO 008
 

El enano llego a la posada. Estaba algo resignado, enfadado e impotente. No había conseguido encontrar la persona que estaba buscando. Cuando entro pidió comida, y bebida, y se sentó a dar buena cuenta de ambos. Recriminaba veladamente al posadero, no haberle dado la información correcta. Gwalin se percató entonces de que un hombre se giró curioso cuando pronuncio el nombre de Agranil. El naugrim no era nada recatado, le gustaba ir directo al grano. Se levantó y se dirigió hacia la mesa de aquel hombre.

Desde la posición de Freagulf, ese era su nombre, vio como tras la comida un enano, algo grosero, entro como un elefante en una cacharrería. Así era aquella raza, directa y no muy sutil. Tras comer, vio como lo abordaba.

Gwalin se presentó directamente, sin más dilación, queriendo invitar al rohirrim. Contó como había llegado hasta allí, como los guardias se habían negado a atender sus preguntas y de cómo casi acaba encerrado. Todo ello hablando alto, sin importarle quien pudiera escucharlo. Freagulf, sin embargo, media el timbre de su voz. Hablaba bajo, sin elevar su tono, no porque no tuvieran que oírle, si no por que no veía la necesidad de gritar y para tratar de que el enano se calmara un poco, lo veía aun alterado.

El posadero trajo las dos jarras, poco le importaba que aquellos hombres se conociesen, gritaran o molestasen a otros clientes. Esos clientes no eran más que un pequeño grupo que apuraba sus licores tras el almuerzo. Lanzabas fugaces miradas a los dos recién conocidos, mientras sus caras reprobaban el ruido que hacían, pero a la vez no dándole importancia. Al poco tiempo se levantaron dejando las monedas, que el posadero les pidió, sobre la mesa. Se despidieron y sencillamente salieron por la puerta, dejando solo al enano y al rohirrim.

Aquella posada no era precisamente un alarde de lujo y de limpieza, pero se estaba bien y el posadero atendía a sus clientes con disciplina y tratando de ser amable. Era su negocio, y al fin y al cabo tenía que esforzarse en ganarse el sustento.

Gwalin estaba también molesto por el muchacho al que, al parecer, había dado y prometido alguna moneda a cambio de cierta información. Aquel chiquillo no aparecía, pese a que no hacia tanto que se había marchado el enano, ya desconfiaba que fuese volviese.

Freagulf y el enano quedaron solos, el posadero estaba tras la barra pelando patatas a la espera de que terminasen sus jarras y pidiesen otra ronda.

Turno 009

Tras su pregunta, el veterano enano se giró y vio que estaban solos en la posada. Esto no era normal en una posada, o por lo menos no en las que él había estado con anterioridad.

-¿Dónde demonios se ha ido todo el mundo? -preguntó para sí, pero en alto, Gwalin.

Apurando lo que le quedaba de cerveza en la jarra Gwalin se levantó y fue a la barra. Al llegar posó la jarra sin remilgos y luego pidió otra.

-Posadero, ponme otra jarra de cerveza -pidió y esperó a que se levantara y se la pusiera para abordarle con otra pregunta.

-Oye, ¿es normal que la taberna se quede sin gente? o ¿acaso se han ido por que pasa algo en la ciudad? o ¿es ha sido por nosotros? -preguntó sin pelos en la lengua el enano al posadero.

Turno 009A

No le sorprendió gran cosa que marchasen todos, pero parecía que el enano ya no estaba tan irritado por un crudo y duro día. - Mejor. Entonces le explicó: - Muchos de los parroquianos vienen a comer o a cenar, y luego retornan a sus quehaceres. Luego, por la tarde noche, suele tener más visitas el lugar. De todas maneras era un dato curioso que no merecía mucha importancia, por lo menos a ojos del aligartha, pero de detalles insignificantes había estado su vida plagado. Algunos no eran nada, y otros, por confianza excedida, habían costado la vida a muchos. No costaba nada sacar el hocico a la calle y escuchar un poco, oler, y mirar, a ver si sucedía algo.

Se empezó a poner en pie, dejando aún la jarra a medias y le comentó al enano. - Espera, vengo enseguida. Parecía que estaba por salir a mear, pero añadió un detallito extra que seguro alegraba al enano: - Y no preocupes por Agranil. No tardará en aparecer. Y si dirigió al exterior, a husmear, con la promesa de que en breve regresaría.

Turno 009A (BIS)

Turno 009
​Percepción

Freagulf salió a la calle. Allí no se oía  nada relevante, algún perro peleándose en la lejanía y  el viento silbar entre las callejuelas como mucho. La ciudad estaba en calma tras el almuerzo.

Turno 009A (BIS-BIS)

Pues varios ... avientos, me recoloco el pantalón y regreso.

Turno 009

Gwalin se giró mirando como Freagulf se marchaba de la taberna con prisas por saber algo que el enano desconocía. Su mano quedó levantada unos segundos hasta que se giró hacia la barra y se topó con la jarra de cerveza llena que acababa de pedir. Encogiéndose d hombros, cogió la jarra y le pegó un buen trago.

-Grrmmmmm -gruñó después de limpiarse la espuma con la manga-. Espero que éste sí que vuelva y no sea como ese mocoso que me ha timado un cobre -dijo volviendo a la mesa y sentándose pesadamente en la silla.

Turno 009B

El hombre rubio no tardó más que unos instantes en regresar, y tras eso, y por el camino recolocarse el cinturón, se sentó en el mismo lugar de donde había partido: - Yo no te he cobrado como por una información. Fue casi una comentario anecdótico, pero sabiendo el carácter de los enanos, se lo tomaría como una regañina. No se molestó en mirar a su interlocutor, mientras comentaba eso, tras lo que dio un largo y profundo trago a la cerveza, la cual no había tocado aún.

Luego le picó la curiosidad un poco más. Ahora si miraba a los inquisitivos ojos enaniles enmarcados por una inmensa y trenzada barba: - ¿Sabe Maese Gwalin que es probable que el comerciante quiera viajar muy lejos de aquí? Aún no se fiaba de las intenciones del enano. Se notaba. El que le invitase a la cerveza no quería decir que se hubiera ganado su confianza. aún tenía, ante sus ojos, que demostrar alguna que otra cosilla más ... y por ahora no la había sentido. Ya habían sufrido sus amigos bastante por otros, y no dejaría que ocurriera así otra vez, si lo podía evitar. Además, tenía una misión y el comerciante esgathoriano le podía ser de gran ayuda, no solo por su amistad, sino por la influencia.

- ¿Qué sabe la guardia de este luchador que yo aún no? Una desconfianza profunda se podía leer en sus gestos. Además, había hecho una prueba más ... y aún estaba por demostrarse su efecto. - Ahora veremos.

Turno 009

Al ver que Freagulf regresaba el enano sonrió, parecía que la suerte cambiaba de rumbo y se acercaba al guerrero. Sin quitar ojo de su nuevo compañero, Gwalin escuchó la primera frase y sonrió. -No hombre, no te sientas ofendido, lo decia por la mañana que llevo y porque seguramente el muchacho no venga - Luego cogió la jara de cerveza recién puesta y le dio un buen trago.

Mientras Freagulf le hizo una pregunta. Gwalin dejó la jarra con un golpe y se limpió nuevamente la espuma de la barba y bigote con la manga. -¡Para qué va ha ser, para enrolarme en su grupo! -dijo como si fuera obvio. -Mira joven, los naugrim que llegamos a mi edad nos puede pasar dos cosas, o nos amodorramos en nuestra ciudad hasta que morimos de inactividad, o nos entra una sed de aventuras, que nos hace querer viajar, ver nuevos lugares y enfrentarte a nuevos retos... hasta que algo te mata Jajajajajaja - La carcajada resonó en toda la sala, cosa que no pareció importarle en absoluto al enano.

-Por si no te ha quedado claro, yo soy del segundo grupo -dijo sonriente, volviendo a coger la jarra de cerveza y brindándole otro gran trago.

RESOLUCION TURNO 009
 

Aunque el posadero no estaba muy contento, el tiempo fue pasando. La tarde avanzaba y los clientes que tenía, tan solo Freagulf y Gwalin, no le parecían suficiente. Ellos bebían cerveza mientras charlaban y el posadero había pelado patatas, limpiado pescado y adecentado el local lo suficiente para estar presentable.

Al cabo de un par de horas volvió a entrar gente. El rohir y el enano seguían allí, hablando de cosas triviales, y esperando por un muchacho que ya pensaban que no llegaría. Entraron cuatro personas, amigos, dispuestos a dejarse unas cuantas monedas en aquel tugurio. Se sentaron en una mesa, el lado opuesto a la peculiar pareja. Pidieron cerveza y comenzaron a hablar del día que habían tenido, contando gracietas y chascarrillos que arrancaban las risas de los demás. Era gente normal, campesinos a juzgar por sus ropas sucias y sus caras aun manchadas de tierra. Antes de ir a casa, gustaban de saciar su sed y olvidar la dureza de aquella época. Era invierno, y aunque no era la época en la que más tenían que hacer, siempre estaban ocupados removiendo tierra, quitando hierbajos y reparando los aperos.

El posadero parecía más contento con cada jarra que servía, pues veía en cada una de ellas alguna moneda que meter en su caja. Estaba solo y su mujer preparaba ya la cena, aunque quedaban horas aún. Los guisos necesitaban tiempo para coger el gusto de los ingredientes, aunque ya habían comprobado que eran poco generosos en ese aspecto.

El dueño volvió a servirles a Freagulf y Gwalin otra jarra de cerveza, aunque no la habían pedido. No pensaba invitarles, pero tampoco le gustaba la gente que se sentaba durante horas consumiendo lo justo.

Turno 010A

El rohir estaba aguantando bien el trago, pero porque, la segunda jarra que cayó en sus manos fue la que la iniciativa del posadero le trajo. No porque lo aguantase bien, sino porque había bebido relativamente poco, sobre toco comparado con el compañero enano. Siempre evitaba bebidas que le pudieran hacer daño. Su estómago no lo soportaba bien y prefería evitar esas desagradables sensaciones.

- Pues no preocupe Maese Gwalin, ya que en cuanto tengamos la oportunidad, veremos al comerciante.

Se le había hecho muy largo, y empezaba a pensar que si eso había sido una siesta, estaba rendido. Ya tenía intenciones de ir a buscar otra vez a su viejo amigo, por estar preocupado, pero había quedado allí y marcharse podía ser un problema.

Turno 010

Al contrario que al rohir, el enano empezaba a sentir los efectos del alcohol. Él llevaba ya más de dos litros de cerveza en su cuerpo, casi tres y empezaba a notarlo. Aunque para Gwalin eso era la cantidad que tomaba en un día normal.

-Pues a ver si es verdad pues llevo queriendo enrolarme en su viaje desde que pasó por mi ciudad en Barukkizdin, aunque no es mi ciudad natal, pero es donde conocí a Agranil... -Gwalin se encogió de hombros como si desde eso momento la suerte para enrolarse en el grupo de Agranil le fuera esquiva, pero lo dejó sin terminar.

El tiempo pasaba y aunque para los enanos el tiempo pasaba de forma diferente pues sabían que disponían de más años que los humanos, en caso de Gwalin, que ya veía que el ocaso de su vida estaba cerca, se empezó a impacientar.

-Pero ni el chaval, no Agranil se acercan y nadie quiere decirme nada...grrrmmmmmm -gruño de nuevo el guerrero.

Turno 010

La puerta se abrió de repente, y un infante entro a toda prisa. El posadero cuando lo vio le gritó para echarlo de allí. Aquellos malditos canijos, como el dijo, solo buscaban alguien a quien robar. El posadero salió de la barra a toda prisa, pero antes de que se diese cuenta estaba frente a Gwalin.

- Lo encontré - dijo animado, mientras veía al posadero avanzar hacia el - Ese tal Agranil - se apresuro a decir - ha salido del cuartel... -  fue interrumpido por el posadero mientras se encogía esperando un buen pescozón del dueño del local.

Turno 010B

Antes de que entrase el niño preguntó: - ¿ Y por qué razón fuiste rechazado la vez anterior?

- Está claro que es ese el estafador del enano. Rió por dentro satisfecho, y además, se podía vislumbrar una sonrisa en su rostro. - ¿Y viene hacia aquí? Preguntó, dando por sentado que la respuesta era afirmativa, ya que si no era así, tendría que que salir disparado tras él. De todas maneras ya se había propuesto esperar, así que ... lo haría, si no era indispensable salir a buscarle.

Turno 010

-Pues la verdad es que no sé por qué. Supongo que ya tenía su grupo formado, pero me han dicho que ahora...

No acabó la frase pues de repente apareció el muchacho a quién había "contratado" para buscar a Agranil, ¡¡y con buenas noticias!!

El enano abrió los ojos desmesuradamente por la buena noticia, aunque tampoco se podía fiar de aquel pequeñajo. De echo al pensar en ello sus facciones cambiaron y sus ojos ahora eran dos rendijas que le escrutaban minuciosamente. Pero antes de que pudiera preguntarle algo, se le adelantó Freagulf.

-Eso, ¿viene hacia aquí o nos vas a llevar a él? -reiteró la pregunta de su nuevo compañero para  ver por dónde salía el chaval.

Turno 010

Nadie evito lo que iba a pasar. El crio recibió un fuerte manotazo del posadero.

- ¡Largo de aquí sucio! - grito el hombre. No un golpe fuerte como en una pelea, era un plastazo con la mano abierta, buscando el ruido y el daño superficial. El muchacho no lloró, quizás estuviese demasiado acostumbrado a tratos como ese.

Turno 010

El chaval , pese al golpe recibido, se mantuvo estoico. - No, no viene hacia aquí.. - dijo acongojado, aguantando las lagrimas - Nadie vendría a este asqueroso lugar - añadió mirando al posadero, desafiándolo - Va a "La Rosa" - se limito a decir mientras estiraba la mano hacia Gwalin, le habían prometido un pago. Era mas valiente de lo que su aspecto daba a entender.

El posadero, visiblemente indignado, volvía a cargar su brazo, otro ostión se le venia encima al pobre infante.