Partida Rol por web

Espiral de muerte

Escena 4 : Nuevos conocidos, Viejos amigos

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21/06/2018, 01:13
Editor Jefe

Una semana después, a pesar de haber conseguido pocos avances, al menos habían mejorado en el tema de la relación de confianza mutua. Tras dejar a Nicholas en el edificio, los héroes acompañaron a Cameron al laboratorio, aunque allí se habían quedado sólo una pequeña muestra de la gelatina orgánica que parecía haber quedado del cadáver de Victor, el resto fue remitido al departamento forense. Nada de lo que ellos pudieron hacer mostró más información, aquello podía ser tanto restos de Victor o guano de murciélago centrifugado o gominolas fundidas y vueltas a congelar, sólo era obvio que era de origen orgánico.

Tampoco fue fácil conseguir información de Víctor, era un refugiado que ya había llegado enloquecido y causando el caos de forma incontrolada alrededor suyo. No había registro previo suyo, había sido catalogado como retornado pues parecía provenir de Rusia, su posible registro de nacimiento llevaba a una historia bastante corta, se le había dado por desaparecido durante un picnic con sus padres, campesinos en la Rusia comunista, en 1950, a la edad de 8 años, los progenitores fueron encontrados destrozados, el suceso fue archivado como un ataque de osos y a Víctor se le ha dio por muerto; ni siquiera se han molestado en actualizar los archivos oficiales tras su retorno en la nave espacial.

El historial médico había desaparecido en el pandemonium del psiquiátrico, pues estaba almacenado en el equipo de su celda de internamiento que había resultado muy dañada en los disturbios, de hecho había terminado ardiendo entre la salida de los héroes y la llegada de los servicios de emergencia. El personal encargado de su caso había muerto en el incidente, a ciencia cierta habían sido las primeras víctimas de Víctor – dos de los psiquiatras eran los “cirujanos” que Kauri había vapuleado en el quirófano del horror. Aunque la verdad es que había un médico y una enfermera que no figuraban en la lista de muertos, sino en la de desaparecidos... pero ésta tenía más bien la consideración de que sus cadáveres no podían ser identificados o reunidos de entre los restos macabros y se daba por hecho que la gente de esa lista estaba muerta.

Habían pasado, Cameron sobre todo, algunos días hablando con colegas y familiares del personal médico que lo había tratado, pero como era de suponer, Victor, y los pacientes en general, no eran un tema de conversación habitual entre los sanitarios con sus conocidos.

Sin embargo sí había conseguido echar un vistazo a algunas imágenes de Víctor antes de la muerte, su rostro desesperado de sufrimiento eterno, su macrocerebro expandido fuera de su cráneo y sus ojos claros que dejaban ver un alma condenada al infierno en vida no dejaban lugar a dudas. Ahora tenía clara como su visión real la imagen del pasado grabada a fuego: ese mismo rostro de horror y dolor como la pantalla que separaba su pasado de su presente. Ya no le cabía ninguna duda, era Víctor quien le había asaltado la mente, aunque no podía recordar nada más, sí había vuelto a su memoria esa escena final, rememoraba el dolor y retorcerse por el suelo mientras le arrancaban su vida de la memoria entre gritos de dolor que se acompasaban a los que emitía el propio Víctor en todo momento, mientras la batería infinita que pretendía arrojar como defensa - lo más pesado que tenía a mano - salía volando y caía desde la nave espacial. Un breve cálculo de la Fuerza Motriz señaló que lo haría en un parque de arena en una zona marginal, apenas a medio metro del lugar dónde jugaba una niñita rubia; pero esa preocupación también se marchó, robada como si fuera la marca de fin de documento que marcara el punto dónde cortarían el libro de su vida.

Había otra pista, la habían conseguido Cameron y Myriham, en un intento desesperado revisando el contenedor de residuos peligrosos dónde estaban todos los restos de limpiar la celda de seguridad de Victor. Un particular escalofrío gélido en el costado de Myriham llamó su atención sobre una placa metálica chamuscada, del tipo que ponían las empresas de equipamiento tecnológico en su hardware, mitad informativo por si hay que llamar al servicio técnico mitad publicitario. La empresa era una consultoría tecnológica que resultaba familiar a Myriham, aunque le provocó un bloqueo; a Kauri le provocó un escalofrío: era la empresa de informática del polígono industrial propiedad de SUD-Estate en el que se había originado el correo con el que María Delgado había tratado de hacerle atentar contra Wimbo.

Eso había sido ayer, ahora los cuatro habían quedado, pronto por la mañana, para ir juntos en coche al polígono en el extrarradio de la exciudad de Pretoria, ahora uno más de los  barrios anexados a Johannesburgo, aunque particularmente grande.

Cameron llegó el primero, éstos días había avanzado por primera vez de verdad en la búsqueda de su pasado, aunque sólo fuera para descubrir que la puerta secreta que le sacó de su túnel sin salida llevaba sólo a un laberinto formado de muchos corredores, todos sin salida. Este era el último que ofrecía esperanzas. La empresa que proporcionó tecnología para el soporte vital de Víctor, o para el sistema de información de su tratamiento podía mostrar un nuevo camino o, con la suerte que tenía en éste tema, una docena a cual más obtuso y enrevesado. Que aquello pudiera tener conexión con el sinsentido de la chica digital esa, la tal Miku, sólo añadía desazón y más enigmas a sus esperanzas.

Myriham llegaba distraída, como siempre, aunque con tiempo suficiente para no llegar tarde, con su dispositivo portátil echando humo, figuradamente, como su atareada mente. Una molestia le hizo meter la mano en el bolsillo y sacar el papel con la lista del Saltador. ¿Por qué lo guardaba todavía? Miró la mancha de sangre que tapaba el último nombre, su fecha de caducidad había pasado hacía diez días y no había habido noticias del Saltador, cuyo despedida de Wimbo había sonado – a parte de inquietante por las implicaciones – muy definitiva, ni de ningún asesinato misterioso de metahumanos. Pero había algo raro con el papel, era igual de sólido que siempre, pero a la vez translúcido, como hubiera sido borrado con goma demasiadas veces y en lugar de ser un trozo de folio ahora fuera un papel de fumar la mancha de sangre era cada vez menos espesa.

Kauri llegaba apresurado y, con seguridad, el último. Su madre había estado tan preocupada durante su ausencia que ahora volvía a sobreprotegerle como cuando era un niño. Cuando supo que su pequeño había estado en aquel psiquiátrico que la televisión había conseguido hacer pasar – por una vez con acierto – por una mezcla de viernes 13 y pesadilla en elm street, casi se había vuelto loca. Ya no estaba tan contenta de que andase con esas chicas y tampoco le hacía gracia que hubiera añadido a su círculo a esos amigos nuevos. Había mirado en el Internet que eran esos Ogobe, y, si por ella fuera, Kauri se quedaría en casa una buena temporada, y así se lo hizo saber una y otra vez mientras intentaba convencerle de dejar ese grupo de locos tan peligroso. Pero por ahora el polinesio había capeado el temporal, al módico precio de llegar cuarto de hora tarde a la cita.

Faraji, por su parte llegaba a tiempo y se dedicaba a consultar su correo con una sonrisa mientras esperaban a Kauri. Myriham había sido alguien particularmente interesante de conocer, o más bien, su contacto con Ma Wembe. Aunque la atención médica infantil con la ICON colaboraba con ellos era de primera, se centraba en vacunas y curas, pero en toda Sudáfrica no había mejor hospital para el diagnóstico precoz que el de la anciana, quien se había mostrado encantada de colaborar con ellos, enviando un autobús una vez a la semana a por los niños Ogabe que no se sentían del todo bien para poder prescribir el tratamiento para que los médicos de ICON pudieran hacer un mejor trabajo. Según le dijo la anciana, aunque Myriham no se acordaba, ella programó el sistema de diagnostico durante un par de días frenéticos al poco de conocerse. Al principio no era ninguna maravilla, aunque ayudaba, pero con el tiempo fue mejorando su diagnostico y, desde hacía unas semanas que había empezado a usar ese interfaz de la joven de pelo rosa, acertaba más que los mejores doctores de clínicas de pago.

La sonrisa del Shujaala sonrisa era por el último mensaje de Sheba, era el reenvío de un correo que el hospital le había reenviado, al parecer una empresa había hecho una campaña de marketing consistente en un viaje al circo para una institución infantil pública o benéfica, y el hospital de Ma Wembe era muy jugoso para eso desde que Wimbo lo diera a conocer al regalarle las entradas para el fatídico espectáculo de títeres, por lo que habían decidido elegirles a ellos. Cuatro de los niños Ogabe más pequeños se habían unido a los internos del Hospital en la excursión. Terminaba de leer el mensaje  de Trill™ original que había llegado al hospital y que habían reenviado a Sheba, y ella a él, por lo que quedaba el último tras muchas líneas en blanco y cadenas de símbolos:

"…por todo ello es un placer invitar a la institución que Vd. preside a una asombrosa y única función del Circo El Grande.

Fdo. María Delgado
+madre_coraje_md68

Gerente de marketing de Leonard & María SM"

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25/06/2018, 00:00
Cameron Steyn

La paciencia es una virtud que debe de ser cosechada y cuidada, pero Cameron está alcanzado su límite. Los avances en la investigación no han sido fructíferos, más bien están siendo una verdadera pesadilla. Sea quién sea la fuerza oculta de todo aquello, sin duda sabe esconder bien su rastro.

La única buena noticia, es que aún disponen de un último hilo del que tirar, antes de perder por completo las pocas pistas que han logrado reunir. La mala noticia, es que debido a que ha dado su palabra, debe de esperar a que sus nuevos compañeros lleguen para poder seguir con la investigación.

Sus instintos le dictan que la mejor opción sería colarse en el interior del edificio y extraer toda la información que exista en lo referente a Victor, pero no está seguro de cual será el procedimiento a seguir por los héroes de la ciudad. Quizás lo más apropiado sería que dos se colasen, mientras que dos crean una pequeña distracción. Pero de nuevo de nada sirve trazar planes, así que lo mejor es esperar y revisar los alrededores.

Buscando un momento de intimidad en un callejón cercano, extiende el poder de la matriz para crear uno de sus clones y enviarlo a la zona trasera del edificio, para que permanezca en las sombras y vigile por si hay algún movimiento extraño. Tras aquello y comprobar que aún falta casi media hora hasta la hora del encuentro, toma un café para llevar de una cafetería cercana, un donuts y se sienta en un banco cubierto de pintadas y bastante maltratado por el tiempo y las personas, para esperar a sus nuevos compañeros de aventuras.

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27/06/2018, 09:09
Editor Jefe

El polígono no parecía tener nada fuera de lo común, eran seis naves industriales de unos dos mil quinientos metros cuadrados de planta, todas iguales salvo por la decoración y el acabado interior. La mayoría mantenía la configuración original, una planta baja casi diáfana y una segunda planta de oficinas que apenas ocupaba un tercio del piso inferior para tener un amplio espacio de techos muy altos.

Que las empresas estaban alquiladas quedaba claro por la uniformidad en todos lo equipamientos y espacios comunes y exteriores. Salvo los letreros de cada negocio, todo era igual indicando que había una empresa propietaria que no se curraba mucho la individualización del producto - al menos el de almacenes industriales en el extrarradio del extrarradio -.

El edificio que buscaban era quizás la empresa más peculiar, el resto tenían un negocio que - incluso si era de servicios - requería mucho espacio de exposición, cuando no era abiertamente productivo: una fábrica de sofás con exposición, un estudio de diseño con sus muestrarios de producto, una tienda de muebles, una segunda de bricolaje, una cafetería-restaurante que daba servicio no sólo a ese grupo de almacenes sino a varios más parecidos que había por las parcelas aledañas.

Pero su empresa había modificado el edifico más, aparentemente, pues tenía numerosas ventanas por todo él, no sólo en la parte alta de atrás. Tenía el aspecto de haber sido convertido en edificio de oficinas y ni siquiera tenía escaparate; era el único con guardia de seguridad en la entrada, incluido un torno para pasar del recibidor al resto del edificio y su aparcamiento estaba a rebosar de vehículos, como también los alrededores; seguramente tendría treinta o cuarenta empleados ahora trabajando.

Se trataba de una compañía de servicios informáticos y contabilidad, SUD-INFOCON, o eso decía su publicidad y los carteles que exhibía, seguramente el edificio les había salido más barato de remodelar que haber alquilado unas oficinas más cerca de los centros urbanos - aunque fuera el de Pretoria o Soweto en lugar del de Johannesburgo - pero también estaban en un lugar dónde no se sabía muy bien de dónde podía venir el negocio. Lo más probable es que fuera una división de una compañía mayor o, más probablemente, una empresa instrumental para un grupo mayor.

La parte de atrás de todos los inmuebles era parecida, con ventanas arriba y pared abajo. El edificio que buscaban era la excepción pues también tenía ventanas en el piso de abajo. Todos tenían las mismas pegatinas que indicaban que estaban conectados por alarmas y videovigilancia con una empresa local de seguridad, que era la misma que el guardia de la puerta de SUD-INFOCON.

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27/06/2018, 10:30
Myriham

Con todo el sigilo que aprendió en el circo, Myriham se acera al sitio donde está Cameron, cuando se encuentra a tres o cuatro metros saluda con un tono que espera no suene tan cansado como ella se encuentra, ayer estuvo ayudando en la clínica de Ma Wembe, muchos de los niños Ogabe, que acuden a la clínica, están realmente dotados para la ciencia, tenía que buscar el momento de hablar con Shujaala para pensar en un programa de formación, había tanto potencial en los niños ... la imagen del saltador y Wimbo acudió como un golpe y la trajo de nuevo a la realidad.
- Buenos días señor Steyn, suponiendo que usted sea usted y no esté ahora donde uno de mis pequeños acaba de verle, aquí cerca, en la trasera del edificio de SUD-Estate.
Las gafas de realidad aumentada aún consiguen que Myriham se despiste un poco de "solo la realidad", pero al menos hacen que no esté constantemente mirando la pantalla del dispositivo de la muñeca, cambiar el bolso bandolera por un chaleco con múltiples bolsillos ocultos, hace que sea más difícil perder componentes prefabricados o alguna herramienta, las habilidades aprendidas en el circo la permiten acceder rápido a los bolsillos, no saldrán palomas o similar, ni es como estar en el escenario haciendo ilusiones, pero puede parecer magia.
- Parece que somos los primeros, eso o Kauri y Shujaala están muy bien escondidos, de su magestad me lo esperaría, de Kauri no, el joven es de los que van de frente.

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27/06/2018, 11:28
Shujaala

Mi chófer y yo pasamos por delante del parque dónde está sentado Cameron, así que le veo comerse el dónut. Me río. "Un poli con un dónut. Vaya con los estereotipos".

- Déjame por aquí. Os mandaré un mensaje si me hace falta transporte luego.

Me bajo del coche y camino hasta llegar a Cameron y Myriham. ¡También ha llegado!

- Buenos días, Cameron y Myriham. Oye, me dijeron que ayer estuviste con Ma Wembe. No puedo agradecéroslo lo suficiente. El bien que le estáis haciendo a mis chicos... Y ahora, con lo del circo que viene, hay cuatro chiquillos para integrarse en la sociedad sudafricana.- Sonrío de oreja a oreja. No son las noticias que yo más necesito, pero son muy buenas de todas formas.- De veras, mi pueblo tiene una deuda con Ma Wembe y contigo. Espero poder pagarla pronto.

Me giro para mirar el edificio y cierro los ojos un segundo. "Céntrate".

- Vale. ¿Qué sabemos de este sitio?

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27/06/2018, 14:07
Kauri

Kauri llegó corriendo. Si el grupo esperaba pasar desapercibido, no lo lograrían gracias a él. No solo venía a toda prisa y tarde, sino además llevaba poquísima ropa. Se había tomado en serio lo de llevar un "traje de héroe", que en su caso se limitaba a una falda típica de su pueblo que le cubría hasta las rodillas, y una especie de faja azul de licra ajustada a su cuerpo que recorría su pierna derecha en forma de olas.

Aquel detalle era más estético que otra cosa; le gustaba el mar.

En su primera aventura oficial con ICON ya se había cargado una buena camiseta y unos pantalones. Él era casi invulnerable, pero su ropa no. Así pues prefería ir ligero de ropa, tener más movilidad y flexibilidad y no ganarse broncas de su madre, que le amenazaba con no darle dinero para comprar más prendas si seguía trayéndolas hechas jirones a casa.

Iba incluso descalzo, y daba toda la pinta de ser un hombre tribal perdido en medio de una ciudad.

¡Hola!- saludó cuando llegó, y se paró a respirar profundamente un par de veces para recuperarse de la carrera-. Siento llegar tarde, he tenido... problemas para llegar- porque tal vez decir que su madre le había dado un sermón no era muy de héroe.

Se quedó mirando a los demás. Había oído la última pregunta de Shujaala, y él mismo quería saber la respuesta a eso.

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27/06/2018, 14:57
Myriham

Cuando Shujaala menciona el circo, el corto pelo de la nuca de Myriham se eriza.
Circo ¿Qué circo?, intento estar al tanto de los circos que vienen a la ciudad, al menos los grandes y no he oido nada de nada.
Mientras la mente paranoica de Myriham se mueve hacia el miedo, el hilo de pensamientos se corta ante la aparición estelar de Kauri, la mirada nada discreta hacia el joven arranca una pequeña sonrisa a Myriham y la lógica dicta que se conteste a las preguntas de sus compañeros.
- El edificio es de una empresa de informática, SUD-Estate, son los que prepararon la sistemática para la maquinaria de Victor. Es un almacén industrial de toda la vida, mis drones no me cuentan nada que no sea normal, un muelle de carga con dos puertas metálicas grandes en la parte trasera, muchas ventanas pequeñas, aparentemente solo para que entre luz natural y un muy buen sistema de ventilación, en la parte delantera hay un acceso como de pequeña oficina y tiene una recepción, no hay planos de la distribución interna ni en el ayuntamiento, en principio solo es un almacén diáfano.
Con un aire de duda Myriham casi no se atreve a preguntar.
- Kauri, has pensado en pedir un mono táctico a la gente de ICON, ya sabes keblar, elástico, evita balazos y suelen venir en un discreto color negro, también se puede personalizar un poco, como el que llevo, ya quedó demostrado no soy invulnerable y Nicholas casi me ha obligado.
Y después añade dirigiéndose a Shujaala
- Majestad, no se de ningún circo que haya llegado a la ciudad, al menos no uno grande o importante y Ma Wembe no me ha dicho nada, ¿Qué circo es?

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27/06/2018, 20:46
Cameron Steyn

La llegada de Myriham provoca que Cameron alce una ceja y la lance una mirada de respecto.

-Veo que eres una mujer de múltiples talentos, pocos son capaces de acercarse tanto a mí sin que los detecte. Aunque estas pequeñas piezas dulces siempre logran desconcentrarme.    -Indica con humor alzando el trozo que le queda de donuts. Tras lo cual, se encogió de hombros ante las siguientes palabras de la mujer.    -Parece que tampoco soy el único al que le gusta tener una perspectiva más amplia de los lugares que visita. Pero de nuevo el donuts me delata, jamás desperdiciaría uno de estos con una de mis creaciones. 

Terminando el café de un trago, arroja el vaso a una papelera cercana y se pone en pie para recibir a Shujaala. Le saluda con un gesto de la cabeza y después se mantiene al margen de la conversación. No le gusta el circo y desde luego no está muy metido en los asuntos de ayudar a otros.

Claro que no escucha demasiado de aquella conversación al ver llegar a Kauri. Para que negarlo, su mirada recorre al recién llegado al menos dos veces para intentar comprender qué es lo que lleva encima.

-Un vestuario...interesante. La próxima vez que necesitas transporte, avisa.

Una vez reunidos, no tardan en aportar lo que saben del lugar. Lo cual por desgracia, no es demasiado.

-Parece que la tecnología es tu punto fuerte, Myriham. ¿Crees que podrías hacer un par de comprobaciones? Dudo que dispongan de nada comprometido a la vista, menos aún cuando la seguridad es más bien mínima. ¿Podrías averiguar si la cantidad de energía que consumen está dentro de lo razonable? Disponen de ventanas en todas las plantas, una forma de mostrarse transparentes ante los curiosos, pero es probable que si tienen algo que ocultar, lo hagan bajo tierra. ¿Un subnivel quizás? ¿Podrías comprobar si existe algo así?

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30/06/2018, 17:46
Shujaala
Sólo para el director

- O puedo usar otro método.- Les doy un pinganillo a cada uno.- Con esto estamos conectados. Quedáos aquí, os avisaré.

Me meto directamente en la recepción. Ignoro al guardia y voy hacia el recibidor, buscando a algún recepcionista.

- Muy buenas. Mi nombre es Faraji Menelik y soy el rey de los Ogobe. Quiero hablar con el director ejecutivo.- Uso la mirada de rey que me he acostumbrado a usar para pedir cosas.- Y pronto.

Notas de juego

Quiero hacer un movimiento de Recabar Información. ¿Podría usar esta descripción para tirar con Influir?

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02/07/2018, 08:48
Director

Notas de juego

Normalmente recabar información es un movimiento especial, no se usa para la interacción directa, si no más bien entre escenas para mover hilos que quedan pendientes y traerles a primer plano con una partida sobre ellos tras obtener pistas que no sabemos muy bien dónde estarían o cómo se obtendrían. Digamos que el "cómo" se obtiene se difumina un poco respecto a "qué" se obtiene.

En una situación "táctica" como ésta se usaría más bien examinar, pero llegado el caso de que hubiera que tirar. La interacción se hace natural hasta que haya algo que requiera un movimiento que, además, podría ser fácilmente tomar el control más que investigar :)

Lo has puesto sólo para director ¿lo hacemos público y te contesto el post?

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02/07/2018, 09:12
Myriham

- Hasta donde puedo acceder, al menos sin llamar la atención, los planos muestran justo lo mismo que hay, nave diáfana de almacenamiento o similar.
- Los drones pueden recorrer el exterior sin que pase nada, están en "espacio público legal", y el piloto tiene carnet y esas cosas, ahora mismo no tienen incorporado ultrasonidos ni nada que pueda marcarme si hay subsotano o similar.

Myriham sonríe, ladea un poco la cabeza, la sonrisa podría tener un aire pícaro, es uno de los gestos de ayudante de mago, estudiado para que su melena caiga sobre el hombro derecho y tenga cierto aire pícaro, aunque con el pelo a cepillo y la mirada triste que tiene últimamente queda bastante extraño.
- Cualquier otra iniciativa sería algo más hostil, quizás, solo quizás, podríamos hacer una aproximación algo más ligera, entrar, preguntar, sonreír, dejar pegado al ordenador de recepción un pequeño dispositivo anónimo de espionaje industrial, solo para ver que puedan tener en sus sistemas.
Queda a la espera de respuestas por parte de sus compañeros, ya que parece que tanto Shujaala como Kauri podrían tener algo que aportar, su mirada para poco en Kauri y se centra en sus ojos esperando que no piense que el comentario sobre el uniforme es una crítica, por otro lado y no solo con intención de traspasar el peso táctico a Shujaala, termina mirándole con cierto aire de súplica apelando a su mayor experiencia en combate, bien para que la corrija o bien para que apoye sus ideas.

Notas de juego

Respondo a la pregunta directa del personaje de @Keldan, aunque quedan en el aire la pregunta del circo a Shujaala y el no inocente repaso visual a Kauri.

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02/07/2018, 19:41
Kauri

Kauri se miró a sí mismo cuando notó las miradas de Myriham y Cameron. No había pensado que tal vez tendría un aspecto demasiado llamativo por su excentricidad. Pero desde que había empezado a hacer escapadas nocturnas para hacer de héroe por la ciudad, siempre había ido vestido así y se había acostumbrado. Los delincuentes callejeros solían subestimar a un tipo sin protección aparente, y gracias a eso había logrado capturar a unos cuantos malhechores que le habían llamado de todo menos "inteligente".

Bueno, yo estoy bien así- se encogió de hombros y sonrió tímidamente. No tenía vergüenza de ir con tan poca ropa, pero ahora que se sentía observado y juzgado por sus compañeros, se sentía algo retraído-. Supongo que tendré que pedir un mono de esos, sobre todo para misiones más discretas- admitió.

Tampoco es que los demás llamaran poco la atención, a excepción de Myriham, quizá. Kauri se quedó en silencio mirando a los demás y escuchando los diversos planes que iban surgiendo. Él no era un estratega (lo cual muchas veces le había comportado problemas), así que les dejaría el trabajo de pensar a sus compañeros. Confiaba más en su buen juicio.

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02/07/2018, 20:29
Shujaala

- El circo es de... Mira, lo hablamos luego.

Escucho las opciones de mis compañeros y asiento con la cabeza.

- Está bien. Ve haciendo eso, Myriham. Y mientras, tengo una idea. Es un poco más directa, pero creo que será efectiva. Tomad.- Saco de mi bolsillo cuatro pinganillos y les doy uno a cada uno. El que sobra me lo pongo yo.- Ahora podremos comunicarnos. Quedáos aquí. Os voy diciendo.

Me voy de inmediato al interior del edificio. Ignoro al guardia de seguridad y entro directamente en la recepción. Taladro con la mirada al empleado.

- Hola. Soy Faraji Menelik, rey de los Ogobe. Quiero hablar de inmediato con el director ejecutivo.- Uso el tono que me he acostumbrado a usar para exigir cosas sin opción a replicar.

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03/07/2018, 07:56
Editor Jefe

Poco después Faraji estaba en mitad de la oficina de abajo, llena de puertas de despachos, con la atención de todos los trabajadores. Era una pequeña colmena de cubículos de un par de metros cuadrados con hombres y mujeres con gris aspecto de oficinistas, de variadas etnias locales.

El guarda de seguridad, trataba de volver a ponerse de pie, apoyándose en una silla y sacudiendo la cabeza para librarse del mareo, más producto de la voltereta que del golpe.

El tipo en el que fijó su mirada, un arquetipo de contable, contestó con notable nerviosismo señalando a las escaleras que subían, situadas dónde estarían, probablemente, en todos los almacenes.

-"Si se refiere al jefe está en los despachos de arriba, el grande del fondo. Esto es una empresa pequeña sólo hay un jefe de la compañía, su título oficial es presidente, pero es sólo el jefe."

Faraji pudo apreciar, sobre todo a medida que los curiosos se asomaban por las cortinas de sus despachos de la planta inferior que aquella planta parecía una oficina normal, con dos docenas de cubículos cutres para los trabajadores en el centro, que tenía doble altura adoptando una forma de corrala, y una docena de despachos alrededor, probablemente de supervisores, gerentes y comerciales. La única puerta diferente, dotada de un panel de seguridad de clave numérica estaba al fondo, al lado de la escalera. No parecía nada muy especial, probablemente para la caja fuerte, el servidor de datos importantes, papeles comprometidos y poco más.

La escalera al piso superior y éste en sí no mejoraban mucho el aspecto, un par de plantas y cuadros cutres daban un toque un poco más formal al pasillo rectangular que permitiría acceder a algunas estancias más pero éstas no eran visibles desde la perspectiva de "la plebe"

 

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04/07/2018, 10:30
Shujaala

- Comuníquele que voy para allá.

Subo las escaleras, pero por el camino hablo por el comunicador.

- He visto una sala asegurada. Intentaré conseguir acceso. Voy a formar una escenita, podéis aprovechar para colaros por una ventana o algo.

Entro en el despacho grande al fondo que me ha descrito el conserje y miro serio a quien quiera que esté ahí.

- ¿Es este el despacho del jefe?

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06/07/2018, 20:02
Cameron Steyn

Para que negarlo, Cameron no tiene ni puñetera idea de lo que pretende Shujaala. Colarse en el edifico por una ventana no parece buena idea, no al menos cuando cada ventana está conectada a un servicio de alarma. A su vez, la propia distribución del lugar hace casi imposible que puedan ocultarse allí dentro.

-Si queremos colarnos allí dentro, habrá que evacuar a los trabajadores. Este lugar debería de disponer de un sistema de alarma contra incendios, si logramos activarlo y hacerles creer que realmente hay fuego en el edificio, deberían de evacuar. Eso nos otorgaría unos minutos para poder fisgonear.

Extendiendo la mano y tras comprobar que no hay nadie en los alrededores que pueda verlos, forma sobre la palma de su mano un bote de humo, tal y como los que usa la policía para dispersar a los manifestantes cuando las cosas se ponen peligrosas.

-Myriham ¿Puedes manipular los sistemas de alarma, para que la señal no salga de aquí? Queremos que las alarmas suenen, pero no que se presenten los bomberos y la policía antes de tiempo. Kauri, revisemos el lado este del edificio, allí deberían de estar los aseos del personal, con un poco de suerte una de las ventanas estará lo suficientemente abierta como para que podamos colar el bote de humo. ¿Qué tal tu puntería? ¿Crees que podrías colarlo en caso de encontrar una apertura?

-Shujaala, nos mantendremos en posición mientras haces tu jugada, si no consigues nada pasaremos al plan B.

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10/07/2018, 08:49
Editor Jefe

Mientras el grupo hacía planes en el exterior y localizaban ventanas que daban a zonas aisladas - entre otras, efectivamente, las de los baños, que estaban semiabiertas aunque eran más bien ventanucos de ventilación - Shujaala había tenido éxito en montar una escena, tal vez más del pretendido.

La gente salía de sus cubículos e incluso de los despachos, mientras el guardia se recuperaba del coscorrón y avisaba por teléfono a la policía o a su compañía de la intrusión, para mirar cómo subía al piso de arriba.  

Algunas puertas salían en derredor de un pasillo rectangular con el interior abierto a la planta de abajo. La más visible era el portón doble que daba al fondo, aunque desde el exterior ese despacho sería la parte de arriba de la entrada del almacén reconvertido.

Shujaala se encontró con el jefe en la misma puerta, que salía visiblemente molesto por el jaleo cuando él llegaba. Con ceño fruncido y cara agriada, el tipo tenía el aplomo y la seguridad de quien lleva tiempo dirigiendo, a pesar de que no tendría más de cuarenta con pelo ralo y su etnia era inidentificable, tenía sangre mezclada, casi como si le hubieran elegido para representar la nación arcoíris. También un rictus ligeramente desdeñoso y cara amargada. Probablemente había sido el dueño de una carrera meteórica que se había estancado. No costaba imaginarle dirigiendo aquella empresa de tercera fila desde hace quince años.

-"¿Quién es usted? No puede entrar aquí de ésta manera. La policía está en camino y no hay nada que robar, esto no es una licorería ¿sabe?"

 

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10/07/2018, 09:30
Shujaala

Notas de juego

Jefe, yo no he golpeado al segurata. De hecho, indiqué que le ignoro xD Que si tú quieres, hacemos como que le he dado un golpe, pero que no era mi intención.

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10/07/2018, 10:47
Director

Notas de juego

El segurata no te va a dejar pasar como pedro por su casa, se interpondría y la única forma de hacer lo que narras es quitarle de en medio, entiendo que con un simple empujón sin hacer daño y le deja desorientado. Lo que no puedes es entrar ignorando a alguien que no va a dejarte entrar, o sí, pasando por encima y pisoteandole, que viene a ser lo mismo pero con menos estilo :)

¡Ya me gustaría a mi que ignorar a la gente la hiciera desaparecer! :) ... Eh mejor pensado no, que me acabo quedando sólo en el mundo :)

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18/07/2018, 12:11
Myriham

Myriham tarda demasiado en reaccionar a la acción de Shujaala.
- Este hombre es como un torbellino. ¿No le habrá dicho nicholas lo de los aparatitos codificados?
Desde la nueva tablet, conecta un programa cortesía del servicio secreto español que cierra el circuito de alarmas del edificio sobre si mismo y lo espeja del exterior, respuesta constante todo ok.
- Cameron, las alarmas del edificio están aisladas de bomberos y comisarías, si nadie llama por teléfono no vendrán agentes.
- Aunque discrepo de esta forma de actuar, estaba pensando en algo más discreto y comercial.
- Su Magestad siempre puede comprarse la empresa, lo mismo ICON tiene presupuesto y eso ...

Myriham piensa un segundo lo que acaba de decir ...
- Lo siento, ha sido inapropiado, os pido disculpas a todos.
Cambia los drones a vigilancia externa y confirma que de momento nadie está actuando alrededor del edificio más que Cameron y Kauri.
- Kauri, si mantenéis la ventana del baño abierta, trataré de colar un drone en la ventilación, con vuestra ayuda.