Partida Rol por web

Estación de nieblas

Capítulo 3.5: El filo de la noche (Émille)

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13/12/2016, 00:48
Émille Lalique

Que el machito ese hubiera sido lo suficientemente rápido como para rápido como para rajar el cuello de la chica era de esperar. Después de todo ya la tenía agarrada. Sin embargo ver el brazo cercenado valió la pena. Y si ella muriera... Bueno, la guerra tenía sus bajas, y estaba claro que ese era su destino desde antes de que llegásemos aquí, y que no iban a soltarla si los dejábamos vivir.

Ni siquiera tuve que pensarlo. Dejé que las runas acelerasen mis acciones, buscando cómo esquivar el ataque del que venía a por mí y aprovechar el movimiento para cercenarle el brazo que le quedaba con la otra cuchilla de la lanza. Luego se la lancé al que no dejaba de mirarme y no me quedé quieto: me dirigí hacia el muro del callejón mientras invocaba mi hacha, dispuesto a usar la pared para impulsarme y caer sobre este último con toda la contundencia del arma.

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19/12/2016, 23:08
Narradora

El vampiro que habías dejado manco se movió rápidamente, esquivando tu cuchilla y mostrándote sus colmillos afilados como dos agujas. El otro se movió un instante antes de que la cuchilla llegase a su posición y su cara de satisfacción parecía sugerir que se creía capaz de adelantarse a tus movimientos.

Podías escuchar cerca de ti el sonido de golpes entre Scott y el de la navaja mientras el hacha aparecía en tu mano y atravesabas el aire hasta caer sobre un vampiro cuyo rostro cambió satisfacción por sorpresa al ver el arma salir de la nada. Eso fue lo último que mostró su cara antes de que la hoja del hacha la atravesara partiendo su cráneo en dos.

Mientras él caía al suelo con la cabeza abierta hasta la mandíbula, notaste algo moverse a tanta velocidad que apenas fue un borrón en la periferia de tu visión antes de que un brazo te aferrase con fuerza del hombro y te clavase los colmillos. La punzada de dolor de inmediato se vio sustituída por un placer que no era la primera vez que experimentabas pero al que te era imposible resistirte y que era en parte la razón de que los nephilim no cazasen en solitario.

El vampiro empezó a succionar tu sangre mientras oleadas de gozo se extendían por tu cuerpo en un clamor que parecía pedir más directamente desde tus venas.

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29/12/2016, 14:29
Émille Lalique

Aquel vampiro al que había partido la cabeza en dos no podía quejarse. Si antes tenía una cara de satisfacción, ahora tenía dos. Más o menos. Me estaba disponiendo al siguiente ataque cuando algo sucedió más rápido de lo que yo podía reaccionar... Y un instante más tarde tenía una de esas sabandijas enganchada en mi cuello. Había que joderse, macho, ojalá se atragantara.

Sabía que aquel placer no era bueno. Racionalmente lo sabía. Sin embargo era imposible resistirme por completo a él. Era tan... Tan como todo lo que uno podía soñar. Joder, si aunque mi cabeza no quería mi cuerpo pedía quedarse así un poco más, sólo medio minuto...

Yo sabía que eso no podía ser. Lo había vivido y estudiado, y lo que más me hacía reaccionar, lo había visto en otros. Pero también sabía que poco o nada podía hacer. Quitármelo de encima era prácticamente impensable, mis propias manos parecían resistirse a esa idea. Sin embargo había algo que quizá sí funcionase.

A tientas, con los ojos cerrados y la frente apuntando al cielo, entre suspiros de placer, busqué mi estela. Me moví despacio no de una forma premeditada ni esperando que aquel dios no se diera cuenta, sino simplemente porque no podía hacerlo de otra forma. La llevé hacia mi cadera, y entonces empecé a dibujar una runa de Calmar indignación. Si aquello no funcionaba, bueno... Racionalmente sólo esperaba que no pillasen también a Scott. E irracionalmente que no parase nunca.

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27/03/2017, 04:33
Scott Crystalwine

Tu mano se movían tan despacio con tu cerebro envuelto en las oleadas de placer que antes de que llegaras a poner la punta de la estela sobre tu piel sentiste un tirón en tu brazo, justo a tiempo para ver cómo el cráneo del vampiro se hundía y sus colmillos abandonaban tu carne desgarrándola. Una intensa furia hacia el responsable de haberte arrebatado la fuente de gozo te invadió desde dentro, pero duró apenas un instante, el tiempo que tardó el engendro en convertirse en polvo gracias a la estaca de Scott. 

El hombre cojeaba un poco, pero no tenía heridas a la vista y tras él tan sólo quedaban los cuerpos de las chicas y algunas montañas de polvo que el viento desperdigaba por el callejón. 

Te puso una mano en el hombro y te miró a los ojos, como si necesitase comprobar que estabas en tus cabales. Y debió gustarle lo que vio, porque entonces su mirada se desvió hacia la herida en tu brazo y la contempló ladeando un poco la cabeza. 

—Bien hecho, chaval —dijo, cambiando la estaca por una estela y disponiéndose a dibujarte una iratze cerca del lugar que el vampiro había mordido—. ¿Te sientes bien? ¿Te ha emponzoñado?

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29/03/2017, 01:08
Émille Lalique

Mi respiración se encontraba alterada, pero no de la forma que acostumbraba durante el combate. No era la primera vez que experimentaba algo así y sabía que no me acostumbraría nunca, pero al menos en esa ocasión una parte de mí seguía siendo lo suficientemente cuerda como para recurrir a la estela. Y aunque nunca lo reconocería me moví despacio, mucho. En parte para que la fuente de mi placer no se diera cuenta, pero por otra para que no parase. En el fondo habría dado cualquier cosa porque no lo hiciera, pero también lo habría dado todo porque sí.

Al notar que los colmillos abandonaban mi piel los seguí por instinto, con ansia, y busqué con los ojos encendidos al enemigo. Quien me hubiera arrebatado la primera sensación de paz en semanas, de verdadero placer, iba a tener que vérselas conmigo. Mis dedos se cerraron con más fuerza en la estela y me preparé para invocar mi lanza... Cuando todo terminó.

Respiré aliviado, haciendo un esfuerzo consciente por evitar que la vergüenza llegase a mi rostro. Dibujé ante su cumplido una media sonrisa automática, aunque aún no había acabado de recuperarme.

—Tú tampoco lo has hecho mal —dije como si él mereciese también un cumplido y yo fuese alguien para dárselo, medio en broma. Mi cabeza aún tardaba algunos segundos en procesar, y tardé en entender lo que me había preguntado. Moví el brazo, incómodo por el dolor.

—No creo —enuncié, esperando que no fuera así. Recurrir a un hermano silencioso y ponerme al nivel de Alice habría sido una derrota. Entonces hice un gesto hacia su pierna—. ¿Tú estás bien? ¿Qué hacemos con ellas?

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30/03/2017, 20:53
Scott Crystalwine

El hombre sonrió con una pizca de ese humor que sólo mostraba en ocasiones especiales cuando le devolviste el cumplido y con tu gesto sus ojos bajaron hacia su pierna por un momento. Entonces negó con la cabeza, quitándole importancia.

—No es nada, sólo un golpe.

La iratze comenzaba a cumplir su cometido y sentías cómo el ardor que había desprendido al dibujarla comenzaba a extenderse por tu brazo, sanando poco a poco tu herida. Tardaría un rato en estar completamente curada porque era profunda, pero al menos parecía que no había veneno en su interior. 

—Ahora llamamos a tu tío y él se encargará de avisar a la policía mundana —dijo entonces, respondiendo a tu otra pregunta y contemplando los cuerpos de las chicas en el suelo. Sus labios se fruncieron en una mueca—. Pasará como un asesinato, tal vez un asunto de bandas. —Se encogió de hombros—. Nada que nos concierna, en todo caso. Y luego a nosotros nos tocará preparar un buen informe.

Empezó a sacar el teléfono del bolsillo interior de su chupa, pero antes de marcar te miró de nuevo, apreciativamente.

—¿Te hacen unas birras antes de volver a casa? 

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31/03/2017, 00:24
Émille Lalique

Asentí con seriedad cuando Scott dijo que sólo era un golpe. Mientras no hubiera veneno no había de qué preocuparse aunque fuese más que eso, para algo teníamos las runas.

Luego, al escuchar lo que decía sobre mi tío, volví a asentir. Sin embargo decidí dejar que fuera él quien lo llamara. Miré alrededor, y con lo del informe mi rostro dejó claro que aquello me parecía una mierda. Normalmente dejaba que Amber se encargase, o el propio Gareth tras darle mi parte, o incluso mi tío. En realidad sólo los hacía como debía cuando quería impresionar a mi mentor. Y hoy, con suerte, acabaría por hacerlo Scott.

Mientras sacaba el teléfono comencé a caminar. Quizá pareciese distraído, pero la verdad es que buscaba algo por los alrededores que fuera de los vampiros. Usualmente buscaría una pista de su escondite. Hoy, en el fondo, echaba un ojo también por si habían traído alguna moto como la de mi compañero. La verdad es que era una pasada.

Se me hizo un poco rara esa pregunta viniendo de alguien que no fuese Amber.

—Mientras no sean en un bar de subterráneos... —dejé caer sin parar de buscar, aunque no tardé en cambiar de tema—. Lo de tu moto, ¿va con llave?

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31/03/2017, 18:13
Scott Crystalwine

Un leve resoplido escapó por la nariz de Scott cuando mencionaste la palabra «subterráneos» y negó con la cabeza con énfasis.

—No entraría en un tugurio de esos ni loco —afirmó, llevándose el teléfono a la oreja—. A no ser que alguien hubiera incumplido los Acuerdos y entrase para cazarlo —aclaró, enarcando las cejas—. Y no llevan llave, funcionan con energías demoníacas. ¿Por qué? ¿Quieres una? —preguntó, esbozando una media sonrisa divertida.

Sin embargo, antes de que pudieras responder tu tío debió descolgar el teléfono, porque Scott te hizo un gesto con la mano y se alejó hacia el final del callejón mientras hablaba. 

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05/04/2017, 03:15
Émille Lalique

Al escuchar la respuesta que Scott me dio sobre el antro de Subterráneos asentí convencido. Intuía que no le gustaban, pero me gustaba oírlo de viva voz. Si la fiesta que buscaría allí era la que describía a lo mejor no era tan muermo como solía parecer.

Un momento más tarde, con sus preguntas, lo pensé por un instante. Seguro que quedaba un poco de niñato asentir directamente, pero... Qué demonios. E iba a contestar cuando mi tío descolgó el teléfono. Dejé que se alejase sin quitarle ojo de encima los primeros segundos, pero volviendo a mirar alrededor no mucho más tarde. Esperé hasta que colgó el teléfono, y para entonces ya podía reconocer lo de la moto sin dejar de parecer un tío duro.

—Claro que sí —aseguré—. Cazar a esos hijos de puta persiguiéndoles en una de sus motos es como justicia poética.

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09/04/2017, 00:54
Scott Crystalwine

Cuando Scott regresó lo hizo a buen paso y con expresión satisfecha. Parecía que las runas estaban haciendo su trabajo en su pierna y la llamada debía haber salido bien. Al escuchar tu respuesta emitió una breve risa antes de ponerte una mano en el hombro. 

Eso mismo pienso yo —aseguró—. Tendremos que conseguirte una entonces... Y sé exactamente de dónde la vamos a sacar. —Miró hacia el final del callejón de donde venía y te hizo un gesto con la cabeza hacia allá—. Vamos. Se va a montar una buena en cuestión de minutos y me gustaría estar bebiendo cerveza para entonces. 

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12/04/2017, 02:16
Émille Lalique

Eché un vistazo a la pierna de Scott al verle volver, pero al darme cuenta de que la cojera se había reducido me despreocupé. Me sorprendió un poco que me pusiera una mano en el hombro, pero de alguna forma me hizo sentir bien, como si hubiera entre nosotros cierta camaradería. Era un poco raro, pero no me disgustaba.

Evité sonreír para que no se diera cuenta de que su respuesta sobre la moto me había entusiasmado. Joder, eso sí que iba a molar un huevo. Y más cuando al escucharle daba toda la impresión de que íbamos a joder a algún maldito chupasangres de camino. Aún así fue inevitable al menos una sonrisa a medias, y asentí con lo que dijo después. No sabía si lo de estar tomando cerveza era sólo mientras esperábamos a que se calmasen las cosas, pero desde luego al oírle había parecido que lo de la moto sería hoy. Pensándolo bien a lo mejor teníamos que conseguir dos: fijo que Amber quería trastear con una. Pero sobre eso no dije nada, mejor ir paso a paso.

—Vamos —dije empezando ya a trotar en la dirección que había señalado, aunque no tardó en ocurrírseme una pregunta—. Oye, ¿y dónde la guardas normalmente?

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20/04/2017, 01:08
Scott Crystalwine

Al llegar al final de callejón te diste cuenta de que no tendríais que ir demasiado lejos: justo allí, aparcadas de forma descuidada, había cuatro motos de buen tamaño, similares a la que Scott había usado para llegar hasta allí y emanando esa sensación que se deslizaba por tu espalda como un presentimiento y que ya conocías bien. 

—Venga, escoge una —dijo el hombre, haciendo un gesto con la cabeza hacia lo alto del edificio donde había quedado la suya—. Recogemos la mía y nos largamos. Normalmente la guardo en una azotea cercana al Instituto, te la enseñaré al volver y puedes dejar la tuya allí también si quieres.

 

Notas de juego

Puedes buscar foto para tu moto si quieres.

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24/04/2017, 00:03
Émille Lalique

En cuanto giré la esquina y vi las motos mis ojos se iluminaron. La verdad, hasta hoy nunca me había planteado llevar una de esas, y esperaba saber hacerlo. O aprender rápido.

Pegué una carrera hacia ellas, y al momento supe cuál quería. No tenía mucha idea de esas cosas, pero me iba a quedar la más negra de todas. Pegaba con el traje.

Me monté directamente, teniendo cuidado de no tirarla al hacerlo, y miré a Scott. La verdad es que no tenía muy claro ni cómo arrancar, pero me sonaba que había que girar mucho la mano derecha.

—Cuéntame qué hago —le dije, aunque al final acabé por echarme un poco atrás y dejarle sitio. Teníamos que coger la suya, después de todo—. O bueno, dale y aprendo.

La verdad es que llevaba tiempo sin estar tan emocionado como en ese momento. Estaba acostumbrado ya a cazar demonios y subterráneos, pero... ¿Robarles? Eso era nuevo. Y se lo merecían. Que les dieran por culo, bastante que nos llevábamos sólo una. Y por otro lado mejor así, porque si todos tuviéramos la verdad es que no sería lo mismo.

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24/04/2017, 02:01
Scott Crystalwine

El hombre caminó más despacio que tú hacia las motos, probablemente resentido aún por la herida de la pierna. Parecía satisfecho al verte emocionado y cuando escogiste, asintió con la cabeza. 

—Buena elección —convino, para después sentarse delante de ti—. La moto despertará en cuanto tu voluntad se lo ordene —explicó—. Esto es el acelerador y aquí en el pie tienes el embrague. Tú ve probando y ya le irás pillando el punto. Lo importante es que sepas que sólo funcionan de noche. En cuanto salga el primer rayo de sol se convertirá en una piedra así que intenta no estar volando en ese momento.

La moto ronroneó entonces y un instante después Scott ya estaba acelerando y levantándola del suelo para surcar el aire en dirección a la azotea donde habíais dejado la suya.

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27/04/2017, 04:36
Émille Lalique

Aunque él no pudiera verme asentí a la explicación de Scott, atento. Contado así no parecía muy difícil. Asentí también a lo de ir probando. Tenía claro además cómo iba a hacerlo. Runa de alado, y a volar. ¿Qué podía perder, una moto? Ni siquiera creía que eso fuese a suceder.

Acepté, por supuesto, su consejo sobre tener ojo con la llegada del día. Bueno, esperaba usarla para cazar, y eso solía hacerse de noche. ¿Qué iba a hacer con la moto si no? ¿Usarla para ligar? Ni de coña.

—Entendido —aseguré. ya con ganas de ponerme yo al mando—. Vamos a por tu moto. Quiero probarla cuanto antes.

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28/04/2017, 00:32
Scott Crystalwine

La moto se elevó en el aire y unos segundos después estabais aterrizando sobre el edificio, junto a la moto de Scott. El hombre se bajó y dio un golpecito sobre el chasis, esperando a que te colocaras para conducirla.

—Recuerda: en la mano el acelerador y en el pie el embrague. Sígueme.

Y con esa indicación dejó que te apañaras tú con el vehículo para sentarse él en la otra y arrancar. Corrió por la azotea hasta que llegó al borde y en lugar de frenar o caer, la moto se elevó en el aire, cogiendo velocidad. 

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03/05/2017, 20:22
Narradora

No te costó acostumbrarte al manejo de la moto en el aire y enseguida te pareció que habías nacido para viajar así. ¿Quién quería usar un maldito avión si podía surcar el aire controlando cada movimiento?

Un par de birras en un club discreto y pusisteis rumbo al Instituto. Antes de entrar en él Scott te enseñó el lugar donde solía dejar él la moto, en una azotea cuya puerta de acceso estaba protegida con runas que impedirían la entrada de mundanos indiscretos. 

Desde esa noche el hombre te trataba un poquito diferente, como si el hecho de haber salido juntos a cazar Subterráneos hubiera creado algún tipo de complicidad entre ambos. Además el Ángel pareció haber escuchado tus súplicas pues Scott se ofreció a encargarse él mismo del informe para Gareth. 

Notas de juego

 
 

FIN