La noche madrileña te recibe con una fresca y reconfortante brisa, al mirar al cielo ves a la luna en toda su plenitud, sonriendo tímidamente oculta por una pequeña nube, las estrellas brillan como faroles en el cielo despejado, facilitando con su luz el camino trazado para mortales y animales.
-¡Domine!- llama sorprendido tu hombre de confianza, un jinete se apresura a desmontar para atender tus necesidades, en su cara se refleja la sorpresa mezclada con temor.
Tu voz rompe el incomodo silencio tranquilizando a los hombres, quienes no pierden el tiempo para desmontar y estirar sus piernas, un par de ellos se desabrochan los calzones obedeciendo a la voz de la naturaleza mientras los animales pastan tranquilos a un lado del camino.
La camaradería surge entre ellos, haciendo las bromas propias tras la promesa de una cama y una madriguera caliente, nada mejor para un soldado, comida bebida y una buena zorra para calentar la cama, lo has oído en miles de ocasiones, claro que tales placeres te han sido velados primero por tu cuna y moralidad y ahora por tu condición.
Tras algo más de media hora, decides continuar el camino, no quieres que el alba te sorprenda dejándote a merced del juicio de otros, el camino aguarda junto con la promesa de un buen descanso, esta vez sin pesadillas.
Al cabo de una hora llegáis a la ciudad, observas que está bastante cambiada desde tu última visita, sin duda se ha expandido añadiendo dos nuevos arrabales, según tienes entendido Madrid ha comenzado a cobrar cierta importancia tras recibir al rey y su corte con cierta asiduidad, ¿quién lo diría?, Madrid, una ciudad sin importancia alguna, una ciudad de labriegos que carece de los lujos y arquitectura de tu conocida Toletum. Tal vez el príncipe y señor de Iberia, Silvestre Ruiz, tenga algo que ver con la reciente importancia de la ciudad, tal vez ... .
El hecho de acoger la corte de forma asidua hace que proliferen tabernas y posadas para dar cobijo a la sobre población resultante de tales eventos, por lo que no os cuesta encontrar un buen lugar donde descansar.
Tu criado se ocupa de los arreglos pertinentes, mientras un par de fuertes mozos descargan tus pertenencias y las depositan en tu habitación. El muchacho de las cuadras se encarga de las monturas, felices se dejan conducir con la promesa de una buena comida y un cepillado.
Al entrar en la habitación observas que es "especial", un par de pesadas cortinas de terciopelo cubren la ventana, a los pies de la cama hay un gran arcón, frente a esta hay una extraño mueble, armario lo llaman. Una mesa con un espejo y una jofaina completan el escaso mobiliario de la habitación, sobria pero acogedora.
Tu criado atiende tus necesidades como toda noche, abajo los hombres se divierten con un par de taciturnas zorras, mientras comen y beben. El ojeroso posadero los atiende de mala gana a sabiendas de la importancia de su señor.
Mientra tanto repasas el itinerario con tu criado, desplegando un mapa señaláis los puntos por donde pasareis, primero Alcalá de Henares, luego Catalayud, Zaragoza, Lleida tras pasar por Fraga, antes de llegar a Barcelona parareis en Tarrassa. Sabes que lo más acertado sería enviar un par de hombres por delante para avisar a Nuño y Alfonso de tu llegada para que hagan los preparativos previos.
Finalmente el sueño hace presa en ti, tu criado cierra las pesadas cortinas, instintivamente piensas en descansar en el lecho cayendo en la cuenta que no estas en la seguridad de tu refugio, finalmente decides entrar en el armario, tu criado cierra las puertas antes de acostarse en el lecho velando por tu seguridad.
El día pasa transcurre sin pesadillas, para cuando despiertas de tu sueño observas a tu criado como siempre, junto a él una tierna doncella, un extra de la posada, tu alimento, incluido en el precio acordado.
Lo siento he tenido un dia tela de liado. Ala que lo disfrutes ni pa ti ni pa mi :P. A ver que haces ahora pillin :)
Tengo una duda XD He buscado un plano del Madrid de la época para situarme (http://lh5.ggpht.com/_7tvXkH33_Nc/SSXucSHeDPI/AAAAAAAAAO8/I-wcTLENJVw/s000/06%20Siglo%20XIII.jpg es casi como el del XIV pero estando a principios del XIV he optado por ese) y me preguntaba donde estaría el refugio de Monçada. Y va y resulta que la Iglesia de San Nicolás de los Servitas es, tras la de Santa María de la Almudena hoy desaparecida y que era la más importante, la iglesia más antigua de Madrid, así que el tío ya vivía ahí.
La duda que tengo es si Roger conocería el refugio :P Por un lado yo diría que si, son amigos, se cartean, y los vampiros eran más "abiertos" en esta época que lo serán luego, claro, como no existe ni Sabbat/Camarilla, ni Anarquistas, ni nada XD Pero prefiero consultarte antes de ir para allá, que no me gusta eso de ser God ;) Si no pues tiraré para el Alcazar (mini Alcazar en la época XD) porque supongo que la corte vampírica estaría por allá, no se sabe nada, pero tampoco es que hubieran palacios ni nada parecido. Madrid era diminuta, más que Barcelona XD
Ok, la verdad es que has tenido más suerte que yo o le has echado más tiempo a buscar mapas de madrid del siglo XIII, la cosa cambia un poco en el siglo XIV, pero nada poca cosa ...
El gordo no está gordo del aire, es que el mu cabrón se mueve poquito tanto en vida como no vida. El refugio de Monçada es conocido, ya tenia el prestigio de confesor, muchos LaSombra van al ex-obispo a confesarse.
Suelo tener suerte para encontrar cosas en internet, en este link tienes todos los planos de Madrid por épocas: http://madrid2008-09.blogspot.com/2008_11_01_archive.html
Vale, pues Roger irá para allá, esté Monçada o no. Lo de la confesión lo sabía y lo tenía en cuenta, no creas XD
Ok, gracias por el link, me lo guardo :). Con Barcelona no tengo tanto problema.
El Lasombra mira a los humanos desde la distancia, tanto física como la marcada por la diferente naturaleza entre ellos. Sus palabras han causado la reacción prevista. Nada hay más alentador para ellos que la promesa de una buena recompensa en forma de alojamiento, comida y compañía femenina.
Mientras tanto la muchacha se alisa la falda, sentada en el lecho, la perspectiva de dinero sin tener que comprometer su virtud resulta demasiado buena, la pobre idiota no sabe de lo que se ha librado, por lo que se permite una tímida sonrisa para sus adentros, a estas alturas debe de pensar que Dios existe, con esas monedas su familia podrá comer unos días más, y su virtud sigue intacta por lo que no será un valor devaluado. Acabará mal, muy mal ... siempre acaba mal.
Fadrique avanza con torpeza hacia el lecho, tomando a la muchacha por el brazo izquierdo obligandola a levantarse, llevándosela de la habitación. Dejándote a solas en tu intimidad.
Para cuando bajas ves a Fadrique junto al resto de los hombres, ultimando detalles, dando instrucciones.
Al verte saluda -Domine- pausa -todo está listo para la partida-.
Sales de la posada sin diriguirle una palabra, las calles de Madrid serpentean, fiel testimonio de la ocupación musulmana, finalmente llegas a tu destino.
Una puerta se abre, la luz emana de su interior, el hombre asiente sin decir palabra, guiándote a través de pasillos, la luz muere conforme avanzáis, tienes la sensación de estar metiéndote en la mismísima boca del lobo.
Conforme avanzas comienzas a sentir de nuevo el escozor que sintieras en la catedral junto a Polanco. El hombre se detiene señalando una puerta entre abierta.
Dentro las tinieblas se remueven, un hombre obeso se haya sentado en una mesa, frente a un ajedrez dispuesto, frente a si una muchacha joven e increíblemente hermosa.
-Jaque mate- sentencia el obeso al levantar la mirada repara en tu presencia.
Con un gesto de su mano despide al mudo monje, quién dandose la vuelta desaparece por el oscuro pasillo para volver a sus quehaceres.
Monçada -Buenas noches ... pasad mi querido capitán- invita haciendo una seña con su mano diestra -os esperaba-añade con una sonrisa enigamatica cruzando su cara.
La mujer se vuelve mirando sobre su hombro, sin decir palabra te observa de arriba a bajo, estudiandote, como el lobo a su presa -buenas noches- dice sumandose al saludo de Monçáda.
-Hoy Dios es generoso conmigo- sonríe Monçada -a mi casa acuden mi hija prodiga y un buen amigo- pausa -Roger ¿conoceis a mi chiquilla Lucia?- dice señalando a la joven de cabellos negros.
La muchacha se levanta de su asiento como un resorte, con cara agria te mira -ha sido un placer conocerle ... ya me marchaba, tomad mi asiento por favor- dice señalándote con su mano el espacio que acaba de abandonar.
-Sire, me alegra volver a veros, pero tengo asuntos pendientes que resolver- sin esperar respuesta por parte de Monçada se marcha pasando junto a tu lado abandonando la estancia en pos del mudo monje.
Por momentos ves la ira malcontenida en la cara de Monçada, al cabo de unos segundos vuelve a mostrar su conocido semblante.
Ese Monçada me resulta conocido como Príncipe XD Y Lucita tiene un polvo buen ver :P Bonita escena :)
Se me olvidó comentarte que Roger rechaza a la doncella como alimento por su Via y la jerarquía de pecados ;)
Con mala cara observa como su chiquilla abandona la estancia, ladeando la cabeza de un lado a otro a modo de reproche.
-Estos chiquillos de hoy en día ...- dice con una sonrisa excusándose por el comportamiento de su chiquilla -tomad asiento por favor, ¿os apetece una partida de ajedrez?- dice mientras coloca las piezas en el tablero.
Al coger un peón negro se queda cierto tiempo mirándolo, sonríe, colocandolo frente al rey negro, cubriéndolo.
Un aura de ¿santidad? cubre al hombre, es parte de él, de su naturaleza ... desgraciadamente es molesto, aquellos que tienen el honor o desgracia de tenerlo en su presencia deben de lidiar con ello, sufriendo ese molesto escozor.
No dudas de que el ex obispo saca partido de ello, aquellos menos disciplinados se apresuran presa de la molestia, dejando la prudencia a un lado, para otros es algo más parecido a un santo entre las filas de los condenados.
Sea como sea, el chiquillo de Silvestre Ruiz ha avanzado mucho en muy pocos años, siguiendo la estela de su sire, algunos dicen que incluso superándolo en ciertos aspectos, en vida fue un importante obispo, podría haber sido papa ... o al menos eso dicen.
Sin duda todo el fofo hombre fue todo un trofeo para el Señor de Iberia, un trofeo esquivo.
Sí, lo he tomado prestado de la partida de Pombo, buscaba un gordo ceboso pero no lo encontraba, pensé en el obispo de Robin Hood principe de los ladrones pero no lo encontraba por ningún lado.
En cuanto a Lucita, si, está bastante buena, con razón su padre no la dejaba salir de casa ... xd.
Yo no la dejaría salir de la cama :P
Hmmm... ¿Que te parece este? No está tan gordo pero por la ropa XD
Servidor se retira, que viene the boss :P
Ala ya está el tio, digamos que ha hecgo regimen ... xd.
He quitado el link del gordo que había en el post, por que doblaba la anchura de la pantalla (demasiado gordo largo) y era un dolor.
Roger no puede evitar sorprenderse un poco, pues lejos de hacerle esperar en alguna sala dispuesta a tal efecto, el monje que ha abierto la puerta le conduce directamente hasta su señor, siempre en silencio. Quizás Monçada esperara su visita, si alguien le vió llegar la noche anterior, o quizás está demasiado acostumbrado a que su amo reciba visitantes. Quien sabe. El lugar debe estar bien protegido, aunque ¿Quién osaría causar algún daño al santo varón que habita aquí y que es, además, el chiquillo del Príncipe de la ciudad?.
El obispo situa frente a si las piezas negras, cediendote el honor de comenzar la partida, lentamente coloca las piezas sobre el tablero.
-Por favor viejo amigo no me halageis ... el orgullo es un pecado y yo un pobre pecador que cae una y otra vez en esa piedra- dice con falsa modestia -siempre tendré tiempo para los viejos conocidos-.
Monçada observa detenidamente el tablero de ajedrez, una sonrisa cruza su cara al verte colocar el peón que guarda a la reina en el centro del tablero.
-Previsible ... muy previsible- sentencia sonriente.
Ganar el centro es ganar media partida ... el buen obispo comienza su magistral jugada, normalmente haría una apertura con el peón que se sitúa frente al rey sin embargo si optará por este movimiento lo perdería haciéndote ganar una posición, por lo que opta por detener el avance de tu peón con el suyo propio.
-Sí, sin duda su visión es más agradable que la vuestra-dice haciendo alusión a su chiquilla - pero yo no la veo como vos ... a fin de cuentas soy un hombre de Dios y para mi no existe mayor belleza que la del creador ... además es más tozuda que una mula- añade en tono confidente.
Su mano derecha acaricia su mentón, mientras observa el tablero, esperando tu próximo movimiento, sonríe para si satisfecho con su elección.
Sus dedos tamborilean sobre la mesa -¿por qué?, ¿de verás me hacéis esa pregunta ...?, ¡oh Roger!- exclama -mi querido amigo sois impaciente ... demasiado directo, espero que sea fruto de nuestra amistad y confianza de lo contrario tendré que replantearme seriamente si sois el más apto para este encargo-.
Una vez terminas de mover ... adelanta uno de sus caballos, el obispo pasa al ataque, mostrándose seguro, dentro de poco comenzarán a caer los peones.
-Es simple mi querido capitán- levanta la mirada para observar tu rostro -habéis tenido éxitos moderados,pero no habéis alcanzado una posición elevada ni renombre mas allá de los propios a vuestra edad, si enviásemos a alguien más .... como decirlo -pausa -ambicioso- saborea la palabra -correríamos el riesgo de llamar demasiado la atención, y lo que puede ser una duda puede convertirse en un hecho confirmado, no os lo toméis a mal ... querido amigo sois inofensivo y no llamáis la atención y eso os puede salvar la no vida- silencio.
Monçada vuelve a bajar la cabeza para mirar el tablero ... ummmm masculla pensativo antes de hacer su próximo movimiento sacando el peón que aprisiona a uno de los alfiles.
-Por suerte para vos yo si he reparado en usted y en vuestra lealtad ... si salís con bien de esta ya tendréis oportunidad de agradecérmelo- pausa -¿os satisface mi respuesta?- añade en tono distraído.