Partida Rol por web

Fortunas perdidas

ACTO 1 Capítulo 1 - Escena 3: Llegada a Shiro no Soshi

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01/04/2021, 23:24
Soshi Isane

- Es un verdadero placer volver a encontrarnos Isawa Satoru.

La mujer bajó la mirada ante las palabras del Ikoma y no pudo evitar esbozar un rubor en sus mejillas.

- Entiendo... - dice la mujer girándose hacia la puerta e invitando a toda la comitiva a adentrarse en el Kyuden. - Supongo que la magistrada tendrá sus razones para haber declinado nuestra invitación.

Acompáñenme. Les llevaré hasta la señora Shinobu después de que les haya enseñado sus aposentos.

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03/04/2021, 21:15
Ikoma Kazuo

Kazuo se apeó de la montura, ciñó su obi, estiró la espalda y entregó las riendas de Daitan a uno de los sirvientes, pero no sin asegurarse de que llevaba consigo todo lo que creyera que fuera a necesitar, como su porta-pergaminos y, por supuesto, su biwa.

—Agradezco su comprensión —contestó a Isane, llevándose la diestra al corazón, para después volver sus ojos hacia Norie—. ¿Sería posible acompañarla, en su audiencia con el venerable daimio? Después de ser testigo de todos sus tormentos, no podría perdonarme jamás el no haberle prometido a Soshi Bantaro-sama lo antes posible lo que ya le he prometido a Soshi Isane-sama. 

Notas de juego

Satoru, no te olvides de reaccionar a la pichalocura de Kazuo de antes XD

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05/04/2021, 12:28
Isawa Satoru

Kazuo tomó la palabra tan pronto como él calló, dando una continuidad a sus frases con una naturalidad que casi hacía parecer que eran dos voces en el mismo discurso. Pero a pesar de eso, las palabras del Ikoma en ningún caso hubieran salido de la boca de Satoru. Antes de hacerlo, el shugenja se hubiera mordido la lengua hasta sangrar.

Especialmente, porque en otra época esas palabras, u otras muy similares, habían sido suyas. Y similares habían regalado sus oídos procedentes de los cálidos labios que escondía el mempo de la mujer, y que tan bien había llegado a conocer.

Por un momento, sus ojos se cerraron. En parte, en un intento de serenarse, y por otra parte, para evitar lanzar una mirada asesina a Kazuo. No tenía nada que reprocharle, al fin y al cabo, pero ser consciente de ello sólo hacía más desagradable el sentimiento que se revolvía en su interior. Y sólo cuando ella pronunció su nombre abrió de nuevo sus párpados para mirarla.

-Sólo somos hojas en el viento que agitan las Fortunas. –Respondió lentamente a la otra shugenja, conteniendo el suspiro que pugnaba por escapar de sus labios. –Es un inesperado regalo poder veros de nuevo, Isane-san-

Obligándose a enfocar sus revueltos pensamientos en la política, Satoru sopesó con cuidado la petición de Kazuo a la magistrada Escorpión. Acudir con ella al daimio era, sin duda, la forma más rápida de acceder a Soshi Bantaro, pero también una forma en la que no podrían hablar de forma completamente libre con él… o más bien, todo lo libremente que un hombre sabio se permitiría en una corte del clan de los secretos.

-Lo cierto es que mi compañero tiene razón. Al fin y al cabo, Mirumoto-sama nos ha enviado precisamente para poder honrar al daimio hasta que ella pueda llegar. –Añadió, dirigiendo una mirada a Norie, mientras trataba de comprender el motivo por el que la magistrada había sugerido que tal vez Megumi no debiera acudir a la fortaleza. –Nos sentiríamos muy honrados de poder expresarle nuestra voluntad de resolver este conflicto tan pronto como podamos.

Después, asintió ligeramente al gesto de Isane girándose hacia la puerta para conducirles al interior de la fortaleza, y aprovechó el momento de deshacerse de sus monturas para colocarse junto al bardo Ikoma.

-Cuida tus palabras, y hasta tus pensamientos, Kazuo-san. –Dijo en voz baja. Tras la expresión neutra de shugenja, se adivina una profunda turbación que afectaba a sus palabras. Una tal vez mayor que la que podría haberle causado el reencuentro con Soshi Isane. -Tras estos muros, ni siquiera tus silencios te pertenecen.

Bien disimulada entre los amplios pliegues de su ropa de viaje, un ojo del color de la miel observaba también al bardo en silencio. Al parecer, la pequeña gata del Isawa se había empapado de los sentimientos de su dueño.

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06/04/2021, 23:59
Bayushi Hoji

- ¿Así que ya conocía al señor Isawa Satoru, señorita Isane? - dijo el Bayushi con cierto tono incómodo. Los ojos dentro de su máscara estudiaban la reacción de la Soshi, mas la joven SOLO reaccionó al comentario del bardo Ikoma.

Se notaba que el agente de Norie deseaba preguntar más, pero fue capaz de controlar su curiosidad y acallar sus dudas.

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07/04/2021, 00:20
Shosuro Norie

La magistrada solo esbozó una sonrisa y denegó el ofrecimiento de la Soshi.

- Gracias, Soshi Isane. Pero mis hombres se encargarán de mis cosas y ya conozco perfectamente el castillo. Bayushi Hoji se reunirá después con la honorable Soshi Shinobu-sama para explicarle nuestros avances. Me gustaría conversar una vez más con el general Soshi Furuyari.

La magistrada se giró para observar a los dos samurai y asintió en un gesto de la cabeza, como si les diese permiso para proceder.

- Además estoy segura de que los agentes de Mirumoto Megumi se sentirán más cómodos para hablar con Shinobu si no estamos nosotros para condicionarles.

Ellos tienen la posibilidad de hacer las cosas bien, sin las prisas y la sensación de asfixia que tuvo el Magistrado Shinjo. Creo que es prioritario que se sientan cómodos y libres para investigar.

Luego se gira hacia Kazuo y Satoru - Les deseo una feliz estancia. Confíen en la Dama Shinobu, ella conoce bien el funcionamiento del castillo y de los valles.

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07/04/2021, 21:40
Ikoma Kazuo

Kazuo respondió a Satoru con uno de los silencios que él acababa de mentar, matizado por una amplia y enigmática sonrisa que mantuvo hasta que el perspicaz Bayushi Hoji sacó a colación la familiaridad entre los dos shugenjas. El momento pasó sin que el Escorpión pudiera saciar su sed de respuestas, y entonces Shosuro Norie tomó la palabra. 

«Soshi Bantaro, Soshi Shinobu, Soshi Furuyari». El bardo tomó nota mentalmente de los nombres de los tres destacados samuráis, y también de las intenciones de Norie de entrevistarse con el daimyo y el general. Había dedicado otra no tan velada crítica a la labor de Shinjo, lo cual le llevó instintivamente a preguntarse si no harían lo mismo con ellos tan pronto como dejaran de oírles, pero el León decidió no perderse en tales pensamientos, pues no conducían a ningún sitio. Se limitó a hacer una reverencia de despedida a la magistrada, y a volverse hacia la bella Isane. 

—Entonces, si ya está todo dicho, creo estar preparado para la entrevista con Soshi Shinobu. ¿Satoru-sama? 

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07/04/2021, 22:15
Soshi Isane

Los agentes del Campeón Esmeralda se quedaron a solas con Isane, y esta les hizo un gesto para que le acompañaran. Los tres cruzaron el patio exterior donde puede verse en la zona izquierda numerosas tropas en tareas de mantenimiento, criados poniendo a punto los caballos, y soldados escorpión haciendo tareas de entrenamiento militar básico. En el patio derecho algunos shugenjas dan ordenes para levantar empalizadas, las torrenciales lluvias de los últimos días han causado algunos desperfectos en las torres de vigilancia.

- Shosuro Shinobu es la esposa de Soshi Bantaro, ella es la señora del castillo. Ella desea que por encima de todo se sientan ustedes seguros y bienvenidos. No escatimará en esfuerzos, así que si necesitan cualquier cosa tengo ordenes de satisfacerles en cualquier... deseo.

Atravesáis el muro del patio medio y pueden verse algunas casas y templos nobles, sobretodo de familias servidoras del Daimyo pero también casas de invitados para alojar a grandes personalidades, como el Daimyo del Clan y su familia o séquito, cuando vienen a visitar a la familia Soshi. Un jardín extremadamente grande y cuidado se encuentra visible en la zona más oriental del palacio, podéis apreciar un intrincado laberinto hecho con setos cortados y arboles cuidadosamente seleccionados.

Finalmente entráis al Palacio Soshi propiamente dicho, un baluarte bien protegido lleno de altas torres, con siete plantas y cuatro alas separadas por pasillos cubiertos y algún puente colgante. No es el castillo más grande ni la fortaleza más resistente que habéis visto, pero el tortuoso e intrincado diseño es de los más complicados que habéis visto hasta ahora, y por un momento se os ocurre que es el sueño de cualquier niño que le guste jugar al escondite...con múltiples recovecos, escondites y salidas (*)

En las puertas, una mujer de la más alta nobleza os espera para recibiros, acompañada por una pequeña comitiva de cortesanos.

Notas de juego

(*) Podéis hacer una tirada de Percepción + Investigación (NO 30 y se permiten aumentos para más info)

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07/04/2021, 22:43
Soshi Shinobu

La mujer noble se adelantó con seguridad bajando los escalones y Soshi Isane se acercó a su señora para susurrarle algo al oído. Su rostro era calmado y hermoso, vestía un kimono de gran calidad con motivos florales de tono escarlata y violeta. Debía estar cerca de la cuarentena años, pero su belleza aun se conservaba y sus gestos estaban perfectamente calculados. Su voz, delicada y un poco más grave de lo esperado, invitaba a la calidez de su hogar.

- Bienvenidos a nuestro hogar, os estábamos esperando, y tenemos todo pendiente para acomodaros en nuestro hogar, lejos de toda la miseria y desgracia que ha traído la ambición de nuestros enemigo a los plebeyos del Emperador.

La dama hizo un gesto para que los criados abrieran las puertas y ayudaran a los agentes de la Magistrada con sus pertenencias; luego les hizo un gesto amable a la Magistrada y sus asistentes para que la acompañaran hacia el castillo.

- Mi nombre es Soshi Shinobu, hija de Soshi Ranzo (*) y esposa de Soshi Bantaro, actual señor de los valles Ojatara y fiel servidor del Emperador.
Es para mi un honor poder tenerles en nuestra casa. Acompañadme dentro y podréis disfrutar de un merecido descanso. Yo misma organizaré un encuentro con mi esposo para cenar esta noche y solventar todas vuestras dudas.

A su lado, varios Bushi escorpión y un numero idéntico de shugenjas cuadraron de forma respetuosa y se inclinaron a la llegada de los agentes. Al lado de Soshi Shinobu, caminaba un hombre atento con ropas livianas y un furoshiki repleto de pergaminos.

La mascota de Satoru maúlla con un lastimero sonido cuando los criados tratan de separarlo de su amo.

Notas de juego

* Antiguo (y difunto de hace años) Daimyo de la familia Soshi.

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08/04/2021, 21:27
Isawa Satoru

La sutil crítica que la magistrada Norie había dirigido a su equivalente Unicornio no le había pasado desapercibido a Satoru, pero prefirió no decir nada hasta haber meditado sobre ello. La magistrada no parecía tan torpe como para revelar sus pensamientos accidentalmente en una conversación. Esa crítica iba destinada a ellos.

Con eso en mente, siguieron a Isane al interior de la fortaleza. Satoru escuchaba a la mujer mientras les hablaba, hasta que dos inesperadas palabras cayeron en sus oídos como losas.

Cualquier… deseo.

Ese último comentario de la mujer fue demasiado como para que Satoru mantuviera la impasibilidad que trataba de aparentar. Como si el dique que contenía sus recuerdos se hubiera resquebrajado, una avalancha de sensaciones lo golpeó con más fuerza que una bofetada.

Un hormigueo recorrió su cuerpo cuando el recuerdo del cálido tacto del cuerpo de Isane y la sensación de su piel contra la suya eclipsó cualquier otro pensamiento, y en sus labios aún le pareció sentir el eco del sabor dulce y amargo de sus besos. Hasta tal punto los recuerdos de antiguas sensaciones saturaron al joven shugenja, que el último tramo del camino apenas fue capaz de prestar atención a lo que los rodeaba.

Al menos, hasta que alcanzaron las puertas del palacio Soshi para ser recibidos por la mujer que se presentó como Soshi Shinobu, esposa del poderoso daimio Soshi y a todos los efectos señora del castillo.

Fue precisamente su voz la que arrancó a Satoru de sus revueltos pensamientos, y lo devolvió al instante presente.

-Siempre es un privilegio poder disfrutar la hospitalidad de Shiro no Soshi, pero ser recibidos personalmente por vos es un honor al que las palabras apenas hacen justicia, Shinobu-sama. –Contestó el Isawa, acompañando su declaración con una sonrisa y una reverencia ligeramente más pronunciada de lo que marcaba la etiqueta. De alguna forma, el aura de autoridad de la mujer eclipsaba incluso la perturbadora influencia de Isane. –Mi nombre es Isawa Satoru, Maestro del Aire. El Campeón Esmeralda nos escogió a mí y a mi compañero Ikoma Kazuo como ayudantes de la magistrada Mirumoto Megumi.

Sólo lamentamos el que esta visita se deba a circunstancias tan trágicas como las que han sucedido en estos valles y no a motivos menos oscuros. Tened por seguro que es nuestra firme voluntad de que se haga justicia y que la paz regrese pronto a vuestro hogar.

-Tanto nuestra, como de la magistrada Mirumoto Megumi, quien ha querido que nos adelantemos para honraros cuanto antes. Tan pronto acabe la tarea que el Doji Satsume le encargó vendrá para unirse a nosotros.

-No es necesario que os encarguéis de Tameiki. –Dijo amablemente a los criados cuando trataron de coger a su pequeña mascota, y luego dejó que la gatita ocupara su lugar habitual entre su ropa de viaje. –Me ocuparé personalmente de ella.

- Tiradas (1)

Motivo: Percepción+Investigación

Dificultad: 30

Tirada (5): 9, 3, 16 (10, 6), 4, 3

Guardados (2): 16, 9

Total: 25, Fracaso

Notas de juego

Un post un poco rápido pero estaba falto de inspiración.

De paso justifico el no pasar la tirada de Percepción :D​​​​​

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12/04/2021, 22:05
Ikoma Kazuo

Kazuo se dejó llevar por Isane por el castillo, y enseguida quedó cautivado por su intrincado diseño. Los laberintos, los escondites, las torres y los guardias… todo ello invitaba a pensar que allí se escondía un gran secreto, y el bardo no tenía ninguna duda de que así era. De todos los Clanes, el Escorpión era el más dado a las intrigas, y de las familias que lo integraban, los Soshi eran desempeñaban el papel de shugenjas.

Cuando atravesaron las puertas del palacio la mente del Ikoma recorría la reconstrucción que había imaginado, pero el recibimiento de reyes que Soshi Shinobu les dio puso los pies del bardo en la tierra bien rápido. La señora del castillo lucía su belleza con experiencia, y a los ojos de él, su veteranía no hacía sino realzarla. Tuvo que reprimirse para no morderse el labio, que era algo que hacía desde niño cuando veía algo que le gustaba, y dejó que su amigo tomara las riendas de la conversación y le presentara, momento en el que él hizo una refinada reverencia.

—Sois muy generosa —añadió, mientras Satoru luchaba por mantener a Tameiki a su lado.  

- Tiradas (1)

Motivo: Investigación

Dificultad: 30

Tirada (6): 2, 7, 1, 8, 10, 9

Guardados (3): 10, 8, 9, 8 (Se tiran de nuevo solo los dieces guardados)

Total: 35, Éxito

Notas de juego

Paso la tirada de Percepción 

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12/04/2021, 23:51
- Fortunas -

Ikoma Kazuo se encontraba apreciando la arquitectura minuciosa del castillo, cuando apreció un par de detalles.

El primero era que que el edificio al que se encaminaban, estaba comunicado a distintos niveles con otros edificios por puentes. Muchos parecían arcos decorativos, pero la mayoría transitables de forma cómoda. Otros eran claramente decorativos, pero un samurai ágil podría cruzarlos con facilidad.

Entre las decenas de criados, samurais y cortesanos que entran y salen por las distintas puertas del castillo, consiguió apenas ver la forma de Shosuro Norie. La magistrada esmeralda se encaminaba con paso rápido y firme a la parte trasera del castillo, por una puerta secundaria como para no llamar la atención. Norie se detiene al lado de una cortesana escorpión que va vestida de luto, el color blanco de la muerte. La mujer lleva el rostro enrojecido por el llanto contenido, y aunque Norie siente ganas de abrazarla para consolarla, mantiene el protocolo y saluda de forma respetuosa manteniendo la compostura y la distancia, luego desaparece detrás de un grupo de Bushi que hacen de muralla intentando proteger algo de la vista pública.

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13/04/2021, 00:06
Soshi Shinobu

- Ante todo quiero pedirles disculpas por las atenciones deficientes de mi familia. Hemos perdido muchos hombres y muchos recursos, pero se les atenderá en cualquier necesidad. Mi doncella, Soshi Isane se encargará de asesorarles estar disponible para cualquier petición que tengan.

Los agentes fueron acompañados a sus habitaciones en el ala de invitados del Castillo.

Recorrieron parte del castillo y percibieron que los pasillos del lugar eran incómodamente oscuros, los contrafuertes de las ventanas eran muy opacos y las decoraciones de las cortinas muy tupidas y enrevesadas, haciendo que la débil luz del atardecer no penetrase apenas al interior de la vivienda.

Oportunas velas y lámparas iluminaban de forma débil las esquinas y cruces en los pasillos del castillo, provocando largas sombras que producían confusión y misterio. Obviamente, los guardias, sirvientes y demás habitantes del palacio, estaban más que acostumbrados a guiarse y vagar por el castillo en semejante penumbra.

En muchos rincones y recovecos, se podía ver de forma casi inapreciable guardias de la casa Soshi, muchos de ellos Shugenjas Soshi expertos en magia de Aire.

- Si desean darse un baño caliente o tienen cualquier petición, pueden solicitarlo a Isane. Pero les ruego que no salgan fuera del castillo durante el resto del día. Los criados han preparado arias remesas de alimentos bajo mis ordenes y vamos a alimentar a los refugiados. No quiero un encuentro desagradable de mis invitados con esas pobres almas.

Si no tienen ninguna pregunta les veré en la cena.

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13/04/2021, 21:40
Ikoma Kazuo

—Un baño siempre es bienvenido —dijo, mirando a Satoru, que pudo ver un destello jocoso en los ojos del bardo—. ¿Sería posible dar un paseo por el castillo después? Confieso que su diseño me ha dejado anonadado. No tenía ni idea de que su construcción fuera tan original e ingeniosa. 

Entonces sí que posó todo el peso de su mirada en la esposa del señor. 

—Si es posible, me encantaría que vos misma me lo mostrarais. Estoy seguro de que, habiéndoos criado entre estos muros, tendréis un sinfín de historias que contar —llegados a ese punto su petición se podría haber considerado impropia, pero el Ikoma fue raudo a intentar remediarlo, valiéndose para ello de la reputación de los de su linaje—. Sé que este no es el motivo por el que se me ha enviado aquí, pero me encantaría añadir a los archivos de mi familia cuanto podáis contarme de vuestro honorable padre, Soshi Ranzo-dono. 

Y agachó la cabeza en señal de profundo respeto, aguardando una respuesta. 

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14/04/2021, 18:52
Isawa Satoru

-Las atenciones de vuestra familia son más que generosas para unos viajeros como nosotros en tiempos de escasez, Shinobu-sama. –Contestó a la falsa modestia de su anfitriona con una inclinación. -Y vuestra atención, más de lo que podríamos soñar.

-Sin embargo, un baño sería sin duda algo de agradecer. –Añadió, corroborando la respuesta de Kazuo, y devolvió una media sonrisa al bardo cuando sus miradas se cruzaron. –No querría ofrecer una mala imagen en vuestro hogar, y siento que llevamos ya cabalgando demasiado tiempo.

Lo cierto era que, aunque exageraba, había bastante verdad en lo que había dicho. Sentía el polvo del camino pegado a su piel, y era dolorosamente consciente que su compañero olía ya demasiado a Daitan, y él probablemente no estaría mejor situado. Y al igual que el bushi se equipa con su armadura para una batalla de aceros, ellos estarían mejor preparados para una de palabras después de ese baño.

Pero la siguiente petición de Kazuo fue completamente inesperada, y Satoru tuvo que dedicar unos momentos a pensar sobre ella antes de poder abrir sus labios. Era atrevida, tal vez incluso demasiado atrevida, pero también una potencial oportunidad. Si lo conseguía y los acompañaba, podría escuchar de primera mano mucha información.

Pero si lo conseguía y no los acompañaba, se quedaría con Isane. El estómago Satoru se estremeció, sin que el shugenja lograse comprender muy bien el motivo exacto.

-Comprendemos que estáis llena de responsabilidades más importantes que cumplir el humilde deseo de Ikoma-san. –Aún no estaba completamente seguro de qué era lo que quería, pero al menos tenía claro que no iba a dejar de echar una mano a su amigo, si realmente quería obtener ese favor de Shinobu. -Pero es cierto que también estoy seguro de que nadie como vos podría hacernos entender cómo os ha afectado esta desafortunada guerra. Como investigadores de Mirumoto-sama, sólo podemos estar un tiempo limitado aquí… pero para vos, esta tierra ha de ser como parte de vuestro propio cuerpo.

Acabado su pequeño alegato, no pudo evitar que su mirada se desviara discretamente hacia la sinuosa silueta de Isane.

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18/04/2021, 23:40
Soshi Shinobu

La señora del castillo guardó silencio y lanzó una mirada a su doncella Isane. No hubo palabras, ni siguiera un gesto visible, pero sin duda unos expertos tan cultivados en el arte de la diplomacia como Kazuo y Satoru sabían que de alguna manera, estaba habiendo algún tipo de comunicación entre ellas.

- Para mi será un placer poder enseñarle el hogar de mis antepasados, Ikoma Kazuo-san. - dice con una sonrisa sacando una mano delicada para acariciar su abanico. - Después deberé atender asuntos ineludibles, pero si no le importa hacerlo ahora... todavía tengo algo de tiempo.

Extiende su abanico y lo mueve para invitar a Kazuo a recorrer el pasillo.

- Isane, enséñale sus aposentos y prepara el baño a nuestro invitado Isawa.

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19/04/2021, 21:49
Ikoma Kazuo

Kazuo hizo una reverencia a Shinobu, y cuando se volvió a alzar asintió a Satoru a modo de despedida. 

—Te veré en la cena, pues. 

Notas de juego

Por mi parte nada más que decir 

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20/04/2021, 13:16
Isawa Satoru

Tras los discursos de ambos samuráis, la señora del castillo miró a Isane, y el silencio que siguió a esa mirada estuvo lleno de secretos. Era evidente que ambas mujeres estaban comunicándose de alguna forma, pero el shugenja no estaba seguro de si esa forma era mundana, o si estaban utilizando algún hechizo.

Él conocía, gracias a su madre, que el clan de la Grulla podía usar un lenguaje invisible basado en pequeños gestos al que llamaban Cadencia. Ella misma lo conocía, pero nunca había accedido a enseñárselo para no romper sus juramentos.

Pero también era muy consciente de las habilidades mágicas de Isane durante el tiempo que habían pasado juntos. De todos los shugenjas de Rokugán, sólo los extraños Ishiken-do eran capaces de emular la capacidad de los Soshi para esconder sus plegarias.

Tras ese momento, finalmente Shinobu accedió a la petición del bardo, y éste se apresuró a agradecerle la oportunidad con una reverencia y a despedirse momentáneamente.

-De acuerdo. -Contestó a Kazuo, devolviéndole el asentimiento. Un segundo después, se decidió a añadir algo más. Después de haber sido consciente del mudo intercambio entre las dos mujeres, supuso que lanzar algunas pistas falsas no estaría de más, teniendo en cuenta de que estaba seguro de que tratarían de investigarlos. -No llegues tarde esta vez, Ikoma-san.

-Os sigo, Isane-san. -Añadió, dedicándole también una inclinación. Poco a poco, comenzaba a acostumbrarse a la presencia de la mujer, al menos lo suficiente como para evitar que su voz lo traicionara.

Notas de juego

Adelante, adelante

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22/04/2021, 22:06
Soshi Shinobu

La señora del palacio Soshi les agradeció con una profunda sonrisa y comenzó a caminar con Kazuo por las estancias de la residencia. Un par de cortesanos menores les siguen en la distancia, lo suficientemente lejos para no escuchar su conversación, pero siempre a la vista para que el paseo de una señora casada con un soltero de mala fama no suponga un deshonor.

Las estancias del castillo provocan una sensación extraña, la arquitectura es complicada, hay celosías por todas partes, y muchas ventanas apenas ofrecen una penumbra para los retorcidos pasillos. Los techos son altos, con intrincadas vigas de madera con adornos apenas perceptibles desde el nivel del suelo.

El castillo se encuentra adornado y acondicionado a la perfección, como si el mismo castillo fuera una gran obra de arte, donde las luces y sombras juegan un papel clave. Esto no es extraño para quienes hayan vivido años en una ciudad escorpión, siempre han sido famosos por buscar la dualidad, pero los Soshi eran sin duda los que más experimentaban con dichos efectos de luces. Y sin embargo... un observador minucioso podía notar que el castillo utilizaba su emplazamiento natural como defensa en la montaña, y que podían encontrarse muchos guardias y shugenja vigilando todas las murallas y tejados.

A pesar de la paz impuesta por las legiones imperiales, era obvio que los Escorpión no confiaban en ser atacados incluso en el mismo corazón de su familia.

- Mi familia ha poseído estos valles desde hace cientos de años, aunque el Castillo se reconstruyó en este emplazamiento hace solo unos doscientos años, nosotros ya dominábamos el punto más alto de los valles Ojatara cuando los Unicornio se marcharon del Imperio. Nosotros cuidamos de sus tierras durante siglos, y se las devolvimos cuando regresaron. 

El palacio era inmenso. Shiro no Soshi no solo albergaba la residencia de la familia, también era el núcleo de su escuela, podeía un Dojo con biblioteca extensa, llena de pasillos, escaleras y pergaminos. Varios santuarios repartidos por distintas plantas señalaban la devoción a los kami y los antepasados por parte de la familia.

Todas las esquinas y ventanas poseían carrillones de viento, pequeños instrumentos que emitían sonidos dulces con las caricias de la brisa y honraban a los kami de aire, aquellos que otorgaban su inmenso poder a los Soshi.

Shinobu se detiene en un balcón, se asoma y contempla las vistas del valle hacia el oeste. Inspira y cierra los ojos, aspirando el aroma de la tierra mojada por la lluvia.

- ¿Qué hace usted aquí, señor Ikoma Kazuo? Conozco su reputación en Ryoko Owari, y este es un lugar donde la chispa de la guerra puede volver a convertirse en un incendio en cualquier momento.

Notas de juego

Percepción + Investigación (NO 30)

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22/04/2021, 23:17
Soshi Isane

La señora Shinobu les agradeció con una profunda sonrisa y Soshi Isane antes que nada guió a Satoru hacia sus habitaciones para cambiarse las ropas de viaje por ropas mas adecuadas a su estatus, indicándoles a unos criados que preparasen el baño para el maestro de Aire.

Las estancias del castillo provocan una sensación extraña, la arquitectura es complicada, hay celosías por todas partes, y muchas ventanas apenas ofrecen una penumbra para los retorcidos pasillos. Los techos eran altos, con intrincadas vigas de madera y con adornos apenas perceptibles desde el nivel del suelo.

El castillo se encontraba adornado y acondicionado a la perfección, como si el mismo castillo fuera una gran obra de arte, donde las luces y sombras juegan un papel clave. Y sin embargo... un observador minucioso podía notar que el castillo utilizaba su emplazamiento natural como defensa en la montaña, y que podían encontrarse muchos guardias y shugenja vigilando todas las murallas y tejados.

A pesar de la paz impuesta por las legiones imperiales, era obvio que los Escorpión no confiaban en ser atacados incluso en el mismo corazón de su familia.

- Esta es tu habitación, Satoru. - dijo con un tono gélido y una mirada fría. - os prepararé el baño personalmente, se encuentra abajo, en la planta inferior.

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25/04/2021, 17:38
Isawa Satoru

Aun ligeramente aturdido, Satoru siguió a la shugenja por los pasillos del hogar ancestral de los Soshi, y se esforzó por obligar a su mente a enfocarse en todo menos en ella. Así, comenzó a analizar el lugar con toda su atención, y eso le ayudó a terminar de normalizarse. Toda la construcción de la fortaleza era intrigante, y pudo darse cuenta de cómo había lugares para apostar guardias convencionales, y otros desde los que los shugenjas podrían asistirlos. Tal y como había dicho a Kazuo momentos antes, allí los secretos no estaban a salvo.

Finalmente, llegaron hasta las habitaciones que le habían asignado, y ella se detuvo sólo el tiempo necesario para darle unas instrucciones tan correctas como gélidas.

-Isane… -Contestó con voz suave y ahogada. La frialdad de las palabras de la mujer parecía clavarse en su alma. -Yo…

Tragó saliva, y centró sus pensamientos. Al menos, eso era algo que el rígido entrenamiento de Akio le había enseñado.

-Te esperaré aquí. –Añadió con voz más normal, y añadió con una expresión triste en su mirada. –Estaré listo en unos minutos para el baño. Y trataré de no ser una molestia.

Una vez dentro de sus habitaciones, Satoru sacó a Tameiki de entre sus ropajes, y dejó escapar el intenso e interminable suspiro que llevaba conteniendo casi desde que sus ojos se habían cruzado con los de su antiguo amor. Se sentía triste, confuso, frustrado, enfadado y ansioso.

Todos los años que había pasado sin verla le habían hecho creer que ya había superado los sentimientos que los habían unido y separado, pero había bastado una mirada para destruir esa idea. Era un pensamiento tan ingenuo como el de la rama seca de un árbol creyendo que después de haber estar separado del fuego éste ya no podría consumirla.

Y ahora, Satoru ardía por dentro. Casi sin darse cuenta, ya tenía a Namida entre sus manos, y se apresuró a buscar la pulida superficie del espejo. Ni siquiera estaba seguro de qué era lo que querría encontrar allí, o si lo que iba a ver lo ayudaría. Simplemente, necesitaba mirar.

Notas de juego

Dejo el inpass de mirar en Namida, y luego si tal sigo haciendo cosas.

Creo que se impone una charla con Tameiki para que sea mis ojos. Un gato ve más que un hombre. Y tal vez, hasta me la juegue a disipar ilusiones, aunque no creo que hayan sido tan cafres en mi cuarto. Otra cosa sería en el de Kazuo, que el pobre no puede evitarlas :P