Partida Rol por web

El Humvee al que os subisteis parecía más un arsenal con ruedas que un vehículo. Dentro de él había suficientes armas para todo el grupo, también teníais mochilas para los soldados normales, para AT y para médicos por no nombrar la munición para cada arma, las ruedas de repuesto del vehículo y un bidón extra de gasolina que probablemente fuese un tercio de la capacidad total del depósito del vehículo.

Inventario del vehículo

Sumimoto minimi 1
Mineba 3
Howa tipo 89 3
Panzerfaust-3 2
Equipo básico 3
Equipo AT 1
Equipo médico 1
Kit medico primeros auxilios 2
Cargadores fusil asalto 65
Cargadores pistola 10
Cargadores ametralladora pesada 9
Granadas frag 12
Granadas aturdidoras 8
Granadas humo blanco 20
Granadas humo verde 12
Granadas humo rojo 10
Granadas humo azul 8
Rueda de repuesto 2
Bidon de gasolína(1/3) 1
Equipo de acampada 2
Comida para una persona 50

Por lo que podíais observar no era un Humvee normal, como los que estabais acostumbrados a utilizar, al principio no os habíais dado cuenta, pero era algo más grande que los normales, de hecho tenían 7 asientos y luego suficiente hueco para el artillero. Detrás también había una especie de maletero en el que estaban todos los objetos y equipación y calculabais que podían entrar 3 personas no muy grandes tumbadas si organizabais el espacio. Sin duda alguna las Fuerzas de Autodefensa se habían dejado dinero en la expedición, por lo menos en los vehículos.

Una vez estabais todos en vuestro sitio os pusisteis rumbo hacia el área que os habían designado. Al salir de la base tuvisteis que conducir por un campo con bastantes baches por la batalla de hace apenas unos días en la que los nativos habían intentado tomar control de la puerta, aunque no habían sido rival para los tanques ni los morteros. A pesar del camino regular no se parecía ir demasiado mal dentro del vehículo, y no tardasteis mucho tiempo en encontrar un camino decente, que aunque no estaba asfaltado y se seguían sintiendo pequeños botes cada poco tiempo, era mejor que ir por la campa.

El paisaje era muy verde, se notaba que era una zona sin explotar de la cual se podían conseguir muchos recursos. Los bosques se extendían hasta llegar a las montañas, de vez en cuando se veía algún animal salvaje bebiendo de algún riachuelo, y las bandadas de pájaros salían volando en dirección contraria al ruido del motor, siendo seguramente la primera vez que escuchasen un ruido semejante.

Tras haber observado que todo su equipo estaba allí, siendo de mayor importancia para el soldado su Sumimoto Minimi, y que parecían tener el suficiente equipo para tratar heridas, así como raciones, Ryuuji consideró que estaba preparados para partir en su misión, deseoso por un poco de acción y explorar aquel nuevo mundo que parecía bastante interesante y prometía adrenalina de sobra al joven.

Si, están todos listos, deberíamos de partir. Aconsejó, primero asegurándose que todos estuvieran preparados para la misión de exploración y contacto con los nativos, antes de poner en marcha el Humvee e iniciar el viaje hacia el destino que les había sido indicado. No sabía muy bien con qué podrían encontrarse, aunque esperaba que en algún momento tuvieran una buena batalla con algo, no se había metido en las Fuerzas de Autodefensa para actuar pura y exclusivamente de diplomático.

No toquen mi ametralladora. Advirtió mientras conducía aquel enorme vehículo a medida que controlaba la dirección del mismo cuando pasaban por los numerosos baches en el camino, resultado de la batalla en la cual había participado no hacía mucho tras expulsar a los nativos que querían apoderarse de la puerta. Un momento sin duda bastante maravilloso para Ryuuji quien no había dudado en hacer uso de sus habilidades.

Una vez que pasaron por la zona de la batalla, el soldado permaneció en silencio apreciando en parte, mientras conducía y mantenía una atención prudente en el camino, la belleza de aquel mundo cuyos recursos no habían sido explotados aún. No podía negarlo, parecía un buen lugar para vivir a pesar del hecho de que desconocían bastante tanto de los nativos como de las criaturas que habitaban ese mundo.

Akari es una recluta infanteria asi que se queda con la siguiente lista:

• 1x Mineba P-9
• 2x Cargador de pistola
• 1x Howa tipo 89
• 5x Cargadores fusil de asalto
• 1x Equipo básico
• 8x Comida para una persona

Akari guarda la pistola en el cinturon, junto con los cargadores de pistola y cargadores de fusil de asalto, se guarda en el chaleco las granadas de fragmentacion y aturdidora y guarda todo lo demas en la mochila, excepto el fusil, que se lo queda en las manos. Los cargadores adicionales que ha cogido los guarda en la mochila tambien, para caso de emergencias donde el Humvee no sea una opcion disponible.

- Akari ya esta lista para el viaje - comenta a sus compañeros mientras se vuelve a acomodar en la parte trasera. Cuando arrancan se agarra como puede para no caerse con tanto bache, suspirando aliviada cuando cogen una carretera más asequible.

Tras ver el precioso paisaje verde recuerda todo el proceso que ha tenido que pasar para estar donde está ahora y no se arrepiente de nada, parece sacado de uno de los libros de fantasía que leía de niña y empiezan a brillarle los ojos, deseando poder bajar y explorar todo el nuevo mundo que se ha abierto tras la puerta.

Un tanto confuso y sin saber aún qué equipo tendría que escoger para la misión, miré por encima del hombro de Akari y me fijé en los objetos que seleccionaba. Ella era una recluta de infantería y yo un fusilero, por lo que nuestos equipos no deberían ser muy distintos.

Tras pensarlo levemente, elegí los siguientes objetos:

• 1x Mineba P-9
• 2x Cargador de pistola
• 1x Howa tipo 89
• 5x Cargadores fusil de asalto
• 1x Equipo básico
• 1x Equipo de acampada
• 8x Comida para una persona
• 2x Granadas frag
• 3x Granadas humo rojo

Me colgué las cinco granadas del cinturón, así como la Mineba, dentro de su funda. Las provisiones, cargadores y equipo de acampada procedí a guardarlos en mi mochila, que me la colgué a la espalda. Entre las manos sostenía únicamente el Howa de Tipo 89. Era la primera vez que sostenía uno de aquellos y me encontraba un tanto nervioso.

Con intención de socializar un poco con mis nuevos camaradas, subido ya en la parte trasera del Humvee, me acerqué a Akari, un tanto intrigado ante su comportamiento. Me resultaba un poco extraño que siempre se refiriera a sí misma en tercera persona, aunque aún era demasiado pronto para preguntarle el motivo.

-Hola. Soy Striker-Tanaka -me presenté, extendiéndole mi mano de gorma cordial para que la estrechara-. Puedes llamarme Joaquin. O Quin, como prefieras. Eres Shimakaze, ¿verdad?

Ante el guiño de Ryuuji sonríe apenas en respuesta mientras sigue constatando su equipo médico, al parecer tienen todo lo necesario para emprender el viaje hacia aquel lugar. Las expectativas por parte de la rubia son bastante buenas, no sabe a ciencia cierta lo que puede encontrarse allí, pero al menos le tendrá esa buena dosis de adrenalina que necesita para vivir. 

- Cuando quieras. - responde a su compañero, anhelando salir. 

Si bien Yoko es una joven medianamente sociable, ahora mismo se mantiene centrada en sus labores mientras va conociendo a sus compañeros. Es importante, por no decir vital, saber quién tiene a su lado y como funciona en base a las situaciones que se presenten. Al fin de cuenta todos son un equipo, una manada que debe actuar en pos de conservarse mientras se cumple con la misión. 

Así que sumergida en una diversidad de pensamientos, no esboza palabra alguna durante el viaje mientras guarda en su memoria aquel camino y todo ese bello paisaje que ahora se muestra delante de sus ojos. En verdad es muy bonito, en parte dista tanto del lugar en el que viven, aunque posiblemente haya sido similar luego de que la mano del hombre se obsesionara con la tecnología. 

- Akari Shimakaze - le dice mientras le estrecha la mano - Llámame Akari.

Tras soltarse las manos le echa una rápida mirada antes de volver a mirar hacia fuera y contemplar el paisaje - Akari está nerviosa por lo que pueda haber ahí fuera y espera que no tengamos que usar las armas en esta primera misión, pero si hace falta espero poder contar contigo Joaquín. - Akari esboza una pequeña sonrisa antes de volver a su estado serio natural.

Wow... - Comenté mientras miraba el arsenal. - Estaremos bien provistos eh?- Sonreía mientras miraba los dos bazookas. Dos? Negué con la cabeza. Quizás había peligros en el camino que desconocíamos y era mejor llevar un minicañón y no necesitarlo que necesitarlo y no tenerlo. -Con vuestro permiso cogeré una pistola.- Me hubiera gustado llevar el fusil de asalto, pero sabiendo que era el AT la pistola me permitiría una mejor manipulación de mi arma principal en momentos de necesidad.

Aquí la lista de los objetos que llevo encima: 

1x Mineba P-9
2x Cargador de pistola
1x Panzerfaust-3
2x Misiles HEAT
1x Misil HEDP
1x Misil HE (Cargado en el arma)
1x Equipo básico
 

1x Equipo de acampada
6x Comida para una persona
4x Granadas frag
3x Granadas humo rojo
2x Granadas blancas
2x Granadas verde
1x Granada Azul

 Adelante chicos, esto será solo un paseo!- Comenté mientras arrancábamos el coche, el viaje fue bastante movidito, comprendí inmediatamente que los surcos y los baches en el suelo habían sido provocados por fuertes explosiones, sabía que para detener un asedio se necesitaba fuerza bruta, pero nosotros no íbamos a asediar nada. Sería posible que nos topáramos con un gran ejército? Mientras en mi mente me imaginaba disparando contra una gran horda de enemigos pasabamos la última zona de combate y un bache hizo que mi cabeza rozara con el techo del vehículo devolviendome a la realidad. 

Miré al piloto que parecía absorto en la carretera, me pareció estupendo, alguien responsable al volante siempre era buena señal. Me giré para hablar con mis compañeros, no me apetecía distraer al conductor y que tuviéramos un accidente nada mas salir de la base. - Como va la cosa por ahí detras? Abrumador explorar todo un mundo nuevo eh? - Sonreí- Quin, perdona si te molesta que te llame así. Como se ve la vista desde arriba de la torreta? Has visto algún animal fuera de lo común? Oye, Striker-Tanaka es todo un apellido o lo podemos acortar por Striker? La verdad que dicho así suena a mote imponente... - Miré a los dos médicos.- Por cierto, tenéis experiencia de combate? Y en cuanto a medicina que habéis estado haciendo? No seréis por casualidad neurocirujanos no? - Traté de bromear, por supuesto que no eran neurocirujanos, nadie con esas capacidades estaría tan loco como para estar aquí. - Y Shimakaze... yo también espero que no tengamos que usar las armas en esta misión, así que no te preocupes, como siempre digo, mas vale tenerla y no usarla que necesitarla y no tenerla!

Tras comprobar el suministro de vendas, me aseguré mi equipo básico junto a una carabina y 3 cargadores para esta, me senté y observe el grupo. 2 tipos grandes que esperaba no tener que vendar el torso demasiado si no quería quedarme sin vendas, el uno un buen tipo amigable y el otro serio y ligermanete amenazante. Por otro lado teníamos a una recluta recién salida de la academia, aunque al menos no parecia ser de las de gatillo facil. Después teniamos a Striker, un tipo agradable, no mucho mas que saber por ahora. Y por ultimo la otra medico del grupo. Parecía joven, así que sería recien salida de la escuela de medicina. Un buen grupo, al menos a primera vista.

Sin previo aviso Yosuke comenzo a preguntar cosas a todo el mundo. Bueno, era lo normal querer saber mas sobre aquellos que te iban a cuidar las espaldas, por lo que respondí con una sonrisa dulce en la boca.

-Bueno, hace ya 7 años que entre al ejercito como medico, así que si he participado en alguna que otra batalla, aunque sobretodo he estado en la base, dado que me especialidad es la cirugía. 

-Lo mismo digo, Akari. Espero contar con una gran camarada ahí fuera, si la situación lo requiriera -le dediqué una sonrisa cordial a la joven y añadí-: Lo más probable es que ni siquiera tengamos que usar las armas, ya verás.

Fue entonces cuando el tipo grandote, el A-T Yosuke Mashira me habló desde su posición.

-Nada extraño desde aquí -maticé, dirigiendo la vista a ambos flancos, por si las moscas-. Puedes acortar diciéndome Striker. Tanaka es por parte de madre. Aunque tampoco me molestaría si me llamases Quin, claro.

Observé al resto del grupo. Por un lado estaba el ametrallador de cabello negro, Ryuuji, que se había incorporado a última hora y transmitía cierto aspecto de hombre duro. Por último, también se encontraban los dos médicos, Kin y Matsu. Kin parecía bastante femenino, aunque también una persona sencilla y agradable. Matsu, por su parte, a simple vista me había resultado una joven bastante callada y seria. Formábamos un grupo peculiar, sin duda.

El viaje parecía ir desarrollándose sin ningún tipo de incidencia, el paisaje cambiaba poco ya que tampoco ibais demasiado deprisa, las carreteras impedían ir a no más de 70 – 80 kilómetros hora y aun así podíais sentir como vuestros huesos se agitaban con cada bache que cogíais.

Una hora había pasado desde que salisteis de la base y vuestros cuerpos se encontraban entumecidos y podíais sentir como os estabais cansando de tanto bote. Calculabais que por delante teníais otras 4 o 5 horas en coche hasta llegar a la zona que os habían designado, aunque no teníais tiempo límite.

El Humvee subió por una pequeña colina en la que el pasto era muy verde y se veían algún tipo de flor muy parecido a las amapolas. Al llegar a la parte superior pudisteis ver como un gran lago yacía ante vosotros ocupando gran parte de lo que parecía un gran valle. El camino bordeaba toda la masa de agua y se perdía en un pequeño bosque de pinos que no parecía muy frondoso y de fondo podíais ver unas montañas que rodeaban el lago, vuestro destino debía estar a su falda. Parar a hacer un descanso e investigar la zona y descansar podría ser una posibilidad, aunque también podríais aguantar unos cuantos kilómetros más en el coche.

- Este viaje es bastante ajetreado y Akari empieza a estar dolorida de tanto bache. - dice con cara de pocos amigos mientras se masajea los hombros - Akari piensa que podríamos descansar y estirar las pieras unos minutos en ese campo tan bonito de ahí fuera, - señala fuera del humvee con el dedo - coger un poco de agua y volver al camino. Es una misión de reconocimiento y Akari opina que no hay prisa para llegar al destino y quizás aprovechar para explorar un poco esta zona.

Akari espera espectante que sus compañeros piensen como ella, tiene muchas ganas de salir del Humvee y explorar esta zona que parece sacada de un shoujo de romance.

El traqueteo constante del Humvee fue un tanto molesto, más aún porque en la parte de atrás cada bache se siente con fuerza y terminas a los saltos durante todo el viaje. Lo bueno es que se hizo soportable, más que nada porque estando en una misión todo puede pasarte y esto en verdad es una nimiedad. 

Una vez que llegan a ese valle, los ojos azulados de Yoko se abren de par en par, vislumbrada ante la belleza que manifiesta el lugar mientras va pensando si realmente no están invadiendo su sitio al cruzar ese portal con sus armas y demás.  Sensación que le recuerda a los indios cuando sos despojados por el mismo ser humano que anhela esos lugares tan bonitos. 

- Antes de beber agua de este lugar, es conveniente analizarla. No es cuestión de que alguno termine intoxicado o algo peor, desconocemos todo de aquí y lo mejor es no arriesgarse. Aunque bueno, es vital tomar muestras para saber con qué nos encontramos. - explica la rubia. 

Sólo que ahora son un equipo y actúan en función de las decisiones a tomar. No hay un líder, así que es arreglarse con las opiniones y ver cómo equilibrar la cuestión. 

Sus compañeros, a medida que viajaban por aquel camino dominado por baches de todos los tamaños, se mantenían conversando para distraerse con algo mientras recorrían semejante largo trayecto. Aquello era algo que Ryuuji podía comprender, si bien él no podía darse mucho ese lujo, teniendo en cuenta que era el responsable de conducir aquel vehículo, y debía estar atento por si algo o alguien les atacaba para hacer las maniobras necesarias.

No le había gustado demasiado escuchar que algunos de los presentes no deseaban combatir. Como si prefirieran recurrir a la paz en todo momento. ¿Realmente eran soldados? Ellos no eran diplomáticos, sino armas, el hecho de que les hubieran enviado, implicaba que en algún momento podrían encontrarse con problemas que requerían del uso de la fuerza. De lo contrario, habrían enviado un montón de políticos a hablar. Sólo esperaba, que en cuanto comenzaran las hostilidades, sus compañeros fueran capaces de actuar de acuerdo a la situación y no se congelaran por el temor.

Al llegar al gran lago, tanto Akari como Yoko comenzaron a hablar sobre la posibilidad de parar a descansar, algo que Ryuuji también agradecería ya que, como todos, su cuerpo se lo agradecería bastante. Al parecer, había perdido cierta costumbre para los viajes largos en terrenos bastante crudos.

Podemos parar, no sería bueno que llegáramos a la zona de la misión cansados. También podemos tomar algunas muestras del agua para verificar sí es segura para beber. Eran buenas ideas, teniendo en cuenta el largo viaje que aún les esperaba, debían llegar con las energías necesaria ante la posibilidad de combate. No quería terminar muerto por una tontería.

Además, tenemos que tomar nota de todo lo que vemos en el camino, por lo que no es una mala idea explorar un poco. Estaba de acuerdo con Akari. Después de todo, la misión consistía en explorar y anotar sobre todo lo que podían llegar a descubrir en la zona recorrida. Era importante parar en algunos sitios y recolectar información topográfica de todo lo que fuera de interés, e incluso establecer contacto con los nativos, de ser posible.

Como era quien estaba a cargo de conducir, decidió parar cerca del lago para investigar la zona y así también descansar, viendo que todos parecían necesitarlo al igual que él. Al detener el vehiculo, no tardó en bajarse y tomar su Sumimoto minimi junto con unos tres cargadores de ametralladora de ser necesario entrar en acción, así como unas cuatro granadas frag, y unas ocho raciones por sí algo le sucedía al vehículo.

Manténgase alertas por si sucede algo. Estamos en territorio desconocido. Advirtió a todos mientras comenzaba a mirar a su alrededor, manteniendo cierta guardia ante cualquier amenaza. Seguían siendo soldados, debían comportarse como tales.

Me distraje mirando el paisaje mientras subíamos la colina, el murmullo de los demás me sacó de mi ensimismamiento, querían parar, no estaba muy cansado ya que tenía el cuerpo acostumbrado a golpes y magulladuras pero la idea de estirar las piernas era parte complementaria de la misión de exploración. - Perfecto pues! Vayamos bajando! No os alejéis mucho y no os quedéis solos, al menos grupos de dos eh? - Sonreí. No me apetecía perder a nadie antes de tiempo.

Me desabroché el cinturón y estiré la mano para agarrar una Carabina m4 con al menos 6 cargadores. Salí del coche y me estiré dejando el fusil encima del coche para realizar ejercicios de relajación muscular, poco después alguien planteó la idea de recoger unas muestras, será una buena manera de comprobar que si nos perdemos y necesitamos sobrevivir podemos al menos recurrir al agua de los lagos. Volví a recoger la M4 y me alejé un poco del lago, dispuesto a explorar la parte mas alejada de la llanura. - Alguien viene conmigo? - Pregunté al aire mientras buscaba con la mirada a algún compañero.

Si alguien se quedaba a explorar en el lago esperaba que alguien viniera conmigo, no había indicios de enemigos de momento así que no me parecía que necesitáramos que alguien se quedara vigilando el coche para fuego de supresión desde la torreta. Mientras esperaba que alguien me acompañara miraba al suelo en busca de algún tipo de flor extraña o rastros de enemigos o animales.

-Estoy de acuerdo, creo que deberíamos parar para descansar un poco y quizá explorar los alrededores -sugerí, uniéndome a la opinión de prácticamente casi todo el grupo-. Creo que lo que ha dicho Yoko es muy acertado. Antes de que alguien tome agua para beberla, quizá deberíamos analizarla. Cuando estaba en la Secundaria, mi profesor de Ciencias dijo que era preferible beber de un río de agua verdosa con renacuajos, sapos o vegetación que beber de un estanque cuya agua fuera muy cristalina y totalmente limpio, sin animales ni plantas.

Bajé del Humvee de un salto, todavía sosteniendo el Howa del 89 entre mis manos. Puede que aquel paraje fuese idílico, pero convenía bajar la guardia.

Antes de tomar la decisión de avanzar hacia el lago, dirigió una mirada a su alrededor, buscando cualquier posible amenazas en los alrededores.

Akari se baja del Humvee y tras estirar las piernas y el cuerpo empieza a masajearse léntamente los hombros, la espalda y las piernas. Para ser un vehiculo militar Akari no tiene claro si el presupuesto se invirtió en espacio en vez de en amortiguadores...

Mientras se quejda internamente Akari mira a su alrededor y empieza a admirar la belleza del lugar. Un lago de agua cristalina que refleja a la perfección el cielo rodeado de un campo de flores digno de un cuadro. Akari deja escapar un - ooh - mientras sus ojos brillan y se emociona deseando rodar por el campo y tirarse de cabeza al agua.

Akari ve como el grandote fortachón se arma y cuando pregunta por ir a explorar casi al instante levanta la mano y se acerca. - Akari se apunta a explorar contigo - dice en un tono firme e impaciente.

Akari se acerca al Humvee para recoger su arma y su mochila y se asegura de tener todo el equipo necesario para explorar, incluyendo la radio, granadas de humo por si hay que marcar posición, comida y bebida para supervivencia. - Akari está lista para partir! - exclama con una notable ansiedad en sus palabras. Mira a sus compañeros alrededor para ver si alguien mas se une al grupo.

Mientras Akari echa un vistazo al paisaje también aprovecha s u vista agudizada para explorar cualquier posible detalle sobre el terreno: Personas, Animales, Casas, Humo a lo lejos... cualquier cosa que pudiera ser de utilidad.

Al notar que Akira ignora su comentario, se encoge de hombros mientras se pregunta mentalmente sobre el asunto de hablar en tercera persona, siendo un aspecto muy curioso de la chica que no pasa desapercibido. No obstante, el grandote cuando pregunta si desean unirse en la exploración, baja de un salto el Humvee mientras se cuelga de forma cruzada el kit de primeros auxilios con la reserva de comida y agua. 

- Aquí una persona dispuesta, me gustaría extraer algunas muestras de lo que vayamos encontrando. -  afirma en un tono decidido. - Sigo sus pasos. 

Dispuesta a recibir un poco de adrenalina, acomoda su uniforme mientras vuelve a atarse el cabello con una cómoda coleta, dejando su dorado pelo esta vez un poco más desenfadado. Le toca unas buenas horas de caminata, exploración y tomar muestras, algo que en cierta forma le fascina. Es una tarea menos compleja, luego es tratar con heridas y demás cuestiones que son arduas de sobrellevar por más formación que se tenga. 

Parecía que estaban todos dispuestos a explorar, principalmente Yosuke que fue el de la idea de formar un grupo de exploración, si bien se olvidaban de que alguien debería quedarse a vigilar el vehículo o de lo contrario arriesgarse a que algo le sucediera. Por ende, Ryuuji negó con la cabeza, expresando su negación a acompañar al grandote.

Yo no iré. Alguien tiene que cuidar el Humvee. Expresó firme mientras continuaba observando a su alrededor, atento por si algo sucedía. No sería bueno bajar la guardia incluso cuando descansaban.

El lugar era hermoso, de eso no había duda, pero no sabían con lo que podían encontrarse, y por lo tanto, debían de tener cuidado con todo. Ryuuji habría querido acompañarles, ya que la curiosidad era bastante fuerte en él en un mundo desconocido. Sin embargo, la misión era de gran importancia, por lo que no deseaba sacrificar el único medio de transporte que tenían. Alguien debía de vigilar que nada le sucediera.

Diviértanse, pero recuerden la misión, tomen nota de todo lo que parezca importante. No había que olvidarse para qué estaban ellos allí, a pesar de que pudieran divertirse un poco. En su caso, prefería dispararle a algo, si bien, hasta ahora, no se habían encontrado con nada que buscara iniciar hostilidades con ellos, por lo que el soldado estaba un poco decepcionado.

Miré mi alrededor sorprendido. Era una enorme belleza de lugar, y no podía sino quedarme con la boca abierta mientras lo veía, aunque rápidamente me recuperé cuando la gente comenzó a hablar de bajar a explorar. La verdad, me habría encantado ir a explorar con el resto y recoger alguna muestra para su estudio, pero como había dicho Ryuuji alguien tenía que cuidar del vehículo, añadiendo a lo que había dicho Yosuke sobre quedarnos solos.

-En tal caso me quedaré contigo. Miraré la zona cercana al Humvee en busca de alguna planta o marcas de animales. Necesito estirar un poco las piernas y relajar los hombros-dicho esto saque el block de notas y un lapiz y me dispuse a tomar apuntes de todo lo que viera por la zona, siempre cerca del humvee.