Partida Rol por web

Los enanos aceptan el trato...

Parls, el oficial del grupo del Malabarista, que estaba en la feria, se presentará en tu taberna cuando estás con los preparativos para irte.

Salud, héroe de Ilanil... Quisiera preguntaros si podriamos acompañaros en vuestro viaje. He oído que os dirgís al norte, y es también nuestro destino. Estamos dispuestos a pagaros por las molestias. Nos encantaría oir vuestras hazañas de vuestra propia voz, y no por habladurías de terceros...

Si aceptas vendrán tantos de la compañía como puedan. Parl o más si la barca es más grande.

Viajas arriba y abajo por el ramal de los elfos, en busca de noticias y rumores durante tres meses.

Descubres que al norte de Ilanil, a medida que te alejas, cada vez está más despoblado.

Hay pequeños asentamientos, aldeas, y por lo que te explican son descendientes de colonos que dejaron Nuevo bastión cuando su fundación. Gente que decidió abandonar el liderazgo de Nuevo Bastión, para ser realmente libres y corrieron muchos peligros y muchas desgracias por su decisión. Ahora que parece que se han asentado con cierto éxito, Nuevo Bastión los reclama como vasallos suyos, y han llegado nuevas oleadas de colonos de Nuevo Bastión, cosa que ha generado roces con esos primeros colonos.

Se pueden conseguir materias primas a buen precio en estas zonas tales como madera, carne, miel, pieles... Y a su vez están muy necesitados productos manufacturados.

En toda la zona hay ruinas de antiguos asentamientos a los que llaman "fogus". Son estructuras monumentales primitivas. Quizás viviendas o emplazamientos funerarios. Quizás elfos, quizás orcos, quizás enanos, quizás...

Es una zona insegura, con presencia de orcos, trolls, bandidos, salteadores y escaramuzas entre elfos y humanos. De hecho hay miedo en la zona por la completa destrucción de varios asentamientos en poco tiempo.

De vez en cuando (quizás una vez cada seis meses o cada pocos años, depende) pasan aventureros enanos hacia el norte. Suponen que a cazar orcos que viven en las lejanas Montañas Peladas.

Más al norte empiezan las fortificaciones elfas, y tras ellas Ciudad Armonía, un lugar donde conviven elfos y humanos, y donde han ido no pocos humanos de los primeros colonos, huyendo de la persecución de Nuevo Bastión. Se dice que allí viven felices.

Será un placer que me acompañeis en mi viaje. Estoy seguro de que me podreis explicar grandes historias

Hasta le podria comprar un trabuco para evitar abordajes. Lo que no se si vale la pena liarse tanto y gastarse el dinero en un juego donde los pj dependen tanto de los objetos.....

Durante tus viajes por el ramal del norte te acompañas de Parl (y de alguien más dependiendo de lo grande que sea el barco) y descubres más cosas interesantes.

Por una parte Parl, pasadas las semanas y viendo como eres te confiesa que están aquí para nivestigar esos extraños casos de asentamientos calcinados. Lo has acompañado en alguna ocasión y te hace notar que los asentamientos no parecen haber sido blanco de los orcos.

Unos blancos demasiado precisos. Un trabajo demasiado limpio. No hay rastro de animales muertos, ni habitantes, ni la destrucción típica de los orcos. Las casas quemadas y destruidas, animales y gente desaparecida... Muy atípico. Podría ser obra de los elfos. Son buena gente los lefos, pero hay una... Una facción algo más radical. Sólo han atacado asentamientos aislados de humanos, aunque también es verdad que no hay asentamientos así de otras razas...

Además, de él has intuido que es más que un comediante, es algo más. Debe de ser un bardo, como tú, pero parece bastante alejado, en realidad, del estereotipo de bardo cantente o bailarín que va de pueblo en pueblo a cambio d euans monedas. Parece más un espía o algo así.

De hecho, te ofrece entrar en la órden del Malabarista. Es una órden, por lo que te cuenta, donde forman a gente como tú para ayudar a las gentes de Gallantia. Tanto con las artes propias de tu oficio, como actuando donde no lo hacen los reyes. Si aceptas, él te puede dar una recomendación para el Recinto del Malabarista, que está en las afueras de Nuevo Bastión. Ah! Y no, no ha respondido a la frase de tu secta. Si decides cambiar de secta habrá unas tiradas para ver si pasas las pruebas y si las pasas habrás de renunciar a tu dote de los secretos para ganar la del Malabarista. No te digo más.

Al final del tercer mes sabes lo siguiente:

Podrías seguir remontando el río hasta llegar a Ciudad Armonía, usando un ramal que recuerdas que existe algo más caudaloso, aunque pasa por un gran valle y eso te dejaría expuesto a los elfos. Deberías hablar con ellos si quieres seguir al norte.

Has oído rumores que ha habido una especie de incursión en tierras en disputa. Un bosque primario que se disputan humanos y elfos, dentro del cual se rumoreaba que había una especie de guía espiritual elfo ha sido muerto por humanos y el recinto sagrado ha sido saqueado. Los elfos están furiosos y parece que la guerra es inminente. Tanto los elfos al norte como una nutrida fuerza de caballeros humanos en Ilanil se preparan para las hostilidades. Se dice que son caballeros del Dragón, contratados por Nuevo Bastión para esta guerra.

Por otra parte, al oír lo de los enanos que van al norte, te ha venido a la cabeza la vieja historia de Khordaldrum, la primera ciudad enana. Hubo una catástrofe, hace muchos cientos de años, y fue abandonada de repente. Se dice que cavaron muy abajo y liberaron una enorme nube de gas venenoso que mató a casi todos los enanos. El resto huyeron con lo puesto, ocupando lo que ahora son los cubiles de orcos, hasta que se asentaron en Burgundia, su ciudad actual, y esos cubiles menores, al quedar abandonados, fueron ocupados por los orcos. Todo esto ocurrió, como he dicho hace muchos siglos, y es muy posible que las riquezas perdidas de Khordaldrum hayan alentado la codicia enana y a veces se aventuren enanos en busca de las riquezas de sus antepasados.

vuestras palabras me parecen interesantes....muy interesantes esa faccion de elfos y esa orden vuestra. Me gustaría saber más. Antés de proseguir nuestro viaje deberíamos ir a hablar con los elfos y conseguir su permiso para pasar por el rio, no queremos que nos acribillen a flechas tal y como esta el ambiente. De paso podríamos intentar saber algo más sobre esos asentamientos calcinados.

Al empezar a remontar el río por territorio elfo os pasan sobre vosotros unas flechas silbadoras, de aviso. El capitán pone el barco al pairo y os sale una patrulla de elfos montados en ciervos que os da el alto y haciendo bocina con las manos os dicen que están en guerra con los humanos y que no podéis pasar.

No parecen muy colaborativos, aunque quizás una razón de peso podría hacerles cambiar de opinión. Está claro que os han tomado por espías o algo así.

Parl, por su parte, durante estos días te ha dicho que no te puede contar más de su orden. que lo mejor que puedes hacer es verlo con tus propios ojos. Contigo viaja toda la compañía, ya que tienes espacio. Sin duda, crees que podrías con la patrulla. Sois bastantes, aunque es posible que alguno huyera y diera la alarma...

Bajaré del barco desarmado para que se vea que voy con buenas intenciones y iré a hablar con los elfos.

Buenas . Me gustaría pedir permiso para pasar ya que nuestras razones son nobles. Sabemos que estais en guerra pero nosotros no tenemos nada que ver con la orden del Dragon, esos mercenarios que solo luchan por dinero. Estamos aqui por dos motivos, el primero intentar comerciar con vosotros e iniciar una relación de amistad que pueda ayudar a poner fin a esta guerra y el segundo intentar averiguar quien es el culpable de los asentamientos calcinados y quien ha sido el culpable de la muerte de vuestro guia espiritual

Los elfos parecen dudar ante tus palabras, sin acabar de decidirse, hasta que finalmente os escoltan río arriba, llegando a los pies de una inexpugnable fortaleza, en lo alto de un risco que cae sobre el río, varias decenas de metros más arriba.

El diseño es humano, aunque parece de gran calidad. Vuestro barco queda bajo custodia de los elfos en un sencillo embarcadero que hay al pie del risco. Allí os espera una escolta de guardias de la fortaleza que os desarman (si vais armados) y os llevan hasta el castillo de la cima. Dentro de allí hay una gran actividad. Parece un destacamento prácticamente militar aunque hay un puñado de humanos que hacen las tareas más serviles. No parecen esclavos y su aspecto es bueno.

La sensación es que en breve se van a poner en marcha hacia alguna parte (supones que hacia el sur, a tierras humanas). Hay bastantes hombres elfos, aunque te llama la atención un contingente de mujeres. Mujeres guerreras de aspecto fiero, que parecen ostentar algún tipo de rango, pues el resto d egente se aparata a su paso.

Os llevan hasta la torre del homenaje de la fortaleza y os introducen en una sala. Una sala desnuda. No hay nada, y estáis custodiados por tantos guardias como vosotros.

Al rato aparece una elfa vestida de cuero y con movimientos felinos. Parece realmente una combatiente excepcional. Os mira con ira contenida. Parece que os juzga con su mirada y por su expresión parecería que os ha declarado culpables.

Me han informado de vuestras intenciones... Parecen honorables... Como lo fueron cuando los de vuestra raza nos pidieron unas tierras para asentarse cuando desembarcaron con lo puesto, en nuestras costas... Desde entonces muchos de los nuestros han muerto por la codicia humana. Y una vez más parece que los humanos quieren más tierras, más riquezas, más de todo.

Llegar aquí en tiempos de guerra parece más cosa de espías que de buenos samaritanos. ¿Qué estáis dispuestos a sacrificar para apoyar esas palabras?

Balbuceas unas palabras confusas, bajo la mirada escrutadora de la elfa, que te acaba cortando con un gesto.

Basta ya! Callaos! En mi vida he oído un bardo tan torpe como vos. Aunque está claro que sois el típico ejemplo de decadencia humana.

Entonces interviene Parl, el jefe de la compañía del Malabarista que te acompaña, implorando perdón, e insistiendo sobre vuestras buenas intenciones.

... Quizás no sois espías... No enviarían a alguien tan torpe.

le corta la elfa, mirándote al decir las últimas palabras. Se queda pensando unos momentos antes de continuar.

Está bien. Tendréis la oportunidad de luchar a nuestro lado contra los humanos, y así veremos si sois amigos o no de los elfos.

Sois escoltados hasta unas celdas debajo del castillo. Son celdas amplias, limpias y secas, con un tragaluz por el que entra algo de claridad. Como celdas son hasta confortables.

Gracias por vuestra intervención Parl, su actitud me ha sorprendido y no he sabido reaccionar... cual es el plan ahora? luchas con los elfos? hacer ver q luchamos con ellos y luego en la batalla cambiar de bando? o intentamos escapar?

Cuando digo lo de escapar mirare si veo allgo que me pueda servir de ganzua para intentar abrir la puerta. Como tengo mano de mago mirare tambien fuera de la celda a ver si veo algo.

Te mira y se encoje de hombros

No sé... Quizás podríamos hacerlo. Esa elfa era una Guardiana de la Luz, y he visto más en el castillo. Nunca había visto una... Son tan intransigentes como dicen.

No sé. Si realmente los quieres ayudar, este es un buen momento para demostrar a esas locas que somos de fiar... Aunque la órden del Dragón no se lo van a tomar muy bien que digamos. Y supongo que Nuevo Bastión tampoco. Esa gente actua por contrato, y si se trata de una guerra sólo los pueden pagar desde Nuevo Bastión.

La decisión es tuya, Autolycus.

Te dice con una enigmática sonrisa.

Mis intenciones eran nobles y en ningún momento he venido a luchar, si estas elfas estan ciegas por su locura o ira no es mi problema. Nadie me obliga a escoger .... intentaremos escapar y si no podemos, lucharemos contra las elfas

No tendrás por ahi ninguna ganzua verdad?

Te mira, mira a su gente y sonrie levemente. Se mete dos dedos en una de sus rastas y saca unos hierros delgados que llevaba ocultos. Te los tiende.

No es que sean muy buenas... Ya sabes... Para emergencias... Pero... Esto está lleno de elfos... Es una fortaleza. Escapar será muy complicado ... Si nos descubren... Somos gente muerta.

Vaya parece que la diosa fortuna hoy me ha abandonado. dirá con desesperación.
Será mejor que por hoy lo dejemos y esperemos a los acontecimientos y cuando lleguen decidiré sobre la marcha será lo mejor. se tumbará en una cama y esperara

Cuando lleve un rato en la cama

Parl mirando el techo He decidido que no voy a matar a mercenarios de la orden del Dragón por muy mal que me caigan por el simple hecho de que esa elfa este ciega de ira, puede que sus motivos sean justos no lo se pero no creo que sean justificación para que se dedique a apresar a alguien que viene en son de paz y obligarlo a matar a compatriotas suyos para demostrar que no es un espía seguirá mirando el techo Tampoco me voy a quedar aquí sentado esperando a que alguien me libere, eso puede pasar hoy o nunca así que en la medida de lo posible intentaré escapar en el campo de batalla. Os digo todo esto porque vuestra vida también esta en juego y me parece justo que sepais cuales son mis intenciones ya que seguramente para asegurarse mi "lealtad" intentará chantajearme de alguna manera y esa manera a lo mejor sois vos. en ese momento se girará y lo mirará

Te mira y asiente con una sonrisa.

Está bien, no te preocupes. Gracias por decirlo. Lo que dices es verdad. Seguramente esa loca volverá... Tu intención es la más... buena. La verdad es que aún no teniamos claro si participar o no del lado de los elfos. Los elfos son un buen aliado para la orden, pero quizás ya está pasando su momento, y apostar a caballo perdedor no es buena idea... Ahora que nos confiesas tus intenciones... Bueno, poco podemos hacer por ahora... A ver qué ocurre, pero por el movimiento de fuera no tendremos que esperar demasiado.

Se rasca la cabeza y te sonrie.

Si yo fuera la elfa apreciaría tu lealtad por tu raza, aunque no compartas sus ideales... Pero no soy la elfa.

Acaba por decir, con una corta carcajada. Parece tranquilo a pesar de la situación.

Pasan un par de días monótonos. Os dan comida suficiente y bastante decente. Verduras estofadas con legumbres y fruta. También os dejan un cubo con agua limpia y una esponja para limpiaros un poco y un cubo para cada uno para hacer las necesidades.

Al cabo de esos dos aburridos días se oye más agitación del exterior. Como de más gente entrando y saliendo en el patio de la fortaleza. Al cabo de un rato aparecen ante vosotros dos figuras. La elfa que ya conocéis y un elfo alto y ataviado con armadura de escamas de metal. Tiene pinta de líder y su expresión es amable.

Buenos días. Soy Duro, el Guardián de Ciudad Armonía. Flor Gentil me ha informado de... vuestra situación. Me gustaría oir lo que tengáis que decir.

Su voz es suave e intercala miradas a vosotros con otras a la elfa llamada Flor Gentil.

Recordad vuestro puesto, Guardián. Son mis prisioneros. No los vuestros.

Le replica Flor Gentil. A lo que Duro le dedica una reverencia y una sonrisa.

Por supuesto, pero me gustaría escuchar lo que tienen que decir vuestros prisioneros después de unos días gozando de vuestra hospitalidad.