Partida Rol por web

Susurro cerca del oido. -Recuerda que no hemos venido a por la lista completa si no la reducida que redacté, cogeremos esas armas y pagaremos por lo que tomemos...

Al ver al traficante de armas me limito a apartar la mirada de él y centro mi atención en su escolta y en todo lo que nos rodea, pues, pese a que el punto de entrega se encontraba algo apartado de la mirada pública, estaba más que claro que nada impedía que ambos grupos fuéramos víctimas de un ataque enemigo o en el peor de los casos un desacuerdo de negocios en cuyo caso deberían rodar algunas cabezas.

Mientras más pronto saliéramos de los muelles, antes podríamos empezar a trabajar en nuestra verdadera misión de encontrar y eliminar a los malditos cazadores, sólo esperaba que la ductus hubiera incluido en el trato un par de rifles de franco para poder eliminar a esos bastardos a distancia.

Zack permanecía en silencio, al fondo y pendiente de los alrededores. Sabía que si algo se salía de control no necesitaba estar al frente para ayudar a solucionarlo y los alrededores del intercambio iban a ser tan importantes como lo que sucedía allí.

Aún así, no dejo de fijarse en como y quiénes eran los que movían las cosas, estaba llegando, pero pronto iba a empezar a moverse para mover los hilos del negocio... Almenos sabía que entrando podía procurarse recursos que serían útiles para la espada.

Miro a Aurora y asiento antes de responder a R1
-"Por eso no debes preocuparte Lazcano, solo espero que atendieras a nuestra última petición y nos traigas el cargamento que te pedimos, es lo único por lo que pagaremos"

Chad bajó de la furgoneta de Cutter por la parte de atrás donde casi siempre acompañaba a los sirvientes de la Tzimisce, tomó la escopeta y se la echó al hombro para después comenzar a caminar hacia la tensa reunión que se había dado.

-Luna, lunera, cara de perra...- corta cartucho- dame paciencia con estás otras... pe-rras.- El malky se coloca detrás y a un costado del hombro de Aurora.

Mientras ladea la cabeza como tratando de entender porque la última vez que se había encontrado con aquel mortal lo había hecho retroceder hasta caer de espaldas.

Le dedicó una sonrisa sin separar los labios y solo espero para que las negociaciones con el Abad no fueran a llegar a las manos como la última vez.

El capo sonríe algo enfadado ante la respuesta del Abad mientras que cruza los brazos y se lleva una mano a la barbilla para sopesar la situación luego levanta la mirada ante el acercamiento de Chad, no pasa inadvertido el que el lunático corte cartucho, situación que tensa la reunión haciendo que los escoltas también se lleven las manos a las armas o incluso apunten hacia los cainitas allí reunidos.

El R1 hace un movimiento con una mano para que bajen las armas sus acompañantes y luego levanta el mentón señalando a Matías Langreo.

-Traje lo que solicitaste Langreo.- Truena los dedos y cuatro hombres bajan dos pesados contenedores de madera y los coloca a los pies del Abad.

-Ahí tienes... lo que me costó un poco más de trabajo fue la Springfield...- Desde su espalda saca una pistola nueve milímetros XD-M de polímero negro para también cortar cartucho a un costado de su rostro. -El precio ya había sido acordado, solo por el pequeño favor que me hicieron al quitarme de encima al traidor de Quintanar haré una excepción por única vez, puedes realizar la transferencia a la cuenta de siempre mediante tus empleados o realizar el pago en cash en la discoteca, mi contador pasará como siempre.- Lazcano asegura la pistola y se la extiende a Matías colgando por el seguro del gatillo.

-Por cierto los CJNG andan muy alborotados con una nueva droga que al parecer está fabricada a base de sangre de lobo, los otros* al parecer están pagando bastante bien por unos cuantos mililitros de esa sangre, ¿Sabes si es mejor negocio que el trafico de armas o trasiego de drogas?.- El R1 se encoge de hombros y se da media vuelta para dirigirse a su vehículo.

-Hay rumores en la calle de que se avecina una guerra entre ustedes... yo ya perdí mucho con la quema de laboratorios y merma de mi ejército, esta vez no me involucraré, no quiero perder más hombres en algo que no nos incumbe.- Con un ademán de mano da una señal para que el cártel comience a movilizarse para irse de ese lugar. -No quiero salir más salpicado de su mierda...-

Maldito mortal idiota. ¿En verdad quiere meter sus narices allí? Sería mejor matarlo ya mismo y quitarnos de encima un posible futuro cabo suelto. - pienso mientras recuerdo quien respalda al mortal y descarto la idea.

Mientras hago mi mayor esfuerzo por ignorar al mortal, observo el rifle de francotirador y lo reviso con cuidado, era en verdad una belleza y sería más que suficiente para despachar a cualquier puto cazador antes que siquiera se de cuenta de nuestra presencia.

Siguiendo las órdenes de la ductus me adherí al silencio y empecé a pensar en mi siguiente movimiento.

Biff se colocó unos pasos por detrás de la manada, desde allí yo me fui comunicando con mis ghoul para comprobar que todo estuviese en orden mientras vigilaban los alrededores, yo misma activé mis sentidos sobrenaturales por si detectaba algo raro desde mi posición.

No me apetecía nada ver el aura de Lazcano, la gente de fe resultaba repulsiva a la vista, pero si había algo oculto era la forma de saberlo. El tipo parecía tener bastante información y además tenía ganas de charlar, pero nosotros teníamos muchas cosas que hacer y mejor ir acabando.

*—Vamos aligerando Matías, que tenemos muchas cosas que hacer.

El comentario de la sangre le hace arquear un ceja, entonces es cierto están moviéndose para conseguir sangre de lobo... Tengo que pensar en ello pero ahora no. 

-Ese negocio es una tapadera. Los otros están buscando esa sangre para traer devuelta a un monstruo, no uno como nosotros, uno que solo puedes imaginar en tus peores pesadillas. -Niego con la cabeza con gesto serio  para que entienda que no es broma.  -Algo que ya era antiguo antes de que los españoles llegaran a las américas.  Y te aseguro que es malo para nuestros negocios, es de los que les gusta que todos claven la rodilla y solo se juegue con sus normas y se coman su migajas. 

Si te enteras de quien está consiguiendo esa sangre o puntos de compra avísanos, insisto, no los mates, los necesitamos para investigar.  Buscaré el modo de recompensarte por la información. 

Un corta risa silenciosa se me escapa ante el último comentario. -LLevámos en guerra siglos contra esos perros, puede entender que protejas a tus hombres y tu pellejo pero ya estás metido en esto hasta el fondo, si nosotros perdemos los otros, junto la CJNG os quitarán del medio y no tendréis ni una tumba donde ser visitados. -Me encojo de hombros. -No es una amenaza es un promesa. Haz con esta información lo que consideres. 

De las palabras de la Ductus, Zack se quedaba con la información de que a la mafia rival los patrocinaban los perros de la camarilla.

En otro momento hablaría con ese tal R1, aunque si era protegido del Priscus se debía tener cuidado, no creía que al Priscus le importase si Zack ayudaba a mejorar sus negocios y la posición de sus lacayos mortales en la ciudad... Pero eso sería para después, aún quedaban muchas cosas por hacer.

Allí ya estaba todo hecho... A menos que el mortal tuviese más información para seguir soltando.

A pesar de querer fingir que no le importaba nada sobre la guerra sobrenatural que se estaba gestando en aquel territorio el R1 no era idiota y camino a la pick up escucho atentamente todo lo que Aurora le ha dicho, antes de que un escolta le abra la puerta este se gira hacia la manada de los Hellblazers, y agrega.

-En las calles está sonando mucho el nombre de El Tercero... no sé si eso les sirva de algo.- Lazcano no pierde mas tiempo y aborda el vehículo para salir de aquel lugar en conjunto con toda la célula del cártel Zeta que le acompañaba.

Sin mediar palabra alargo la mano y cojo la pistola que me ofrece Lazcano, la observo un instante y me la guardo a la espalda.

Por lo que dice, la camarilla se está haciendo con cantidad de sangre de lupino, parece que no íbamos mal encaminados al pensar que quieren despertar un antiguo, y eso no es nada bueno para nosotros.

Antes de marcharse, el narco suelta una última perla, "El Tercero", esperemos no suponga un problema demasiado complicado

Chad poco a poco va perdiendo la sonrisa y sigue con la mirada a Lazcano cuando este se retira del lugar, de pronto una palabra al final de su despedida hace que la mente del malky vuele hacia la noche anterior en el refugio de la discoteca.

-Magia de Sangre, brujería, más sangre, tres, tres, tres, su dominus es el tercero, no puedo hacer nada, te va a comer, Él es el tercero, él es el tercero, él es el tercero.

Él es cuatro de tres, él es el tercero, él impone su ley con magia de sangre, el quiere ver donde te encuentras, él puede ver a través de la sangre, él es el tercero.- 

Chad repite en voz baja lo que la noche anterior había dicho cuando entró en trance al estar combatiendo a aquella cosa que había llevado Lara al refugio.

-Eso es lo que me han dictado las voces, ¿si les he contado que a veces escucho voces?.-

¿En serio? Bien dejemos que siga el show. - pienso mientras veo al Malkavian hablar sobre unas voces que sólo él podía oír, de momento teníamos un alías uno que quizá nos pueda conducir a alguien pero hasta entonces sólo podía esperar, aunque, no puedo negar que la mención de la taumaturgia me inquieta un poco.

Me despido del mortal escuetamente, no hay tiempo para formalismos ni ganas.

-Coged las armas y a los coches, vamos a divertirnos un rato. -Se me escapa una sonrisa con los colmillos extendidos. 

Ante la orden de la Ductus, tomo una caja con la facilidad que un mortal levantaría a un bebé y la coloco en la parte de atrás del vehículo.

Al parecer habría jaleo, las cosas empezaban hoy mismo.

- Estamos listos.

Chad se encoge de hombros y antes de que Zack suba las armas a la furgoneta de los ghouls de Cutter, elige una pistola a la cuál le revisa el cargador y luego corta cartucho para asegurarla y después fajarla a su cinturón, luego toma una escopeta Benelli y la carga también, separa el oso de juguete y el pato de hule, así como los dulces y las latas de soda y las arroja a la parte trasera de la furgo de Cutter.

Adentro de la furgo, Chad toma al oso y al pato y comienza a fiingir una conversación entre ellos.

-Ducky, sabías que para abrir portales infernales hay que utilizar sangre de niño, hay que pintar sobre una pared una estrella de cinco picos invertida con su sangre fresca... !Sí lo sabía Teddy!, algún día hay que abrir una y dar un paseo por el caluroso infierno... ¡Claro!, ¡Eres mi mejor amigo!, tú también lo eres, ¿Podemos invitar a Chad?.- Chad hace que ambos juguetes giran su cabeza hacia el rostro del malky. Chad sonríe y se limpia un par de lágrimas antes de responderles. -Será un honor acompañarlos al infierno.- Chad abraza a los juguetes mientras espera a que salgan de aquel lugar a bordo del vehículo de Cutter.

Biff me lee el mensaje que le acaba de mandar Sarah y un escalofrío recorre mi espalda, sin duda tenemos un problema y de los gordos. Así que me comunico mentalmente con Aurora tras decirle a Biff que reenvié el mensaje a toda la manada.

—Aurora, esto es muy serio. Ese tipo es un grandísimo hijo de puta, es como el puto Blade pero en real. La lista de cainitas que ha destruido es interminable y está entre los más buscados tanto del Sabbat como de la Camarilla, deberíamos avisar que semejante cabronazo anda por la ciudad—. Rara vez podía notarse mi estado de ánimo en mi tono de voz, pero igual que Lara consiguió que me enfureciese de verdad, ese cazador hizo que estuviera realmente preocupada.

—Y luego están las mierdas de Chad, nunca hay que fiarse demasiado, pero tercero y magia de sangre en la misma frase suena mal, y más sabiendo lo que pretenden hacer con la sangre de lobo.

Tras terminar de empacar las cajas, reviso mi móvil y asiento en silencio mientras. - Pues bien parece que tenemos trabajo que hacer y objetivos claros, parece que voy a estrenar juguete ante de tiempo, pero mi duda es: ¿En dónde encontraremos a este sujeto?

Listo, ya todo está embalado y asegurado. - anuncio con voz firme mientras subo a la camioneta y me pongo cómodo.

Maldito cazador, voy a abrirte tu puñetero cráneo y esparciré tus sesos por toda la puta calzada antes de que puedas siquiera enterarte de que ya estás muerto. - pienso mientras miro de nuevo el teléfono, para luego volver a guardarlo en mi bolsillo.

Una vez recogidas y repartidas las armas, nos disponemos a continuar con nuestra misión.
El cazador parece no será tarea fácil, aunque si Carlos es capaz de llevar a cabo lo que tiene en mente puede que no nos de demasiados problemas.
De todas formas, las cosas nunca salen como uno planea

-"Todo listo, cuando quieras nos ponemos en marcha, Aurora"