Partida Rol por web

Casi como si lo hubiramos ensayado mil veces, el enano y yo nos turnamos para acabar con la triste existéncia del goblin.

Un golpe devastador desparrama sus apestosos sesos por el pasillo.

-ESTO es lo que sabemos hacer... -digo contestando a la pregunta del goblin.

La cabeza del goblin saltó hacia atrás a una enorme velocidad. No llegó a escuchar las palabras del bárbaro y su sonrisa seguía dibujada grotescamente en sus labios.

Ahora que el camino estaba libre, decidió avanzar para reconocer el siguietne pasillo. Con cautela, pendiente de no alertar y activar ningún sistema de alarma. Hay otro goblin al fondo del pasillo, preparaos...Les susurró a los compañeros

El mago avanza cuidadosamente, alerta.

Al doblar la esquina, otro vigilante goblin está haciendo su ronda.

El Elfo deambula por los pasillos como un espiritu. Sigue hasta el fondo. Espera dar un rodeo para pillar a los enemigos por la espalda.

Una rápida vuelta a la habitación central llevada a cabo por el grupo, desvela multitud de detalles importantes.

Aunque la fortaleza tenía aspecto de estar limpia y muy cuidada, pronto veís que no es así. Por allí por donde los goblins y orcos han pasado, se ve suciedad y destrozos. La parte aseada del castillo, está así solo porque aún no ha sido recorrida por las bestias. Los tapices y escudos están roídos, descosidos o quemados. Los hacheros para las teas, desnudos o arrancados. Se ve la mano de los goblins a kilómetros.

Los cuatro pasillos centrales, están por una razón u otra bloqueados; generalmente por grandes derrumbamientos de piedras, bien de los techos, bien de las paredes.

Podeís ver los marcos de tres puertas en los pasillos de la izquierda y la derecha.

También deducís, a juzgar por la gran cantidad de goblins de vigilancia que habeís logrado ver hasta ahora; que rescatar al Caballero, no va a ser un paseo.

Además desgraciadamente, todos han reparado en vuestra presencia.

El Elfo ve a los goblins, en linea recta. Sonrio, era la mejor manera de provar su arma nueva.

Te pille bastardo

Susurra para si

Con su nueva ballesta entre las manos, Tiranthir dobla la esquina del pasillo.

Se detiene bruscamente mientras ve al fondo dos goblins que hacen guardia junto a una puerta.

Tres veloces proyectiles sales disparados en un visto y no visto impactando brutalmente contra uno de los goblins, que muere antes de llegar al suelo.

El resto de horribles criaturas, al verse amenazada, no tarda en lazarse al ataque contra vosotros con una rapidez endiablada.

El elfo, el bárbaro y el mago, son los encargados de recibir esta primera oleada de ataques.

El pequeño bastardo verde me coge de sorpresa y me clava su pequeña daga en el muslo.

- Maldita sea!... -intento controlar el volumen pero la rabia me puede.

Aunque intentó guarecerse tras la esquina, el rápido goblin consigue alcanzar su pierna. Noo, ouch... duele. Su mano sujetó la herida un segundo mientras buscaba la daga para desenvainarla con la otra. Casi mientras perdía la firmeza, su daga realizó un tajo horizontal de lado a lado con fuerza, sin siquera equilibrar el cuerpo y dando unos pasos hacia atrás.

Al ver la situación en la que nos encontramos, recapacito sobre mi siguiente acción.

Mago, golpea a ese engendro del demonio y apártate de ahí que cargo contra él.

El Elfo nota los pasos de una criatura en su espalda. Espera a que sea inminente y de repente salta hacia adelante y echa a correr.

A visto como el otro goblin se le a escurrido asi que emprende la carrera dejando a el goblin ese detras de si.
Corre como el viento y salta el pequeño y putrido cuerpo de goblin que acababa de asetear y al llegar a la esquina gira su cuerpo mientras flexiona las rodillas para queda en una posicion estable.

Localiza a el otro pequñajo y acciona el disparados.

Tu no te me escapas.

El grupo de aventureros está mucho más seguro en sus acciones que cuando comenzaron su andadura juntos. Sus movimientos son resueltos, realizados con la fuerza que da la costumbre.

A pesar de haber resultado heridos, los ataques fulgurantes del mago y el bárbaro, terminan con la vida de sendos goblins.

Tiranthir, logra esquivar con habilidad el ataque de su oponente y reculando con rápidez dispara al pecho del goblin, que cae muerto en el pasillo.

Tras ver la el cuerpo del goblin que combatía con el mago caer muerto al suelo y ver que no quedan mas enemigos avanzo por el pasillo con precaución por si hubiere alguna trampa, e, intentando hacer el menor ruido posible.

Deberíamos permanecer unidos, esta fortaleza parece más grande que la anterior... Le comenta al Bárbaro nmientras improvisa un vendaje con alguna de sus prendas que coloca sobre su herida. Con cuidado anuda los extremos y una vez termina le comenta al bárbaro enfatizando con el gesto de su mano. Bien... detrás de ti...