Partida Rol por web

High School DxD: Armageddon [+18]

ボリューム .1: La invitación

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23/03/2018, 17:40
Director

Mantener vivo un dojō era un trabajo duro. Más aún los hábitos que se habían de mantener en el día a día.

Te encontrabas en plena mañana, en un duelo de espadas con tu hermano mayor. Estaba siendo supervisado por tu padre. Cada mañana los hacía practicar. Prácticas qué, después de que murió tu madre, se hicieron más intensas y exigentes. 

Te encontrabas arrinconada por tu hermano, pero pudiste aguantar sus ataques con mucha destreza. Tu contraataque no se hizo esperar, le obligaste a retroceder unos cuantos pasos, haciendo que solo pudiera defenderse.

En la gran sala de dojō podían escucharse un par de katanas chocando metal una con otra. Un sonido agudo y prolongado. Cada choque expresaba una emoción diferente, un poema. 

Tu hermano —aprovechando una abertura— te golpeó en la cabeza con el mango de la katana. Esto daba por finalizado el duelo.

Las reglas que imponían tu padre eran simples: El primero que fuese tocado perdía. Para tu frustración nunca habías podido ganarle un duelo a tu hermano. Era estúpido mirarlo como cualquier otra cosa. ¡Era un genio de la espada! 

Ambos hicieron un ademán y el duelo concluyó.

Tu padre salió por la puerta del dojō, sin apenas mirarlos. Cerró las puertas a sus espaldas y se dirigió a la casa. Solo podían escucharse sus pasos sobre la piedra mientras se alejaba.

Tu hermano sonrió y enfundó su katana.

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23/03/2018, 17:41
Samuru Hino

No te sientas mal respecto a la actitud de papá. Estoy seguro de que está bastante satisfecho con tú trabajo —dijo mientras se sentaba en el suelo, bastante exhausto—. Debes hacerte más fuerte que yo, Shiori. Mucho, Mucho más fuerte.

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23/03/2018, 17:47
Director

No entendías el porqué de sus palabras. Últimamente venía diciéndote eso mucho. No tenía ningún sentido, él sería el sucesor de la familia, ¿no? Entonces, ¿por qué debías hacerte más fuerte que él? No podías evitar percibir cierta evasión de parte de él, cuando tu padre hablaba del tema de la sucesión. Su actitud esquiva... ¿qué quería decir? 

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23/03/2018, 17:51
Samuru Hino

Agachó la cabeza, su expresión se tornó seria. —Shiori —hizo una larga pausa, dejándote a la expectativa—, ¿Qué sucedería en caso de que ya no quisiera suceder a la familia? —preguntó con una voz quebradiza.

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23/03/2018, 19:25
Shiori Hino

Estaba cansada por el arduo entrenamiento, pero realizar tales tareas era fructífero para su cuerpo y mente. Shiori entrenaba día a día pata volverse fuerte, mejorar y ser alguien digna de la familia; hábitos que comenzaron como distracción hace 7 años y que actualmente se volvieron parte de una rutina con la que entablaba una conversación que le costaba expresar con palabras, una danza que estaba dispuesta a bailar para sí y los demás. Aunque no quería admitir que la frialdad de su padre a veces le tocaba al fondo, comprendía por qué era así y más porque tomó un camino similar. Samuru era más dadivoso y no le molestaba, le tenía respeto y agradecía que fuera así.

-Conozco las razones de papá-contestó tajante, pero al mismo con esa afabilidad que otros podían confundir con sequedad-. Sin embargo, creo que hay otras situaciones que atender-buscó una toalla para limpiarse y tenderle otro a Samuru, aunque permaneció de pie escuchándolo más cuando su semblante se tornó serio-... ¿Que no quieres suceder la familia? ...

Sintiendo un impulso crecer en su interior, Shiori sujetó su katana por medio del mango con mucha fuerza mientras le observaba con incredulidad. ¿Entonces esas evasivas no eran por nervios, sino el querer hacer algo más? La mirada de la chica se tornó fría, similar a la de su padre, y se tensó por completo.

-¿Qué quieres decir? Esto es por lo que nuestros padres lucharon por años, Samuru. No seas idiota-poco a poco, su tono de voz fue elevándose mientras continuaba mirándole con recelo-. Si rechazas esta oportunidad sabes que no hay vuelta atrás. ¿Qué es más importante que el legado de la familia? ¿Acaso no sientes nada por lo que hizo mamá?

Se dio media vuelta sabiendo que era peligroso sostener la katana y fue a dejarla a su sitio para evitar algún accidente. Era temprano, así que no debería haber alguien escuchando... aunque eso no le importaba ahora.

-¿Por qué?-se giró bruscamente acercándose a Samuru. ¿Acaso él sabía que ella quería ser la sucesora? No, ella quería ganarse tal puesto, no que fuera regalado-. ¿En qué estás pensando? Si te quedas podrás estar con la familia y ayudar a que prospere este sitio. ¡No quisiera que algo te pasara y no pudiéramos ayudarte!-exclamando esto fúrica se mantuvo de pie a pesar de que su hermano continuaba sentado.

Estaba enojada, a su memoria llegó el pensamiento de que si hubieran detectado la enfermedad de su madre ella tal vez se habría salvado. Si su hermano dejaba el Dojō no podrían cuidarse entre sí, y si no lograban auxiliarlo si algo pasaba...

-¡No seas egoísta!-gritó con fuerza sin dejar de verlo. Su mirada continuaba fría, pero reflejaba esa ira que le costaba esconder-. No solo pienses en ti al no querer esta responsabilidad-no buscaba hacerle sentir culpable, pero no quería que las cosas fueran de esta manera-... ¡Razona, Samuru!

¿Se estaba desahogando? Llevaba tiempo sintiéndose así y solo podía conversar bien con su hermano en el intercambio de las hojas de las katanas. Ahí revelaba el cariño que le tenía, el respeto, la envidia y admiración. Le costaba hablarlo, pero no por se retraída: esa realidad los dos la estaban evadiendo por mucho tiempo.

-¿Por qué hasta ahora lo dices?-la voz de Shiori no solo reflejaba frustración... sonaba melancólica, decepcionada-. Papá estará muy decepcionado y...-se sentó a su lado, aun iracunda mientras apretaba la toalla con la que se había limpiado su rostro-... Si no quieres suceder a la familia... yo...-¿lo apoyaría? No lo sabía, pero le irritaba la idea de que se desperdiciara su talento, uno que ella no podía alcanzar. Le miró directamente esperando una respuesta, tal vez que hubiese razonado y no quisiera continuar con esa absurda idea. Pero algo sí sabía: tenía miedo.

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24/03/2018, 18:09
Samuru Hino

Samuru se veía devastado por las palabras de Shiori.

¡Silencio! 

Un grito ensordecedor hizo eco por todo el lugar. Un grito que expresaba dolor.

¡No necesito que me lo recuerdes! Silencio... —su voz se fue haciendo cada vez más pequeña. 

No le podías ver a los ojos, pero podías sentir una mezcla de todo tipo de sentimientos brotando de él. Samuru era consciente de su responsabilidad para con la familia, también, estaba consciente de su talento. Sin embargo, no se sentía preparado para asumir tal responsabilidad. Se sentía un poco culpable por la muerte de su madre, se sentía culpable por no poder hacer nada al respecto. Definitivamente no se sentía merecedor de tal responsabilidad. 

Papá y yo hemos estado charlando sobre un asunto —dijo Samuru con completa seriedad. Hace mucho que no le veías así—. Es sobre tu futuro, Shiori —hizo una larga pausa, y continuó—. Hasta hace un mes estaba completamente decidido a dejar el dojō, pero papá me habló sobre un tema que me hizo cambiar completamente de opinión: tú futuro. 

Se cruzó de brazos y su expresión se volvió amarga, quizá recordó algo que no quería recordar.

Papá ha decidido que dejes el dojō por algún tiempo. Por lo mismo, te irás a estudiar a la academia Byoko-Sho, al centro de Tokio —levantó la mano antes de que pudieses protestar y prosigió—. No es algo que esté en discusión, ya está decidido. De aquí a una semana dejarás el pueblo.

Algo te decía que había algo mal. ¿Por qué esa decisión tan precipitada? No, no podía ser verdad. Tenía que ser alguna especie de broma. Habías vivido acá todo este tiempo. ¿Por qué ahora? ¿Por qué debías irte a estudiar y vivir a una preparatoria? ¿Es porque has causado muchos problemas? No podías leer la respuesta en Samuru y, de haber algo más, tampoco parecía abierto a decirte.

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24/03/2018, 19:48
Shiori Hino

La voz de su hermano reclamando que callase hizo que Shiori se alejara de él retrocediendo un poco. Cuando lo molestaban, Samuru poseía un carácter mucho peor que el de ella y, sin darse cuenta, había colocado su dedo en una llaga que ambos compartían y del que seguramente no sanaría en un tiempo más. Pero, sin poder evitarlo, el coraje continuaba creciendo en el interior de la chica, pero ahora dirigido tanto a sí misma como a las responsabilidades, a su hermano, a su padre... Mientras continuaba escuchándolo, apretó sus manos en puño con fuerza para controlarse. No era un bravucón del que debía defenderse, era su hermano.

Pero la noticia que venía a continuación desencajó su rostro de pasar a la tensión absoluta a la sorpresa y la indignación. ¿Tomaron una decisión que le afectaría de manera personal, sin consultarle nada? La pelinegra se incorporó del suelo y se acercó retomando la distancia original.

-¿Sin avisarme? ¿Sin decirme nada?-sabía que las decisiones de su padre eran absolutas, pero si hubiesen dialogado los tres juntos habrían llegado a un acuerdo-. ¿Qué está pasando, Samuru?-pensó en su familia y Yari. Rayos, Yari... ¿Cómo se tomaría esta noticia?-. ¿Por qué esta decisión tan repentina? Agradezco que piensen en mi futuro-atacó en tono sarcástico y completamente frustrada-, pero puedo hacerlo por mi propia cuenta. Muchas gracias.

Estaba dolida por no haber sido considerada. Sospechaba que algo más se encontraba tras esa decisión, pero estaba tan ofuscada que le costaba discernir entre el gesto de su hermano y sus propias emociones.

-Acaso... ¿hice... hice algo mal?-el tono bajó un poco, revelando una chica que no guardaba inseguridades sino un dolor acallado y encerrado-. ¿Y si algo les pasa en mi ausencia? ¿Y si vuelven a atacar el dojō? Y si se enteran de que no quieres ser el nuevo líder... ¿quien te apoyará? -aunque le afectara que Samuru no asumiera el cargo, lo iba a apoyar en cualquier decisión. ¿Quería viajar por el mundo? Adelante. ¿Estudiar en otra ciudad? Ahí estaría ella ayudando a preparar maletas... luego de haberle dado un sermón sobre que debía mantenerse en comunicación constante-... ¿Por qué, Samuru? ... ¿Qué va a pasar contigo?

Se sintió traicionada. Era consciente de ser considerada una chica problemática, pero mantenía buenas calificaciones a pesar de todo, ayudaba al templo y al dojō, entrenaba para ser fuerte... solo para ser mandada a Tokio. 

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24/03/2018, 20:15
Samuru Hino

Cuando preguntaste sobre la seguridad del dojō, Samuru golpeó la katana contra el suelo. 

—¡Tomaré el mando de la familia! —repuso tajante. Luego, soltó la katana y la volvió a poner en el suelo. Se podía notar como Samuru hacia un esfuerzo gigantesco por no quebrarse. 

Tu futuro es nuestra responsabilidad, Shiori. No te comportes como una mocosa malcriada. Al dojō no le sucederá nada, ni a papá tampoco. De ser necesario daré mi vida para proteger a lo que amo. Si estás aquí, no serías más que un estorbo —concluyó alzando la voz.

Samuru se levantó, tomó su katana y te paso por un costado sin siquiera mirarte a los ojos. Salió del dojō y cerró las puertas a sus espaldas. Podías escuchar un taconear en la piedra que se iba alejando poco a poco...

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24/03/2018, 20:59
Director

Unos minutos pasaron después de la discusión con Samuru. Aún te encontrabas en el dojō. ¿Qué se supone que acababa de pasar? ¿No había vuelta atrás? No podías irte a Tokio sin más, ¿verdad? El ambiente del dojō se tornó obscuro. Muchos recuerdos vinieron a tu cabeza de golpe. Recuerdos de tu padre sonriendo, tu hermano y tu jugando con tu madre. Todos esos recuerdos se deformaban, se desvanecían como el papel al quemarse. 

La puerta deslizable de madera se hizo a un lado. 

Quien entró fue Yari.

 

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24/03/2018, 21:04
Yari Aikido

Te miró al rostro con una sonrisa forzada y te saludó.

¿Qué hay? Shiori. ¿Lista para entrenarme en el arte de la espada? ¡Quiero aprender a cortar rocas y toda la cosa! He ido mejorando, ayer pude partir una tostada en dos con mi katana, no puedes negar que soy talentoso.

Yari, al verse interesado en kendō insistió en que lo instruyeras. Luego de tanto insistir aceptaste. Desde entonces, cada mañana practicas con Yari antes de ir a la escuela.

Hoy se comportaba como lo haría cualquier día, pero había algo extraño. Tal vez lo estaba haciendo todo muy forzado. Espera, ¿Quizá había escuchado tu discusión con Samuru? 

Oeee, ¿Shiori? ¿Estás ahí? Te noto rara. No debes preocuparte por nada, todo estará bien. D-digo, todo saldrá bien en el examen de hoy —añadió mientras seguía sonriendo un poco forzado. ¿Quizá era tu idea? No. Podías verlo, detrás de esa sonrisa había: tristeza.

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24/03/2018, 21:45
Shiori Hino

-¿Qué tanto escuchaste?-preguntó Shiori ya con tono de voz cansado. Se había contenido de no desquitarse con Yari al entrenar y era obvio que no estaba de humor. A pesar de conocerse por dos años la amistad entre ellos se había formado de buena gana. ¿Quién hubiese pensado que esas dos personalidades tan dispares habría desembocado en esa relación?-... No hay vuelta atrás, supongo.

Sin finalizar de manera formal el entrenamiento, guardó la katana en su lugar en silencio y mirando el sitio donde su hermano le había gritado que sería un estorbo y dejara de comportarse como una malcriada. ¿De verdad estaba haciendo un berrinche? Sí, le faltaba madurar; pero le dolió que Samuru no entiendiera cómo es que ella se sentía ante esa decisión. Soltó un largo suspiro y al voltear a ver a Yari, su semblante era tenso pero sin rastros de coraje: también reflejaba tristeza.

-Si no fuera por ese examen...-faltaría. Trataría de hablar con Samuru, pero era consciente que los dos con la cabeza alterada sería imposible dialogar sin que alguno se enojara. ¿En qué estaba pensando en ponerse así porque Samuru tan solo le preguntó que pasaría si no quería suceder el legado familiar? Ella fue la egoísta, no él-... Yari...-le miró  suspirando profundamente de nuevo. Ese día se había levantado con el propósito de entrenar, asistir a la escuela, volver a casa para estudiar y tal vez preparar la cena si estaba de ánimos; no que su vida diese un giro de 180 grados de esa manera-... Quisiera solucionar las cosas antes de ir a la escuela. Si me voy así seré capaz de arruinar el examen de todo el grupo... ¿Podrías esperar en lo que busco y hablo con Samuru?

Aun tenía la cabeza caliente, pero no quería dejar las cosas así y desquitarse con quienes no lo merecieran... tanto. 

Notas de juego

Me siento mal por Shiori xD soltaste muchas bombas en el inicio. Y disculpa, pero me emociona un poco n.nu

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24/03/2018, 22:40
Yari Aikido

¿Escuchar qué? —dijo reprimiendo su frustración— No escuché nada. 

Durante el entrenamiento notaste a Yari desanimado, cosa que no encajaba con él. Era un libro abierto, estaba claro de que había escuchado algo.

Yari se quedó expectante ante tus frases entrecortadas. Atendió cuando le llamaste por su nombre. —Entiendo. —respondió jadeando aún por el entrenamiento. Si bien no habías sido demasiado ruda, Yari aún no era capaz de seguirte el ritmo. De hecho, en ocasiones, a media práctica se tiraba al suelo cansado.

Tú ve tranquila, yo... te esperaré sentado en las escaleras del dojō.

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24/03/2018, 22:47
Director

Y como habías dicho, te dirigiste a tu casa para hablar con Samuru.

En los momentos de enfado, solo había un lugar a dónde iba Samuru a desahogarse. Al altar de tu madre. Este se encontraba en un cuarto en dónde también estaban los altares de muchos antepasados.

Al llegar al cuarto te encontraste con Samuru, de espaldas. Estaba sentado sobre sus rodillas ante el altar. Por lo que podías percibir, estaba un poco más calmado.

Notas de juego

Las cosas se pusieron un poco movidas por acá. 

Yo también me siento un poco mal con Shiori, creo que se me fue la mano. :'c

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24/03/2018, 23:45
Shiori Hino

Shiori respiraba un tanto agitada tanto por el entrenamiento como los nervios que intentaba controlar. Mirar a su hermano de espaldas le aliviaba porque así no tendría que verle el rostro. Además, ¿qué iba a decirle exactamente? La pelinegra se acercó y se sentó de rodillas a una distancia prudencial para no molestarlo o si él le pedía estar a solas irse de inmediato. Suspiró para tomar fuerzas y deseó tener una katana para tomarla del mango y relajarse.

-¿Recuerdas cuando cumpliste 8 años? Me dio envidia porque te compraron un rico pastel y me comí un pedazo antes de la celebración y... Tenía miedo de recibir un castigo-rememorar aquello le hizo sonreír y sentir una pequeña punzada en su corazón-Me encontraste en la cocina llorando y en vez de acusarme, te comiste otro pedazo y cuando entró mamá dijiste que habías sido tú el que se comió el pastel y que yo estaba intentando detenerte-su voz se quebró, pero solo porque parecía perder un poco de su porte frío -Y mamá nos limpió a los dos... Y para al final dijeron a los demás niños que no habría pastel para cuidar que no hubiese tanto dulce... y tuvimos todo ese postre para nosotros dos...-suspiró y se quedó callada. Samuru siempre estuvo ahí para protegerla, y ahora asumiría un rol que no quería por el bien de los demás. -Lo... Lo siento. Fui impulsiva, terca, egoísta, inmadura... Me cegué porque creí que yo tenía razón y.. Si me preguntaste para saber qué opinaba si no querías suceder era porque querías mi apoyo, no mis corajes de rebelde. -no se atrevió a alzar la cabeza, no sabía si su hermano le escuchaba o no- ... Si voy a esa escuela, te prometo que no faltaré a clases y si un profesor resulta ser un inepto trataré de ser respetuosa... No garantizo que dejaré las peleas, los patanes abundan por doquier... Y... Samuru, sigue tu sueño. Se que papá te apoyará cuando los dos asumamos nuestras responsabilidades. No quiero que por... Un estorbo como yo.. Te frenes. No te sacrifiques.

Una cosa era disculparse en clase si se sobrepasaba por un malentendido, mostrar la funda de la katana para infundir respeto o faltar a clases por decisión propia; pero otra cosa era ver a su hermano cargar algo que no debía por presión familiar y ella entorpecer todo por su rudeza. Jamás permitiría que Yari la viese así, pero Samuru era su único hermano, una persona que admiraba y envidiaba. Estaba nerviosa, pero de mantuvo firme a la espera de cualquier cosa.

Notas de juego

Sí, pero estuvo bien. Esto le dará pie a Shiori a valorar más las cosas sin dejar de lado su carácter ;3

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01/04/2018, 21:09
Samuru Hino

Samuru no parecía inmutarse por tus palabras. Sin voltearse y aún sentado, dejó escapar un largo suspiro. Se podía sentir que los ánimos de Samuru estaban más calmados.

Perdóname a mí también —dijo en voz baja—. Creo que me sublevé un poco, no medí mis palabras. Desde que naciste siempre he tenido la misión de protegerte. Puedes ser una cabeza dura en ocasiones —dejó escapar una sonrisa. Algunos recuerdos quizá llegaron a su cabeza—, pero siempre estaré ahí para protegerte. 

Rompió su postura y te miró. Ciertamente los rasgos de Samuru estaban calmados. Tomó un gran respiro y prosiguió. —Todo lo que hacemos papá y yo es por tu bien. Quizá sientas que irte a estudiar repentinamente a Tokio no tiene ningún sentido, sin embargo, solo te pido que confíes en nosotros —pudiste sentir algo de la calidez de tu madre en esas palabras—. No te preocupes por mis sueños, primero preocúpate por los tuyos. Sé que quieres ser quien tome el mando de la familia, a través de la espada me lo has dicho muchas veces —te miró con una sonrisa y continúo—. Hagamos un trato —propuso mientras te miraba a los ojos—. Me quedaré aquí, cuidando el Dojo por ti. La única forma de que sucedas el Dojo es que puedas vencerme. Una vez te gradúes de secundaria y vuelvas, te estaré esperando para tener una batalla por la sucesión —concluyó mientras te ofrecía una amplia sonrisa.

Sus palabras derrochaban calidez, pero pudiste percibir un exiguo sentimiento de nostalgia.

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02/04/2018, 03:16
Shiori Hino

Shiori se sintió como una niña de nuevo esperando a que Samuru dijera algo, pero el percibir su tono de voz en calma y lo que le expresaba hicieron que la pelinegra sonriera de alivio.

-Sé que puedo confiar en ustedes, pero no negaré que me hubiese gustado saber lo que tramaban-... ella tenía sus sueños: apoyar a la familia, continuar con el legado dejado por sus padres... pero... ¿Eso era lo que quería o fue un objetivo moldeado?-. Y te prometo que me haré más fuerte que tu, te ganaré y así ambos alcanzaremos lo que queremos.

Entonces pensó... ¿Qué era lo que quería realmente? ¿Ser la líder de la familia, recibir aprobación o solo tratar de conseguir algo que sería complicado de obtener? Miró la sonrisa nostálgica de Samuru y ahí encontró la respuesta: forjar su propio camino. Ella deseaba ser la heredera pero no por estatus o prestigio: quería saber por sí misma que poseía la capacidad de suceder mediante los esfuerzos y ayudar a aquellos que podrían requerirlo. Yari, por ejemplo, acudió a ayudarla cuando iban a asaltarla y aunque él le dijo que era porque se le hizo bonita, ella supo detectar ese impulso amable que no todos tenían, pues otro extraño la habría dejado a un lado temeroso por su bienestar. Quería ayudarlo a su manera; pero al fin y al cabo ayudarlo.

-¿Esa escuela permitirá que me lleve una katana? Dime que no debo sacar permisos porque sería un proceso muy tedioso y aburrido-indicó moviendo una mano con fingida modestia-... Y, si alguien se mete conmigo me defenderé, lo sabes. Así que no se sorprendan si a los siguientes días reciben una llamada disciplinaria-prometió no arremeter contra los profesores ni que faltaría a clases; mas no dejarse mangonear por patanes o cualesquiera que intenten meterse con ella-... En fin. Ya debo ir a la escuela. Yari me está esperando-se incorporó sin dejar a Samuru y de nueva cuenta sonrió. Sabía que aún debía conversar, pero eso podría esperar-. ¿Quieres que pase por algo para la cena?

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03/04/2018, 00:21
Samuru Hino

Sumuru te miró con una media sonrisa mientras desviaba la mirada. Luego de eso dijo algo en voz muy baja para si mismo, solo lograste entender la parte final. Dijo algo como: "Problema".

Te miró mientras mantenía la media sonrisa y trató de ocultar cierto sentimiento compasivo. ¡Su expresión era totalmente complicada! ¡No sabías si quería reír o llorar! 

Oh claro, sí... habrá que hacer algo al respecto con ello. Creo haber escuchado que tenían un Club de kendo, supongo que podrías practicar con tu katana si te unes... aunque no creo que sea muy seguro para los demás estudiantes. ¿Eh? Oh, sí. ¡Definitivamente haremos algo al respecto!

¡Su expresión decía todo lo contrario! 

Luego de un largo suspiro, agitó su cabeza y recuperó el temple.

Dejaré que elijas que cenaremos hoy. Me bastará con que no te metas en problemas mientras vas de compra, como la última vez qué intimidaste al encargado porque dijo que eras linda... ¡Bueno, en fin! ¡Llegarás tarde si no te apuras! No deberías hacer esperar a tu amado Yari —definitivamente algo de picardía sonó allí. Te hizo un gesto con la mano instando a que te fueras.

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03/04/2018, 02:23
Shiori Hino

Shiori alzó una ceja ante el susurro de Samuru, pero no dijo nada al respecto. Respetaba que en ese momento no quisiera decir más al respecto y haría lo posible para sacar la información de una buena manera... o ya vería la forma para eso. Definitivamente ocultaba algo y es probable que no quería decirle para cuidarla o protegerla de algo. ¿Tendría relación con su ida a Tokio?

-Al menos debo entrenar aunque sean débiles-la pelinegra sonrió de lado-. No solo servirá para ir creciendo; me permitirá conocer otras técnicas, otros puntos ciegos, otras maneras de perder y ganar...-y su sonrisa se tornó un tanto más siniestra que era evidente que solo jugaba-... y a ellos les servirá de lección de no meterse conmigo.

Colocó sus manos en las caderas escuchando la sugerencia de la cena y ante la mención de lo que le dijo el intendente soltó un bufido leve-. Me controlaré, no te preocupes-sin  embargo, con lo de Yari carraspeó y dio media vuelta para que Samuru no viese que su sonrisa se deformó a una más lúgubre-... Si quiere algo más deberá mejorar en la técnica y no partir tostadas-se volteó ya con su gesto suavizado y se despidió mientras se alejaba a paso rápido para alcanzar a su amigo e ir a la escuela. 

Se encontraba de mucho mejor humor que en la mañana. Pero su corazón continuaba inquieto por todo lo ocurrido pensando en lo que era obvio que le estaban ocultando.

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03/04/2018, 22:39
Director

Saliste a toda prisa de tu casa y llegaste a las afueras de Dojo.

Yari se encontraba esperándote mientras estaba recostado a un árbol. Estaba algo pensativo, pero al verte espabiló y sonrió. Así pues, ambos fijaron rumbo hacia la escuela.

Vivías en Yanaka. Un distrito de Tokio. Era un lugar muy visitado en temporada de vacaciones. Era un pueblo relativamente pequeño, sin embargo, contemplaba sus lujos. Las edificaciones en su mayoría daban un aire antiguo, y contaba además, con bastantes templos. 

La escuela no quedaba muy lejos de tu hogar. Aproximadamente a unos diez minutos a pie. Yari, vivía un par de manzanas más lejos que tú. Desde que se empezó a entrenar contigo cada mañana, te ha acompañado a la escuela.

Mientras caminaban.

Hacia un día agradable. No había calor, tampoco frío. La brisa hacia danzar a las hojas de los árboles mientras despeinaba tu cabello. Yari, que se encontraba bastante pensativo, soltó las primeras palabras desde que partieron.

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04/04/2018, 01:30
Yari Aikido

—Seguro de que te irá bien en Tokio. Eres muy buena en los estudios y tienes muy buenas condiciones físicas, de seguro encajarás rápido en tu clase. Sobre todo porque eres muy linda.

Yari dijo todo aquello con una sonrisa sincera. Normalmente se abstendría de decir algo como eso, pero quizá, sentía la necesidad de hacerlo. No cualquiera podría decirte linda sin salir bien librado, él lo sabía bien, pero decidió tomar el riesgo. 

La expresión triste que tenía antes de el entrenamiento había cambiado por completo, ahora se había convertido en una expresión de determinación.

Aunque... —desvió la mirada y puso una mano en su barbilla— definitivamente si fueras más femenina te convertirías inmediatamente en una idol. Sí, estoy convencido de ello.

Bueno... de alguna o otra manera se encontraba pensando en tu bienestar...