Partida Rol por web

HLCN - Casa de Muñecas II: Ruinas

Día 1: Realidad

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18/03/2015, 18:50
Erika Stolness

Tras las emociones, todas juntas, como un remolino en mi interior, recibidas después de bajar a aquel sitio, lo único que me apetecía era irme a dormir, y a levantar el campamento al amanecer, porque, imaginaba que no nos quedaríamos allí después de lo que había pasado. La excursión y todo lo demás se suspendería.

Me desinfló un poco la idea, pero debía de comprenderlo. Pasaban cosas muy raras allá abajo.

Buenas noches, Abigael— me despedí de la mujer, sonriendo, aunque me parecía más una mueca que otra cosa—. Si necesitas algo, estoy aquí al lado.

Me sumí en un sueño profundo, aunque algo inquieto. Muñecas que giraban sus cabezas por completo, algunas sin un ojo, otras sonrientes, otras con el pelo rapado, y otras sucias y sin algún miembro.

Cuando una de ellas me iba a hablar, cuya boca parecía un pozo negro, fue cuando me desperté de improviso, notando mi pie agitarse.

—¿Qué? ¿Qué pasa?— pregunté con voz pastosa—. ¿Qué ocurre, Abigael?

Me desperté de un salto, y, como impulsada por un resorte, salí de la tienda.

Vi a la gente inquieta, hablando con nerviosismo, asustada, y… Y el horror hecho realidad. Aquella muchacha con su hermano. Había llegado tarde, pero… ¿Sí? ¿Sería posible?

—Lo han matado— murmuré, haciendo una pausa infinita—. Y ha resucitado.

Estaba estupefacta, y lo único que podía pensar era que seguía soñando. No sabía por qué soñaba con que aquel hombre había muerto, y después, había resucitado, pero mi mente era así de divertida.

Sin embargo, mi sueño me mostró, por otro lado, que Salvatore no había sido el único en caer, pues el hombre latino también había muerto… para levantarse después.

Pestañeé varias veces, y tuve que sentarme, porque no podía creerme lo que estaba pasando. La gente muriendo… y resucitando.

—Pero…

Me quedé sin saber qué decir o pensar. Si aquello realmente era un sueño, porque debía de serlo, me estaba dando escalofríos, y, si no lo era… Comenzaba a arrepentirme de haber echado aquella solicitud. 

Notas de juego

Mae mía, qué ritmo O.O

XDXDXXD

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18/03/2015, 21:03
Richard Connors

Habían muerto dos personas. Resucitado otras dos. Pero no aprendían, la gente seguía queriendo averiguar el misterio cogiendo la cámara. Resignado, Richard suspiró. Si iban a arriesgar sus vidas en vez de huir, no se podía hacer otra cosa que colaborar.

-Es muy peligroso volver a bajar para encontrar la cámara, ya visteis lo que pasó ayer. Si lo hacemos, os ayudaré, pero debemos hacerlo rápido. Ir y volver. E irnos en cuanto podamos. Lo contrario es de imbéciles. 

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18/03/2015, 21:06
Chechu Cabezas

Chechu había seguido el ritmo del grupo sin ningún problema, sorteaba obstáculos y veía más allá esperando ver algún objeto de valor entre las ruinas. Desgraciadamente no fue así, cuando encontraron la muñeca pensó que era una pérdida de tiempo pero al igual que mucho decidió mirarla con curiosidad. Una vieja muñeca podía valer algo después de todo, seguro que algún coleccionista estaba interesado.

Pero una muñeca al fin y al cabo. 

Los ojos se movieron como si estuviera viva, todo se tornó en caos y la histeria reinó en el lugar. ¿De verdad ha sido real y no algún juguete moderno? Después de aquello Chechu corrió junto al resto deseoso de escapar de aquella pesadilla. En cuanto estuvieron a salvo se inclinó y apoyó sobre sus propias rodillas. — ¿Qué ha sido eso? —preguntó casi jadeando por el miedo.— Oye cabeza, ¿qué narices ha sido eso? — insistió esta vez a su colega Paco.

No podía creer lo que había visto. Todo y eso lo dejó estar, esperaba lograr conciliar el sueño de una manera u otra pero no sería fácil quitarse aquella imagen de la retina. 

Al amanecer pensaba que algunos habían muerto durante la noche pero no resultó ser así, tanto Salvatore como Luis regresaron. Eso logró tranquilizarlo un poco, le faltó muy ponerse a chillar como una loca. Sin embargo al igual que Wyatt y Janko, él también quería saber qué había pasado así que cuando uno se ofreció a bajar él también levantó el brazo y la voz. — Yo también voy a bajar otra vez, seguro que tiene una explicación... 

Notas de juego

Ninja edit, aquí no ha pasado nada.

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18/03/2015, 23:36
Andrea Barbara Roots

En otro momento probablemente Andrea habría reído ante el comentario de Jessie. Seguramente, incluso, le habría señalado al par de cazafantasmas declarados que había entre ellos. Sin embargo en esa ocasión simplemente dejó que su mirada se perdiera en el muchacho, sin abandonar aún a su hermano.

Luego, cuando Geonwoo se dirigió a ella, simplemente hizo un gesto que mostraba que por lo que a ella respectaba podía hacer lo que quisiera. - Las muertes se dieron aquí arriba, sí. - Reconoció. - Pero pensar que no se van a dar abajo, si quien ha hecho esto - Dijo señalando al vientre de su hermano, mientra sentía cómo la voz le flaqueaba un instante. - también va, no tiene sentido. Lo que tenemos que hacer es irnos cada uno a nuestra casa. Quien quiera quedarse en plan suicida, - comentó llevando su mirada a Janko. - es libre de hacerlo. Si tengo que escoger entre una explicación que probablemente nadie creerá o mi vida, lo tengo claro.

Después de eso Andy escuchó las palabras de aquel hombre mayor, Richard, y sólo pudo asentir con la cabeza. Parecía alguien que, aún estando dispuesto a admitir cualquier tipo de explicación, tenía la cabeza sobre los hombros.

Al ver acto seguido cómo unos y otros se apuntaban a esa nueva expedición, la chica sólo pudo alzar las cejas, sorprendida. Se notaba que no eran ellos los que habían encontrado a su hermano muerto. Aquello era algo que podía esperar de Janko, pero lo de aquel joven bigotudo le pareció casi como quien se apunta a una fiesta en la que no sabe muy bien quién habrá o si habrá para pillar o no y va con las manos vacías.

- Eh, Janko. - Le llamó desde su posición. - Si bajas, ten cuidado. - Pidió antes de emitir un suspiro. - Luego tenemos que hablar.

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19/03/2015, 00:35
Sasha Dixon

Cuando Salvatore y a Luis volvieron a la vida observé estupefacta algo que el sentido común me decía que no tenía sentido, no era posible que la gente resucitara. Me alegré por los dos pero todo era tan extraño que me costaba reaccionar.

-Es genial que estéis bien los dos.- Suspiré aliviada de que todo el mundo estuviera bien. Estaba enfadada y preocupada por lo que había pasado, era un cúmulo tal de emociones enfrentadas, que estaba un poco desbordada.

-Vamos que habéis organizado esto tan bien, que nos habéis traído a un lugar sin posibilidad de comunicarnos con nadie y no se os ha ocurrido planear una posible evacuación.- Me froté la cara con frustración.

- Ni se os ha ocurrido traer una radio, ni un teléfono satélite, ni nada que permitiera una evacuación rápida.-Luego empezaron a hablar de volver a los túneles a recoger la cámara.- No estoy dispuesta a bajar otra vez ahí ni de coña. Si esos túneles llevan cerrados tanto tiempo después del incendio, no quiero ni imaginar todo lo que hemos podido respirar ahí abajo. Es la única explicación razonable, tal vez Krysta allá estado allí más tiempo que el resto y por eso es la más afectada. En vez de preocuparos por la cámara deberíamos concentrarnos en salir de aquí lo antes posible. No sé si podremos bajar con Krysta pero, si no puede andar, lo mejor sería ir hasta donde nos dejó el autobús. Seguramente cerca de la carretera habrá cobertura y podremos llamar para que nos saquen de aquí.

Las palabras de Krysta en medio de su ataque, no podían ser más que un efecto de lo que le había pasado, tal vez incluso había sido ella en su delirio la que había atacado a los dos hombres.

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19/03/2015, 00:45
Aurél Pataki

Después de un momento, comienza a regularse mi respiración y escucho cómo todos se encuentran divagando, sin decidir aun que hacer, estaba claro que si no todos, por lo menos muchos no queríamos volver a descender por esas escalas metálicas. Me acerco al tío del habano y le pregunto - Como te encuentras?... Recuerdas algo?...como sucedió todo?

Cada vez surgían mas preguntas y ninguna respuesta se había manifestado, aunque la razón había abordado ya a todos con diversas manifestaciones de sí, tan subjetivas e individuales como podían ser.

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19/03/2015, 01:12
Ekaterina Kuztnetsova

Al ver como la sangre regresaba al cuerpo de Salvatore, Katia se había quedado paralizada. Lo miraba con los ojos como platos, estuvo así hasta que el joven abrió los ojos, entonces una sonrisa se perfiló en sus labios y nuevas lágrimas se desprendieron de sus pestañas. Pero se mantuvo en silencio, contemplando el reencuentro de ambos hermanos. 

Al poco también regresó a la vida el hombre que fumaba habanos. La joven se volvió a mirarlo, cuando éste empezó a bailar y dar saltos de alegría, y una risa suave reverberó en sus labios. Había estado tensa y ahora su hombros se relajaron y el nudo de su garganta se deshizo. 

Aquello no era normal. La gente no regresaba a la vida así como así. Pero en ese momento no le preocupó, le daba igual, estaban vivos y eso era lo bueno.

- Sí, vayámonos de aquí - . Dijo y se volvió a mirar a Wyatt. - Me da igual que estemos dentro del bosque. Si el autocar nos pudo traer, podemos seguir ese camino - . Se mordió el labio, tembloroso. Quería irse ya. Ella no era ni investigadora, ni periodista, ni friki. Ella era una joven que había querido comprobar si la muñeca de una artista que admiraba seguía allí. Había soñado con poder verla con sus propios ojos y poder rescatarla de aquellos escombros. Pero todo aquello se escapaba de su comprensión, y tenía miedo. Un escalofrío recorrió su espalda y se abrazó a sí misma, mientras su mirada turquesa regresaba a los dos hermanos. - Juntos podemos irnos - . Sus labios esbozaron una pequeña mueca. Sabía que ella sola no podría recorrer mucho camino, pero confiaba que con ayuda podría lograrlo. - Yo... Intentaré no ser un estorbo - . Entonces deslizó la mirada hasta detenerla en Samantha y Sophia. - Vayámonos... -

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19/03/2015, 02:15
Camille Levau

Después de lo sufrido en nuestra primera excursión estaba claro que, o esto era un plan muy bien elaborado por un grupo de ociosos, o realmente todo lo que se rumoreaba sobre maldiciones era cierto. Personalmente quería y a la vez temía que fuese lo primero.

La noche siguió tranquila, con el miedo en el cuerpo y cabreada conmigo misma por haber dejado de fumar hace tan poco tiempo, me costó conciliar el sueño mas el cansancio se antepuso a todo lo demás.

Aun no había despertado cuando unos gritos me hicieron dar un brinco dentro de la tienda, salí a toda prisa y lo visto era por decir algo, aterrador.

Primero la muerte de Salvatore, luego el chico latino, y el gilipollas de turno hablando de la gran perdida que resultaba ser su cámara… alguien estaba buscando una ostia. No sabía que pensar al respecto, ¿con qué clase de psicópatas me encontraba? No lo sabía, pero no estaba por la labor de quedarme a averiguarlo. – una vez que lleguen las autoridades y descubran al puto psicópata me largo de aquí – comenté tajante sin hablar con nadie en particular.

Pero claro, la cosa no pudo quedar así, primero Salvatore y luego Luis volvían a la vida – ¿pero que puta broma macabra es esta? – pregunté ahora si hablando directamente a los dos “resucitados” , estaba totalmente indignada, así que sin mas y con un cabreo en el cuerpo como el que no había tenido en mi vida, me separé del grupo para tomar aire y no terminar por explotar.

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19/03/2015, 03:48
Aurél Pataki

De pronto escucho un acento conocido, es una pronunciación que se me hace muy familiar... Entonces por un momento me distraigo y miro hacia el punto donde proviene esa voz... Es de por aquí, señorita?...

Notas de juego

Ekaterina 

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19/03/2015, 04:47
Narrador

Algunos optaron por bajar y otros por quedarse, pero el temor en todos parecía estar. Wyatt parecía considerar la opción de Andrea pero al ver que algunos apoyaban su idea, decidió dejarlo a un lado y bajar.

Con la compañía de Janko, Richard y Chechu, quienes parecían ser los únicos que se aventurarían nuevamente a ese lugar. La espera se hizo eterna mientras ellos bajaban y volvían a regresar, aunque aquellos no pudieron evitar su sorpresa al llegar a esa habitación y darse cuenta que la muñeca ya no estaba, cosa que, aunque no quisieran admitirlo, motivó una aceleración en sus pasos. Se sentían nerviosos y se apresuraron un poco a salir de allí para unirse al campamento.

Wyatt respiraba agitado ante lo que había visto y entre su respiración agitada, dijo - La muñeca... Ya... No está - comenzó a revisar la cámara y empezó a ver una secuencia de video que él no podía explicar. Le pidió a quienes lo habían acompañado que las miraran para que le dijeran lo que ellos veían y no podían evitar un gran terror ante esto. Todos la pudieron ver, comenzando a sentir sus corazones en sus gargantas y un temor mayor.

Detrás de Krysta y la muñeca, había una estantería de cristal llena de muñecas, donde cada uno pudo verse a sí mismo en ella, y entonces se veía la presencia de dos hombres detrás, un joven de cabello castaño claro gritando y un hombre de traje con algo entre sus manos. El grito del joven llegó a sus oídos con una fuerza que no esperaban, haciendo temblar el lugar donde se encontraban y haciendo que varios de ustedes se tambalearan en el lugar donde se encontraban. Sea lo que fuera, no era un buen augurio.

Las cenizas que habían encontrado allí comenzaron a elevarse gracias a un gran ventarrón que comenzó a soplar sobre ustedes, creando un torbellino que los cubría. Las piezas de muñecas se unían en el aire, el torbellino se cerraba cada vez más, haciendo que todos aquellos fragmentos de polvo, piedras, hojas y recuerdo, se unieran para crear algo viejo, algo olvidado, un lugar destrozado hace mucho. A su alrededor, comenzaron a formarse muros de cristal que rodeaban el campamento, dejando solo sus tiendas como recuerdo de este y la entrada a aquel túnel ubicada en el centro de esta.

Todas las estanterías brillaban con intensidad mientras una escena se desarrollaba frente a todos. Un gran grupo de gente estaba aglomerado mientras que había dos hombres separados del grupo. Uno de ellos llevaba ropa negra y el otro, un traje. No hacía falta mucha inteligencia para asociarlos con los hombres del video. Observaron mejor y notaron que el hombre del traje tenía en su mano a una muñeca muy similar al chico y tenía un cuchillo en la otra. Comenzó a apuñalar a la muñeca mientras el joven parecía sufrir las consecuencias en su propio cuerpo. Sus heridas se abrían primero en el pecho, luego en el cuello y por último, sus ojos. Al atravesar el segundo ojo, el cuerpo del chico dejó de moverse, yaciendo en un charco de su propia sangre.

La imagen se quedaría en su mente por un buen rato, mientras, como si fueran polvo, las figuras se deshicieron, dejándoles la esperanza que esa cristalería también lo hiciera, pero no, ahora no solo estaban incomunicados, sino también encerrados por una ilusión del pasado. La verdadera historia había comenzado y los asesinos estaban entre ustedes. Llegaba la hora de votar para elegir quiénes eran, aunque no entendían bien por qué esa sensación los embargaba de repente.

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19/03/2015, 04:48
Krysta Davis

La joven se levantó consternada y emitió un grito al ver la escena que acababa de desvanecerse para decir - Eso fue lo que yo vi - lágrimas surcaban por sus ojos mientras trataba de buscar un punto en que la cristalería se desvaneciera o rompiera, pero nada parecía funcionar.

Estaban encerrados en una fortaleza de cristal. Aún tenían las carpas y la comida, pero no había manera de salir.

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19/03/2015, 05:42
Luis García

Luis volvía a la realidad, dejando un poco de lado la alegría que le había llenado momentos atrás. Tomó asiento en la tierra, con cuidado de coger su habano. Dio un par de caladas, para después dejar escapar el humo. 

Se decidió a responder la pregunta de Aurél, pero primero esperó a ver como iba la recuperación de la cámara. De hecho, antes de decir cualquier cosa, se fue a su tienda. Miró por allí, encontrando la botella de ron, y el vaso, que habia quedado tirada. Se sirvió un poco y bebió el licor de un solo trago.

Cuando los que fueron en búsqueda de la cámara llegaron, y mostraron el contenido de la cinta, se quedo a cuadros. Perplejo, no tenía idea de como pudo pasar aquello. El no vio esas cosas, pero de que le paso algo raro, le paso, y eso no lo podía negar, Eleguá y el de arriba eran sus testigos.

Aún algo nervioso, decidió que era tiempo de contar que es lo que había pasado por la noche.

- Mi gente... aquí hay una vaina seria, sin mentir.- Mientras hablaba, se acercaba a Salvatore, tragando saliva.- Ayer, cuando fuimos abajo sentí algo rarísimo, como imagino todos habrán sentido...- Respiro profundo, como si le costase explicarse.- Cuando volvimos, intenté dormir, pero no pude. No tenía ni sueño, ni hambre, ná de ná.- De pronto se notó abrazándose a si mismo.- Así que me quede afuera de la tienda, fumando mi habanito, y bebiendo un traguito de ron que traje conmigo, y estaba bien, todo correcto, sin problemas... hasta que sentí ruidos por aquí donde estaba Salvatore... - Se giro a ver al hombre atacado por la noche, bastante nervioso.- Solo alcance a ver a alguien, no pude fijarme quien, entrar a la tienda del chico este. Iba a acercarme a ver que pasaba, pero me tomaron por la espalda, y luego me enterraron no se qué en la espalda... Y desperté en otro lugar chamo, te juro, esa cosa era el mismisimo infierno, muchas muñecas viejas por todos lados, todo sucio, todo cochino, todo era bastante feo mi gente... -  Luego recorrió el rostro de todos, temeroso aún.- Yo sé que muchos no creen... - Comento al notar caras de escepticismo.- Pero a él y a mi si que nos mataron, y bien muertos que nos habían dejado... Esto de que estemos aquí es puro milagro, de los de verdad.-

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19/03/2015, 05:57
Jessie Marley

Pero aquel minuto en el suelo se convirtió en dos, y dos ne cinco, cinco en diez...algunos decidieron bajar a por la cámara y por eso no me moví de allí, no tenía intención alguna de bajar a aquel lugar. Mi objetivo era venir aquí y volver a contarles a mis amigos mi osadía de haber subido hasta un lugar como este. Me enseñaron el vídeo y quedé bastante extrañado y era algo espeluznante. Simple y llanamente, increíble. Pues para nada podía creer aquello. pero fue cunado en un momento, todo empezó a girar y girar y girar. Como aquello continuase así, no ganaba uno para marihuana y poder explicarse todo aquello, así que alcé cabeza y como todos, quedé observando aquella escena de los dos hombre, la cual hizo llevarme las manos al estomago. "¡Ostias! Como al Salva..." Miré a los hermanos, a lo mejor tenía algo que ver, pero no sabía si sería bueno decirlo. Cuando Krysta despertó, pensé "Podría haber gemido algo de eso.." 

Entonces el del bigotillo raro con puro empezó a contar lo que le pasó anoche y sobre un infierno con muñecas. "Llega un momento en la vida de todo hombre...el la que uno se pregunta: La verdad...con tanto emporrao por ahí, uno ya no sabe que creer. Yo no se que tendrán esos puros, pero está alucinando más que yo."

Entonces levanté mis manos a mis lados y empecé a girar sobre mi, llamando la atención de todos.

-Esto señores míos...es una ilusión.

Y al terminar la frase, arranqué a corren dirección a una pared y saltar contra ella. Proporcionandome un ostión monumental cayendo de espaldas medio atontao, mas el atontamimento que llevaba de antes, atontao y medio. Gimiendo y agarandome la nariz con una mano.

-Vaalee...es real.-Alcancé a gimotear-duramente real.

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19/03/2015, 07:14
Salvatore Darthe

Salvatore soltó una risa ante el empujoncito, haciéndose el herido para hacerla sufrir un poco.  El… dolor… - se llevó la mano al pecho, jugando – Si me quieres matar, solo apuñálame de una vez – bromeó con su propia muerte.

Mientras aún abrazaba a su hermana, observó estupefacto revivir al cubano. Eso eran buenas noticias, puesto que ahora no se quedarían sin cocinero. Pero si su resurrección había sido el doble de espectacular, como seguramente había sido dado su excelencia en todas las materias (incluso las desconocidas) entonces entendía la reacción acelerada de todo el mundo. Por supuesto, el hecho de haber resucitado ya lo justificaba, pero había que admitir que verlo era algo que superaba la teoría.

Bien, gracias, caballero – contesta a Aúrel – Lo siento, pero mi asesino ha sido lo suficientemente cuidadoso para evitar que viera su rostro. Y mientras él respondía, una mujer, otra aficionada a los horribles aparatos móviles, empezó a balbucear algo sobre tomar su sangre. No, definitivamente no. No le daría su sangre a una desconocida, y mucho menos se la daría en esas circunstancias, en un lugar tan poco higiénico y con quizás quien sabe que agujas. Pero no tuvo que negarse porque su hermana lo hizo por él, comprensiblemente territorial ante la científica. Después de todo, había estado a punto de perderlo, y eso sonaba como una muy buena razón para ponerse sobreprotectora. Por verla así de feroz defendiéndolo, sería capaz de morir mil veces más de ser necesario. Acaricio los dedos de la chica que se entrelazaban con los suyos, expresando el cariño que sabía no era momento de poner en palabras.

Admiró la fuerza del latino para levantarse y besar y abrazar gente, que él definitivamente no tenía en aquellos momentos. Probablemente, aunque la tuviera no lo haría, puesto que no era tan eufórico y respetaba el espacio personal del resto, más aún las distintas culturas. No había que ser un genio para saber que un latino de sangre caliente y una oriental de sexualidad reprimida tendrían más de un par de choques culturales.

El guía buscó señal con su aparato infernal de comunicación. Por supuesto, no resultaba. Andrea no dejaba de molestarlo con que consiguiera uno de esos, pero dado que las líneas telefónicas fijas eran estables y él no necesitaba gente buscando su consejo 24 horas al día, se había negado terminantemente. Ahora tenía una prueba más de que esos inventos eran inútiles. Casi tanto como los guías, que uno pensaría habrían traído móviles satelitales si iban de excursión… Ineptos, ineptos todos. La próxima excursión se las planearía él, a ver si aprendían como se hacía.

Esa idea, de hecho, no es del todo deficiente – soltó, como cumplido, hacia Janko. Por supuesto, él ya había pensado en esporas o algún tipo de polvo, pero le alegró saber que había alguien más dispuesto a encontrar una respuesta lógica. Que esa persona fuera el anormal, sin embargo, escapaba de sus predicciones. Probablemente, el guía turístico/detective paranormal habría ganado un par de puntos de no ser por la conversación privada que Andrea le ofreció luego, a lo cual Salvatore no pudo sino alzar una ceja. ¿Y qué tienes que hablar con él?

La mirada turquesa de Katia interrumpió sus pensamientos, y mientras rozaba la espalda de Andy, pensando en si debía decirle que ya podía levantarse o en seguir aprovechando de aquel momento de dulzura de edición limitada, asintió en dirección a la rubia. Podía sacar a su hermana y a la pequeña damita de allí, ahora que estaba bien, antes de la próxima noche. No había razón suficiente para arriesgar sus vidas en esto.

Mientras los aventureros buscaban la cámara y quién sabe qué cosa, él ayudó a su hermana a levantarse junto a él, pues supuso que ya que estaba tan feliz con su nuevo amigo detectivesco querría esperarlo antes de irse de allí y aprovechó el momento para sacudirse la ropa. Necesitaba cambiar de atuendo rápido, pero no iba a dejarla sola con un montón de locos y no era momento para irse aún. Cuando se acercaron a ver la famosa cinta que tanto valor tenía, Salvatore abrazó a Andrea por detrás, cruzando los brazos por sobre la clavícula de la chica, aprovechando su altura para poder ver bien y no tener que separarse de ella aún. Vio su versión en muñeco y a los dos hombres, pero tras su última experiencia había pocas cosas que lo sorprendían. Incluso el temblor resultó solo en ponerlo en alerta y sujetar un poco más firmemente a su hermana, por miedo a que fuera a tropezarse de alguna manera. Andrea no era tan torpe como la rusa, pero es que a veces tenía unas demostraciones de destreza dignas de ser evaluadas por un equipo médico.

Entendió, al ver la escena, por qué no había visto a su asesino, cuando sus ojos jamás habían resultado defectuosos. Pero al mismo tiempo, aquella versión de vudú y muñecas de porcelana, de espacios imaginarios y escenarios fantasmagóricos, no era una opción que le agradaba creer. Era posible, suponía. En todos los multiversos, debía haber alguno con tales características. Solo jamás había creído que fuera este.

Aunque en un principio se siente poco atraído hacia la idea de gente invadiendo su metro cuadrado, puede ignorarlo temporalmente cuando el hombre declara haberse acercado para asegurar su bienestar y haber perdido la vida en ella. Un agradecimiento sería lo apropiado, pero no uno público, que le daría más crédito a él que al cubano, así que solo asintió con una mirada agradecida, intentando ignorar el misterioso ambiente que los había rodeado de pronto. Cristal y estanterías, de la nada.

Doy fe de ese lugar y de su muerte. – se limitó a decir, pues no tenía sentido darle más vueltas. Tener que estar encerrado en un lugar sucio como ese… - Aunque si algo hay que apreciar de este asesino, es que tiene sentido del humor. Matar al que tiene de apellido “Muerte”… - sonrió. Nunca pensó que su apellido fuera a traerle más problema que las bromas de Andrea o una que otra referencia en círculos muy determinados.

 Por supuesto, está de más decir que ante la impulsiva acción de su ídolo drogata tuvo que bajar la cabeza a la altura del hombro de su hermana, para llevarse la mano derecha al puente de la nariz y negar con la cabeza, decepcionado. Insensato…

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19/03/2015, 07:40
Mike Straton

Cuando aquel hombre dijo que la muñeca no estaba los pelos de Mike se pusieron de punta y un escalofrío recorrió su piel.... Sin embargo lo que estaba por pasar... fue aún peor.

Ver aquel vídeo, aquel desfile horrible de muñecas muy similares tanto a él como al resto del grupo hizo que el estómago de Mike se encogiese a su mínima expresión y que su piel se quedase totalmente blanca...

Esto no puede ser real, tiene que ser algún tipo de alucinación o alguien nos está manipulando...

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19/03/2015, 08:44
Goro Gaara

Goro en estos momentos se sentía completamente perdido. Si aquellos eran actores eran muy buenos, había revisado el vídeo de la resurrección en su cámara, o mejor dicho, había intentado revisionarlo y ni tan solo había podido acabar de hacerlo: un terror frío le había paralizado la columna ante aquello.
Ni por asomo quería considerar que todo aquello tenía algo de verdad, pero lo sucedido con la muñeca al bajar allí abajo, lo que hubiese sucedido les había afectado a todos, él incluido.
Pero aún así, aquello no era para nada fácil de aceptar.
Había asentido cuando habían dicho que podían usar su grabación en lugar de bajar allí abajo otra vez. No había sabido responder cuando le habían preguntado que creía que ocurría. Goro intentaba parapetarse tras una burbuja, casi alienado de la situación.
En ese mismo estado vió aquella grabación de los que habían decidido bajar, negando con la cabeza. Todo esto ha de ser una broma macabra se repetía interiormente como un mantra.

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19/03/2015, 10:57
Erika Stolness

Aguanté la respiración lo que me pareció una eternidad. Vi cómo se perdían en la oscuridad aquellos que habían decidido bajar a por la cámara de aquel tal Wyatt, como si fueran héroes. Los contemplé, pensando en si volverían. Lo que se me había antojado como un sueño por todo lo que lo rodeaba, se había convertido en una pesadilla, y me moría de ganas de irme de allí.

Escuché las conversaciones que se sucedieron a nuestro alrededor, pero yo seguía con la mirada fija en el lugar por donde habían salido de “expedición” aquellos hombres. Me pregunté si volverían.

Y cuando lo hicieron, deseé que no lo hubieran hecho. Lo que nos mostraron me resultó espeluznante, digno de una película de terror. Noté un escalofrío recorrerme por todo mi cuerpo, y alcé la vista hacia los demás cuando terminamos de ver el vídeo.

Tragué saliva con dificultad, y miré a Abigael tratando de sonreír, y le señalé con el mentón al muchacho rubio que acababa de golpearse para demostrar su teoría.

—Habrá que terminar aceptándolo— murmuré, suspirando de manera profunda, y pensando si el chico se encontraba bien después del golpe.

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19/03/2015, 11:32
Geonwoo Roh

Distraído por las palabras - bueno, y quizás no sólo sus palabras... - de Andrea, ante la posibilidad de revisar las cámaras que ya se encontraban allí, en vez de ir a por la del guía, para cuando Geonwoo ya se dio cuenta, unos pocos acompañaron a Wyatt a por la cámara. Aunque las noticias que trajeron lo dejaron nuevamente sin habla, si bien, tras haberlos mirado, que pudiera levantarse e irse ya no le parecía tan inverosímil...

Y entonces empezaron a ver toda la secuencia de hechos. Lo que más aterraba era el hecho que parecía que allí habían réplicas de ellos mismos como muñecas, y que lo que les pasase a ellas también le ocurría a su... Geonwoo se llevó las manos al rostro, no queriendo ver más este horror, pero al sentir sus manos rozando las cuencas de sus ojos, inmediatamente las apartó, más asustado si cabe.

No fue hasta que Jessie probó de demostrar la ilusión, que la realidad lo golpeó lo suficiente para dejar de estar aterrado y empezar a hacer algo. Geonwoo se acercó y le puso la mano en el hombro. - ¿Estás bien? ¿Te sangra la nariz? ¿Necesitas atención médica?

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19/03/2015, 18:38
Abigael Crownman

Sin tiempo para explicar lo que sucedía a Erika ella mismo lo vio por sus propios ojos, el cubano, como el francés volvió a la vida algo totalmente incomprensible para ella, a pesar de que otros, mas listos en esos temas, parecían querer explicar que eran objetivo de alucinaciones por hongos o partículas de polvo, algo que ella no entendía ni quería. Al poco la expedición para recuperar la cámara se fue y ella recordó lo que dijo una de las chicas, para echar mano de su móvil y comprobar dos cosas, que realmente no tenia comunicación y no podría hablar con su marido ni con las autoridades y que había grabado su móvil en la cueva la noche anterior...

Poco después de terminar de ver el vídeo de su celular llegaron de la cueva y lo que eso desato fue digno de ver, un milagro mas se sumaba a los dos que acababa de ver.
-Esto no son alucinaciones...-Comento Abi al ver como lo que se veía en la cámara se hacia realidad en el campamento y después llego el hombre gris para apuñalar a otra persona, la mujer negra no pudo evitar la sorpresa y callo de culo al suelo sorprendida, con los ojos completamente abiertos.

Las palabras de Erika le llegaron casi como un susurro y ella de manera automática giro la mirada para ver a ese chico porreta demostrar que de ilusión eso tenia poco y asintió a la chica, aun sin salir de su asombro, ella esperaba una expedición a modo de aventura y con suerte llevarse algún que otro recuerdo y útil para su tienda, no una experiencia sobrenatural, ahora empezaba a entender porque algunos eran de ese tipo de espectáculos, lo que no entendía era la mujer que pedía sangre de los resucitados.

-¿C-crees que ellos pueden saber mas que nosotros?-Señalo a Janko, Mona y Sasha.

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19/03/2015, 20:16
Ekaterina Kuztnetsova

Mientras unos cuantos se dirigían de nuevo hacia el túnel para recoger la cámara, Katia se había metido en su tienda y se había cambiado de ropa. Se puso unos tejanos y un jersey grueso, tenía mucho frío y había empezado a temblar. Recogió las cosas y las metió de cualquier manera dentro de la maleta. Se tomó la medicación con un poco de agua y también guardó la mochila. Ya estaba preparada para irse, no quería quedarse ni un minuto más en aquel horrible sitio.

Salió de la tienda, arrastrando la maleta, cuando vio que habían regresado los de la pequeña expedición. No quiso acercarse para ver la grabación, no quería saber nada de todo eso, sólo quería irse. Buscó con la mirada a los dos hermanos y se iba a acercar a ellos, cuando escuchó un grito y todo empezó a temblar. Se desestabilizó e intentó sujetarse a la maleta, pero ésta no soportó su peso y cayeron ambas al suelo. Se incorporó un poco y contempló, horrorizada, las imágenes que se presentaron ante ellos. 

Cuando todo terminó, Katia tardó un poco en reaccionar. Se sentó en el suelo, temblorosa, y miró hacia todos los lados. Ya era tarde, ya no podían irse de allí. En ese momento notó algo húmedo bajando por su nariz, y al llevar la mano vio que era sangre. Sus labios formaron una pequeña mueca de fastidio y buscó un pañuelo para poder limpiarse. Escuchaba varias voces a su alrededor, pero ella todavía estaba como en estado de shock. Bajó la mirada y la clavó en el pañuelo manchado de sangre. Nada de esto es real... Nada de esto es real...