Partida Rol por web

- Ese personaje... ese M esta logrando sacarme de mis casillas. 

Voy a votar por él. No me importa que digan que no puede matársele. Confío en que nuestros ataques bastarán para hacerlo entrar en razón, cuanto menos. 

-M solo reclama atención, si es ignorado se marchara porque dejaremos de ser divertidos para el.- Abrazo a Arya y acaricio su pelo con ternura para que se rejaje, -No te preocupes tanto por quien no se lo merece.-

¡Pero no lo has escuchado!? - Está tan furiosa, que incluso rechaza tu contacto, alejándose de ti para comenzar a andar, no demasiado lejos de la bola de fuego incandescente que proporciona calor donde no lo hay - hace un rato dino "que cosas más curiosas dices, Sorya", o algo así ¡¿Qué pretende llamando la atención sobre mi?! ¿Porqué ha dicho mi nombre!?  y peor aún. ¿Dónde demonios lo ha escuchado ? ¿De qué me conoce? ¡¿Para qué demonios ha venido, pretendiendo ser un mero observador!? 

Ahora ha conseguido que la atención se centre sobre mi. Eso podría significar mi muerte. Va a obligarme a emplear un don que no deseaba usar esta noche, pero ya han empezado las insinuaciones... y por cada persona que insinúa, siempre hay otra que calla. Siempre...

Si está aquí para observar lo ha hecho francamente mal. Si está aquí para lograr que me maten.. ¡No caeré ante el capricho de ningún hombre!

Incluso su voz ha cambiado. Es evidente que está desahogando aquí una fuerza que no desea mostrar de cara a los demás. Es una fuerza indómita, inalcanzable y terriblemente antigua... algo ha cambiado en su cuerpo, quizás más turgente y exuberante mientras grita. está fuera de si y a la vez es exótica, atrayente... pero parpadeas y sigue siendo Aria, la joven Arya, quien guarda sus secretos con el celo de una tigresa sobre sus cachorros. Una mujer de belleza y aspecto sencillo y palabras calmadas que tiembla y tiene miedo cuando las miradas se centran en ella. Es ella. -  No puedo permitirme el lujo de caer.

Me coloco frente a ella, mis ojos frente a los suyos a unos escasos centímetros con una sonrisa jocosa, -¿solo te pasa eso?, si todo lo que pasa es eso...- continuo sin despegarme de ella, -ya veo que no era cierto eso de que no te controlarías aquí dentro conmigo...-

- ¡Basta! ¡No te atrevas a hablarme así! - parece que has conseguido tu objetivo, conseguir que siga cabreándose, pero en lugar de hablár, es el agua quien acude a su reclamo, rodeándola y haciéndola despegar del suelo por un instante. Jurarías que has visto formarse a su espalda unas alas de agua. ¿pero es eso posible?

Chilla, y la onda expansiva te alcanza, lanzándote con violencia hacia atrás, hasta que chocas, con un grujido, contra una de las paredes del refugio, ahora en sombras. 

La bola de fuego se ha desvanecido.

No ves a Arya.

Vuelvo hasta mi el lugar desde que fui despedido por el grito de Sorya algo dolorido sobretodo por lo inesperado del golpe. -Joder que ostia y encima se lleva el fuego....- me siento y a los cinco minutos cansado de aburrirme comienzo a practicar con la espada para entrar en calor y moverme un poco de paso.

Saca un peine y comienza a arreglarse el pelo con tranquilidad mientras os observa.

En la oscuridad, una chispa. La silueta de Arya aparece agachada, y empieza a andar describiendo un círculo y dejando a su paso una docena de fuentes de luz y calor que parecen flotar en el aire sin gravedad, alejando las sombras y el frío por igual.

Cuando termina de describir ese círculo, la temperatura ya ha empezado a recuperar los grados perdidos. 

- Lo siento... espero no haberte hecho daño.

Guardo mi arma clavando la mirada en Arya, me acerco a ella quedándome a su espalda, ¿que sientes que?, ¿porque sientes hacer lo que te pido?.- Tras mis palabras me quedo frente a ella esperando su respuesta.

Ella continua con la mirada un poco perdida, sin mirar al contrario directamente - En el pasado fui una persona mucho más activa y desinquieta. Ahora, sin embargo, soy mucho más calmada, sencilla - hace un ligero mohín con los labios. Hay algo en esa palabra que no termia de gustarle. 

- Y si... se que me lo pediste. Más o menos - Esboza una media sonrisa que enseguida se apaga - pero no me ha gustado reaccionar así, no me gusta haberte hecho daño, y menos siendo mi amigo. Por eso lo lamento. Creo... que lograste desatar una de mis peores facetas, aunque es cierto que me sirvió para calmarme. 

Sujeto con suavidad su cara a la altura de la barbilla con una de mis manos, usando un tono de voz relativamente bajo y suave. -Quieren matarme, controlarme, arrancarme el alma y te preocupa un golpecito de nada.... sonríe y olvida ese detalle que no tiene importancia.-

- Y precisamente por eso lo que yo querría es protegerte y ayudarte, no causarte más daño - Suspira, soltándose de su mano con gentileza. - O quizás sea... que durante demasiado tiempo he viajado sola y me sorprende encontrar a alguien a quien llamar amigo fiel. Incluso Y'aimm parece haber desaparecido, arrastrado por las mareas. 

Quizás tenga que resignarme a no encontrarlo. Solo quedaba un hombre entre los participantes que podría ser él, pero al escucharlo hablar... no, esa no era su voz - Suspira y cierra los ojos un instante antes de abrirlos de nuevo - Quizás sea cierto que amó tanto el sacrificio de Eír que no ha encontrado motivos para regresar a la vida. 

Se pasa un dedo sobre los ojos, secándolos antes de que la emoción la embargue - Perdona. Es... una tontería, ya lo se. Creo que solo estoy sensible. ¿Sabías que él jamás se fijó en mí en realidad? Amó más el último sacrificio que hiciera Eir, con el que permitió regresar a la vida a los enamorados, y por lo tanto también al mismo Y'aimm, que cualquier aprecio que pudiese sentir por mi durante toda la batalla del Caos Planar. Incluso dudó de mi, pero no me importó, y lo perdoné. Yo había llorado por su muerte, y cuando regresó, solo tenía ojos para una mujer que ya estaba muerta - Junta las manos frente a si - Mis esperanzas eran estúpidas...

Pero casi mejor pensar en otra cosa - Suspira antes de mirarte nuevamente. - ¿Puedo preguntarte por quienes son los guardianes del bosque? ¿Alguno de ellos ha confesado o crees que pueda ser un seguidor de Zyba?

-¿Tanto añoras ese recuerdo?, me parece muy bien que luches por el recuerdo de Y'aimm. Solo te puedo decir que tus fuerzas no deben mermar si algo te importa y que primero hagas una lista de prioridades, porque de lo contrio la confusión puede nublar tu juicio.-

Alzo su barbilla dejando su rostro erguido, -así debes ir siempre, con la cabeza bien alta con respecto a tus decisiones y cada vez que necesites expresarte estaré aquí, pues nuestros caminos por ahora nos guian al mismo final.- De momento prefiero aclarar esto antes de continuar con el tema de los guardianes del bosque, cuando me asegure que esta mas animada trataremos ese tema.

Quizás le hizo gracia el gesto de que él le pidiera que caminase con orgullo, quizás solo fue agradecimiento, pero la cuestión es que aquello la hizo sonreír. 

Con naturalidad, ella cruza los brazos, hirguiendo los hombros sin perder esa chispa en la mirada.

- Mis prioridades son algo que tengo seguro. 

Lo primero para mi es un deseo egoísta. Es mi hijo. Por encima de que él sobreviva, no hay nada. Incluso daría mi vida si supiera que con ello él va a sobrevivir. 

Lo segundo será Zyba, o mejor dicho, el objetivo de defender a Zyba. Nada podría hacerme cambiar eso, por muchas ataduras que quisieran lanzarme.

Mi tercera prioridad es proteger a las personas que me importan y que están del lado de Zyba o son afines al Caos. 

Muy cerca de la tercera, está la cuarta, destruir a los asesinos nocturnos y a Rakedus. No soy alguien de combate directo, por lo que pongo antes mi deseo de proteger lo que merece ser protegido antes que destruir a sus opositores. 

Claramente, esos son mis objetivos y prioridades, pero llevará tiempo.

Y mientras transcurre ese tiempo, hay cosas que me gustaría hacer, pero que no son tan importantes. Encontrar a Y'aimm y hablarle de mi embarazo, conocer su opinión al respecto, sería una de ellas, pero si lo encontrase y hubiese elegido un camino contrario a cualquiera de los puntos anteriores no me temblará el pulso a la hora de acabar con él. 

En sus ojos hay determinación. Como siempre, Arya no oculta nada. La sinceridad es sencilla.

Con mi dedo indice dibujo la sonrisa que le surge en el instante inicial. Esa es la chica que quería ver yo,  guarda estos sentimientos que tienes ahora llévalos contigo cuando el desanimo te invada. Tras mis palabras la miro, por curiosidad, no me contaste como apartaste las miradas de los guardianes del volcán del malvado Demónimus.

- ¡Ho! ¿eso? no fue gran cosa. En realidad hasta yo me sorprendí de que ninguno se cuestionase nada. 

Les dije que sabía que Demónimus no eras tu, pero que aún no podía explicar cómo era que lo sabía, porque aún necesitábamos entrar en confianza entre todos antes de compartir ciertos secretos. - Encogiéndose de hombros - No fue nada más. 

Temía que pudiesen votarte y confío en la mayoría de ellos, por lo que la posibilidad de que tu poder se desatase en su contra no me agradaba. No les he dicho nada más ni parecen interesados en preguntar nada. Simplemente lo han aceptado.

Tampoco son muchos. Comparto el Volcán con otras 4 personas, nada más.

¿Y tú?

Me interesa saber con quienes compartes la guarda del bosque y si alguno ha dado señales como para pertenecer a Zyba, para empezar a completar la lista de las personas a las que podría invitar a compartir este espacio.

Nosotros somos 5, ahora cuatro.  Troolshy, Isar'i, Riennot, Gynk y yo. De todos Riennot da muestras de ser de Zyba o Rakedus  ¿y en el volcán?. 

¿Gynk? pero acaba de ser ajusticiado. ¿sigue con ustedes aún? que curioso... nuestra presencia aquí trascienda incluso a la muerte. ¿Es posible entonces que tu permanezcas aquí aún si cayeras? Eso es esperanzador.

Sobre Rienott, hay algunas cosas que ha dicho que me llevan a pensar también que podría estar con Raquedus, entre ellas el hecho de que que haya ido a las profundidades del mar y allí perdiese su alma... y el que cuando empezamos a enfadarnos algunos, parecía que disfrutara. dijo algo así como "dejarme ver vuestra profundidad"

Quizás sea una tontería, pero a mi eso no me resultó divertido.

En el volcán estamos Neheri, Nuraus, Pluma y el hada de frío que apenas ha hablado No logro recordar su nombre... Sneav, eso era :)

Gynk esta muerto, pero si vuelve a la vida continuara siendo un guardián del bosque, la muerte no hace que dejemos de ser guardianes.....lo que si me encargue de filtra a los guardianes que quien me mate me llevare a uno de ellos conmigo, si hay un asesino entre los nuestros me interesa que lo filtre para que se lo piensen dos veces y  después me encargue de hacer mi declaración publica de odio a Rakedus, tengo curiosidad de ver el resultado de mi trampa cuando ya me han corrompido... comienzo a reír divertido.

No deberías revelar que te llevarás a uno de los que te maten. O al menos, eso es lo que yo pienso. 

Si lo haces y hay alguien infectado por la colmena, tu trampa perderá efectividad, porque dejarán que sean otros quienes te maten, en lugar de hacerlo ellos. 

No reveles demasiado.