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HLdCn: El Legado de Caín - Oldland : Diarios Perdidos – I

Un Alto en el Camino

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11/04/2016, 17:07
Yaiza Gray

El haber prolongado la extensión de la vida no te conduce a un aumento de felicidad; más bien al contrario, te arrastra de un modo más evidente a la esencia de la existencia: el dolor, el sufrimiento, la desesperación. Sólo podrás liberarte de la condena cuando te encuentres dispuesto a asumir aquello que llaman: destino.

Volví al lugar del que brevemente me había escapado. La liberación del dolor, seguida del frío y la soledad me volvieron a hacer presa, un producto de su propiedad.

Llevé mis manos hacia la cabeza, donde perdí los dedos de esta por mi pelo negro, expresando desesperación en medio de aquel campo lleno de niebla, encontrándome semi acunada en el suelo sin quererlo. No podía evitar sentirme enjaulada, estúpida por no haber caído antes en quién había sido mi asesino... La pesadumbre quedaría en mí por haberle tratado bien y mal viviría en aquel sueño perpetuo, que poco a poco convertía mi alma inicial en mero polvo, al final. Atrapada en un tiempo casi irreal, me recompuse levantándome y acercándome al grupo con seriedad. 

Allí los vi a todos, asesinos e inocentes, hice un repaso con los ojos, en silencio. Me fijé en Alastor, pues fue el que primero se pronunció y el cual ya estaba con su amante pelirroja.

Cerca del fuego: me tumbé. No quería hablar a no ser que me preguntaran, la rabia me invadía. 

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11/04/2016, 20:14
12 Muerto - Dyehuty

Cuando llegan nuevos, inclino la cabeza a modo de saludo, aunque puedo notar que cómo se toman el ingresar en este lugar una y otra son es bastante dispar. Y entonces vuelvo a acomodarme.

No se está nada mal... aunque parece que a la muerte le está entrando prisa.

Mascullo en voz alta con aire pensativo.

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11/04/2016, 20:25
04 Expulsado - Katalina Brandr

"Bienvenidos..." dijo mientras hacia malabares de con una botella de cerveza que hacia levitar y derramar su contenido con cuidado para que terminara en su boca. "Que refrescante."

"¿Tal vez no me lo contestes pero los que estan adentro saben donde estan?" pregunto directamente a la del baston ante sus ultimas palabras de un espacio que compartiando. "¿Supongo que tampoco ven la maldad que puede estar en ello?" pregunto con una sonrisa como si encontrara algo gracioso en eso. "Bah no importa porque todos los supuestos culpables estan muertos y siguen atrapados."

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11/04/2016, 22:13
09 Muerto - Daeron Markov

Saludo a Yaiza moviendo los dedos mientras fumo de mi pipa de opio con una expresión feliz. -Hoooooola. Pareces un poco alterada. ¿Estás enfadada por el tema ese de que te matarán y tal?- Sonrío y muevo la cabeza a un lado. - Morir por segunda vez es siempre más dulce, espero que lo hayas disfrutado.-

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12/04/2016, 02:47
Olenna D

Cuando una vez más la noche llega a la cabeza de Olenna en este lugar la luz mengua ligeramente y el fuego pierde parte de su calor. Sin embargo al amanecer las cosas vuelven a ser como antes, y con los primeros rayos de luz aquí esas esquirlas plateadas que últimamente mostraban ciertos acontecimientos vuelven a tomar forma sobre la hoguera. Así los presentes pueden ver el estado de cada cuerpo al mismo tiempo que Olenna los ve, mientras ella se mueve despacio por el lugar.

Un instante más tarde, para cuando los recién llegados se unen a ellos, esas mismas esquirlas se han disgregado ya, desapareciendo como si nunca hubieran estado ahí.

Los ojos de Olenna, su gesto y sus palabras reciben a los que acaban de llegar, pero ella permanece aguardando un instante, como si faltase alguien: la negra. Sin embargo no llega a decir nada. Su rostro sí refleja algo de inquietud, pero no es de esas cosas que uno ponga en voz alta.

Cerca, el falso rey estaba sentado sobre un sillón igual a aquel en que los había recibido, y el de las cartas tenía a escasos centímetros un trozo de cuero con un surtido de drogas, además de bebidas y algo de tabaco. Olenna asiente a la chica del lobo cuando esta la saluda, aunque por unos segundos se queda mirando a Yaiza. Sin embargo al escuchar la voz de la primera sus ojos la buscan.

—El lobo está —le dice antes de hacer un gesto con la mano—. Se habrá entretenido, o estará meando un árbol, pero está —asegura totalmente convencida. No es sólo que lo sienta en su cabeza, sino que si incluso el enorme paquidermo del hombre elefante ha llegado al lugar, el lobo de la pelirroja no iba a ser menos.

Después de eso mira a la mujer globo, y por una vez lo hace como si ella hubiera dicho algo con sentido. Asiente con la cabeza.

—El sitio es malo —asegura—. Alguien lo ha visto. Intenta ser bueno, pero tiene sombra y amenaza. Creo que sé quién nos lleva. Tengo que comprobar.

Es tras esas palabras cuando Olenna de nuevo se toma un instante. Las cosas tienen su tiempo, y su cabeza cada vez está más llena de gente. Se acerca entonces a Yaiza.

—No creo que estés tiempo —enuncia. Su tono es hosco, como si más que intentar consolarla estuviera señalando algo que cualquiera daría por hecho.

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12/04/2016, 08:57
Smel

Llegan Deidre, y también Yaiza... ambas azotadas por la vil noche de Oldland.

- Lo suponía, Nimay – digo entonces - Me vino a la cabeza que conocías la posición de Vyka con Sylvia, desde pronto. Solo eso – mas o menos. Resumo al hombre del elefante, aunque resto importancia apretando los labios. Atiendo, pero a veces me veo como una atrevida tonta esférica por un saco de sencillos motivos. 

El meador de colonia vuelve a ignorarme como un pequeño acto ritual, pongo los ojos en blanco y miro a Quón después – A esta semilla sí que no le gustamos – le susurro. Aunque por y desde su parte, el hombre del desierto sí me permite saber lo que pregunto. – Gracias, Dyehuty. Entiendo – .

Por lo demás vuelvo a sentar mi trasero con las piernas a un lado, de cara a la hoguera. Atiendo a Olenna mientras mi pesado cocodrilo vuelve a hacerme esa media luna desde mi espalda - El circulo no es bueno - pienso atusando mi flequillo hacia un lado, una y otra vez – ¿De quien sospechas, Olenna? -. Malditos trucos de Oldland.

 

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12/04/2016, 11:23
Yaiza Gray

Escuché al árabe pero no dije ni hice nada, ya que me quedé observando a Katalina cuando nos dio la bienvenida. Mi gesto cambió. Una muestra más de mi pasado me azotó tirando de recuerdos, trayendo consigo imágenes de una temporada de ilusión y esperanza.

Sacándome de mis pensamientos me habló Daeron, aquel chico que siempre lograba llamarme la atención - No me molesta volver aquí, no me enfada morir...pues poco a poco entiendo que éste era el lugar al que pertenecía desde mi nacimiento - esbocé una amarga sonrisa - lo que me hace estar así es haber caído en la benevolencia tantas veces con personas que no eran reales - comencé a reincorporar mis piernas para sentarme en dirección al Grovehn - siento no haber aprovechado mi estancia en la tierra...principalmente- eran demasiadas las cosas que se habían quedado sin hacer - pero, al menos, he descubierto a dos más de los tuyos, mi viaje no ha sido en balde y mi muerte tampoco, pues he traído compañía. 

Sintiendo de pronto el revolotear de mi Vencejo Real, levanté la mirada para dedicarle una sonrisa más tierna. Seguidamente me fijé en Olenna - tranquila, no deseo volver, sólo que mates a Oliver: él me trajo aquí.

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12/04/2016, 12:36
Director

Y mientras los caídos seguían conversando, la imagen de Smel se difuminaba, alejandose junto a su cocodrilo de aquel lugar...

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12/04/2016, 15:25
Olenna D

Olenna se encuentra a punto de contestar a la chica del cocodrilo cuando esta desaparece. La mira partir en silencio, valorando si darle su respuesta o no en el lugar donde todos se reúnen. Después escucha a Yaiza ladeando la cabeza, poniendo atención en lo que ella dice y acaba por sentarse a su lado. Las últimas palabras de la mujer le sacan un asentimiento.

—El negro —repite para mostrar que lo ha entendido. Luego se queda mirándola a los ojos.

—No diré todavía —enuncia—. He contado. Si el sitio es malo, pronto estamos todos dentro. Hoy el dueño de la cabeza, mañana el negro.

Entonces guarda unos segundos de silencio, como si algo estuviera dándole vueltas a la cabeza.

—No has vuelto —dice luego al hombre elefante—. Podía ser, pero no. —Entonces se encoge de hombros y le mira durante un instante—. ¿Qué dice la rueda?

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12/04/2016, 15:57
13 Muerto - Deidre

Poco tardé en distinguir una sombra que se acercaba rápidamente, era Tyr y las palabras de Olenna solo certificaban lo que mis ojos estaban contemplando. Aquella mirada que compartíamos, su negro y reluciente pelaje,  ese andar tan especial ha logrado que sonría emocionada.  

- ¡Tyr! - lo llamo con alegría. El lobo reduce la velocidad ante mi voz,  huele en el aire y camina. Se detiene frente a Olenna,  agachando la cabeza en señal de respeto. Luego avanza hasta colocarse entre Alastor y yo,  apoyando su cabeza en el Grovehn como una clara señal de empatía.

-Precioso, un gran trabajo has hecho. Lo siento mucho. - expreso acariciando su pelaje como siempre. Solo que todo aquel momento de reencuentros entre bestia y humano,  termina cuando Olenna inicia la conversación.

- ¿He revivido a Smel?  Curioso. - fundamento luego de recordar aquella elección en el limbo. No obstante,  de nuevo comenzaba la ronda de sospechas y me transportaba a mis días en los senderos de Odland. 

Tenía mis dudas y más aún luego de morir. - Te dije Olenna,  mi muerte estaba cantada. Ahora sabrás la verdad, era una protectora pero evidentemente las semillas me vieron como un peligro. Primero intenté salvar a Nimay y por la noche lo mataron,  desde el momento de elegir hacia conexión con el elegido y así fue como descubrí que era él. - expreso tras dedicarle una mirada al implicado y prosigo. 

- También intenté protegerme pero aquí estoy...  Tengo mis sospechas: Noi, Fiona y no sé  si Vyka. Ya sabes que ese lugar es peligroso, ojalá pudiera ayudarte desde aquí, aunque te pediré una cosa... Cuida a Theora, ella puede estar en la mira ahora. - termino por decir bajando la mirada. No creía en nadie de los que estaban reunidos en Odland, era mejor estar muerto. 

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12/04/2016, 16:17
Nimay Radhav

Nimay y Haathee detuvieron sus pasos para contemplar a los que llegaban y a la que se marchaba. Ambos, hombre y elefante, se encontraban a un par de metros de la hoguera, justo en el límite donde el frío de la muerte se hacía demasiado presente. 

Desde ahí escuchó a Olenna dirigirse a él y le dedicó una pequeña sonrisa al mismo tiempo que se encogía de hombros.

—No he vuelto —convino, pero matizó algo más—. Todavía. —Después hizo una pequeña pausa antes de seguir hablando con tono pausado. —La rueda dice lo mismo. Ahora es ella la que está esperando por mí. 

Finalmente su mirada fue atraída por la pelirroja que había llegado esa noche y cuando ella le nombró, el hombre frunció el ceño, extrañado.

—No sé de qué estás hablando —le dijo al mismo tiempo que los dos pares de ojos oscuros se detenían en ella—. Nunca has contactado conmigo y desde luego si me estabas protegiendo a la vista está que no lo hiciste muy bien. 

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12/04/2016, 16:28
13 Muerto - Deidre

- No te ofusques Nimay, intenté protegerte con mi don y fuiste asesinado por la noche. Simplemente eso,  creo que en vez de tomártelo como una ofensa deberías al menos valorar el gesto que tuve contigo. -replico en un tono sereno luego de intercambiar miradas con Alastor. 

- Jamás estuve en tu contra,  ambos quisimos proteger a la niña y nunca he sido un peligro para Odland... Bueno,  las semillas se sintieron tocadas. - sonrío ante mis palabras sin quitarle la mirada,  no buscaba una discordia con aquel hombre que había intentado salvarle el pellejo. 

Solo que debía aclararle algo más. - No pudiste saber de mi porque cuando estaba conectando contigo moriste. Así que solo quedó en nada... - me encojo de hombros e intento que vea a través de una mirada, que de mi parte no hay mal rollo con él. 

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12/04/2016, 16:46
Yaiza Gray

Olenna se sentó a mi lado; la miré y le sonreí ligeramente. Se colocó en mi hombro el ave - tráelo cuando puedas, él es semilla...merece perecer - respiré hondo, deseaba bañarme en su sangre. Mi hambre interior gritaba por dentro y aunque en aquel lugar lo escuchara más flojo, permanecía conmigo, siendo parte de mi - Analiza sus actos para conocer algo más acerca de ellos - miré sus ojos dejándole a cargo aquella ardua tarea.

Sin querer meterme en las conversaciones que comenzaron a tener, agaché la cabeza mirando mis manos.

Sin embargo, volví a escuchar la voz de Deidre. Después miré a Nimay - ella nunca te ha protegido Nimay, lo dudo...sé que no es ella la que ha llevado a Smell de vuelta a la vida - mis ojos azules se fijaron como una flecha en los del chico, pues conocía bien que la chica del cocodrilo volvería a la vida por obra y gracia de otra persona. La chica del lobo le engañaba - yo la he traído aquí, la he guiado hacia la muerte porque todo lo que dice es mentira, ella participó en vuestra muerte, ahora sí que estoy segura: es semilla.

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12/04/2016, 17:41
Olenna D

Con los ojos en la chica del lobo desde el mismo momento en que exclama, Olenna escucha sus palabras. Frunce un poco el ceño cuando afirma haber revivido a la chica del cocodrilo y no tarda en corregir su error.

—No has revivido a nadie —asegura—. Las luces de ella siguen apagadas. No han hablado. Las luces a veces traen vida, a veces no.

Un instante más tarde, cuando ella prosigue hablando, la Grovehn escucha. Sus pupilas están fijas en la Eve y ligeramente dilatadas, y cuando la otra prosigue ella no tarda en responder.

—Los que dices no son semillas —enuncia—. Si dices quién nos lleva, creo que es la que grita. Ella o la de la cara pintada —asegura mirando durante un instante a Yaiza, por si ella sabe más. Después habla al hombre elefante.

—No te dije —comienza con una breve sonrisa antes de señalar con el bastón a la chica del lobo—. Ella te confirmó como semilla. A lo mejor por eso no volviste. —Luego guarda un instante de silencio, tranquila, y finalmente habla con gravedad—. Buen momento para que deje de esperar.

Finalmente guarda silencio algunos segundos antes de asentir a las palabras de Yaiza.

—Morirá —promete—. Murió el de las cartas, murió la mujer globo y los demás. Morirá. Antes miraré. Escucharé vivos, escucharé muertos y escucharé piedra. Luego morirá. —Después de eso guarda silencio de nuevo antes de mirarla de nuevo a los ojos—. Dos cosas —dice a Yaiza—. Una: la niña cree que la de cara pintada nos lleva a ese sitio. ¿Sabes si es ella? —Luego hace un gesto hacia el hombre elefante—. ¿Confías en él?

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12/04/2016, 18:00
13 Muerto - Deidre

- Error...  Dos oportunidades has tenido Yaiza de averiguar las cosas y marcar la diferencia. ¿Cuál es el resultado? Nada, Olenna sabe que he estado colaborando para detectar a las semillas ya que puedo hacerlo a través de rastros. Así  que por favor, dejemos las acusaciones para los vivos que en verdad es lo que importa. ¿Me llevaste a la muerte?  Gracias mujer,  ahora no tengo que protegerme de las semillas y del otro bando. Me salvaste... Aunque le quitaste la posibilidad al resto de que yo siguiera buscando rastros. Hay semillas asesinas, semillas que protegen y semillas que ni siquiera asumen que lo son.  - era la realidad y lo manifiesto a través de una actitud segura,  mirándola a los ojos muy consciente de cada una de las palabras. - Matas a la que protege y dejas a las asesinas. Buen trabajo chica. 

Ahora ya cambiando la dirección de mis ojos,  se posan en Olenna. - Antes de llegar aquí, me dieron a elegir. ¿Que significa?  Si no reviví a Smel, entonces... ¿Qué hice? - pregunto intrigada. Era ignorancia pura. 

- Por cierto Yaiza...  - la señalo. - Yo no he matado a nadie por las noches y de día saben que si, al igual que tú y todos los presentes. Así que es mejor,  hablar cuando tengas conocimiento de causa. Además no estoy para tener disyuntivas con uds,  no tiene sentido. Estamos muertos. - afirmo ya en un tono serio. En verdad no tenía ganas de escuchar lo mismo una y otra vez. 

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12/04/2016, 18:34
Nimay Radhav

Nimay y Haathee escucharon en silencio. El hombre cruzando los brazos sobre su pecho. El elefante con la trompa laxa y estirada. Escucharon y los ojos de ambos se deslizaron de una a otra de las mujeres que hablaban. Deidre, Yaiza, Olenna, Deidre de nuevo. 

—Así que... Según tú... ¿Tengo que estarte agradecido porque mintieras sobre mí con esa supuesta conexión que sólo tú conoces? —preguntó, mirando a la pelirroja con incredulidad—. Creo que Yaiza tiene razón. Todo lo que sale de tu boca son mentiras. Si eres una de esas semillas que además protege a las otras semillas... ¿Por qué ibas a querer ayudar a los que deberían ser tus enemigos? Antes me fijaría en aquellos sobre los que callas, pues probablemente serán los que tratas de ocultar.

Chasqueó la lengua, molesto, y los dos pares de ojos abandonaron a Deidre para dirigirse a Olenna.

—Todavía es pronto. La rueda puede esperar un poco más. De noche soy más útil. 

Entonces hizo una pausa y empezó a girar para ponerse de nuevo en movimiento. La paciencia era una de sus virtudes, pero la estaticidad no le agradaba. Sin embargo, antes de hacerlo volvió a voltear su cabeza buscando a la chica del palo.

—Llevo tiempo aquí. Dime, ¿sobre quién debería hablarme la rueda?

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12/04/2016, 18:55
Olenna D

Olenna espera durante sólo un instante la respuesta de Yaiza, pues antes de que esta llegue las palabras de la chica del lobo captan su atención. Su mirada la busca y ladea la cabeza, aunque no tarda en responder a lo que dice.

—¿Resultado? —pregunta como si le extrañase esa palabra—. Yaiza vio al de las cartas. Yaiza vio al negro. Tú seguiste el rastro de un elefante. Resultado dos uno. Gana ella —explica satisfecha, dibujando al final una sonrisa.

—Es verdad que ayudaste. Yo te dije «cuando no tengan asesinos irán a ti. Morirás. Viva mejor que muerta.». Yaiza no tenía asesinos. Moriste. Si no hubieras ayudado antes a semillas, estarías bien. Pero está bien —dice antes de ladear la cabeza una vez más—. ¿Quieres algo? Él tiene sillón —enuncia señalando al falso rey—. Él tiene drogas —ahora apunta al de las cartas y luego pasa a la mujer globo—. Ella cerveza. Puedes tener.

Después de eso permanece un par de segundos callada antes de responder a una de las cuestiones que la pelirroja ha planteado.

—Lo que hiciste es encender una luz —explica—. La luz de alguien. La de él, creo —enuncia haciendo un gesto con la barbilla hacia el falso rey.

Y tras esas palabras Olenna observa una vez más a los presentes, repasando a todos con la mirada como si quisiera saber qué esconden sus almas. Las palabras del hombre elefante llegan, pero ella tarda varios segundos en mirarle para contestar.

—La gente no entiende —explica—. No escuchan y no entienden. Cada uno, cada uno, pero son idiotas. Quieren ir por semillas hoy. Pero si van por semillas podemos acabar todos dentro. —Niega con la cabeza—. De noche más útil, pero si miras bien al atardecer también.

Luego se queda mirándole un instante, pensando en sus palabras. Finalmente una media sonrisa aparece en su rostro poco a poco.

—Pregunta a la rueda de mí —le dice—. Si dices mi secreto, creeré que sabes de otros. Si no lo dices, encontrarás el palo —ladea entones la cabeza—. ¿Bien?

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12/04/2016, 21:13
08 Muerto - Aisha

Nuevos muertos llegaban y viejos muertos marchaban como si de una macabra broma se tratase. Y con ellas nuevas conversaciones vacuas llegaban a este frío lugar. Pero de entre todas ellas al fin Olenna dijo algo coherente. Bien al parecer a despertado y al fin es capaz de ver mas allá de su propia nariz.

Asiento complacida ante las palabras de Olenna. –Me alegra escuchar que piensas tomar iniciativa ante la secta. Así que piensas que es Raffael o bien la que grita, Bethanny, os réferis a ella… arqueo una ceja dubitativa. - Sigo pensando que la causante es la niña pero bueno… Me encojo de hombros.

- Propongo que utilicéis a las semillas para tal propósito. Observo seria a los presentes. - Si han de matar que al menos sea en beneficio de todos…

- Elige a la más fácil de acusar para el linchamiento y después antes del anochecer anuncia que cabe la posibilidad de que sea la otra o que operen en dúo… o cualquier otra cosa ya se nos ocurrirá algo… Alega que si las semillas no actúan al caer la noche todo estará  perdido sonrisa rara supongo que la semilla o las semillas tendrán dos dedos de frente.

Dicho esto chasco mis dedos y Blanca Noche emprende su etéreo vuelo hacia una fantasmagórica rama. Mientras vuelvo a sentarme cerca de la hoguera para contemplar dubitativa sus danzantes llamas. Llevo una de mis manos hacia la llama durante unos segundos antes de retirarla y contemplar sin asombro que nada sucede. –Siempre hace frío, siempre hace frío… sin apartar la mirada de la hoguera Bonito Vencejo.

- Por cierto, Nimay creo que deberíais de mirar en la Niña, su naturaleza puede a ver sido alterada… nunca se sabe lo que un loco depara... aunque podéis mirar en Olenna si queréis pero de momento eso no ayudaría.

 

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12/04/2016, 23:33
09 Muerto - Daeron Markov

Sonrío mientras fumo, con las piernas cruzadas y la espalda apoyada en un tronco, sin hacer mucho por moverme. -Bueno, al menos parece que llevamos la muerte bastante bien.- Me quito la pipa de la boca para señalar a Yaiza, mirandole a los ojos. -Pero no te arrepientas de nada de lo que has hecho en vida. Tus decisiones son tuyas, y te las llevas a la tumba.- Pienso un poco, y me río de lo apropiadas que son mis palabras en la situación en la que estamos la gente de este grupillo. -No se si podreis decir lo mismo que yo, pero yo he vivido mi vida al máximo. Y pienso pasar mi no-vida de la misma manera.

Vuelvo a poner la pipa en mi boca y me giro hacia Olenna. -Dicho esto, ¿sería mucho pedir música y cocaina?- Sonrio- Como un pequeño favor, por los viejos tiempos. 

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13/04/2016, 00:19
Olenna D

—¿Bethanny? —pregunta Olenna con el ceño fruncido al escuchar hablar a la chica del búho. Luego niega con la cabeza—. La del martillo no grita.

Después de eso deja que siga hablando, y un instante más tarde pasa a informar.

—Yo no acuso sin saber —dice—. No acuso a ninguna de las dos. Otros lo han hecho con la de cara pintada. La niña y el viejo. Alguien ha pedido el nombre del asesino para matarlo ahora, antes del atardecer. Lo he dicho. Este atardecer muchos miraremos a la de cara pintada. Si nos siguen llevando, la siguiente será la que grita.

Luego se queda unos segundos en silencio, mirando a la mujer con expresión atenta. Finalmente, con sus últimas palabras, se encoge de hombros.

—Ayudaría a creer que dice verdades.

Después de eso escucha las curiosas peticiones del chico de las cartas y ladea la cabeza, sin terminar de entender por qué pide una de las cosas.

—¿Música? —pregunta extrañada, esperando más detalles antes de hacer algo al respecto.