Partida Rol por web

Luego de dos espectaculares impactos a la planta intento ver mi herida que se notaba en mi brazo, me ardía un poco pero lo mas increible era que estaba un poco atontado debido a esto y me sentía mareado pero quería saber que mas podría esconder la profesora.

Quiero ir al invernadero dos profesora. Y salgo con mi mano en el brazo esperando que me dejara de doler un poco.

Johan llego al mismo tiempo que sus compañeros Mérida y Gabriel salían del invernadero, al entrar vio como en cada mesa había una planta puntiaguda, Katherin lanzó un hechizo de impedimenta, pero falló estrepitosamente su hechizo, Arcturus en cambio consiguió hacerlo al momento

- Muy bien Arcturus puedes marcharte, vamos Johan intentalo. Katherin, vuelve a repetirlo

lo intente otras tres veces y aun así el hechizo siguió sin funcionar....

-lo siento, profesora Sprout....debéras que lo intento. no se porque este hechizo se me resiste tanto...-dije a punto de echarme a llorar.

Observé la escena, e intentando reponerme de los mareos, ayudé a levantar a mis compañeros que se habían caído al piso y a los que estaban heridos. Ante todo había que guardar las apariencias. Miré a la profesora y le dije;

-A mi también me gustaría ir al invernadero número 2 profesora. -

Dije, mirándola.

 Había salido ileso de la planta y todo termino por lo menos por ahora, me levanto sabiendo que había efectuado bien el hechizo y ayudo a los demas a levantarse. Creo que esto fue mucho para la primera clase pero... Vamos al segundo invernadero. Estaba en perfectas condiciones como para no ir.

Clementine limpió el sudor de su frente. Estaba ilesa, pero por consecuencia exhausta. Había logrado esquivar a la planta hasta ahora pero tenía que acabar con ella. Sin embargo, en ningún momento dejó de mantener la cabeza en alto y de sostener firmemente su varita.

-¡Incendio!- exclamó más concentrada que nunca, con su varita apuntando a la tentacula venenosa. Funcionó, unas impresionantes llamas de fuego fueron expulsadas desde la punta de su varita.

Ante los elogios de la profesora Allison esbozó una gran sonrisa, sentía un pinchacito de orgullo sabiendo que lo había hecho bien, y quería seguir mejorando. - Gracias profesora. - contestó feliz.

Eso sí, le preocupaba el estado de algunos de sus compañeros, parecían muy magullados por aquellas terribles plantas, pero le aliviaba pensar que la enfermería de Hogwarts podría tratarlos sin problemas.

- Yo también iré al Invernadero 2, profesora Sprout. - dijo acercándose a Thomas y Richard. - Vamos allá. - añadió con firmeza y lista para la siguiente prueba.

-.planta de mierda-. Exclamo Alexander con una mezcla de odio y placer-. Yo también ire al siguiente invernadero-. Se dirige tranquilamente hacia la profesora, mientras llama a su murciélago, que estaba escondido en su capucha, para que le limpiara las heridas que tenía en el rostro.

Estaba rabiosa y lo peor de todo era que la planta parecía estar encarnizada conmigo. La ira me estaba llevando por mal camino y era mejor curar mis heridas ya que estaba atontada y sin aliento. Mis fuerzas estaban agotadas pero elijo seguir un poco más. 

-Voy al invernadero 2. - testaruda en la máxima potencia,  no quería rendirme a pesar de las condiciones. 

Sonrío y asiento a la Profesora.

- Por supuesto que voy al Invernadero 2. - afirmo ayudando a Arietis a dirigirnos hacia allí.

Llego a clase con muchísimas ganas, pues la herbología me interesa mucho. Observo todas las plantas que puedo antes de que la profesora nos mande prestar antención.
 

Por lo visto la rapidez no fue suficiente para evitar los tentáculos y terminé seriamente herida. Me froté la mejilla y salí del invernadero - me voy a la enfermería a curarme las heridas.

Invernadero 2

Entrais al tiempo de ver como la profesora Sprout consuela a Katherin

- No te preocupes pequeña, seguro que te saldrá pronto, vete a descansar, en la próxima clase saldrá mejor- dice intentando animarla

- Repasare lo dicho anteriormente para vuestros compañeros que no estaban. Los Arbustos puntiagudos son arbustos con espinas que crecen fuera de ellos. Se puede disparar estos picos en los seres humanos, pero pueden ser destruidos con el hechizo impedimenta. El Encantamiento Impedimenta es un hechizo que impide el movimiento hacia adelante, bien ralentizando su movimiento, o inmovilizando por completo durante un corto periodo de tiempo. Usareis ese hechizo con estas plantas. Así que repetid conmigo, ¡Impedimenta!

Cada uno ponganse delante de la planta, si consiguen pararla antes de que les hiera pueden irse

Después de disculparme con la profesora, salgo del invernadero 2 para que los demás sigan con la clase.

Llegué al siguiente invernadero un poco más cansado. El veneno me estaba haciendo efecto, por lo que pronto debería ir a enfermería. Tenía cierta rabia contra lo que me había hecho la planta, por lo que cuando la profesora nos contó el hechizo, vi a la planta y conjuré inmediatamente, como si hubiera sido un ataque sorpresa, aunque no sabía si lograría ser más rápido que ella;

-¡Impedimenta! –

Y a la vez que un aura negra cubría a la planta, esta se quedaba sin capacidad de moverse. Sonreí, y tal como había anunciado la profesora, el que lo lograba antes de que la planta le hiciera daño podría irse, quería comprobar si lo lograría…

Samantha había decidido ir al invernadero 2, pues no mostraba ninguna muestra de dolor por las heridas de la planta. Ciertamente le había hecho cortes, pero sus ropas de gran calidad hacían que se viera bien y de buena manera a pesar de estas heridas. Observó a la planta, y levantando su varita no muy rápido, observó al arbusto y dijo;

¡Impedimenta!

Y así fue como de su varita salió un brillo de color oscuro que atravesó a la planta, y esta se movió poco hasta quedar sin poder moverse. Samantha sentía como su conjuro había resultado a la perfección, por lo que se quedó mirando a la profesora con seriedad, esperando a que le diera su aprobación para retirarse de la clase.