Partida Rol por web

Aquel aula era lo que yo estaba buscando, así que me acerqué a la mesa que debería ocupar el profesor en caso de que lo hubiera y extendí mi libro de hechizos para echarle un vistazo. Estaba en duda si seguir practicando los que ya había aprendido para mejorarlos o ponerme con alguno nuevo.

Pasé página a página y una idea acudió a mi mente. Después de todo lo que había pasado quizás necesitase aprender algún hechizo que me sirviera en caso de que alguien me atacara, aunque no veía motivos para que algún alumno se le ocurriera tal cosa, y estuve en duda entre practicar el desmaius o el flipendo, pero llegué a la conclusión de que estando sola sólo podría practicar el flipendo.

Tenía bastante tiempo por delante así que la primera hora me dediqué a practicar y perfeccionar el Accio y el resto del tiempo me puse con el flipendo intentando tirar el libro de la mesa. Aquel hechizo era algo difícil.

Accio se te da cada vez mejor y Flipendo, aunque más difícil, tampoco se te da mal. Seguramente tras haber utilizado la varita varios días ésta se sienta de manera más natural en tu mano. 

Por la ventana te parece ver a Zane, en los jardines.

Llevaba un par de horas practicando aquellos hechizos y ya me sentía un poco cansada, así que me acerqué a una de las ventanas que daba al jardín para contemplar algo distinto a aquellas cuatro paredes.

Me pareció ver a Zane solo allí abajo y, por unos instantes, se me pasó por la cabeza bajar a hablar con él. Sentía curiosidad por saber qué había sucedido al final y si le habían castigado, quizás incluso me contara la verdad de todo aquel lío, aunque lo dudaba mucho.

Y si pierdo el miedo y la vergüenza y voy a hablar con él ¿pasará algo?

Entráis en el primer aula que encontráis vacía. Contiene una decena de pupitres más el del director, un apr de armarios con libros y otros utensilios y una gran pizarra al fondo.

- Movamos las mesas a un lado para hacer espacio.

Conseguís un espacio considerable en el centro del aula y Anne se sitúa a un extremo, sacando el libro de DCAO. 

- Ven, vamos a mirar las instrucciones y empezamos. ¿Vale? ¿Quién ataca primero?

-Las señoritas primero, por supuesto. Yo defenderé, ¡Espero que me salga bien! Y después cambiamos.

Me coloco en posición, estoy emocionado. Aunque es una lástima que lo que aprenda no lo pueda demostrar a mi abuelo al no poder hacer magia fuera de la escuela todavía. Me encantaría verlo mirarme orgulloso.

-¡Cuando quieras, Anne!

¡No fallaré!

Pero sí que fallo. Nada más empiezo a hacer mi escudo noto que algo no va como debería.

- ¡Vale! 

Anne revisa las intrucciones una vez más y se prepara.

- ¡Expelliarmus!

Un rayito de luz rojiza sale de su varita pero se disipa antes de llegar a ti.

- Vaya, qué mal. Pruebo otra vez, ¿vale? Y a la siguiente cambiamos. ¿Preparado? ¡Expelliarmus!

Su segundo hechizo sí que sale disparado con fuerza hacia tu varita.

Mi fallo no tiene gran importancia ya que ella no me alcanza, eso me hace respirar aliviado. Sí, estamos practicando, pero aun así soy competitivo. La decepción real llega cuando mi segundo intento tampoco es bueno pero su expelliarmus sí...mi varita vuela.

Tsk

Corro a recogerla.

-¡Muy bien hecho! ¡Ahora me toca a mi!

Me concentro mucho antes de lanzarlo, quiero que salga muy bien.

-¡Expelliarmus!

Anne suelta un gritito de emoción al ver que ha conseguido desarmarte, claramente contenta. después se prepara para tu ataque.

- ¡Lista! ¡Protego!

Sin emabrgo ni siquiera llega a formarse una película a su alrededor y tu expelliarmus manda su varita al otro extremo de la clase.

- Guau, ¡eso ha sido bueno! - corre a buscar su varita y se prepara para su turno. - ¡Voy! ¿Listo? ¡Expelliarmus!

-¡Bien!

Me ha salido a la primera ¡Y era fuerte!

En cuanto ella recoge su varita me dispongo a protegerme, decidido a no volver a fallar otra vez.

-¡Protego!

¡Ahora sí! ¡Ahora sí!

-¡Vamos una vez más!

Estoy realmente emocionado ¡Seré un super mago!

-¡Expelliarmus!

Aunque su protego se conjura bien, tu Expelliarmus rompe la barrera y lanza su varita por los aires.

- Jopé Brad, qué bien se te da. - te dice mientras va a buscar su varita.

Cuando está lista, te lanza un nuevo Expelliarmus, pero no parece conseguir conjurarlos como debería, así que repite el proceso. El segundo conjuro sí le sale y sale disparado contra tu mano de la varita.

-¡Prote.....- "clink", resuena mi varita al caer al suelo.

-Agh...solo sale cuando no vale....sigamos ¿Vale? Yo con protego y tú con expelliarmus..

¡Me va a salir! Me apuesto lo que sea a que lo consigo dominar!

Me concentro con todas mis ganas y lo hago de nuevo. Visualizo una especie de escudo medieval.

¡Bien!

Me emociono tanto cuando mi escudo para su ataque que ataco de inmediato con ganas.

-¡Expelliarmus!

La rapidez de tu expelliarmus y que al parecer Anne no ha pillado el truco aún hace que su varita de varias vueltas en el aire y acabe en la otra punta de la clase.

- Suerte que son resistentes, sino me la habrías roto. ¡Menudo conjuro!

Tras correr a por ella, Anne se sacude los hombros y te apunta con la recién recuperada varita.

- ¡Expelliarmus!

Me siento orgulloso cuando veo que su varita vuela. Y no disminuye ese sentimiento cuando paro su ataque.

-¡Sí! Ya le pillo el truco a esto. ¿Quieres seguir? ¿O estás cansada de perder?- bromeo y chuleo -Puedo ganarte durante todo el día, ya sabes...

Completo mis frases chulescas con hacer girar la varita entre los dedos.

- Jo Brad, ¿seguro que no lo habías hecho antes? Se te da muy bien...

-No, nunca ¡Debo ser un genio!- río guardando mi varita. -¿Intentamos otra cosa? Escuché a mi abuelo hablar de un conjuro que te deja respirar bajo el agua, más o menos. Se llama "Casco-burbuja" ¿Lo buscamos y probamos en el lago?

-Debe ser chulísimo poder bucear todo lo que quieras.

- Eso sería genial, aunque dicen que hay criaturas peligrosas en el lago... Lo probamos en la orilla, ¿Vale? Pero necesitaremos algun libro que lo expliqué...

-Claro, en la orilla. Hasta que nos sepamos defender de las cosas que vivan ahí, por supuesto. ¡Algún día tocaré el fondo, ya verás!

Abro camino hacia la biblioteca.

-¿Alguna otra cosa que tú quieras hacer después? No sé...por ejemplo buscar a alguien o...¡Conocer a Axel, mi perro!

La clase es más grande que la anterior, de hecho es muy grande. Tiene unas gruesas cortinas en las ventanas, así que Anne no lo duda dos veces y las corre para hacer la clase más oscura.

- Así vemos mejor si el hechizo funciona. - explica mientras lo hace, aunque parecía lo más lógico practicando lumos. 

Deja la última abierta para que no esteis en una oscuridad total pero si suficiente para ver los progresos de vuestro hechizo con claridad.

- A lo mejor antes no se veía nada porque había mucha luz, ¿porque no pruebas otra vez?