Partida Rol por web

- "Nadie que deba importaros. Ahora debéis estar concentrados en el Campeonato." -

SUBTERRANEOS DE LA ARENA DE DETRITUS: SALA DE DESCANSO DE LA ESCUELA AMARILLA:

La puerta se abre y entra uno de los Guardias de la Arena y se dirige a vuestro Instructor:

- "Señor, el Juez de la Arena desea veros a colación de una petición formulada por el Instructor Azul." -

SUBTERRANEOS DE LA ARENA DE DETRITUS: SALA DE DESCANSO DE LA ESCUELA AMARILLA:

- "Está bien, voy para allá." -

El Instructor Amarillo y Limonero salen de la Sala y cierran con llave al salir. Os quedáis solos.

Marronoso seguia sumido en su concentracion, su mente solo estaba enfocada en el campeonato y en los proximos combates. Sin importarle la interrupcion de aquel extraño individuo, y a punto de hacer lo que el instructor azul hizo con él. Siguio repasando para si mismo los pasados combates y posibles estrategias para combatir a sus proximos enemigos.

Aun no es el momento para dejar la escuela azul... aunque ya veremos mas adelante...

Tras el accionar del instructor, marronoso asintio levemente con la cabeza en señal de aprobacion y para hacerle saber a su intructor que todavia estaba con el y las palabras de aquel sujeto no habian despertado nada ni tenido efecto alguno, o por lo menos no lo habian hecho por ahora.

Tras mis cavilaciones y este extraño momento en el que apareció el hombre, me acerco al enano, ya que necesito hablar con alguien y parece ser la única persona con la que puedo hacerlo de mi escuela..

Hola Tapón.. ¿ qué tal te encuentras ? Le pregunto sentándome a su lado.

 Bannor mira a la menuda mediana. Y asiente, saliendo de sus reflexiones.

 - Bien, pequeña. La carné ha sanado de sus heridas contra Lagartija. Pero creo que quien más ha sufrido de los dos eres tú. Hojalá el alma fuera tan fácil de surcir como los tajos de un gladius en la piel. - Dice serio, pero con una mirada relajada, predispuesta hacia la mediana.

Asiento ante las palabras del enano.

Crees que esto cesará algún día? O tendremos que seguir matando gente hasta que nos maten a nosotros? Pregunto más que nada por escuchar la propias respuesta en la pregunta..

 Bannor asiente.

 - Ciertamente yo también me lo he preguntado. Hay casos en los que los gladiadores se han podido ganar la libertad, poniendo fin así a la carrera de gladiador, peropor desgracia cuando llegan a este punto, han perdido la humanidad por el camino.

Suspiro ante las palabras del clérigo y me mantengo unos instantes en silencio de nuevo..

No se si es bueno o malo, pero teniendo que estar aquí dentro, pediría que los remordimientos terminaran pronto.. Si al menos hubiera otra forma de salir..

 El enano asiente.

 - Sería bueno, Dora, sería bueno, pero no creo que sea el caso. De todas formas es lo que hay. Rezaré al Padre Radiante para que vele por ti.

Muestro una apenada sonrisa al enano.

Te lo agradecería, necesitaré toda la ayuda posible para seguir permaneciendo viva..

 Bannor ofrece su sonrisa más afable.

 - No temas pequeña, hasta ahora has demostrado una gran capacidad para salir de los combates con vida, mientras hay vida, hay esperanza. Espero que pronto puedas salir de la Arena.

No sabes cuánto agradezco que estés aquí para poder hablar con alguien.. - Digo dándole las gracias por sus palabras de aliento. Crees que los demás estarán dispuestos a hablar y ser más compañeros que rivales en algún momento? Marranoso está claro que no, pero los demás? Me gustaría que no todo fuera una competición, ganaríamos más si nos ayudáramos los unos a los otros. Le susurro para no llamar la atención que no quiero que ninguno de ellos se ofenda.

ARENA DE DETRITUS: SALA DE DESCANSO AMARILLA:

Al cabo de un rato se escuchan dos vueltas de llave y la sólida puerta de la Sala se abre. Entra un hombre ataviado a la moda imperial que se os queda mirando un rato uno a uno. Su mirada os recuerda a las de los mercaderes de esclavos...

- "Lagartija, eres un líder nato, pero sin seguidores. Tal vez equivocaste tu lugar. Has llegado a Semifinales, tal vez si llegas más allá volvamos a vernos.

Dientes, suerte en Cuartos pequeño Tiefling, te hará falta pues tú y tu oponente estáis muy igualados.

Champiñón, venciste de forma espectacular a Bola de Sebo en las Eliminatorias. ¿Quién lo hubiese dicho? Tu combate en Cuartos te enfrentará a Marronoso, sin duda el adversario más peligroso. No te envidio. Si de algún modo vences seguramente es que dentro de tu pequeño cuerpo hay todo un Campeón oculto.

Bella Mugiente, me apena que una sacerdotisa como tú haya llegado aquí. Mucho me temo que tardarás mucho en abandonar la Escuela Amarilla.

Babosa, defraudaste a tu Instructor que creyó ver en ti un fiero guerrero, tal vez dejándose engañar por tu fiero aspecto, adusto carácter y esos tatuajes. Tal vez si él hubiese sabido más, sabría que los jóvenes burgueses de buena familia de algunas de las ciudades más ricas del Imperio se tatúan esos mismos tatuajes para aparentar lo que no son. No eres un guerrero, sino un burgués, un niño rico. Le has costado mucho a la Escuela Amarilla y probablemente tardarás mucho en abandonarla." -

Dientes,que escuchaba casi sin interés las palabras del recién llegado, le dedico una mirada burlona cuando le deseó suerte.

No necesito suerte.Tan solo luchar mejor que él.Sólo espero que ésta vez me dejen matarlo... gruñó el Tieflin, que comenzaba a impacientarse ya en la sala de espera. De todos modos...¿quién sois vos,para saber tanto de nuestra escuela? preguntó,ahora ya más cautamente,cada vez más intrigado por el hombrecillo...

¿De que coño hablas maricón remilgado?... - digo mirando con rabia al tipo que acaba de entrar hablándonos a todos como si supiese más que nadie en el mundo - Si mi instructor es un retrasado que no sabe diferenciar un enano de un troll no es mi problema. Si pierde dinero que se joda, soy un esclavo, no su ferviente adorador. Si te crees que me importa algo de lo que puedas decir más vale que te largues por donde has venido - le espeto escupiendo al suelo.

una sonrisa sarcasitica se aprecia al escuchar las palabras del hombre... El mediano estaba irritado, sabía que la victoria contra Horton había sido espectacular, pero luchar contra Marronoso, era un hazaña casi imposible, sino imposiblel.

Tras la contestación del furioso enano, Babelín intenta bajar los humos:

-Enano, no muerdas la mano que te da de comer.

-Señor, mi capacidad y estrategia no sirven contra alguien que me puede matar de un golpe, además, de que tiene un arma mejor. Me será imposible salir victorioso de ese combate, sin un arma mejor.

 El mediano sabía que era una petición imposible y ya negada, pero podía ser que su suerte cambiase, y le diesen un estoque, o una ballesta.

 annor mira al resto de sus compañeros.

 - Ciertamente, el que hablaramos más entre nosotro nos ayudaía a sobrellebar este destino. Y quien sabe si sería mejor de cara en un futuro, pues, tengo enetendido que en las arenas se ofrecen todo tipo de combates, como en grupos, parejas...

Me encojo de hombros y luego miro al resto de mis compañeros..

- Espero que las cosas cambien pronto.. - Digo tratando de esperanzarme. tratando de pensar que voy a seguir viva el suficiente tiempo como para poder verlo.

El colosal draconico escuchaba atentamente las palabras de sus compañeros, le daba rabia la mentalidad debil con la que hablaban. El camino del geurrero es vencer hasta ser vencido, y eso es todo lo que hay. Ahora son guerreros, ya sea por eleccion propia o fuerza mayor y deben atenerse a las reglas del guerrero.

-Basta de bobadas sin sentido, aqui las cosas son simples MATAR o MORIR. Para dilemas existenciales esta el templo, en la arena se saca la verdadera naturaleza... el instinto de supervivencia. Ese instinto que te hace prevalecer, y no te deja morir... y eso es lo que tu tienes pequeña y no hay nada de que avergonzarse por eso.