Partida Rol por web

Último día... y fiesta.

Esa es la idea que asalta a Dairiseki nada más despertarse.

Otra idea le cruza la mente mientras, a su misma vez, la dice Agu en alto.

- No estaría mal hacer puente~

Maldita sea Agu. Aguanta un día.

-Sólo es un día, no creo que pase nada....

Miro al suelo pensativo

- Pero Daaaaairi - Agu te mira con cara triste - no se trata de que vaya a pasar algo. Se trata de estar aquí. En pijama. Viendo la tele. Tomando un refresco.

Agu, que estaba de espaldas a ti, se gira.

- Si nos quedamos te dejaré besarme.

-...

-Estabas apunto de convencerme, habría sido mejor decirme que si NO hacíamos puente me besabas

Agu se quita la peluca y el pintalabios con el reverso de la mano.

- Mecachis... la próxima vez será. Tu antes molabas.

En ese momento entra Kazuki en la sala restregándose la cara con la mano derecha.

- Buenos... *bostezo* días. ¿Aún no estás haciendo el desayuno? Pues esta vez lo haré yo.

Se estira un poco y comienza a sacar los utensilios.

- Dairi, ¿tienes planeado algo para esta noche? He pensado que podríamos ir a cenar por ahí con Kichiro, para celebrar las vacaciones. Aunque él ya tiene vacaciones desde hoy. Qué bien vive.

Suspiro aliviado de haber salido de aquella conversación (casi me convence)

-Tranquilo ya hago yo el desayuno y así me despierto, me parece bien lo de salir a cenar (bostezo) 

Recorro como un elefante torpe el camino a la cocina

Puesto que no os aclarabais, acabáis haciendo el desayuno entre los dos. Al menos es divertido y tenéis una conversación mínimamente interesante para estar lo dormidos que estáis.

Desayunáis de relax, y finalmente llega la hora de marcharte. Habéis quedado en casa por la noche para ir juntos a cenar.

Era sorprendente el calor que podía llegar a hacer tan pronto por la mañana. Llegas cuando una de tus compañeras está abriendo el establecimiento y entráis juntos. Y así empieza otro aburrido día pasando cosas por el láser para cobrar a la gente.

Agu pone voz ronca:

- Buah tete, ¿que puto rollo no?

Sus comentarios habituales.

Cuando abres la caja por primera vez, ves dentro... ¿una carta? En su sobre y todo. Bien cerradito. ¡Dentro de la caja! ¿Qué narices significaba eso? No tenía remitente... ni destinatario. Decides cogerla y guardarla antes de seguir atendiendo al cliente.

Al llegar un rato de descanso, abres el sobre. La carta tenía una letra bien cuidada, aunque no la reconocías.

Hola Dairiseki,

Sé que no hemos tenido oportunidad de hablar mucho, aunque me ha gustado conocerte. Sé que en poco tiempo cambiaste mucho, y tu caso con tu Arcano no es tan grave como los demás. Aún así, aunque los otros no puedan verlo, sé que estás haciendo un gran esfuerzo por llevar esta situación por el buen camino. Sigue así.

Has conocido también nueva gente durante la última semana. Sé que ha sido durante poco tiempo, pero trátalos como si fueran tus amigos. Como tus hermanos si llegara el caso. Juntos haréis más de lo que yo nunca pude hacer por vosotros.

Me marcho. No para siempre. Pero no puedo asegurarte que volvamos a vernos. Me marcho en busca de experiencia, tal como mi maestra y mentora hizo hace tiempo. Cuando vuelva, espero poder ayudaros a vosotros y al resto de gente en casos como este.

Sigue así, pues estoy orgullosa de tí.

Atentamente,
Mei

Y fin de la carta. Era cierto que la conocía hace poco. ¿Por qué hablaba como si conociera a Dairiseki desde hace más tiempo? Y después de la escenita de ayer y de solucionar todo con todo el mundo, ¿decide marcharse?

(suspiro)-Agu, sabías algo de esto? la verdad es que es una pena (digo cuando no hay clientes mientras ordeno unas cajas)

- ¿Saber qué?

Agu coge la carta de tus manos y se pone a leerla. Cuando termina te mira y dice:

- No lo sabía. De hecho pensaba que estaba ahí.

Agu señala y tú miras. Acercándose a la caja viene una chica con el vestido de sacerdotisa. Por un momento piensas que era Mei, pero al verle la cara sabes que no. Aunque aún así, su cara te suena...

Sí! Estaba ayer en el templo. Era amiga del resto, parecía ser. Se llamaba Hana.

Al fin, la chica llega a la caja. Tiene té, leche y pastas. Muchas pastas.

- ¡Buenos días! Sabía que te había visto en alguna parte. Eres...

Se pone las manos en la barbilla y pone cara de pensativa.

- ¡Diraisike! Jeje, lo he recordado. Soy la nueva sacerdotisa, me llamo Hana. Creo que nos vimos ayer.

Parecía una chica muy alegre. Sonreía todo el rato e iba pegando saltitos para desplazarse.

-Bueno, has acertado un 90% pero no te voy a decir en que fallaste ( me rio) , como llevas tus deberes de sacerdotisa?

- Té... hecho. Pastas... hecho. Vestido... hecho. ¡Solo me falta ayudar a gente!

Se ríe. Parece realmente alegre.

- ¡Ah! Eso me recuerda una cosa. ¿Te apetece venir después del trabajo al templo? Estaría bien hablar sobre Arcanos.

Y qué directa es.

-De verdad me gustaría pero ya hice planes para cenar con un amigo, y uno tiene que cumplir sus planes.

Miro a Agu con gesto rígido

-El resto de las vacaciones las tengo libres para ir al templo en cualquier momento, mañana mismo si te va bien.

- Excelente, Dareisiko.

Con sus manos agarra las tuyas y te las aprieta suvamente.

- Espero verte mañana en el templo. Y pásatelo bien en la cena~

Y se marcha pegando saltitos.

Ya tuve esta sensación antes, no puedo vincularme emocionalmente con cada chica que me presta un poco de atención, lo de mei fue extraño, pobló mi mente hasta que desapareció y después de eso no sentí nada, parece que mis emociones son tan vagas y poco comprometidas como yo...

Ahora empiezo a sentir lo mismo por esta nueva chica, por lo menos parece más alegre que mei sin embargo el tener estos pensamientos me hace sentir ruin, cosa que en consecuencia me deprime y me hace necesitar más que nunca algo de proximidad emocional.

[Mientras pienso todo esto reordeno el inventario, deseando no ver a agu por el rabillo del ojo y perdiendo la percepción del tiempo]

-La verdad es que se me están quitando las ganas de ir a cenar. (murmuro al aire)

- Jooo. Nos tendremos que quedar en casa, con el aire acondicionado, con la tele y durmiendo. No creo poder soportarlo Dairi. ¡Mátame ahora!

De alguna parte, Agu había sacado un pepino y simulaba un seppuku en su cuerpo con él. Luego ríe.

- Creo que es la mejor opción Dairi. ¿Pero sabes qué sería aún mejor? Ir a ver a Hana.

La verdad es que si que era mejor opción, se que no era lo correcto pero sí lo que quería hacer, lo cómodo quizás?
Y que le diría, "hola he dejado a alguien colgado para venir aquí", no, estoy cansado, tengo sueño...
 

Tras darle vueltas durante mucho rato salgo del trabajo y me dirijo al templo, por el camino me siento detestable.

-A lo mejor deberíamos volver...a cenar!

No esperaba una respuesta
 

- ¡Ya está! No hace falta buscar solución: ¡Llevémonos a Hana a cenar con los otros!

Interesante... ¿qué podría salir de aquello? Resultaría raro, ya que Kazuki y Kichiro conocían a Mei como la sacerdotisa. Sería un buen momento para presentársela.

-mmm no se...

Paro y me siento en un banco, y si les molesta que lleve a Hana? y si le molesta a ella? quizás lo mejor sería irse a casa, por otro lado ya les dije que iba a cenar con ellos, pero ya voy a llegar tarde...

Me pierdo en mis pensamientos poco a poco hasta que...

me quedo dormido