Me agacho para estar a su altura y pregunto - ¿A qué te refieres? -
- Viene muy poca gente a verme... a veces viene gente, pero no se quedan para siempre. Pero todo el mundo que me viene a ver está triste. Pero desde hace poco, hay muuuchos amigos.
Entonces, comienza a contar con los dedos:
- Chica lobo, chica aire, chico espada, chico jabalí, chico dominó, chico grande, chica samurai y chico reloj. ¡Son muchos! Hace días tenía otra amiga, pero se fue hace poco. ¿Os quedaréis?
Satoshi no habla, pero escucha todo con el entrecejo fruncido. No parece gustarle lo que oye.
Miro a Satoshi y tapando el microfono le digo. - ¿Qué estás pensando?-
Saki estaba intentando asimilar aquella información, pero prefería ir directa a las respuestas más básicas.
- Podríamos... Quizás... Pero, antes tienes que decirnos dónde quieres que nos quedemos y... - Tarda varios segundos en continuar. - Que... Quien eres realmente.
- Hay algo que lleva mucho tiempo mosqueándome, pero nunca le he dado importancia. O no he querido dársela hasta ahora. Pero no has sentido en algún momento durante las últimas semanas... ¿que hay menos gente de lo normal a tu alrededor?
Con el microfono aún tapado miro a Satoshi con los ojos como platos. - Hoy vine con el tren vacío... No le estoy dando importancia pero ahora que lo dices es cierto que hay como una falta de gente. - Me giro con un poco de miedo hacía Anastasia.
- Anastasia ¿Dónde te los llevas? - Digo con un poco de miedo ante la inocente niña.
Anastasia parece confundida.
- Quedaros... aquí. ¡No me llevo a nadie, la gente se va!
Parece triste.
- Solo soy Anastasia...
Satoshi te pone una mano en el hombro para llamar tu atención.
- Quizá no se lleva a nadie. Quizá somos nosotros los que... "hemos ido", o algo así. Yo puedo creerme ya cualquier cosa.
Saki cada vez estaba más confundida.
- Lylia, ¿Que has descubierto? ¿A quién se supone que se lleva Anastasia?
- Anastasia ¿Sabes por que tus amigos se van? -
- Creo que quieren estar con sus propios amigos. O que no me quieren...
Saki se estaba comenzando a cabrear por la falta de respuestas que le estaba dando Lylia, pero aún así comenzaba a ver por dónde iba el tema así que no tenía sentido echárselo en cara en ese momento. Simplemente sigue concentrada escuchando.
- Pues... a donde estabais vosotros antes. ¡Vuelven a su hogar! ¡Vuelven a su mundo!
Me quedo en silencio unos momentos que parecen eternos. - Anastasia ¿Cuanta gente dirias que hay ahora mismo en este mundo? -
Miro a Satoshi con una cara que es un poema. No tengo claro qué decir pero parece que todo lo que estaba planeando no importaba en lo absoluto.
- Saki, ¿Has escuchado lo que ha dicho Anastasia? ¿Te parece bien que nos encontremos? -