Viendo que no haces nada más, puedes considerar que te han llevado detenido a la comisaria de Wattwill. Pasamos a Mijail.
Wattwill al norte. A diez minutos en coche.
Poca gente te ibas a encontrar después de la tormenta que aun estaba que si que no sobre vuestras cabezas. Todo el terreno estaba enlodado y embarrado, siendo una tortura entrar en zona de caza boscosa. Desde luego, esos árboles separados y desnivelados de forma tan abrupta serían la forma perfecta de acabar con algo roto.
Miraste desde fuera, pensando si sería conveniente o no. La zona donde podías dejar el coche estaba en la zona de la carretera y luego ya un sendero simple, repleto de gusanos que salían de la tierra encharcada.
Me gustaba el cielo de esa forma, aunque lo preferia cuando se acercaba nieve y no lluvia. El frio tenia algo limpio, algo de orden en cierta forma. Me gustaba eso. La quietud.
Alcance por fin un lugar donde poder hacer lo que queria. Los arboles, las formas del terreno eran de las que decian que podias romperte algo, pero no buscaba eso. Solo los primeros pasos en el lugar, no pensaba internarme mucho, menos aun tras una tormenta como la de anoche. Pase a la parte de atras de mi vechiulo y con cuidado me cambie de ropa. Primero el torso, despues los calcetines, despues los pantalones, hasta estar ya con la ropa de caza. Sali del vehiculo dejando que mis pies se acostumbraran a un terreno ligeramente diferente del urbano. Tras eso saque el arma, la cargue y coloque el seguro. Cogi lo necesario, incluido el movil y cerre el vehiculo.
Pise con cuidado en el suelo, notando la tierra humeda, encharcada, permitiendo a los gusanos salir de la misma por la presion de mi peso. Iria con cuidado, asegurando cada paso hasta estar cerca de la zona boscosa. Caminaria fijandome en el lugar y sobretodo en la presencia de mas gente en los alrededores. La mecanica seria sencilla un avez llegado a los limites de donde era legal la caza, descorrer el seguro, apuntar bajo, unos treinta grados con la horizontal y en una direccion diferente a la del sendero, pasar el cerrojo para el siguiente proyectil, seguro y avanzar. Metodico, fijo, practicamente como si fuera un entrenamiento ensayado, porque en cierta forma lo era. Una vez llegara a la zona de caza en si misma.
El plan era simple, asegurar que no me rompia nada, no buscar zonas que pudieran provocar un accidente, asegurar siempre antes de avanzar y esperar a llegar a la zona boscosa antes de efectuar ningun disparo. Eso dejaria la ropa manchada de barro, el arma con trazas de polvora de polvora y un buen numero de casquillos que faltarian en su lugar. La cohartada, ya tenia una base estable y consolidada. No era cuestion de gastar toda la municion, lo suficiente para uno o dos dias de supuesta caza.
Me adentre lo suficiente como para que no se me viera desde el camino, pero siempre muy atento al camino, asegurando cada paso. Entonces comenzaria las rondas de disparos, dejando espacio entre ellos, a veces dobles, otras no no era cuestion de que si alguien me oyese pareciese que estaba malgastando municion inutilmente. Me moveria muy lentamente de posicion, recogiendo cuantos mas casquillos pudiera, para tampoco dejar el efecto de que habia estado en el mismo sitio disparando sin ton ni son.
Una hora mas tarde, volveria por el camino. El arma con el seguro puesto, ninguna bala en la recamara y colgada al hombro. Mi atencion puesta en donde ponia los pies y en el entorno, para no sufrir ningun accidente. Una vez en el coche, procederia de nuevo con la ropa. Sentado en el coche, pero con las piernas fuera de este, limpiaria las botas hasta que no hubiera ni un solo gusano y las trazas de barro aunque visibles, implicasen que me fijaba en mi equipo. Haria de igual forma con el pantalon y con cualquier posible mancha de barro. De nuevo procederia a quitarme la ropa en el mismo orden, la iria colocando en diferentes bolsas, sobretodo las botas y el pantalon. Una vez vestido de nuevo y con todo en su sitio, incluida el arma, con el maletin cerrado. Volveria a Wattwil.
Dejaria las bolsas en el vehiculo, no asi el maletin con el arma, que volveria a cargarlo hasta la habitacion. Una ducha procederia. El movil no habia sonado, asi que por el momento no habia mucho que hacer. Las ordenes eran claras, las habiamos hablado hacia unos dias y no tenia oposicion ninguna, y ademas era jueves, asi que algunos de los locales de disfrute nocturno estarian abiertos. Primero un lugar para cenar, luego a proceder con la vigilancia, incluyendo quizas uno de los posibles locales nocturnos. La cena seria en el hotel, no tenia ganas de ir a buscar ningun sitio y la comida del lugar era mas que aceptable.
No dude en meterme en la ducha, tras haber dejado cada pieza de ropa en su bolsa correspondiente. El agua caliente ayudo con el sudor del dia, permitiendo relajar mis musculos. Una vez terminada y con la ropa elegida ya colocada sobre mi cuerpo, recogi mis cosas y baje al restaurante. Era una buena hora para cenar, que ademas me permitiria ver a quien llegara para la misma. Una forma sutil y simple de comprobar nuevos clientes en el mismo.
Motivo: Suerte (Clientes que se salgan de lo habitual, que llamen la atencion a alguien como yo)
Tirada: 1d100
Dificultad: 55-
Resultado: 45 (Exito)