Partida Rol por web

Kellom entra en la nueva habitación y avanza hacia el interior apresurado. Sus ojos recorren la nueva cámara y se detienen fijos hacia donde sombra señala: el glifo. Su mente trata de mantenerse en blanco.

Kellom reconoce el glifo custodio. Tal y como sospechaba Sombra es un glifo explosivo, diseñado para evitar que aquello que está guardando caiga en manos inadecuadas. La explosión destrozaría el escritorio y todo lo que contiene, a parte de dañar seriamente al incauto que se atreva a perturbar el glifo sin cuidado y abra el cajón del escritorio.

Kellom le da una pista a Sombra para desactivar el glifo, indicándole por dónde tiene que borrar el dibujo sin que la trampa se active.

Disimuladamente el enano sale de la habitación y mira la escena asomando levemente la cabeza.

Sombra, con mucho cuidado empezo a retirar los trazos arcanos con sus pinzas, no comprendía la logica de aquel anagrama gráfico, así que siguio su instinto. A pesar de la baja temperatura una gota de sudor bajaba por su frente...

Con sumo cuidado y siguiendo el consejo de Kellom, aunque sin entender muy bien lo que está haciendo, Sombra consigue desactivar el glifo con éxito! Ahora ya es seguro abrir el cajón del escritorio

Tocar algo en éste lugar parece tan peligroso como entrar en una guarida de gnolls comentó Clevor en voz baja mientras el pícaro se encargaba de otra de las letales trampas del enano hechicero. Cuando por fin terminó exitosamente, se aventuró debe ser importante lo que allí se guarda

Clevor se atreve con lo que tan celosamente guardaba el enano.

Dentro del escritorio, encuentra un pequeño tesoro de monedas y joyas, así como el diario personal de Draigdurroch.
Las entradas comienzan con su llegada a la zona hace 30 años, la construcción de su torre en honor a Asmodeo, su teoría de que las ruinas de la ciudad Netherina de Karse yacen bajo el Bosque Terrible, sus primeros contactos con los fragmentos dispersos del dios muerto Karsus, y sus esfuerzos por forjar un pacto sobrenatural con Karsus.

Realiza una anotación sobre las “ridículas hadas” que viven en el Bosque Terrible. En concreto, dice que las autodenominadas guardianes del Bosque Terrible enviaron un mensajero con una aviso de no inmiscuirse con el semidios. La respuesta de Draigdurroch fue convertir al mensajero en cenizas. “Dejemos que sientan el fuego de Asmodeo, y también pronto la furia de Karsus”, escribe en la última entrada de su diario con obvia autosatisfacción.
“Afirman que me castigarán por mis acciones si no presto atención a sus avisos. ¿ELLOS ME castigarán? ¡Qué gracioso!”

Cuando la cosa se hubo calmado con la desactivacion de la trampa volvio a entra en el cuarto. Al encontrar el pequeño tesoro y mas valioso el conocimiento encerrado en ese libro penso que habia concluido la mision.

Diria que ya tenemos todo lo que nos pidio la dama, no señores? Deberiamos volver y a partir de alli que decida ella. 

Clevor finalizó de revisar el diario con interés, lo cerró y lo guardó con cuidado. Lo mismo con las riquezas que allí había. Luego se volteó hacia Travok que recién entraba a la habitación.

Diria que ya tenemos todo lo que nos pidio la dama, no señores? Deberiamos volver y a partir de alli que decida ella. 

El humano lo observó un momento y luego movió la cabeza hacia el artefacto mágico ¿Y ese artefacto no sube? Creería que aún queda un piso por revisar, maese enano. 

El enano se acerca al artilugio magico y lo revisa.

Creo enteder que solo nos lleva  a las dos plantas de abajo.

Observando el artilugio, Travok siente una corriente helada que se le mete por la espalda y le recorre todo el cuerpo. Al mirar hacia arriba ve un agujero en el techo y un largo ascenso hasta lo que podría ser la azotea de la torre, pues el final del agujero parece dar al exterior.

Por las barbas de mi tia Petunia, que Frio!! Ey! parece que se puede salir por arriba. Habra que enviar alguien para arriba y que observe antes de subir todos.

Gira lentamente la cabeza con una sonrisa sadica a Sombra.

Ja, ja. Tranquilo muchacho, deja a los demas hacer.

Saca el equipo de escalada y se dispone a subir.

Pues... subamos al artefacto entonces observó Clevor con una expresión de perplejidad ante el enano preparándose para escalar las paredes de la torre. Se acercó a la extraña plataforma y señaló al resto del grupo para que le siguiese. Supongo que allí arriba está el final de nuestro camino. Preparaos. Advirtió mientras observaba el filo de su brillante espada cubierto de costras de sangre heladas, como escarcha escarlata.

Ya estaba planteado en sus pensamiento como subiria por la zona, como una majestuosa cabra montesa hasta que la voz de la conciencia le retumba en su cabeza mientras empezaba a sacar los aparejos de escalada Funciona como los otros ascensores, solo tienes que pedirlo. Con una sonrisa estupida, vuelve a guardar los aparejos y se pone en pie.

Bien pues como dice nuestro amigo Clevor #Plash #Plash (palmadita en la espalda) vamos a ello señores.

Os subís todos en la plataforma y pronunciáis una simple palabra arcana. Al instante la plataforma empieza a moverse y a elevarse poco a poco. Conforme subís la temperatura va bajando cada vez más (como si eso fuera posible) y una vez llegáis arriba del todo, la luz del exterior os ciega durante unos segundos y el viento helado os penetra hasta el tuetano.

Os encontráis en la cima de la torre. Ante vuestros ojos se extiende el manto blanco que cubre los árboles del Bosque Terrible en una visión que no carece de belleza. Flotando a varios pies sobre el punto central de la torre, hay un zafiro perfecto, fácilmente del tamaño de un puño cerrado humano.
Sobre la gema, el aire parece endurecerse en hielo y nieve, girando en todas direcciones como si estuviera impulsado
por un viento furioso. Las nubes sobre la torre parecen extraer energía de la gema, llenándolas con la esencia pura
de una tormenta invernal.

El viento os azota y cada ráfaga helada viene acompañada por un latido de energía que surge del corazón del zafiro. La superficie de la gema de otra forma perfecta parece haber sido tallada por rasguños o runas que brillan con su propia energía blanca.

Kellom se lleva cada mano al antebrazo contrario y se los frota compulsivamente para darse calor, el frío lo acobarda y los dientes castañean. Maldice en voz baja y la sola visión de una perspectiva helada le hace encogerse su corazón. Entonces un paisaje bello pero cruel empaña su visión dejándolo totalmente ensimismado. Entonces sus ojos abarcan la gema y se mueve lentamente, ralentizado por el frío helado. Sus ojos se abren cuán grandes son. Y se esfuerza poniéndose en cuclillas centrando su atención en las runas escritas en él.

Kellom observa con atención las runas escritas sobre la gema. Detecta que no son parte natural del zafiro, si no que fueron talladas recientemente. Están echas en escritura Barazhad del idioma primordial, mientras que el zafiro es de origen feerico. Las runas fueron realizadas por los guerreros de hielo para corromper el zafiro, aumentando su poder y extendiendo los efectos de la escarcha mágica sobre una zona mucho mayor.

¡Esta gema es sin duda la fuente del fenómeno de clima antinatural!

El cormyriano se cubría de la terrible ventizca utilizando su pesado escudo, sentía como el viento pulsaba, empujándolo rítmicamente, haciendo que sus tendones y sus músculos se esforzaran. Se plantó con firmeza y dió varios pasos hacia adelante, cubriendo el flanco del gnomo, que parecía estar luchando mucho más que él contra las heladas ráfagas.

¡Éste debe ser el portal principal! gritó, mientras su voz se ahogaba y era llevada por el terrible poder que manaba desde aquél núcleo. Luego posó sus ojos en el brujo feérico Yo te cubriré de cualquier cosa que pudiese aparecer... exclamó con un tono serio.