Partida Rol por web

El alba os despierta en una cálida mañana de verano y los afanosos pasos de los siervos resuenan por toda la fortaleza. El desayuno de hoy ha sido elegido especialmente para vosotros, arroz con pescado fresco y pastelillos dulces, recién horneados, para que os de fuerzas en el viaje y no desfallezcáis.

También os dan carne seca, bolas de arroz y agua para el viaje de dos días que emprenderéis. Incluso alguien ha puesto una pequeña botella de sake, para calmar los nervios y entrar en calor.

Todo está preparado. Afuera os espera una compañía de quince soldados del clan león que os acompañarán hasta las afueras de la ciudad. Cinco de ellos forman una hilera portando cada uno la bandera con el Mon de los clanes a los que representáis.

La gente se aparta dejando las calles libres y haciendo a un lado a los testarudos bueyes. Y veis como todos se inclinan a vuestro paso, pues, aunque no sepan cual es vuestra misión, saben que vais a arriesgar vuestras vidas por su seguridad y por el bien del imperio. El respeto mostrado por la gente humilde os da más confianza en vosotros mismos.

Pensáis en esto mismo, en vuestro clan y vuestra familia. Sois jóvenes y no se espera tanto de vosotros, pero si falláis habréis decepcionado al clan y a vuestra familia. Victoria o una muerte honorable, son vuestras dos opciones. 

Naoko venía de una cuna humilde, y aún en su humildad su familia vivía para el servicio del imperio y su gente. Aunque se arrodillaran, aunque los Samurái fuesen mas que solo hombres, ellos 5 iban a sufrir, morir, amar, sangrar y cagar como cualquier hombre, y Naoko lo sabía.

Al pasar fue saludando a todos los plebeyos, a la gran cantidad que conocía, incluso por sus nombres pidiéndoles que se cuidaran mientras ella no estaba para cuidarlos o que le guardaran alguna de sus mercancías. Muchas veces era ella quien se encargaba de muchas tareas domésticas, siendo que no tenían mas de un criado en total, y él ayudaba en la casa, solamente.

La mañana nos hace llegar la algarabía que parece haber en la ciudad por nuestra misión. En mi interior crece una alegría al saber que será en beneficio de los más necesitados, para que nadie más sea atacado por aquella bestia.

Me reúno junto con el resto de la comitiva y veo a las caras que anoche conocí. Miro a Matsu Naoko y me siento complacido pues la primera impresión que me dejó es la de una joven de gran sabiduría para su edad y gran sentido común. Veo a Hida Kusonoki, quién parece un guerrero muy capaz, así como Tsuruchi Genji. De los miembros del Fénix no tengo muchos conocimientos pero aquel Isawa debe ser tan destacado como todos en su noble familia.

Comenzamos a caminar y la gente parece estar muy feliz con nuestra misión y recibo sus muestras de cortesía con agradecimiento y respeto, inclinando la cabeza mientras avanzo.

Akemi sigue en su estado habitual de ensoñación cuando se presenta a la comitiva. Realiza una reverencia y se incorpora al grupo, sin decir ni una sola palabra. Es un individuo callado, obediente, y con un gran mundo interior. Parece muy atento a todo lo que le rodea, y también perdido en algún rincón de su despeinada cabeza.

- Algunos caballos agilizarían nuestro viaje - apuntó sin venir a cuento, pero muy cortésmente. Su voz era bastante seria. Era una de las pocas ocasiones que podrían escuchar su voz. Simplemente, Akemi evitaba hablar si era necesario. De gritar en batala ya era otro cantar...

duermo placenteramente toda la noche a pierna suelta cual largo soy, me levanto temprano, hago algo de ejercicio , me doy un baño y me bajo a desayunar ,como hasta llenarme,pero con modales,,me visto y me reúno con el resto del grupo, cuando llego a la calle veo toda la parafernalia que han montando y Mirumoto habla de ir en caballo, ,miro al grupo y luego me miro yo, no se en que caballo quiere que vaya  montado, no hay caballo que aguante mi peso Matsu sam ya que vas ha ser nuestro guía puedes informarnos de como son estas tierras y como es el terreno por el que se mueve la bestia

-Nada más despertar, enciendo varias varillas de incienso y dedico unos minutos a rezar a Osano-Wo para que me de fuerza para realizar mi cometido con honor.

Una vez aseado, arreglado y desayunado, me encamino con todo el equipo que considero necesario para el viaje. Nada mas llegar al punto de encuentro, me uno a mis compañeros.
-¿Habéis comido arroz hoy?

Tras recibir sus saludos, espero junto a ellos a que el resto lleguen. Cuando ya estamos todos y comenzamos a caminar hacia el exterior de la ciudad, me llevo una grata sorpresa al ver a la gente mostrándonos su respeto. Esperaba una salida anónima de la ciudad, pero podría acostumbrarme a esto.

El pueblo tiene un río, como es natural en los lindes del río hay una densa capa de árboles. Luego esta el pueblo en si y mas allá, rodeandolo, tierras cultivadas, que terminan en una sabana: pastizales, tierras para caballos y liebres... No es un lugar para un oso. Si en efecto es un oso lo que buscamos, creo que deberíamos centrar nuestra busqueda en el bosque que queda de camino. Eta noche pararemos ahí, tengo un conocido que es pescador y puede darnos hospedaje al borde del bosque. Quizás él haya visto al animal. Explico una vez en el camino Eso será por la noche, esperemos que si nos apuramos, lleguemos temprano.

-Matsu sama, creo que vuestra decisión es acertada. Los dioses nos han bendecido al permitir que un líder no sólo fuerte y diestro sino también inteligente forme parte de nuestro grupo. Sus palabras quizás resonaban vacuas y aduladoras, pero era lo que el aprendiz sentía.

-Una vez en el bosque, podría entablar comunicación con los sagrados espíritus del entorno, para obtener alguna pista sobre el presunto animal, expuso el shugenja, sin ánimo de darse importancia.

No lo recuerdo bien, pero creo que hay una capilla para el Kami del río en el bosque. Seguramente una ofrenda en ella al tratar de contactar al Kami ayude. Le preguntaremos al pescador cuando lleguemos. Y de paso puedes ayudarlo a tener mas pesca, que siempre lo merece. comentó Naoko con una sonrisa.

El plan que la joven Matsu propuso parece tener buenas bases y un gran sentido pragmático. Asiento con la cabeza a sus palabras en señal de aprobación. Creo que será una buena instancia para la superación personal y el autoconocimiento necesario para obtener cualquier victoria que necesitemos.

"La sabiduría está en nuestro interior y quien se conoce a sí mismo, no puede ser derrotado por otros."

Prefiero guardar silencio pues ya suficientes cumplidos han sido pronunciados y ya sabemos que la joven Matsu tiene las cosas claras y bien definidas, por lo que no es necesario recalcar más el tema. Mantengo el paso tranquilamente junto con el grupo, mientras el paso es marcado por las armaduras de mis compañeros.

El día pasaba y a medida que el sol descendía los campos y praderas se llenaban cada vez más de árboles y arbustos. Casi al atardecer llegáis al río que converge con el de los tres bandos y que discurre paralelo al camino hacia Hima. 
Al fondo podéis observar la línea de árboles que delimita el bosque, donde la humilde casa del pescador os brindará alojamiento esa noche.

Ya casi de noche, al acercaros podéis ver una casa cerca de la orilla del río, pero dentro de los límites del bosque. Es una casa simple, sin adornos ni jardín. Su techo es de paja y la puerta de madera está abierta.
Un par de truchas cuelgan de un trozo de bambú encima de un brasero y un hombre fuma en pipa sentado en su porche mientras os ve llegar.

Al acercaros el hombre se levanta y se inclina ante vosotros en señal de respeto.

-¿Puedo ayudarles en algo nobles señores y señora?-

Kamuro-san! Como esta? Saludó Naoko con una reverencia también Venimos muy cansados del camino, de camino a Hima a lidiar con el monstruo que parece estar cazando en el pueblo. Podrías brindarnos alojamiento, o al enos un luggar para acampar?

El paisaje que se abría ante sus ojos era de una belleza calma y embriagadora. Un lugar excelente para apartarse del ajetreo mundano y dedicarse a la contemplación.

El río de aguas puras y cristalinas, discurría serpenteando entre la vegetación.

Sin duda es el sitio idóneo para albergar a poderosos kami de agua, pensó el shugenja, recordando la acertada recomendación de Matsu Naoko de realizar una ofrenda. 

La voz de la jóven saludando al pescador le devolvió a la realidad e hizo una reverencia al hombre, esperando su respuesta.

El viaje está siendo muy tranquilo de momento, claro está que cuanto más nos alejemos del castillo, mas peligroso se vuelve. No podemos relajarnos. 

Estoy seguro de que mis compañeros son todos muy diestros, o no estarían aquí. Pero me sentiría mas tranquilo si  yo fuese por delante del grupo reconociendo el terreno. Siempre y cuando Matsu-sama nos ordene adoptar algún tipo de formación. Perteneciendo al clan León, seguro que lo hace. Ya comenzamos a adentrarnos en el territorio de la bestia, y seguro que no desea informar de la muerte de algún compañero de viaje debido a un error. 

voy en la parte de atrás del grupo ya que la que tiene que ir en primer lugar es la que conoce el terreno y así puede hablar con sus conciudadanos, yo me quedo más en la retaguardia vigilando de que todo este tranquilo aprovechando mi altura. a cierta distancia al borde del bosque se divisa una choza de barro y paja, con un campesino en la puerta que al vernos nos saluda amistosamente

El distraído bushi dragón no dice ni una palabra. Tampoco tiene nada que decir que no estropee el agradable silencio durante la marcha. Tamborilea con los dedos y piensa en música, dentro de su cabeza, hasta llegar a la cabaña del pescador.

Hace una reverencia a Kamuro, pero sigue dejando a los líderes del grupo continuar con la diplomacia.

Después de un viaje no tan largo, llegamos al linde de aquel bosque que Matsu-dono nos había indicado. Allí encontramos al pescador que había mencionado, que nos saluda con gentileza. Le hago una reverencia a modo de respeto también mientras me mantengo en segundo plano.

"La joven Matsu hablará con él de manera apropiada para que así podamos cazar a esa terrible bestia. Debemos mantener la calma para dar solo los movimientos precisos y necesarios, como caza la serpiente. De otra manera, esta puede acabar con nosotros por nuestros descuidos."

Me quedo en silencio mientras medito lo vivo que está ese bosque y cual ha de ser la relación que la famosa bestia de Hima tiene con la naturaleza y los Kami. ¿Será realmente un animal o es un espíritu? Será una criatura traviesa o furiosa o directamente un retaso de corrupción proveniente de alguna sombra oculta en el imperio? Solo el tiempo y la calma nos brindará las respuestas.

El paisaje que se abría ante sus ojos era de una belleza calma y embriagadora. Un lugar excelente para apartarse del ajetreo mundano y dedicarse a la contemplación.

El río de aguas puras y cristalinas, discurría serpenteando entre la vegetación.

Sin duda es el sitio idóneo para albergar a poderosos kami de agua, pensó el shugenja, recordando la acertada recomendación de Matsu Naoko de realizar una ofrenda. 

La voz de la jóven saludando al pescador le devolvió a la realidad e hizo una reverencia al hombre, esperando su respuesta.