Wolf tomó un gran trago de aire al verse rodeado por todos aquellos hombres perfectamente armados y dispuestos a volarle la cabeza si hiciera el más mínimo movimiento sospechoso. Retuvo el oxígeno en sus pulmones el tiempo necesario como para pensar cómo demonios había llegado a esa situación y saberse incapaz de escapar de ella de ninguna forma, ni con acciones ni con palabras, aunque fueran su especialidad. Intercambió una mirada de soslayo con Álvaro, se encogió de hombros y, cuando parecía que iba a soltar uno de sus discursos, se desinfló como un globo.
- Increíble... Quince coronas por mi cabeza... hasta yo intentaría atraparme por esa recompensa... - Murmura entre dientes tras la intervención de la hechicera, no estando muy seguro de que fuera a servir para algo. Si algo sabía sobre los guardias es que eran muy cabezones. Y sus capitanes más todavía.
Lollenda por su parte, sin sorprenderse de nada de lo que estaba pasando centró su atención en encontrar una vía de escape de aquel lugar...
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se me cae un ojo verdad? xD
¿Qué significa esto humano? pregunto con una voz dura y amenazante. Primero dejas libre a ese cobarde ladronzuelo y ahora encima nos tratas como a criminales cuando no hemos hecho nada… entonces caigo en la cuenta de que ha mencionado a la inquisición. No hace falta ser muy inteligente para saber lo que eso significa.
¿Estás sugiriendo que yo, un miembro de la antigua raza he hecho un pacto con los oscuros? ¡Nosotros los enanos no somos unos debiluchos como vosotros o lo elfos, que nos vendemos a los dioses oscuros! ¡Retira esas palabras humano, o será mi hacha el que las retire por ti! le grito al capitán de la guardia completamente furioso, levantando el hacha y colocándome en posición de combate.
Alvaro quedo boquiabierto, la verdad que le parecio todo demasiado rapido y la guardia no cuchichea tanto con unos detenido, al menos si no vale la pena. El guardia tenia ordenes estrictas, y no esperaba menos, eramos un grupo peculiar y la verdad que no pensaba pagar nada que Gabriella hubiera nada, echandole una mirada de soslayo. Cuando el Capitán solto lo de la Inquisición como un mazazo me doble, y era un trabajo facil, una maga de la escuala de magia decia, que desgracia una cosa era ser un pilluelo y otra muy diferente que la Inquisición me acuse de lo que sea, he conocido gente ahorcada aceptando cualquier acusación con tal de que no sufrir mas y que los maten al fin. El miedo me cubre el cuerpo con un ligero sudor que me gotea por dentro de la blusa, hoy sera un día muy largo, pienso mientras miro por detras de los guardias esperando que aparezca cualquier cazador de brujas. Pero creo que le va ha costar quitarme todas las armas, prefiero una bala en la cabeza que meses de tortura.
Perdón por la tardanza.
El Capitán os dedica una mirada, y luego mira a sus hombres.
-Vigilad bien, y tened los ojos bien abiertos. Al menos indicio de problemas, matadlos. A saber de que son capaces.- El Capitán se retira, aunque solo a la entrada del patio, sin quitaros ojo de encima.
Pensé que era alguien de palabra, ya veo que no es así.- Dijo enfadada
Negó con la cabeza quedándose en pie observando el lugar con expresión ceñuda
La palabra de los humanos y de los elfos tiene el mismo valor que el estiércol. Y al parecer estos cerdos de aquí no hacen más que restregarse con el. Exijo una explicación, y si no se me da para cuando cuente cinco será mi hacha la que la pida. Uno, dos… mientras hablo levanto el hacha y me coloco en posición de combate. Los nudillos con los que sujeto el hacha están blancos de la fuerza con la que aprieto el arma. Tan solo el hecho de que se trataba de “agentes de la ley” había evitado que no me abalanzara contra ellos antes. Pero había sido acusado de algún delito que no había cometido, y no iba a dejar que semejante agravio contra mi honor quedara impune.
El Capitán abre su boca, intentado quizás sonreír, mostrando una hilera de dientes mal formados y amarillentos.
-La palabra es algo que ya no existe en el Imperio. Ser fiel a algo parecido solo trae problemas. Además, ¿Que hace una maga celestial tan lejos de su escuela? ¿Por que viaja en compañía de indeseables? ¿Y esa elfa, Asesina? Son demasiadas preguntas. Hasta que no sepa las respuestas, se van a quedar aquí.- Chasquea los dedos.
-Y matad al enano si llega a cinco.- Sobre vosotros, los arcabuceros apuntan directamente a la cabeza de Hargin. -No creo que nos vaya a ser de gran utilidad.-
Fuera de todo pronostico y despues de largas amenazas, esto que vendo ahora no es humo, si la bala no me alcanza lo van ha pagar caro. Como de la nada, con un gesto tan natural como chasquear los dedos aparece en mi mano derecha un arma, el estoque mi fiel amigo, nunca me ha decepcionado y cuantos enemigos lo han comprobado, en la mano izquierda aparece el main gauche, afilado corto perfecto, ahora solo queda batirse, como siempre.
Parece que si esto no se relaja, espero que con la intervención de la bruja, vamos ha vender al menos caras nuestras vidas, por 14 miseras monedas de oro y promesas que caen en saco roto, que injusta es la vida.
Con mi mirada recorro a los guardias, solo necesito una escusa, luego resad a Sigmar porque ni Verena os salvara lo juro por ella!
Lollenda rezó para que el enano llegara a cinco...Aunque se sorprendió de que supiera contar... El único número que sabían los enanos era mil
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Esta bien, si es asi como quiere jugar sus cartas.... Pero recuerde que cuando quede aclarada la inocencia, entonces usted y yo volveremos a hablar, me va a deber una disculpa, y le aseguro que no soy una mujer a la que se contente con facilidad.... - Gabriella estaba muy enfadada
Trrrreeessss... cuattttrrrrrrroooo… a duras penas consigo decir los siguientes números. El comentario del capitán acerca del valor de la palabra había hecho que mi furia aumentase, y ya no me bastaba con apretar el mango del hacha con todas mis fuerzas. Mientras no estaba diciendo los números, apretaba la mandíbula con tanta fuerza que las encías comenzaban a sangrarme.
Pero al contrario que ellos los enanos somos seres de palabra, así que no atacare hasta llegar a cinco como dije. Pero si cuando llegue a cinco no se ha disculpado, mi hacha se encargara de sacarle la disculpa.
dilo... dilo...dilo... - cerró los ojos por un segundo con fuerza - di cinco comepiedrasdemierda
Gabriella no pudo evitar estar atenta a lo que sucedía con el enano. -Me pregunto si será tan estúpido como para decirlo o, tan "cobarde" como para callarse ...
Los enanos son gente de palabra y no dudo ni un segundo que esto va ha acabar mal, asi que apresurandome en los versos que le mando a Verena, me concentro para combertirme en una furia de acero si ninguna bala se me clava en la cabeza antes de empezar, este es el momento de que algo nos interrumpa si no nuestras suerte esta echada, a sido un placer pienso sin musitar ni una palabra.
Master, creo que es necesario un plano, para asi hacernos una idea de la situación.
Wolf no se podía creer lo que estaba oyendo. Se llevo lentamente una mano al oído derecho e introdujo el índice en el oído para comprobar que no tuviera ningún tapón de cera incrustado. Luego se llevo esa misma mano a los labios y, haciendo pantalla con ella sobre la boca, olió su propio aliento. No había bebido lo suficiente como para tener alucinaciones, así que lo que estaba haciendo ese enano era del todo real. Estaba contando hasta cinco contra un grupo de mas de veinte soldados, armados algunos de ellos con armas de fuego.
Y entonces es Álvaro el que desenvaina las armas.
- ¿¡Pero te has vuelto loco!? - Exclama a voz en grito, con la boca abierta y señalando a su amigo como si fuera incapaz de creer lo que estaba haciendo. De hecho, era incapaz de creerlo - ¡Guarda tus armas ahora mismo, maldita sea! ¡Qué te vas a jugar la vida por un enano que tiene mas músculos que cerebro! ¡En serio, guarda las armas, que no se en que demonios estás pensando ahora mismo! ¡¡Cinco contra veinte!! ¡Y armados con arcabuces! - Abre los brazos y abarca con un gesto a todos los tiradores apostados en el primer piso, lejos del alcance de las armas de todos, salvo de las flechas de Lollenda - Y aunque los matáramos a todos, cosa que no va a pasar porque acabaremos como coladores antes de poder dar un paso, ¡¡Estamos en Altdorf!! ¡La ciudad está llena de tíos como estos, de guardias que nos matarán nada mas vernos!
- ¡Qué somos hombres sensatos! ¿Qué ha sido del escapa hoy para luchar mañana? ¿Cuántas veces hemos depuesto las armas y echado a correr por salvar el culo? ¡Unas cuantas docenas! ¿Y ahora te haces el valiente? Anda y no seas estúpido. Que lo haga el enano vale, que está mas loco que una manada de cabras, pero... ¿Tu? ¿Tu? Y además, ¿Por qué? ¿Porque lo dice el enano este? Anda y depón las armas, que ya verás como todo se arregla cuando la hechicera hable con sus superiores...
El Capitán suspira, se acerca hacia el grupo que os rodea, arrebata de las manos una de las alabardas a uno de los guardias y con el arma plana le arrea en toda la cabeza al enano, haciendo que este caiga, con un hilo de sangre.
-Vaya...- Dice el Capitán, dibujando media sonrisa. -Parece que la cabeza de los enanos no para el acero imperial.- Deja escapar una risotada. -En el fondo, tienen suerte de ser un grupo tan variopinto. De ser vulgares rateros, ya les habría separado la cabeza de los hombros.-
Hargin, tira 1d10, que serán los minutos que pasarás besando el suelo. Y por qué os necesito a todos vivos ahora, que si no los guardias disparan, y tienen HA de 45... Y son 20 disparos de arcabuz casi a quemarropa, que eso hace pupa XDDD.
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Mañana os lo hago, vía paint, pero lo hago. Que hoy ya estoy cansadillo y necesito de reposo XD.