Partida Rol por web

De pronto, notáis que la conversación entre quienes se encuentran fuera se detiene bruscamente.

-¿Qué ha ssssssido esssssso?- pregunta uno de los sujetos- Bartley, ¿qué ha  ssssssido esssso?

-¿El qué?- contesta, haciéndose el sueco. Vuestras voces se escucharon con claridad en el exterior- Yo no he oío ná.

-No mientassssss esssstúpido ssssser inferior. ¿Hay alguien contigo en la zona?

-¡NO!- gritó Hodge- Nunca nadie quier tar conmigo, ¿cómo iba haber alguien? Yo siempre toy solo, mu solo.

-Como nosssss esssstéssss ocultando algo, ya ssssabes lo que passssará...

Ahora estaba hablando el otro sujeto, que hablaba mucho más bajito que el primero, así que no pudisteis oír nada más.

Me tapo la boca con ambas manos al escuchar el giro en la conversación del pueblerino y las dos personas de extraño acento. De repente fui consciente del error estúpido que había cometido al hablar en voz alta sin preocuparme por los que se hallaban en él exterior, y más después de lo que había dicho mi sobrino. Si sus palabras eran ciertas, podía haber puesto en peligro no solo la vida de mi hermano, sino la de todos nosotros.

Me quedo  quieto, expectante, respirando lentamente para evitar realizar cualquier sonido, mirando hacia la puerta, a la espera de que la conversación acabe.

Maldición...

Pienso para mis adentro. Una vez mas he pecado de inocente y he obrado mal.
Mas de una vez mi forma de ser me había metido en mas de un embrollo pero estaba visto que no había escarmentado. Y por como hablaban esas personas de fuera esto no parecía un embrollo mas si no un problema y de los gordos.

Mire a mi tío para comprobar su reacción y lo vi igual de asustado que yo.
Durante al menos 1 minuto contuve la respiración y no me moví lo mas mínimo.

Apoyado en la pared, junto a la puerta saco el revolver del bolsillo, lo agarro con ambas manos y miro duramente a los Mallard. Con un movimiento de cabeza le indico a Jason que se coloque al otro lado de la puerta deseando con todas mis fuerzas que sea mas facil razonar con el que con Mycroft.

Si entran solo podré contar con el para abatir a esas cosas y ni siquiera se si mis balas les detendrían...mierda, Alan, como te has metido en todo este lío!!?? Calma...cálmate...tranquilo...si uno de esos bichos asoma su fea cabeza se va a encontrar con una bala del 38 alojada en el cerebro.

Niego con la cabeza, no voy a moverme ni un ápice, menos con los bichejos estos justo al lado, y con el revólver entre las manos solo podemos esperar que el bueno de Bartley consiga disuadirlos pese a nuestra más que evidente presencia... tal vez por alguna mala casualidad se alejen, aún así tendremos que ser precavidos antes de salir... si salimos...

Bartley está intentando distraerlos de lo que han escuchado, hablando de trivialidades sin importancia. Sin embargo, escucháis cómo uno de ellos lo aparta de un empujón, y le manda callar.

-Tú, mira a ver si hay alguien en essssa cassssa.

-Si ya os diji que no hay na de na. Sólo tengo basura, y nunca teno visitas- protesta Bartley, mintiendo, pero aún así, el sujeto lo vuelve hacer callar con un nuevo empujón.

La puerta comienza a abrirse...

La situación se tornaba desesperada. Ahora uno de los desconocidos trataba de entrar en la vivienda. Si lo que ha dicho Charlie es cierto es probable que estos hombres conozcan el paradero de mi hermano. Pero también es probable que sean peligrosos. ¿Qué hacer en semejantes circunstancias? Si dejo actuar a mister Rowlandson o a mister Jason seguro que intentan acabar con su vida sin pararse a pensar en preguntarle por Charles. Pero no sé si seré capaz de reducirlo yo solo, tiempo ha desde la última vez que combatí, mis capacidades en el arte del boxeo se encuentran harto oxidadas.

Me quedo observando cómo se va abriendo poco a poco la puerta, paralizado completamente por una mezcla de dudas sobre cuál sería el mejor curso de acción y el miedo a lo que las personas que parecían haber raptado a mi hermano eran capaces de hacer.

Es demasiado dificil de ocultarse aquí, además demasiado inesperado, no podremos con ellos, no al menos sin usar las armas de fuego, y usarlas requerirá revelar nuestra posición, lo cual solo nos deja una opción, dejarles fuera de combate y salir pitando, o investigar lo que haya que investigar esta misma noche.... miro a mi alrededor, y sujetando aún el revólver con una mano, preparo la siniestra rodeando ya con los dedos la espaldera de una silla listo para dar con ella al tipo que a de entrar y mostrando así mi clara intención de plantar cara, ante la imposibilidad de ocultación, no tenemos altenativa compañeros...

La puerta se abre, y lo que veis aparecer por ella dista mucho de ser un ser humano. Aparece un ser del tamaño de un hombre adulto, pero con aspecto de insecto. Realmente, parece una especie de moscardón gigante, que emite ciertos sonidos sibilantes al respirar.

Mis ojos no pueden estar viendo lo que creo que están viendo. No puede ser no. Me niego a aceptarlo.¿Que clase de cosa es esa?

Me quede pasmado, con los ojos abiertos como platos al observar a aquel "ser" extraño atravesar la puerta. Ni tan siquiera en antiguos escritos que habia estudiado habia descripciones de criaturas tan aberrantes como esa. Algo asi no tendria que existir. No puede existir. ¡Oh hermano, ¿donde te has metido?!

Qué-coño....

Quedo con la boca abierta, el revólver en una mano apuntando al engendro y otra mano sobre la silla

No entiendo el porqué, tal vez, si no lo hubiera visto, hubiera elucubrado rumores semejantes, pero sin ningún fundamento, tantas leyendas que había oido, escuchado y difundido, ahora tal vez algunas de ellas podrían cobrar sentido y veracidad, qué podría ser de mi vida tras esto

Vuelvo a mirar al ser de arriba a abajo, nah... no puede ser real, no me lo acabo de creer.....

El extraño ser se sorprende al veros, pero en cuanto nota vuestra presencia, se dispone a atacaros, sin mediar palabra con vosotros.

-¡Alerta! ¡Esssstamosss ssssiendo essspiados!

Es lo único que grita a su amigo, antes de cerrar la puerta de la cabaña con vosotros 4 y él mismo dentro.

Cuando es repulsivo ser insectoide cierra la puerta el corazón empieza a bombear a mil por hora tratando de abandonar mi pecho a traves de la garganta. Esa cosa parece creer que entre los cuatro no somos rivales para ella. Apunto a su bulbosa cabeza con mi 38 y aprieto el gatillo. En mi cabeza un único pensamiento:

- Hay que acabar con este y coger al de fuera antes de que traiga a mas de los suyos.-

El insecto gigante no se esperaba el disparo de Alan, y aunque se mueve veloz, no es capaz a evitar recibir el impacto de la bala. De su cabeza comienza a emanar mucha sangre, mucha, de un color rojizo excepcionalmente oscuro.

En vista de que el disparo de Alan no ha causado todo el daño que debería sin apenas pensarlo comienzo mi ataque.

De mi espalda saco dos cuchillos, que sujetaba con el cinturón, de dimensiones respetables y le lanzo uno con toda la fuerza que soy capaz.

Maldita sea, ¿Y si son personas? Realmente al verles no sabía si disparar o pedirles explicaciones, sin embargo sus siniestra presencia hacía que mi cabeza supiera la verdad aunque mi corazón tratara de esconderla, pero no puedo perder el tiempo al escuchar el disparo de Alan, y pronto me apresuro a deslizar el resorte hacia abajo apretando el gatillo y abriendo fuego contra el ser infernal

 La bala impacta en el  enorme ser que se tambalea herido y cosido de plomo, hago ademán de atravesar la puerta a su lado pero no me fio que aún no caiga por lo que espero unos segundos interponiendo la silla entre él y yo mientras grito a Bartley desplazando a él la tensión de nuestra supervivencia

¡¡ Bartley, ayúdanos, esta vez te matarán, Bartley, a ellos !!

El cuchillo sale por los aires y queda clavado en la puerta. El Mi-Go, herido por el impacto de Alan, y furioso, arremete contra Mycroft, el primero de los presentes que enfila su mirada. Lanza su mano contra el intelectual, pero a causa de la sangre que mana de su herida, no ve del todo bien, ve borroso, y falla al intentar coger al hermano de Charles.

Una bala a bocajarro en la cabeza y sigue en pie!!!

Doy un paso atrás bastante sorprendido cuando el cuchillo golpea la puerta. Contaba con la ayuda de Jason pero la inesperada actuación de Charly me ha dejado sorprendido. Cuando la extraña abominación arremete torpemente contra Mycroft aprieto con fuerza el cañón del revolver contra su torax y disparo nuevamente.