Partida Rol por web

abro un ojo y lo vuelvo a cerrar

JODEEERRRRR no era una pesadilla...es la pura realidad...nos toca ir de "excursion"

  pienso mientras bostezo suavemente y me estiro poco a poco.luego los abro lentamente mientras noto como una legaña me intenta agarrar el parpado izquierdo para que no lo abra y caiga en la tentacion de volver a cerrarlos...

pero esto no es un sabado cualquiera y de vacaciones..sino la realidad..asi que toca diana.

me giro un poco hacia el lado y me incorporo con mi manía de siempre:  pisando primero con el pié derecho.

ufff esta vez no me equivocado. Generalmente si me levantaba y pisaba con el izquierdo no es que fuera un mal dia...pero ya tenía esa espinita clavada de que no era buen día...y al final algo ..por muy pequeño que fuera , lo fastidiaba.

Ramon...¿ por qué nosotros? jejeje.. me echaba a reir mientras veia como Ana depositaba la carta a su familia

yo no tenía el privilegio de poder ver a mi familia...o simplemente el mero hecho de saber de ellos...

que sería de ellos...que sería de mis amigos...que sería de mi ciudad..

me visto y respiro fuerte antes de salir de la tienda de campaña

vamos chicos...no sabemos a lo que nos enfrentamos..pero sobreviviremos si nos mantenemos unidos

una frase que siempre la decía de broma a mis amigos cuando jugabamos al futbol o cosas similares...pero claro..ESTO NO ERA UN PARTIDO DE FUTBOL

Finalmente llegais a la entrada norte, que es la principal, hay unos doce soldados armados con varias armas y mas o menos la misma cantidad de civiles, poco a poco van llegando los últimos civiles.

Apenas han pasado 10 minutos de las 6:00 llega el comandante que os explico el objetivo.

No quisiera repetirme, vuestro objetivo es conseguir provisiones de la parte noreste de la ciudad,la parte este esta prácticamente agotada ya. Los jefes de grupo, para los civiles son los que llevan una cinta roja en el brazo ( uno la lleva ya puesta otra se la esta poniendo ahora ) añadida para esta ocasión, deberéis seguir sus ordenes. Solo queda daros las gracias y buena suerte.

El comandante, parece que ha dado por finalizada la conversacion, los soldados se dividen en los dos vehiculos y dos de ellos se ponen a la parte de delante. Los otros cuatro, aun a tierra, uno de ellos se sube y ayuda a ir subiendo los civiles, si alguien tiene algo que decir es posiblemente el ultimo momento que tiene.

mientras me dirigía hacia la salida norte  del punto seguro observaba todo el escenario en el que nos ibamos a mover..

coches abandonados, edificios sin vida....calles desiertas..todo parecía fantasmal...

pero eso no me hacia quitarme de la cabeza el hecho de querer seguir con vida al final del día...no sabía a lo que nos enfrentabamos...no sabia ese terror que había por ahí suelto y que sin duda traia buenos quebraderos de cabeza a toda la humanidad....

miré a todos los de mi alrededor y suspiré mientras pensaba que en todos los fregaos andaba metido...

Ana dirige una mirada a los soldados, una mirada intensa, pero decide seguir a Jose y subirse al vehículo.

Una vez sentada, dirige una última mirada al campamento. Quizá sería la última vez que lo vería. Sus ojos se ponen vidriosos, pero rápidamente sorbe por la nariz cualquier rastro de mucosidad y se restriega los ojos con las manos, volviendo a aparentar serenidad.

Finalmente Ramón también sube al camión, aunque un poco mas dubitativo que el resto. Los tres camiones finalmente se ponen en marcha y pasan a través de la puerta una vez es abierta.

A medida que abandonáis las primeras calles, Barcelona es mas caótica de costumbre, los coches están por el medio de las calles con las puertas abiertas, otros sin cristales incluso podéis ver algún cuerpo en el interior de algún vehículo o en el suelo cerca de el.

En una esquina incluso hay un agujero en el suelo, donde un chorro de agua se eleva mas de 10 metros, parece que algo reventó y sale por ahí.

Barcelona se podría decir que esta como en una película de terror. Lleváis poco mas de 10 minutos, los vehiculos van lentos esquivando los varios obstáculos de las calles, siempre pasando por calles grandes de mas de 2 carriles de transito. Desde la parte de atrás, tenéis todo el campo de visión tapado por la tela de protección, aunque la parte trasera esta despejada y podéis ver el estado, incluso veis como un cuerpo vivo al pasar vosotros os empieza a seguir, que rapidamente lo perdéis por la velocidad.

La ventanita pequeña que comunica la parte delantera con la trasera se abre, y el que parece ser el jefe de un vehículo, habla: En menos de 5 minutos llegaremos al destino. Preparaos.

Santo cielo suelta Ramón, al que la situación sobrepasaba.

La visión de tanto caos le resulta estremecedora. No lo esperaba, no lo sabía o no había querido saberlo. Todo era más bonito dentro del Punto Seguro, por improbable que le hubiera parecido eso ayer.

No tiene fuerzas para iniciar una charla de las suyas, para calmar los ánimos. Está aterrado, y no puede hacer otra cosa que mirar el mundo pasar por la salida del camión, como si fuera un televisor.

mis nervios se multiplican.
joder...estamos en el caos total....en el infierno..
no pensaba que todo estuviera así de mal...no me lo imaginaba en tales dimensiones
con las pelis que me habré visto de este estilo y ahora soy un protagonista..pero lo malo es que esta no es una peli....

Ana también observa todo con pánico y frustración.

Creo que el infierno es la casa de Heidi comparado con lo que hay aquí fuera. Dice mirando aún el sitio por el que habían perdido al hombre ese que les seguía, sin parpadear.

Es solo cuando el jefe se dirige a ellos, que vuelve a poner los pies en el suelo y sujeta sus cosas con fuerza. Chasquea la lengua.

Cómo si eso fuese tan fácil... Murmura preparándose.

Finalmente el vehículo frena secamente pero haciendo poco ruido. Casi al instante los hombres armados saltan del vehículo con los rifles apunto, como si se tratara de alguna película de acción podéis ver como apuntan al exterior buscando algo que pudiera ser problemático, segundos mas tarde, uno de ellos, deja le rifle colgando y abre la pequeña puerta de unos 50 cm que impedía que las cosas y vosotros cayerais al suelo en el trayecto.

El sol brilla y es un día bastante caluroso, aunque aun no se puede observar por culpa de los edificios, echáis un vistazo rápido a vuestro alrededor, estáis a una calle bastante ancha pero llena de coches algunos ordenados otros a mitad de la calle, un edificio de piedra de una sola planta con un cartel verde decora la fachada hace referencia al supermercado Mercadona.

Las puertas están cerradas y la reja metálica esta bajada y posiblemente cerrada.

Ana se baja, y aunque no tiene armas y está rodeada de guardias que sí, sigue sin sentirse segura.

Vale, habían llegado a su destino. No les habían dicho nada, pero suponía que las provisiones debían ser del Mercadona. Genial, la reja está cerrada.

¿No tendréis algo de dinamita en los bolsillos? Bromea, aunque con algo de ironía. O mejor... quizá si soplo muy fuerte se vuele el edificio, como en el cuento.. murmura para sí, pero aún bromeando.

Todo eso llevaba a que no sabía como abrir la reja.

Las bromas de Ana a duras penas calman un poco a Ramón. A desgana, se baja del camión.

Asaltar un Mercadona no era lo que tenía en mente el profesor. No es que esperara que fuera de caza, o a recolectar frutas a un bosque, es solo que lo que parecen proponer los militares es vandalismo y robo. Supone que el ejército tiene autoridad suficiente para hacerlo, pero ¿él, Ramón Lorenzo, forzando una puerta y llevándose comida? Le resulta difícil de imaginar, y tampoco le gusta nada.

Claro que la situación lo requiere, pero a Ramón le cuesta asimilar que la civilización y la sociedad humana que conocía haya llegado a tal punto.

No dice nada. Ni da ninguna idea ni opina. Tal vez los soldados se den cuenta de lo inútil que es y lo manden de vuelta a la base.

Esto no era lo suyo. No se le da el trabajo de campo. No es de utilidad. Su lugar está en el Punto Seguro, con los niños...

Uno de los soldados que mas cerca esta de Ana ríe un poco.
Puedes probar de soplar, y la dinamita me la olvide a los otros pantalones. Pero creo que no todos.

Pocos segundos mas tarde otro soldado saca un pequeño paquete que pone en la cerradura con algo que clava en el paquete, una luz de color roja encendida hace varios destellos para luego volverse verde.
Uno de los soldados recomienda que todos os ponéis a cubierto. Pocos segundos después de hacerlo una pequeña explosión resuena por la calle. Cuando miráis la entrada media reja a quedado literalmente desintegrada y la otra es un manojo de hierros.

El camión empieza a tirar marcha atrás para dar el culo justo en la puerta reventada. De pronto un disparo de una arma de los soldados alerta al resto del grupo de recolección, cuando miráis al final de la calle un cuerpo esta tendido en medio del asfalto. Parece ser que el ruido lo ha atraído...pero solo a uno?

El jefe de equipo os saca del letargo, dando prisa en cargar todo lo que podáis que no se pudra y dure bastante. Si queda sitio ya pondréis algo que pueda durar menos.

Algunos de los civiles empiezan a entran en el supermercado acompañados de 2 soldados armados con luces. El mismo jefe os da una linterna a cada uno.

si algo aprendí de mi gusto por las películas apocalipticas o de las peliculas de zombies es que no te fiases de estos lugares..y más si tenian comida, ya que podrían haber sido saqueados.
-ana, ramon, tened cuidado- lo mejor es no ir en cabeza ni en la cola del grupo. cualquier cosa que se pueda lanzar nos puede ser util, así que si teneis la ocasion de estar por la zona de utensilios o de conservas, pues coged algo..nos puede servir- dicho esto, esperé a que entrase gente y nos tocase a nosotros el entrar.

Cuando entráis apenas podéis ver mas allá de lo que ilumina la luz exterior.

Varios pasillos que podéis contar como unos 6 se pierden en la oscuridad solo iluminados por las varias linternas del grupo.

cojo una pequeña lata y me la guardo en la mano.
si me veo en el pasillo solo recogiendo comida antes la lanzo a la oscuridad para ver si alguien sale.