Partida Rol por web

La Estrella Roja

[Intr. Muffin] El ixateco

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02/07/2019, 22:03
Muffin

Notas de juego

En teoría podría usar 1rp para estabilizarme pero no serviría de nada porque al seguir sangrando cual cochino en matanza al turno siguiente no podría usar el "permanecer en la lucha" porque volvería a recibir daño del sangrado así que no veo como eso va a ayudar pero bueno.

Turno 1: gasto el primer punto de resolución, restantes 3

Turno 2: recibo daño del sangrado, mi hp baja, como he sufrido daño pierdo otro punto de resolución y gasto otro para estabilizarme. Restantes 1

Turno 3: daño del sangrado, hp baja, como he sufrido daño pierdo el último rp. No puedo estabilizarme, fin del turno sin rp. Muere. 

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02/07/2019, 23:01
Director

Notas de juego

Claro, pero ganas dos turnos xD
Como ponía en el anterior post, Torm está viniendo. Tranquilo que la posibilidad de esto estaba prevista, aunque he de decir que no solo de una hostia xD

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03/07/2019, 10:51
Director

En cuanto Muffin cae hacia atrás, tratando de detener el sangrado con sus pequeñas manos, el pirata pareció perder el interés en aquel ysoki, que sin duda parecía muerto entre tanta sangre. Con las dos manos que le quedaban libres se puso a trastear con el aparato de cierre, tratando de volverlo a activar con poco éxito. A Muffin se le cerraron los ojos y cayó inconsciente durante unos segundos. 

Cuando, gracias a su fortaleza de aventurero veterano, logró abrirlos de nuevo, el kasatha seguía, cada vez más frustrado, tratando de activar de nuevo el cierre... y demasiado centrado como estaba en ello, no vio a Torm, que con varios impactos de bala en su armadura aparecía tras la esquina disparando como un poseso. De hecho fue una suerte que Muffin estuviera tendido en el suelo, porque si no seguramente se hubiera llevado alguna ráfaga. Torm barrió el pequeño espacio entre el ordenador y las cajas con su rifle láser, y el kasatha recibió varios impactos que, si bien no le tumbaron, sí le hicieron retirarse y cubrirse. El artillero del Vadomo avanzó, y con una mano agarró al ligero ysoki por los restos de su segunda piel y lo arrastró, dejando un reguero de sangre digno de película de miedo por todo el hangar, hasta la nave. Por el camino recibió un impacto en el hombro de la ametralladora automática que casi lo derriba, pero siguió en pie. 

En ese momento, Muffin volvió a perder el conocimiento, y esta vez no estaba en condiciones de volverse a despertar. Parecía el fin: habría jurado que veía incluso la proverbial luz al final del túnel, una luz blanca, brillante, que le cegaba más y más...

Muffin despertó, y escupió sangre. El dolor le informó de inmediato de que no estaba muerto, y la luz no era otra que el foco de emergencia del puente de la Vadomo, que iluminaba a su tripulación mientras el capitán daba órdenes a voz en grito. Muffin pudo ver que estaba atado a la cama de la enfermería de la nave, y que tenía en el brazo un pequeño tubo inyectado: un suero de curación. A su lado, Pit le administró otro, y Muffin sintió que algunas heridas se cerraban. 

-¡Bienvenido!-le dijo al abrir los ojos, para luego inmediatamente agarrarse a un asiento que había en un extremo. Muffin comprendió que estaba atado para que no saliera volando con el despegue. 

La nave se sacudió, y por la ventana estrecha y pequeña pudo ver cómo el Culo de Joe se alejaba en la distancia. Finalmente, tras unos minutos tortuosos, por fin la nave se estabilizó. 

-Ya les he dado esquinazo en el campo de asteroides-dijo la voz de Fera por la megafonía-Vamos hacia Absalom. Por desgracia, el capitán nos comunica que vamos a tener que subsistir a base de raciones de emergencia. Muffin, si me oyes, gracias por salvarnos el culo.

Pit miró a Muffin, con una sonrisa. 

-Eso es. Hemos salido gracias a ti. No sé qué hiciste pero la puerta se abrió lo suficiente como para salir. ¿Cómo te encuentras? No quisiera ser irrespetuoso, pero, ¿es normal que tengas la cara tan hinchada?

Evidentemente la hinchazón no es tal, sino los abazones llenos de LPCs de Muffin. 

- Tiradas (2)

Notas de juego

Bueno. Vaya con el tutorial xD

Tienes el sangrado detenido y estás a 3 de vida gracias a los sueros de curación. Lo que significa que ya no corres peligro mortal, pero herido sigues.

Iba a preguntar cuando acabáramos que qué tal te había parecido el combate y tal en Starfinder... pero casi mejor no lo hago jajaj

 

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03/07/2019, 11:49
Muffin

Su mente vagaba entre la consciencia y la inconsciencia pasando más tiempo en la segunda que en la primera. Sintió como le levantaban en el aire pero no se despertó hasta que el suero le entró en la sangre. El dolor que su inconsciencia había contenido, lo lleno todo como si la presa que lo mantenía se hubiera pulverizado.

Gimio mientras Pit le administraba un segundo suero pero aún tendría que pasar mucho tiempo en la enfermería antes de estar bien. El despegue fue brusco pero apenas se enteró de él. Seguía sorprendido de estar vivo. Aquellos hombres le habían salvado la vida. Fue a hablar pero seguía teniendo la boca llena y apenas salió un susurro. - Gracias por salvarme la vida. - respondió al bienvenido de Pit.

Escucho la voz de la capitana y sonrió aliviado al haber dado esquinazo a los piratas. Luego se inclinó a un lado y "vómito" todo el contenido del abazon. Llenando el suelo de paquetitos de comida - Me ha dado tiempo a hacer la compra Fera, he conseguido traer 19 LPCs. Espero que con eso nos sirva, Capitán. - dijo por el comunicador antes de toser algo de sangre.

Fue fácil Pit, abrí la puerta y arranque los cables de la palanca para que no pudiesen volver a cerrarnos. Me ha costado un poco pero había un pirata que no quería colaborar. - dijo haciéndose el valiente. - Me encuentro como si algo hubiese intentado hacerse un bolso con mi piel. Debería estar muerto. ¿Quién me ha sacado de allí?  

Notas de juego

El combate lo he visto bien, se aguanta mucho daño antes de caer. Igual estaba un poco descompensado entre ambos bandos pero es lo que hay, entiendo que querías que fuese una huida frenética así que la sensación de peligrosidad la has conseguido. 

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03/07/2019, 20:21
Director

En cuanto Muffin vació los abazones Pit dio un salto atrás, sobresaltado. 

-Pero... ¿Qué diantres?-dijo mientras veía cómo de la boca de Muffin salía una sucesión aparentemente inacabable de pequeños LPCs, mientras su cara volvía a la normalidad al desinflarse como un globo. Muffin notaba los abazones doloridos por haberlos tenido tensados tanto tiempo. 

Pit miraba entre sorprendido, fascinado y horrorizado. Finalmente pulsó el botón del comunicador, y dijo:

-Capitán, buenas noticias... tenemos LPCs para comer. Muffin acaba de... eh... vomitarlos. 

Por suerte el capitán parecía estar al tanto de la biología de los ysokis.

-Sí, algo de eso había leído. Me alegro de que no tengamos que comer esa basura de raciones.

Ante las palabras de Muffin sobre el bolso de piel, Pit ríe. 

-Estoy seguro de que esos salvajes lo habrían hecho. Fue Torm el que te sacó, aunque en realidad no habríamos llegado a ninguna parte sin tu ayuda. El pirata solo se alejó del puesto de control porque ya no podía usarlo. Menos mal que sabes manipular un circuito-dijo con alivio. 

-Ahora descansa. Se ve que lo necesitas. Nosotros nos encargaremos de alimentar a los bichos. ¿Carne para los tres, no? La sacaremos de los LPCs.

Notas de juego

la sensación de peligrosidad la has conseguido. 

Demasiado casi xD 

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03/07/2019, 22:53
Muffin

El ysoki se levantó quejumbroso y se inspeccionó a si mismo. Estaba hecho un desastre, tendría que remendarse o le quedarían una horrible cicatriz. Solo pudo pensar en la cara que pondría su madre si la viese. Debía hacer un último esfuerzo antes de dejarse llevar por Morfeo. - Muchas gracias Pit, carne para los tres. Cuidado con los grapanes aun no me fio de ellos, no se como reaccionarán sin mi ahí. Haced una cosa, si vais a darles de comer y se muestran agresivos dejadles la comida cerca pero fuera de la jaula. Dásela solo si se calman. - dijo el ysoki dando instrucciones mientras se terminaba de levantar de la camilla. - El ixateco no os dará problemas, pasad tiempo con el, quiero que se acostumbre. Como hemos ido haciendo estos días atrás. Y dejadlo junto a la ventana, la luz le vendrá bien. - añadió mientras rebuscada entre el material de la enfermería.

Una vez hubo reunido el instrumental, el ysoki se llevó un trozo de madera con un paño a la boca para hacer fuerza y no gritar. Luego empezó a limpiar y coser sus heridas. Dejó que Pit recogiese los paquetes de comida interrumpiendolo sólo cuando necesitaba que le pasase algo de material. - Si hay algún otro herido mandamelo, le haré un apaño. - dijo una vez hubo terminado de remendarse. 

- Tiradas (1)

Notas de juego

Voy a probar la habilidad de curar para tratar heridas mortales. Cuesta 1 min y la CD varía dependiendo del instrumental médico que haya. Si la paso, recuperaría 1pg/nivel (3) y si la saco por 5 recuperaría eso más mi Int. Esto se puede hacer 1/dia mínimo. En un buen laboratorio de medicina se puede más. 

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04/07/2019, 17:13
Director

Los días en la Vadomo, como en cualquier nave espacial en tránsito, eran largos y oscuros. Pit informaba a Muffin de que los gapranes estaban nerviosos y algo agresivos sin él, y que el ixateco estaba somnoliento, cosa que no extrañó a Muffin ya que no recibía toda la energía que habría obtenido del sol en Luminaria en aquella nave. 

Gracias a sus expertos cuidados, a lo largo de los días sus diversas lesiones fueron curando. Las costillas magulladas por los impactos sónicos se soldaron y la terrible herida de la hoja del pirata se fue curando. A los dos días Muffin ya podía levantarse de la cama, aunque como mucho al baño, porque cualquier esfuerzo le costaba un horror. A pesar de sus cuidados, la herida había sido profunda y casi mortal, y había cortado limpiamente dos costillas, por lo que sí que le había dejado un recuerdo: no la horrible cicatriz que podría haber sido, pero sí una fina señal que le cruzaba el pecho en diagonal, una cicatriz que resaltaba blanquecina contra su piel grisácea y que iba casi desde el hombro hasta la cadera. 

Definitivamente, el acero al carbono no era para tomárselo a broma. 

Según pasaban los días, logró estar más despierto y moverse más. Finalmente, pudo levantarse e ir a su camarote, donde pudo cuidar de sus animales por fin, que parecían un poco hambrientos, pero estaban sanos y bien cuidados por la tripulación. Sus compañeros de viaje le dieron las gracias por su actuación en el Culo de Joe, y Muffin pudo ver que la armadura de Torm aún mostraba los agujeros de los impactos recibidos mientras le sacaba a rastras. 

Ese mismo día, Fera anunció que ya estaban llegando, y a las pocas horas Muffin pudo ver la inmensa estación Absalom, tan grande como un planeta pequeño. Estaba rodeada de cientos de miles de naves, una agrupación conocida como la Flotilla, que en realidad estaba formada por naves en ruinas, abandonadas, estáticas o de comercio que conformaban un anillo como los que tenían algunos gigantes gaseosos. Fera se incorporó al congestinado tráfico aéreo de la estación con habilidad, y por fin entraron en Absalom. Tras desembarcar en uno de los miles de hangares, Muffin se encontró con la bulliciosa estación, en la que había estado muchas veces, pero que nunca dejaba de impresionarle: un crisol de razas, culturas y todo tipo de formas de vida, un lugar poblado por millones de criaturas que se apiñaban en aquella estación. Por todas partes, aprovechando hasta el último espacio disponible, había alojamientos, tiendas, establecimientos, edificios de gobierno y todo lo que alguien pudiera desear. Si había que buscar algo, lo que sea, sin duda podría encontrarse en la estación Absalom. 

Osdar y su tripulación se dedicaron a descargar las cosas de Muffin a una de las carretillas motorizas públicas que se podían alquilar por toda la estación, un modelo más grande que aquel que le habían dado en el Culo de Joe. 

-Ha sido un placer, señor Muffin-le dijo Osdar-No se puede decir que no nos hayas hecho el viaje interesante. Tenemos que irnos en pocas horas, pero si alguna vez necesitas transporte, ya sabes a quién llamar-añadió sonriendo. Sus pieles de defrex estaban rotas en algunos puntos donde había recibido disparos, pero la verdad es que solo acentuaban ese aire de veteranía que le rodeaba. 

Notas de juego

La enfermería de la Vadomo es buena, y como vas a pasar varios días ahí, te curas entero. Realmente solo tienes que curar con medicina los puntos de vida, los puntos de aguante se regeneran simplemente descansando. 

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04/07/2019, 18:42
Muffin

Su recuperación fue rápida pero más lenta de lo que le habría gustado. Pasar dos días quieto en aquella cama con sus animales tan cerca y sin poder trabajar con ellos fue un suplicio. Aprovecho el descanso para relajarse todo lo que pudo, no había parado desde hacía un mes. Primero en aquel desierto y luego todo el tema del Culo de Joe.

Eso le dio mucho en que pensar, era la primera vez que había sido objetivo de una persecución simplemente por su raza. No sabía si aquello se repetiría o si volvería a cruzarse en el futuro con esos piratas pero ya no se sentía tan seguro como de costumbre. Cuando por fin pudo salir de la cama, lo primero que hizo fue trabajar de nuevo con los animales. El ixateco está más que listo para ser vendido como mascota. Disfrutaba de las atenciones humanas. Los grapanes habían mejorado mucho pero aún les quedaba mucho que mejorar. Seguiría trabajando con ellos hasta poder llevarlos sueltos sin correa y sin miedo a que hiciesen una masacre.

El reencuentro con el resto de la tripulación estuvo bien, había pasado apenas seis días con ellos y ya se sentía uno más. Se agradecieron mutuamente el haberse salvado el culo y rieron juntos por el mal trago pasado. 

Cuando llegaron a Absalon, Muffin no pudo evitar mirarlo todo como si fuera su primer dia allí. - El placer ha sido mío capitán, me han hecho sentir como uno más de la familia. Siento mucho todos los problemas que ha habido y os doy las gracias, muchos otros quizá habrían pensado que la vida de un ysoki no merece un tiroteo. - dijo más serio. - Si necesito volver a volar os llamaré, no lo dudes. Y quizá os recomiende a unos amigos. Il Mercato es un grupo pequeño pero se acabará expandiendo. - dijo dándole la mano al capitán antes de despedirse uno por uno de los demás. - No os metáis en líos, pero si os metéis y necesitáis ayuda mirad a ver si hay suerte y estoy cerca. Haré lo que esté en mi zarpa para ayudaros. En serio, no dudéis en llamarme. - dijo mirando a todos los presentes.

Una vez acabadas las despedidas, sacó su comunicador y llamo a su enlace. Informaría de que había vuelto y concretaría una reunión. Esperaría un par de días a que el ixateco recibiese una buena dosis de luz para que estuviese pletórico y trabajaría un poco más con los grapanes. 

Notas de juego

Mi idea es avisar de que he vuelto y tengo la mercancía, ir a mi hostal de confianza y prepararlo todo para la reunión con el cliente. 

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06/07/2019, 21:06
Director

Una vez despedido de la Vadomo, Muffin se interna en el gentío. Caminar por Absalom se parece más a nadar o bucear que a caminar, y orientarse más a navegar o astronavegar. Hay tanta gente que uno debe guiarse por las luces del techo, los dibujos del suelo o los carteles luminosos para saber dónde está y hacia dónde va. Por suerte, el ysoki es tan pequeño que se cuela con facilidad por entre las piernas de la gente y avanza a buen ritmo, mayor del que podría si fuese más grande. 

Finalmente, llega a su motel favorito, el que usa siempre que se aloja allí: una limpieza aceptable, precios competitivos, y una tasa de criminalidad por debajo de la media. El lugar perfecto. Tras saludar al shirren del mostrador, que ya le conoce bien, le alquila una habitación. Otra cosa buena de ese motel es que es más grande que muchos otros, por lo que suele tener habitaciones libres. 

En cuanto se hubo instalado llamó a Trix, quien le respondió alborozado, o lo que Muffin supuso que era gran alegría en un shirren por teléfono. Acostumbrados a hablar telepáticamente, interpretar las emociones en la vacilante y extraña voz real de los shirren es difícil. Le dijo que sabía que no le decepcionaría y que le esperaba cuando quisiera en su oficina. 

Por desgracia, muy pocas estancias de Absalom, por no decir ninguna, tienen acceso directo al exterior, por lo que prácticamente ninguna tiene luz natural del sol. 

Notas de juego

Te recuerdo esto del primer post: 

Hacía ya más de un mes que Trix, un shirren de la estación Absalom, uno de los más antiguos y fieles contactos comerciales de Muffin, le había venido con aquel encargo. Una lashunta, líder de una gran compañía, quería un ixateco para su estrambótica colección de mascotas, que incluía criaturas de todos los rincones de los Mundos del Pacto y más allá. Aquella lashunta estaba tan podrida de dinero que no le importaba pagar fortunas por animales raros, y ese era el negocio de Muffin. Sin embargo, esta en concreto no era fácil, y de hecho la lashunta no había logrado conseguirlo de ninguna otra forma, pese a sus recursos. 

Sin embargo, Trix le había hecho una buena oferta: pago por adelantado. Trix le había dado en aquel instante un creditdrive con cuatro mil créditos2 y le había dicho que, incluso si no encontraba al ixateco, podía quedarse el dinero. Pero que se lo daba porque tenía tal confianza en sus capacidades que sabía que lo encontraría. 

Por supuesto, el primer impulso de Muffin había sido coger el creditdrive, decirle que no lo había encontrado y terminar con aquello. Pero le caía bien Trix, y era un gran socio, no quería estafarle. Además, había conseguido pinchar su orgullo profesional con aquel desafío. 

La oficina de Trix está cerca del motel, y sus cerraduras biométricas están sincronizadas con las tuyas, como con todos los trabajadores de Il Mercato.

La habitación son 20 créditos la noche. 

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07/07/2019, 19:53
Muffin

Viendo que iba a ser complicado conseguir que al ixateco le diese algo de luz solar, Muffin decidió no posponer más el encuentro. Cuanto antes se encontrase con Trix, antes verían al cliente y antes podría salir en busca de otro negocio. Además estaba ansioso por conocer a esa lashunta que tenía tanto afán por las xeno-mascotas. 

Dio algo de comer al animal, lo arregló un poco para que estuviese presentable y lo metió en una jaula limpia que cubrió con un trampo. Eso lo relajaria y evitaría miradas de curiosos. Se puso sus mejores galas y salió en dirección a la oficina de Trix. 

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09/07/2019, 10:05
Director

Notas de juego

Estaba yo bajando un poco el ritmo para ver si daba tiempo a que otro jugador terminase, que os vais a encontrar dentro de poco. Pero nada, va a haber que esperarle xD

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09/07/2019, 11:54
Muffin

Notas de juego

:'(

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09/07/2019, 12:58
Director

Casi nadie se fija en Muffin, muy a pesar de llevar la voluminosa jaula y sus mejores galas, ya que hay demasiada gente y demasiadas cosas extrañas en cualquier calle de Absalom para que llame verdaderamente la atención. Colándose por entre las piernas de las especies más grandes, Muffin no tarda mucho en llegar a la oficina de Trix, que se alza encajonada entre una empresa de envíos (propiedad también de Il Mercato) y un establecimiento de comida rápida, que inunda toda la calle con el aroma a fritanga. Allí se sirven, clavados en pinchos, todo tipo de cosas fritas, algunas de las cuales de procedencia dudosa. 

Muffin pone su zarpa en el lector y la máquina verifica rápidamente los puntos de cada dedo y la retina de Muffin antes de abrirse con un chasquido. En cuanto pasa, la puerta se cierra automáticamente tras él, con un sonido hidráulico. Ante él se halla un almacén con todo tipo de mercancías, en diversos estados de embalaje, y unas escaleras que no tarda en subir para dirigirse a la oficina. Trix está sentado tras su escritorio, y mueve los quelíceros de alegría al verle con la jaula. 

Se levanta de su escritorio y le habla, ahora telepáticamente, de forma que su voz adquiere muchos más matices y emociones que por teléfono: 

-¡Muffin! Sabía que lo conseguirías. ¡Es increíble!-dice cuando ve al ixateco-Nunca había visto uno en persona. Ya he contratado un pequeño habitáculo exterior en el que podremos darle luz, son extremadamente caros pero por suerte lo ha pagado el cliente. Te iba a decir que te quedaras para la venta, pero justamente hoy ha llegado un comunicado de la sede central. Al parecer una corporación de Castrovel llamada MantraCorp ha contratado nuestros servicios, dicen que necesitan a alguien con experiencia en xenobiología y con conocimientos de ingeniería. Al parecer eres el único disponible que cumple ese perfil, y la sede te ha pedido a ti en concreto. 

El shirren coge con cuidado la jaula y la deja sobre la mesa, donde le da lo que parece un roedor muerto, que el ixateco ataca con entusiasmo y hambre. Trix se sienta de nuevo a su escritorio. 

-Hasta ahí, todo bien, pero me temo que las noticias de que un pirata loco está atacando naves solo por llevar nativos akitonianos ha supuesto un problema en Absalom. Casi todos los capitanes que podrían llevar gente fuera de la estación ahora no aceptan pasajeros ysoki, shobad, humanoides akitonianos ni otras razas de tu planeta. Los Caballeros de Iomedae están tras ese kasatha, pero no lo han pillado aún. Hasta entonces, salir de aquí te va a ser difícil. 

He estado preguntando y cobrando un par de favores, y al parecer una capitana androide llamada Vallan-7 es la única dispuesta a llevar ysokis en su nave. Creo que buscarla es tu mejor opción para llegar a Castrovel. Por fortuna parece que los de MantraCorp no tienen mucha prisa, pero tampoco conviene hacerles esperar hasta que los Caballeros encuentren a ese canalla. 

 

Notas de juego

Intentaré meter prisa xD

Bueno, vamos a avanzar un poco porque parece que la gente va un poco lenta xDD Y quiero seguir >.<

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11/07/2019, 13:12
Muffin

El ysoki iba nervioso por la calle, no todos los días lleva uno 4000 créditos en el bolsillo. Se dió tanta prisa por llegar que ni siquiera paró a comer uno de esos pinchos fritos que tanto le gustaban. Sólo cuando se cerró la puerta tras el respiro tranquilo. Inspiró hondo, se repeinó lamiendose la pata y arreglandose el pelaje y comenzó a subir las escaleras.

La oficina de Trix, el hombre que le había conseguido la mayoría de los trabajos. Un sitio familiar y una cara familiar. El ysoki sonrió al recordar su primer encuentro con un shirren, eran unas criaturas fascinantes. Realmente diferentes de los mamíferos y con una envidiable capacidad de hablar en las mentes de los demás.

He tenido un encontronazo con ese pirata. Destrozo el Culo de Joe y casi nos pillo a mi nave y a mi. Sabían quien era y en lo que estaba trabajando. Fue raro... La verdad es que la tripulación se porto de maravilla y los he añadido a mi lista de contactos, Il mercato debería hacer lo mismo, son de fiar. - dijo el ysoki tras una breve pausa. - Es una pena tener que irme, me habría encantado conocer a una cliente tan importante. ¿Seguro que no me puedo quedar hasta la venta? - rogó el ysoki. - ¿Me encargaré de lo de MantraCorp, que sabemos de ellos? ¿Han especificado algo más sobre el trabajo?  

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11/07/2019, 19:19
Director

Esta vez los quelíceros de Trix se mueven nerviosamente, y le llega una respuesta de preocupación a través de la telepatía.

¿Te atacaron? Santo Weydan. Me alegro de que estés bien. Vaya salvajes... No sé cómo pudieron saber lo que buscabas, las transmisiones con el cliente fueron a través de sus cifrados, eran último modelo, de esos que usan las grandes corporaciones. No creo que tengan a alguien dentro de Il Mercato... ¿A lo mejor interceptaron la transmisión en la que contrataste la nave para salir de Verces?

A su pregunta sobre el encargo, el shirren responde:

Por desgracia, ya sabes cómo son las corporaciones con estas cosas. No quisieron decir nada más por las comunicaciones, prefieren tratarlo todo en persona. Siempre están paranoicas con el espionaje industrial, y en Castrovel más, la competencia es peor que en un nido de serpientes. 

¡Puedes quedarte hasta que llegue el cliente! -exclama en la cabeza de Muffin. Tanta alegría podría ser extraña, pero Muffin sabe por qué es. Al preguntarle si podía quedarse, ha ofrecido a su socio una decisión: si dejarle quedarse o no. Desde que se separaron del Enjambre, los shirren tienen libre albedrío, y tomar decisiones es para ellos casi como una droga, incluso las más pequeñas decisiones triviales inundan sus cerebros de placer. De hecho, hay shirren que se convierten en "yonquis de las opciones" y se "drogan" constantemente con series de pequeñas decisiones diseñadas de antemano. Trix no llega a eso, claro, pero como todo shirren tomar decisiones le resulta tremendamente placentero. 

Tiene que venir dentro de poco hasta aquí para recoger al ixateco y llevarle al habitáculo exterior. Supongo que puedes quedarte hasta que llegue, ya buscarás luego a ese androide. 

Tal y como Trix ha dicho, no pasa ni media hora hasta que suena el timbre de abajo. Una pantalla se despliega y muestra que en la calle esperan siete lashuntas vestidos con idénticos, caros y elegantes trajes negros. Parecen clones unos de otros, y tienen todo el aspecto de guardaespaldas de los caros. De pronto, de la formación de guardias aparece una lashunta, con traje también, pero de distinto corte y confección que los demás, que mira a la cámara del portero automático. Tiene esa mirada de educada superioridad que solo se ve en altos ejecutivos y demás mandamases, esa mirada de quien está por encima de los asuntos de los pobres mortales. 

Trix aprieta el botón para abrir la puerta mientras agita nervioso sus quelíceros. Pronto, se oyen por las escaleras los pasos de los ocho lashuntas, los sordos impactos de las siete parejas de botas y los más agudos sonidos de los tacones de la clienta. 

En cuanto entran en el despacho, parecen llenarlo por completo: el despacho de Trix tampoco es tan grande, y con diez personas, contando a Muffin y a Trix, está abarrotado. Los guardias se despliegan con profesionalidad por la sala cubriendo la ventana y la puerta, recorriendo con su mirada todos los rincones del lugar. Probablemente la mayoría sean ex militares. Muffin puede comprobar que sus trajes tienen el ligero brillo que indica que no son solo tela: probablemente ofrezcan mejor protección que la mayoría de armaduras pesadas. Además, los bultos en sus caderas indican la presencia de armas de fuego. 

Proyectando su telepatía de forma que la oigan todos, Trix se levanta y les saluda. 

-¡Bienvenidos! ¡Bienvenidos! En nombre de Il Mercato, les digo que es un placer hacer negocios con ustedes. Nos acompaña Muffin, el mejor tratante de xenomascotas de todo el sistema. Él nos ha traído esta preciosidad. ¡Oh, Sadara!-dice, con una cortesía y amabilidad de lo más genuinas: no cabe duda de por qué Trix se encarga de las relaciones públicas y la atención al cliente-¿Es ese un traje de la nueva línea de Varlo Arden? ¡Impresionante!

Sadara avanza con seguridad y confianza absolutas por el despacho. Cualquiera habría dicho que era su propia casa, y que Muffin y Trix eran los invitados y no ella. Su paso casi recuerda al de un general avanzando por terreno conquistado. 

Tal y como dice Trix, su traje es impecable, pero más impresionante es ella. Los lashunta poseen un marcado dimorfismo sexual, y las mujeres son altas, delgadas, esbeltas y dotadas de un carisma natural. Y en este caso no es una excepción: ni las mujeres de las holorevistas tienen una figura más definida y perfecta. Su rostro tiene las facciones afiladas y casi como cinceladas, y se sienta con movimientos fluidos y gatunos. Se baja las gafas de sol (¿Gafas de sol en Absalom?) revelando unos ojos brillantes y que perforan más que un par de láseres de artillería modelo afelio. Dirige una mirada apreciativa a Muffin, aunque más como si fuese una mercancía valiosa que una persona, y con una sonrisa que podría cortar el cristal antibalas, responde. 

-Trix, querido. Vamos a ir al grano, ¿Te parece? Hablemos de negocios. Tienes lo que busco, ¿no?

La jaula del ixateco permanece sobre la mesa, cubierta con la manta. A juzgar por la ausencia de sonidos, debe de haberse dormido. Trix mira a Muffin, como invitándole a que haga los honores. 

Notas de juego

En el despacho está la mesa del Trix, su silla y tres sillas delante. Si te has sentado en una de las de los laterales, Sadara se sienta dejando una de separación. Si estás en la del medio, se sienta a tu lado. Si no estás sentado, se sienta en la del medio. 

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11/07/2019, 20:21
Muffin

El ysoki sonrió cuando le dejó quedarse. Pasaron el rato conversando sobre el encontronazo con el pirata, toda la información sobre el que pudo sacar y otros pormenores de su viaje. Le habló también de los grapanes y de sus planes para ellos por si en un futuro algún cliente se interesaba. No se esperaba para nada el despliegue que tuvo lugar. 

Un número alarmante de guardaespaldas protegían al cliente demostrando que aquella adquisición no habría supuesto un gran sacrificio para su bolsillo. El ysoki se preparo para dejar que Trix tomase las riendas y ocupó un discreto segundo plano hasta que el shirren le dió la entrada. Hizo una pequeña inclinación de cabeza, más un saludo cortes que una reverencia, y descubrió la tela al tiempo que decía. - Así es señora, recien traído de Verces. Un ixateco macho, un joven adulto en perfecto estado de salud. Está algo apagado pues como sabréis, la falta de luz le quita una de sus fuentes de energía. - dijo abriendo la jaula y despertando con cuidado al ixateco. Luego lo sacó de la jaula, lo acarició con delicadeza como había hecho los últimos días y dejó que el animal se acercase lentamente a curiosear a Sadara luciendo su precioso pelaje. - Además, he estado trabajando con el desde que lo capture y se ha habituado al contacto. Puede acariciarlo si quiere. - dijo preparándose para ayudarle si así lo deseaba. 

- Tiradas (1)

Notas de juego

Se habrá quedado de pie, en una posición secundaria a la izquierda de Trix. Que se le vea pero que no sea el centro de la conversación. 

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12/07/2019, 19:04
Director

Sadara terminó de quitarse las gafas de sol y se las pasó a uno de sus guardias sin mirarle, quien las recogió y guardó en un estuche forrado de terciopelo. Escuchó a Muffin, pero su mirada estaba clavada en la jaula y en la manta que la cubría. Cuando Muffin la retiró, la lashunta movió las antenas con atención, escrutando al animal, con la fascinación en los ojos. 

El ixateco parecía más dormido que otra cosa, salió de la jaula y se paseó indolente por el escritorio de Trix. Se estiró como un gato y bostezó mostrando sus dientecillos, agitando el pelaje, de tal forma que las células fotosintéticas de su pelo cambiaron y vibraron en distintos colores apagados al tratar de absorber la luz de los fluorescentes. Cuando estaba en Verces, era casi marrón claro por completo, pero ahora era casi totalmente negro por la falta de luz, con solo unos ligeros toques pardos donde le daba la luz. Sin más, se hizo un ovillo como un gato sobre el escritorio y se tumbó allí, con los ojos cerrándosele. 

Sadara alzó la mano, y de inmediato otra lashunta trajeada avanzó hacia ella. Su atuendo parecía distinto que el de los demás guardias, y en vez de tener la pétrea expresión de póker de los demás tenía una media sonrisa, como si todo fuera divertido. Llevaba un anillo con una gema verde en la mano derecha. 

-Disculpad, pero sabéis que tengo que asegurarme, ¿no? -dijo Sadara- Espero que no os importe que realice las comprobaciones habituales. No es fácil obtener un ixateco como este. 

Su voz indicaba que en realidad le traía sin cuidado si les importaba o no. La lashunta de la sonrisa alzó la mano del anillo, y la gema brilló. Movió la mano en un patrón preciso, y de pronto Muffin notó cómo todo el pelo se le ponía de punta, y la temperatura de la sala bajaba notablemente. La lashunta movió los dedos en un patrón preciso... y una línea de luz apareció y permaneció en el aire siguiendo su movimiento, como si estuviera dibujando con luz en el aire. Comenzó a entonar palabras imperiosas que sonaban como órdenes y que hacían vibrar ligeramente el aire en la sala.

Magia. 

En los Mundos del Pacto la magia no era extraña, pero aún así mucha gente pasaba toda la vida sin verla en absoluto. Algunos aparatos incorporaban elementos mágicos a su construcción, y todo motor de Deriva era una fusión de tecnología y magia, pero aún así no era tan habitual verla directamente, en su forma más pura. El poder al que estaba recurriendo la lashunta no tenía nada que ver con la tecnología: era algo muy distinto, mucho más antiguo y mucho más poderoso. 

El ixateco parecía haberse despertado y asistía con ojos asombrados más que asustados al espectáculo de luces. La lashunta terminó de dibujar un extraño símbolo en el aire y lo golpeó con la mano, haciendo que se desintegrara en mil lucecitas que recorrieron la sala como luciérnagas. Realizó varios conjuros más, ninguno de los cuales tuvo efectos visibles más allá de un ligero pitido en los oídos y el pelo de punta de la nuca de Muffin, y finalmente bajó la mano. Las luces volvieron a su brillo habitual y la sensación de presión en el aire desapareció. Trix movió los quelíceros aliviado, era su forma de soltar un suspiro de alivio. 

La lashunta asintió a Sadara y se retiró. Sadara seguía con la vista fija en el ixateco. Le miraba como un niño miraría a un juguete en una tienda de regalos, o a una nueva bici. Era un entusiasmo que parecía infantil y desentonaba con su por lo demás dura y fría imagen de mujer de negocios. 

-Muy bien-dijo al fin-Tenía que asegurarme de que no se tratase de una ilusión o de un duplicado de animatrónica. Ahora, hablemos del pago. 

Alzó la mano y uno de los guardias se acercó y abrió un estuche, en cuyo interior descansaban cuatro creditdrives dorados y negros. Sadara cogió uno sin mirar siquiera al guarda, y lo puso sobre la mesa. Muffin sabía que era una tontería, que todos los creditdrives pesaban lo mismo, pero casi pudo sentir el peso de los créditos en su interior. 

-El pago-dijo Sadara, empujando el creditdrive por la mesa-Diles a tus jefes que estoy satisfecha con el servicio. 

-Ha sido muy complicado-dijo Trix en la mente de todos. Muffin sabía que no lo podía evitar. Siempre regateaba. Siempre negociaba. Sería capaz de venderle hielo a un riforiano de Triaxus-Mi compañero estuvo un mes en el desierto, y el espacio es peligroso para los ysoki desde que...

Sin mudar ni por asomo la expresión, Sadara alzó una mano. Muffin pudo sentir cómo empleaba sus propias aptitudes telepáticas para cortar a Trix como quien cambia de emisora en la radio. O, mejor dicho, como quien apaga la radio. 

-Ahórramelo-dijo mentalmente. Su voz mental era distinta que la de Trix, severa y dura, era casi como si alguien te diera golpecitos con los nudillos en la sien-Acordamos seis mil créditos-dijo, esta vez con los labios. Muffin sabía que así era: cuatro mil para él, mil para Trix y mil para Il Mercato. Un trato justo, se mirara como se mirase-Pero como estoy satisfecha con el servicio, y para que me ahorres tu cháchara de feriante, he añadido mil al creditdrive. Considéralo un regalo-movió los dedos, y el creditdrive se acercó a Trix sin que lo tocara-¿Y bien? Tengo cosas que hacer. 

Trix se apresuró a mandar una señal mental de aprobación, y cogió el creditdrive. Incluso él sabía cuándo era sensato dejar de negociar. Uno de los guardias se acercó con una jaula con recubrimiento plegable y provista de suelo acolchado y luces interiores, y metió con sumo cuidado al ixateco en ella. El animal pareció un poco cabreado ante la idea de que le cogieran en un principio, pero en cuanto tocó el cómodo interior de la jaula se enroscó y se quedó dormido. 

Sadara se levantó. 

-Trix, Muffin. Un placer hacer negocios con ustedes. 

Notas de juego

Te quito los 20 créditos del motel, que no te los has quitado. 

Si no dices o haces nada, Sadara y sus guardias se van. 

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13/07/2019, 12:27
Muffin

El ysoki disfrutó viendo la fascinación que tenía la lashunta por el ixateco. Se vio reflejado en ella, tenían cierto parecido, los dos compartían esa fascinación y se sintió feliz por ver a su cliente satisfecha. Cuando la segunda lashunta avanzo, Muffin no entendía nada. No era la primera vez que participaba en un trato semejante pero si era la primera vez que estaba presente en el intercambio. Casi se sintió ofendido, casi. Aquel despliegue de magia, el primero que veía en su vida, basto para que el ysoki abriese la boca como un niño asombrado viendo Absalon por primera vez. 

Cuando las comprobaciones estuvieron hechas, el aire de ilusión infantil volvió a verse en los ojos de Sadara y Muffin se recupero no sin antes dar una mirada de respeto a la mujer que había hecho las comprobaciones. El pago se hizo según lo acordado dejando la asombrosa cantidad de mil créditos de propina. El ysoki confío en disimular su alegría mejor que el asombro por la demostración de magia.

La negociación había acabado, y la mujer estaba dispuesta a marcharse. Cuando se levantó, Muffin cambió se peso de una pierna a otra antes de romper su silencio. - Disculpe Sadara, siento robarle un poco más de su tiempo pero se que no me perdonaría no intentarlo. He oído que posee una de las mayores colecciones de xeno-mascotas del sector. Soy un gran amante de los animales y para mi sería un gran placer poder visitarla algún día. Se que lo que le pido es una locura, usted es una mujer muy importante y ocupada pero... - Hablaba como un niño, acelerado y dejándose llevar por la vergüenza y la ilusión sabiendo que pedía un imposible. - No hace falta que me de una respuesta ahora, ni siquiera próximamente pues debo irme en seguida, Il Mercatto me necesita en otra parte, pero en un futuro... Estaría muy agradecido. - dijo por fin dando se cuenta de que estaba divagando. -Lo siento. - se disculpó intimidado ante la posible reacción de aquella mujer. 

Notas de juego

Vaya... Yo que iba a hacer un sinpa jajajaja

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14/07/2019, 11:11
Director

Una ligerísima expresión de irritación pasó por el ceño de la lashunta, que ya se estaba levantando, cuando Muffin la detuvo. Sin embargo, volvió a sentarse y miró a Muffin con aquellos ojos penetrantes como láseres de minería mientras hablaba. Sonrió ligeramente.

-Evidentemente, mi colección no está... aquí-dijo, con un cierto desprecio en la última palabra-Pero nunca se sabe. ¿Muffin, no? -dijo volviéndose hacia uno de los guardias-Apúntalo en la lista de contactos. Ah, y tranquilo -dijo con su sonrisa confiada y sus ojos brillantes-en realidad no vas a dejar de trabajar para mí. MantraCorp es parte de mi holding en Castrovel. Claro que yo no tomo las pequeñas decisiones de cada empresa-dijo agitando una mano como desechando una idea tan absurda-Pero no deja de ser mía. Tal vez algún día tenga más encargos. 

Nos veremos -dijo, esta vez dando claramente por terminada la conversación y levantándose- Mi ixateco necesita luz. 

Y, sin más, se dio la vuelta, se volvió a poner las gafas de sol que el guardia le tendió y salió de la oficina seguida por su séquito de guardias. Una vez que la cámara confirmó que habían subido a sus vehículos, Trix se echó hacia atrás en el asiento e hizo un ruidito aliviado con los quelíceros. 

-Bueno, eso ha ido mejor de lo que me esperaba-dijo en la mente de Muffin-Estos mandamases me ponen nervioso. ¿Siete guardaespaldas? Ni que esto fuera una zona de guerra. Y, ¿quién demonios lleva gafas de sol en Absalom?

En fin, el caso es que tenemos unos buenos mil créditos de más... que nadie sabe que tenemos-dijo alzando el creditdrive negro-¿Qué te parece? ¿Mitad y mitad? 

Notas de juego

Vaya... Yo que iba a hacer un sinpa jajajaja

XDDD me temo que para evitar eso, en los moteles se paga siempre por adelantado jajaja 

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23/07/2019, 16:54
Muffin

La conversación terminó mejor de lo que el ysoki había esperado. Cualquier cosa que no acabase con él fulminado en el suelo atravesado por la mirada de aquella mujer era un buen final. Suspiró tranquilo cuando se hubo ido. Un posible contacto para futuros proyectos, eso era bueno. Y tenían mil créditos más, eso era mejor aún.

Creo que es una forma de demostrar su poder y lo mucho que les sobra el dinero. De ahí las gafas y el conjunto de guardaespaldas. - dijo volviéndose hacia Trix. - Me han rajado de arriba a abajo Trix... Esta bieeen. Mitad y mitad. Pero deberás encargarte del asunto de los grapanes. Y nada de perros de pelea, perros de seguridad como mínimo. Yo correré con los gastos mientras termino de prepararlos. Pero más vale que no tardes, comen como limas.