- Por supuesto, Maese Mormont, usted está al mando. Me parece una buena idea- contesté al hombre de mirada gélida con mi débil voz. - Cuanto menos tiempo perdamos será mejor- dije haciendo un gesto hacia el pasillo, cuando el norteño comenzó a andar yo lo seguí con paso raudo, siempre unos cuantos pasos por detrás, junto con los otros guardias.
Dejo a Quentyn que interrogue a los sospechosos mientras Jean y yo seguimos investigando.
Pese a vuestros gritos y órdenes la multitud apelotonada sigue corriendo hacia vosotros y en breves instantes os arroyará. Escucháis como la gente que forma la multitud comienza a dar voces confusas y caóticas -¡Corred! ¡un asesino! ¡huid!
Si no hacéis algo enseguida chocarán contra vosotros con gran fuerza, algo que no es bueno para nadie y mucho menos para el maestre.
Se puso serio al ver sus ordenes siendo ignorada y observo a los soldados. Hagan una barrera humana, preparense para el choque y traten de que nadie pase. ordeno rapidamente mientras la gente se acercaba.
Salio a su encuentro aunque la idea era tomar a alguno de los invitados para cuestionarlo. Ha pasado algo en gran salon? porque estan tan nerviosos? pregunto intentando comprender que pasaba, no era un comportamiento que le gustara usar pero no se le ocurria una mejor idea en momento de panico.
Master espero que no se haya olvidado de un pobre viejo como yo :(
Sacas la espada del cuerpo sin vida de tu señor y la sangre brota de la herida dejada a su paso. Lo han atravesado de lado a lado, sin resistencia alguna. El asesino debió aprovechar que su víctima estaba dormida para asestarle el golpe fatal. En el pomo del arma distingues claramente un dibujo, el pez de la Casa Tully, impreso en color negro.
No me olvido, simplemente estaba actualizando y me quedé a medias. Siento la demora :)
Veis como un hombre abre la puerta de un pasillo y al veros registrando a otras personas vuelve a cerrar rápidamente, refugiándose en su interior.
-Que usen los escudos para detener al gentío!- dije en voz alta, poniéndome delante del maestre a fin de proteger su integridad física.
Al ver aquella escena tan particular, le hecho una mirada a Jean y comienzo a caminar dando grandes zancadas, para abrir aquella puerta, con la mano ya puesta sobre el pomo de la espada.
Aquel simbolo lo confunde por mas de una razon. Estaba seguro que el pez negro se encontraba muerto, pero si de verdad se tratara de él ste asesinato tenia aun menos sentido. Pero tambien estaba la posibilidad que fuera alguien haciendose pasar por él, lo que enojaba mas al anciano caballero.
Conocia a Bryden, sabia que aunque era rebelde y cabezon nunca fue un asesino. Limpio en la sabana la espada y fue afuera para reunir a los soldados para dar ordenes. Se diriguirian a la habitacion de Jojen Reed y verian que informacion podrian sacar de ahi.
Seras vengado Ser Neal. juro en un susurro mientras avanzaba con la espada en su mano.
Entras en la habitación de Lord Reed y en ella no ves absolutamente nada raro, salvo un hombre muerto tirado en el suelo, tal y como dijo el Lord. Tiene un feo tajo en el pecho y, junto a él, ves un cuchillo y numerosos venados.
Abrís la puerta sin dudarlo y veis en el interior a dos hombres, uno anciano y tullido y otro joven y aguerrido.
Alguien abre la puerta de un fuerte empujón y asoman dos hombres en la estancia. Uno de ellos es de aspecto recio, noble y peligroso mientras que el otro es joven y enigmático.
Joshep reconoce que el primero es Joren Mormont.
Los hombres chocan con fuerza contra vuestra barrera, tratando de huir de algo incierto. Aguantáis como podéis, sufriendo el envite de la fuerza de decenas de personas asustadas. Durante el choque las personas que encabezaban la marea son aplastadas por el resto, sufriendo graves heridas.
Tras la turba podéis ver, en el pasillo, a dos personas sobre un charco de sangre.
-Pues se me acabo el tiempo- Pienso mientras voy hacia el viejo a toda velocidad y poniendome a su espalda le pongo el cuchillo en su cuello -Bueno, señores. Tenemos aqui una curiosa situación. Quiza queramos calmarnos antes de que alguien haga alguna tonteria- Digo mientras miro fijamente a los hombres que han entrado por la puerta, evaluandolos. A la vez susurro unas palabras al oido del viejo -Si querias ayudar este es un buen momento para empezar-
-Pues se me acabo el tiempo- Pienso mientras voy hacia el viejo a toda velocidad y poniendome a su espalda le pongo el cuchillo en su cuello -Bueno, señores. Tenemos aqui una curiosa situación. Quiza queramos calmarnos antes de que alguien haga alguna tonteria- Digo mientras miro fijamente a los hombres que han entrado por la puerta, evaluandolos.
Perdon por tardar tanto en escribir, he tenido unas semanas duritas en el curro
Master, reconozco al anciano al cual se toma de rehén? Puedo tirar algo para evitar que llegué a él? Ya que en el post anterior había dicho que entraba con la espada lista para ser desenvainada.
Symon nota a las dos personas en el fondo y empieza a hacerse fuerza para apartar gente así poder llegar hasta el fondo. Con una mano en la empuñadura de una espada tiene mucho cuidado de no lastimar a nadie.
“Esto es una pesadilla.” Piensa preocupado mientras avanza.
Observo al hombre tirado y luego el resto de la habitación extrañado. Pensando que otro grupo debia encontrarse aquí y si se había retirado al menos moverian el cadáver.
Miro a sus hombres y dio una nueva orden. Volverian rapidamente al salon principal e informarian de todo esto al rey. Dada la orden empezaron a regresar al gran salon de la boda.
Protegiendo al maestre ordeno a mis hombres que vayan apartando a la gente a fin de poder llegar hasta los 2 cuerpos que veo y a los que Ser Symon se esta acercando.