Partida Rol por web

Tras acabar con todas las ninfas del mago Faresm, quien habia osado insultar la hermosura de la joven hechicera, Elara inicio nuevamente su peregrinacion hacia las tierras del norte.
Tierras salvajes, infectadas de harpias, wyverns, grifos, y quien sabe que otras espantosas criaturas salvajes.
Ya no viajaba acompañada.
Elara habia perdido el rastro de sus cinco compañeros de viaje. Sin embargo, aun tenia en su mente la idea fija. Intentaria por todos sus medios completar el recado encargado por el Amo del Calabozo.

Aunque tubiera que viajar sola, llegaria a la torre donde se habia refujiado la harpia sacerdotiza de Zariel, (un archidiablo de la novena capa del infierno) y le arrancaria el broche magico que el Amo del Calabozo necesitaba.

Lo que nunca se imagino la joven maga, es que en ves de grifos y harpias, se cruzaria en su peregrinacion con uno de sus más antiguos compañeros de aventuras...

A lo lejos, a un costado del arrollo por el que Elara venia descendiendo valle abajo, bajo las sombras de las imponentes montañas, una fogata iluminaba el rostro de un hombre...Shaguerrak!

Elara mira extrañada a aquel que recordaba como un elfo.
Abre sus grandes ojos azules como tratando de entender que aquella escena estaba sucediendo, esto era un sueño? Pensó...
Luego con vos temerosa dice:
Shaguerrak?

Cuando Elara se acerca al improvisado campamento, enseguida nota que el conocido guerrero se encuentra apoyado contra una mochila, y dormitando...
zzzzzz
ZZZZZZZZZ sisea Shaguerrak
La joven maga llega al fogon y en seguida un joven de poco mas de veinte años que seguramente se encontraba vigilando el descanso de su compañero, surge desde detrás de un promontorio...

Elara se acerca suavemente a Shaguerrak que duerme apoyado en el árbol cuando de pronto le lanza una terrible patada a un costado y grita:
Despierta Elfo arrepentido!!!

Hey! Shaguerrak desenvaina. Luego mira a Elara y sonrie. - Sigues pateando como una niña malcriada así no conseguiras novio. Y por cierto olvidaste el prefijo Lord. (dejo las armas desenvainadas no sea que esta en uno de esos días)

Bueno, hasta que por fin despertaste.
Hace rato que te espero.
Nos vamos.
Elara saca una bola de cristal de dentro de su bolsa de cintura, que es grande por cierto.
Ah! hay un grupo de aventureros que anda por ahí, buscando quien sabe que cosas en este momento.
Teníamos que matar un clérigo necromántico que vaya uno a saber que cosas ha hecho, bueno, por lo pronto, le llevaron un artefacto que me mandó a buscar el Amo del Calabozo.
Tengo como viajar hasta donde está ellos, por supuesto.
No me fió de andar sola por ahi en el bosque con un loco como tú.