Partida Rol por web

Enarcó una ceja mientras sostenía la mirada al cuervo, mientras maniobraba para llegar hasta allí una vez el semáforo se puso en verde. Seguramente querría guiarle hasta algún lugar, y fuera lo que fuera, de seguro era mejor que nada. Con tantas desgracias pasando por el mundo, nunca se sabe cuando podía necesitarse un héroe.

- Veamos qué puedes ofrecerme, no quisiera perder una mañana para nada amigo... - Dijo para el cuervo, aunque realmente sabía que farfullar eso en su jeep no iba a ser suficiente para que eso lo escuchase... De poder entenderle.

El cuervo, viendo que le sigues, empieza a conducirte por las calles de la ciudad. Sorprendentemente, todos los semáforos se ponen en verde y tardas poco tiempo en seguir al cuervo hasta un callejón apartado por el que no cabe tu jeep. El cuervo se queda posado encima de un contenedor, y te contempla, esperando a que bajes y acudas a él.

Aparcó el Jeep en el lugar y se bajó rápidamente. Entró en el callejón hasta donde estaba el contenedor, manteniéndose a una distancia prudencial y observando el lugar con un vistazo descuidado para el ojo inexperto, pero un escrutinio analítico para el ojo experto. En su mano iba la Teje-Destinos, y esta se aferraba a la lanza expectante.

- Bueno pajarito, ¿Quien te manda hasta mí?

- Tu abuelo. Mi nombre es Munin; tengo noticias para ti.

El pájaro se posa en el suelo y te mira

- Voy a ir rápido. Mi hermano y yo ya hemos avisado a los demás; tu eres el último, y hay prisa. Odín cree que el Ragnarok es inminente; el clima frío tan extraño es señal inequívoca de que se acerca el Fimbulvert, el invierno de tres años que precede al Ragarok. El dios Uller nos ha hablado de un artefacto, el Corazón del Invierno, que se ha activado hace poco y que puede desencadenar el Fimbulvert con toda su fuerza, pero también detenerlo. Odín quiere encontrar ese artefacto, pero está oculto aquí, en Midgard, y los Aesir no pueden intervenir directamente en el mundo de los mortales. Por eso os ha elegido a unos cuantos de los vástagos mortales de los Aesir para que encontréis ese artefacto y lo pongáis a salvo. El Corazón del Invierno se encuentra enterrado en Bodie, una ciudad minera abandonada de California; allí te encontrarás con los demás vástagos que han sido elegidos para esta misión. Ponte en marcha inmediatamente; no te preocupes por el dinero o el transporte, Frigg se ha encargado de unas cuantas cosas y lo tendrás fácil para desplazarte.

El cuervo levanta el vuelo y se posa en un contenedor

- ¿Alguna pregunta, hijo de Vidar?

Eric había captado el mensaje, cuando su abuelo quería algo, era difícil negarse. Asi que el Ragnarok estaba cerca... Curioso ver como las sensaciones nunca mienten.

- Odín, siempre en movimiento, siempre pensando, con un mundo y un panteón dependiendo de sus decisiones... Una tarea digna de un Dios tan grande. - Dijo divagando para sí mismo en voz alta.- Dile a mi abuelo que ya estoy en movimiento hacia el objetivo, que puede confiar en mí... Al menos ha mostrado más preocupación que Vidar, el cual parece ignorarme en estos tiempos que corren. Me reuniré con los demás Héroes y nos pondremos manos a la obra para rescatar la reliquia que busca mi abuelo. Mi única pregunta es donde coger el avión para poder pasar mis "objetos privados" y donde encontraré al resto en América. - Se giró encaminandose al Jeep.- Gracias amigo Munin, espero que nos volvamos a ver.

- Cualquier aeropuerto, estación de tren o de autobuses servirá; tu solo tienes que dar tu nombre,  y pasarás sin problemas. Con el resto te encontrarás cuando estéis cerca del objetivo.

El cuervo alza el vuelo y desaparecer de tu vista

- Buena suerte en tu misión, hijo de Vidar. Tu padre no te olvida; fue él quien solicitó a Odín tu participación.