Partida Rol por web

-Vamos debe de estar a punto de morir!!

-Probemos hechizo de ataque más básicos...

Nagash concentra su energía pero el orbe de ácido sale completamente desviado en otra dirección. Parece que el gnomo no está muy centrado en este combate.

Aunque el resto de los ataques fallan totalmente, el clérigo aprovecha que el ciempiés baja momentáneamente la guardia para conectar un tremendo golpe de maza que reduce el cráneo de la alimaña a pulpa, haciendo saltar por todos lados sangre y sesos de color verdoso. El cuerpo continúa moviéndose preso de espasmos durante pocos segundos para luego quedar inmóvil.

Jacen sigue notando en la punta de sus dedos ese incómodo picazón, incluso algunos dedos parecen habérsele dormido...

- Ven aquí, voy a ver si te puedo ayudar con ese veneno.

- No, si ya mejor me amputo el brazo.

- No seas exagerado. He estudiado mucho en el templo sobre el arte de la sanación.

- Eso es lo que me temo.

- Veamos a ver si con este antiveneno y la ayuda de Kronos... Arghhh... ¿qué coño has hecho?

- Creo que algo se debió de perder en la traducción del manual.

- ¡¡Lo que se va a perder es tu cabeza!!

Jacen consigue zafarse por fin del efecto del veneno. Pero se encuentra realmente mal. Ve borroso y las manos le tiemblan. Es dudoso que vaya a ser mucho más efectivo, al menos en combate y desactivando trampas, hasta que se recupere.

- Toma esto Jacen. Hará que te sientas mejor. Ahora deja que te salpique de magia con mi varita.

- Por favor... deja de hablar

Después de curarse y administrar los mejores cuidados posibles a Jacen, los TR se encaminan hacia el mausoleo de la propiedad. El edifico rectangular se encuentra en la esquina noroeste de la propiedad. En cada una de sus esquinas se encuentran columnas talladas a la semejanza de hombres y mujeres con los brazos cruzados. Un par de puertas de piedra custodian la entrada, en las que se pueden apreciar los rostros en bajorrelieve de dos hombres. Kronos traduce los jeroglíficos del Osiriano Antiguo:

"Cripta de la Casa de Pentheru: que los Dioses maldigan a los profanadores hasta el Día del Juicio"

Las puertas son pesadas, pero no están cerradas. Bajando un tramo de escalera de 5 metros, los aventureros se encuentran una habitación rectangular en cuyo centro se encuentra un altar de piedra situado sobre una tarima de piedra. Cuatro columnas cariátidas, con la forma de figuras femeninas y masculinas con los brazos cruzados sobre el pecho y espadas khopesh o ankhs, se situan en cada esquina de la plataforma. Una figura envuelta en vendas, con los brazos cruzados sobre el pecho, parece dormir el sueño eterno sobre el alta.

También Hay portaantorchas vacíos construidos en las cuatro esquinas de la habitación. En la pared opuesta hay una escalera que desciente a la oscuridad.

-Que alguien me de la poción para ver en la oscuridad, se que la vamos a necesitar más que nunca. Kronos decapita al cadáver para evitar que luego nos cree problemas. Estoy cansado de respetar a los muertos cuando estos no hacen más que volverse contra nosotros. En cuanto lo decapites, Nagash haz fuego, vamos a incinerarlo también.

Mientras que Nagash prepara el fuego, Kronos coge su hacha de batalla y asesta un golpe definitivo, separando la cabeza del tronco.

- Diría que lo siento pero no es verdad, te reunirás con mi la Señora de las Tumbas en breve.

Nagash coge la antorcha que le tiende el guerrero e incendia el cadáver, para así terminar el procedimiento iniciado por Kronos.

- Thantalas, toma la poción. La verdad es que siendo el que peor veías en la oscuridad deberías haberla llevado tú encima.

Nagash enciende la antorcha y Thantalas bebe la poción que le pasa Jacen, pero cuando Kronos comienza a acercarse al altar, la figura envuelta en vendas se levanta y comienza a acercarse a los aventureros.

- Creo que he visto antes a esa criatura

Kronos agarra con fuerza su maza y se prepara para el próximo movimiento de su enemigo.

Nagash prepara su disparo con calma, siente como su cuerpo se relaja, y un segundo antes de disparar grita a sus compañeros:

-Tranquilos, he tenido tiempo para fijar el blanco.

Thantalas ve que su compañero se coloca en posición defensiva, y hace lo mismo. 

- Kronos  es el momento de mostrar lo que hemos practicado, el muro de escudos!!

Jacen carga su arco y dispara sin mirar haciéndose el chulo, consiguiendo únicamente que la flecha golpee el techo de la cripta para desesperación de sus compañeros.

- La próxima vez miro al objetivo, prometido.

La flecha de Nagash golpea el pecho de la criatura envuelta en vendas, traspasándola de parte a parte sin que tenga efecto aparente. Ésta sigue avanzando y se pone al alcance de los aventureros que se preparan para recibir su ataque...

Con gran furia, Kronos ataca con su maza de armas... tanta furia que se pasa de ímpetu y lo único que consigue es dar una vuelta sobre sí mismo.