Partida Rol por web

Esta sala mide 20x26 metros y tiene una altura de 15 metros. Dentro de la habitación hay una gran mesa cubierto con un fieltro, una pequeña mesa redonda y una rueda octogonal colgada de la pared.

La rueda está en el muro opuesto a la entrada, justo delante de la puerta, a cinco metros del suelo. Los lados de la rueda están numerados del 1 al 8 y las cifras están pintadas de un color rojo sangre. La rueda, gris y negra, está hecha de acero y ébano y tiene dos metros de diámetro.

La mesa es de mármol, de 1x4 metros, y está cubierta por un grueso fieltro dorado. En el fieltro, perfiladas en rojo, hay ocho casillas numeradas del 1 al 8. La mesa pequeña, también de mármol, es redonda y tiene un metro de diámtro. Encima suyo, hay unas figuras metálicas, idénticas a vosotros hasta el último detalle, una de cada uno.

Encima de la puerta hay el único asiento del lugar, un trono inmenso y ornamentado, que está vacío.

El trono que para todos está vacío, para tí tiene un ocupante. Un joven exquisitamente bello que te mira fijamente y dice ¡Ah, aquí estás! Ahora empezaremos. ¿Intentarás dar un buen espectáculo, verdad?

Mosqueado porque sus pies habían andado solos miró al resto, a ver si como ellos decían, andaban tras él, todos juntos.

No sabía realmente lo que había sucedido, pero imaginaba que era como una fuente de deseos y entonces preguntó por lo que tenían delante: - ¿Y ahora qué?

-Ahora... dadme un segundo, les dijo Dalbur a sus acompañantes. Luego miró hacia el trono aparentemente vacío, y dio unos pasos en esa dirección. -Lo invisible y lo visible se mezclan en esta sala, anunció. -Estoy listo para empezar, respondió a la pregunta que nadie había formulado. -Pero antes debo saber de qué juego se trata, si no es mucha molestia.

Dalbur se detuvo unos pasos delante de sus compañeros, y esperó.

Sonrie vaya, si quieres saberlo tendrás que jugar, coge la figura que te representa y ponla en una de las casillas. termina señalando las mesas.

- " Puffff " - digo al vernos en otra extraña situación, ¿ es que nunca se va a terminar ? prefiero algo a lo que golpear.

Tras unos instantes, Dalbur se acercó a las figuras. Agarró la que era idéntica a sí mismo, y la puso en la casilla número uno. Sus movimientos eran decididos, al menos en apariencia. En realidad, estaba cada vez más confuso en aquel extraño lugar.

-Ya está. La casilla número 1. ¿Juguemos?, dijo con voz desafiante en dirección al trono vacío.

La última vez que Gramj dijo algo parecido (Juguemos) terminó en una pelea en la que muchos dientes fueron escupidos y sangre salpicaba el suelo...así que embrazó el escudo y se preparó para luchar.

-Otra maldita sala de juegos, aquí solo faltan xf#!@s. Masculla Thudim. 

En cuanto Dalbur pone la figura que le representa en la casilla número 1 la rueda comienza a girar y Dalbur desaparece, tras la desaparición de Dalbur la rueda sigue girando.

Apareces en un coliseo hecho de arena y como público solamente el que estaba sentado en el trono. Frente a ti hay un gorila de color negro que tiene los ojos rojos y se abalanza sobre ti para atacarte dándote tiempo suficiente para embrazar tu arma.

Dalbur sacó su escudo y su martillo, y se preparó para luchar contra el gorila. Era un veterano de muchas batallas, y confiaba en su habilidad contra este enemigo inesperado, incluso sin el poder de Mahal.

Le aciertas con el golpe y luego ataca él, tienes intención de parar bien el golpe cuando ves que te ataca con los dos brazos repartiendo tu parada para ambos. Y tras ello te intenta morder. En el segundo golpe te deja bastante aturdido y el aprovecha en cuanto puede para asestarte otro golpe que te deja bastante mal, intentas parar  todos los golpes que puedes dedicándote sólo a defenderte y la criatura poco a poco te va debilitando hasta que te recuperas y ves un momento para atacarle.

-Maldita sea, Thudim coge su figura y la pone también en el 1. -Al menos espero correr su misma suerte. 

- ¿Nos repartimos por seguridad o vamos todos?

Ya daba por imposible que esto tuviera algo de lógica o de cordura. Se empezaba a conformar con salir vivo de aquí, y que su mente no se perdiera

Miro con incredulidad el lugar vacío donde antes estaba Dalbur, con el ceño prieto me dirijo al resto de compañeros - " no podemos separarnos en este lugar, apostad todos al uno, ¡ vamos ! " - y coloco una de las fichas en la casilla 1 mientras murmuro - " No me gusta nada este maldito lugar " -

- ¿Va a ir solo? Ya no sabía que pasaba pero empezaba a odiar a aquel lugar. Cuando comentó Gorkatdhûm de que no le gustaba el sitio, asintió afirmativamente, con la cabeza, dando a entender que estaba totalmente en la misma línea de pensamiento.