Partida Rol por web

Las nieblas de Mnemósite

Ciprian - I

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12/03/2010, 15:15
Adela

-Pues sí, vamos a Hendell. ¿Eres un camarada en apuros? Si quieres podemos llevarte... aunque no sé si a mis hermanas les va a gustar la idea de viajar con un chico.

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17/03/2010, 14:45
Ciprian Eliade

Suspiró de alivio.

-Me portaré bien, lo prometo. Dormiré aparte, y comeré aparte si hace falta. Y ni siquiera hablaré, si no queréis.

En otras circunstancias, le hubiera gustado no sonar desesperado. Pero ni se dio cuenta, ni hubiera sabido evitarlo.

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19/03/2010, 00:59
Adela

La zínner hizo pucheros.

-Ay, pobrecito... Mira, espera un rato a que terminemos la actuación y nos cuentas lo que te ha pasado, ¿vale?

Adela volvió a pasar el sombrero, pero se dio por vencida. Sus hermanas recogieron los bártulos y la mayor se acercó a ellos y preguntó por Ciprian.

-Es un amigo. Está en problemas. Nos lo podemos llevar, ¿verdad?

La hermana mayor lo miró como calibrando lo peligroso o molesto que podría llegar a ser, y viendo que era un mequetrefe se encogió de hombros. Adela le guiñó un ojo a Ciprian.

-Haremos noche aquí y mañana nos iremos hacia Hendell.

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19/03/2010, 16:29
Ciprian Eliade

Soltó el aire muy despacio, en un prolongado suspiro de alivio, y encogió los hombros mientras la hermana de Adela le sometía a examen. Volvió a relajarse, y echó un vistazo hacia su derecha. Estaban en medio de la calle... se volvió hacia Adela otra vez.

-Me alojo en casa de una mujer llamada Olenna; llegué anoche. Mi... no sé que ha pasado con los míos. Nos atacaron. Los estoy buscando. Creo que han podido ir hacia Abel; por eso voy hacia el norte. Muchísimas gracias por llevarme. Los caminos son muy peligrosos, últimamente -dijo, amargamente.

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24/03/2010, 09:21
Director

Una vez recogieron el tenderete se dirigieron a las afueras del pueblo para hacer noche como habían dicho. Las zínner acogieron a Ciprian sin reservas más allá de las iniciales: le dieron carne, pan y té, le permitieron acostarse junto a ellas siempre que mantuviese vivo el fuego durante la noche y expresaron sus condolencias por los problemas habidos con su familia.

A la mañana siguiente el trío de hermanas y Ciprian salieron al camino, hacia el norte. La niebla, cada vez más densa y fría, hacía poco fácil el tránsito por la llanura. Para espantar los malos espíritus, las mujeres cantaban.

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27/03/2010, 17:06
Ciprian Eliade

No fue a despedirse de Olenna y su hija, ni a darle las gracias. No tenía que recoger nada de su casa; nada que recoger, más bien. Acompañó a Adela y las mujeres y se mantuvo en silencio la mayoría del tiempo. Por la noche rellenó, mientras las hermanas no miraban, algunos de los saquillos que llevaba entre la ropa con cosas que pudo encontrar en los alrededores y que necesitaba para obrar magia. No estaba del todo abastecido cuando...

Ahora que se alejaban de Villa Tres Cruces, volvía a estar a merced del Cazador Oscuro, si había seguido su rastro. Pero aunque supusiese abandonar el que tal vez fuera el único refugio de Moth, sabía que a la larga no estaría seguro si no abandonaba el principado, y buscar a los suyos en los caminos era demasiado arriesgado.

Escuchaba a las hermanas cantar. Su abuela a veces cantaba por motivos parecidos y su madre solía fruncir el ceño y decir que era una tontería. Ella no era bruja, aunque era mucho más sensible a los espíritus; podía verlos y oírlos, y sus sentidos se habían agudizado con los años. Aunque Ciprian y sus hermanas habían heredado el don de su madre, su Segunda Vista era mucho más aguda. Él estaba demasiado ocupado con sus sueños para preocuparse por lo que veían sus ojos.

Agachó la cabeza. No quería pensar en casa. De pronto, se sintió irritado con las tres zínner; avanzaban muy despacio, llamaban mucho la atención. Torció la boca con disgusto y se arrebujó con la capa. No quería preguntar a cuánta distancia estaban de su destino, para no iniciar una conversación y para no poner en evidencia que ni siquiera sabía a qué distancia estaba Hendell.

Callaría hasta el anochecer, y si se tenía que volver a quedar despierto para vigilar el fuego, lo haría. El Cazador Oscuro no le atraparía mientras dormía.