Partida Rol por web

Tomada la decisión, el trío camina por el los pasillos del barracón teñidos de naranja a causa de las luces intermitentes de alerta. No andan demasiado cuando escuchan un sonido sordo y potente: un único disparo procedente de un pasillo cercano. No se encuentra en su trayectoria hacia el laboratorio del Dr. Knightley, pero es suficiente para ponerles en guardia. Los problemas no andan lejos.

Tras oir el disparo cerca, comento:

-Creo que debemos apresurarnos para que no nos peten el culo los que han decidido hacerse con esta base!

Pensado mentalmente un poco la estrategia, caigo en la cuenta de la posiblidad de quedarnos incomunicados en algún sector, con lo que apresuro el paso hacia el laboratorio con una idea fija en la cabeza: ir a por la operativo y darles cera a quienes fueran los que atacaban la base.

Al escuchar los disparos estuve a punto de soltar una carcajada respecto a que los muchachos rebeldes no perdían el tiempo empezando a abrir fuego cruzado contra esas alimañas, pero para cuando me di cuenta el firebat ya había hablado.

Saqué mi rifle en un abrir y cerrar de ojos y mantuve la calma durante los siguientes ssegundos, intentando localizar la procedencia de los disparos.

- Pero es posible que hayan entrado ya ? - pregunté algo incrédulo. Apenas podía creer que en cuestión de segundos esos zerg ubieran entrado en la base. Y más aún, en el edificio en el que nos encontrábamos.

- Quién me acompaña ? - dije asegurando el fusil y recargándolo con fiereza.

Marron se encogió de hombros y con las manos en los bolsillos caminó al lado de Connor.

—No es que me apetezca mucho hacer puré de insecto volador pero...

Dejó la frase en el aire, quizá valorando una alternativa pero pronto desechó la idea y sacando una mano del bolsillo cogió la pistola y la observó.

—Te toca trabajar nena.

Ante la posibilidad que cabía de que en la enfermería ya no hubiera nadie y me encontrará sólo en medio de una sala que no me inspiraba ninguna confianza, valoré lo que me podría aportar una inspección a fondo de aquél lugar donde se encontraba aquél doctor y opté por seguir a la pareja de hombres que valientemente habían optado por averiguar el motivo del disparo. - No creo que hayan dejado alguna información relevante expuestos a un posible daño o destrucción.-

- Pues eso, que a dónde nos lleven los ruidos de combate ¿no? ¡Allá vamos!

Los tres hombres avanzaron con decisión hacia el origen del disparo. Una nueva detonación de arma de fuego se produjo, mucho más cercana ahora, confirmando que habían tomado la decisión correcta.

Doblando la esquina cercana un nuevo pasillo se abre ante vosotros. Como a mitad de éste, a una docena de metros, se encuentra un armero junto a otro pasillo que se inicia en el que acabáis de llegar. Hay sangre salpicando la pared en ese punto, así como un impacto de munición cercano.

Tu instinto de veterano reconoce el sonido del segundo disparo, y al ver el impacto en la pared lo confirmas. Alguien anda disparando un Canister C-10 por aquí cerca.

- Hummm - gruñí cuando nos acercamos a los restos de sangre y perforación de proyectiles encajados en la pared de aquél pasillo.

Palpé con la palma de la mano de la armadura la zona de impacto de aquellas balas y enseguida me dí cuenta de quién se trataba.

- Estas balas son de una Canister C-10, el arma preferida de los fantasmas. Empiezo a suponer que nuestra amiguita está en problemas. - dije irónicamente.

- Lo que no entiendo muy bien es a quién dispara exactamente. Dudo que esos llamados zerg hayan atravesado las defensas tan rápidamente. Qué tal si lo averiguamos ?

Esperé la respuesta aunque ya la supiera, y recargué mi Gauss encarando la zona a la que nos disponíamos ir, una zona conflictiva, y grité: - Así que queréis machacarme, eh ?

WWWWHHAAAUUUUUUUUUUUUUUMMM!

La onda expansiva se percibe en el ambiente principalmente por las luces que se apagan progresivamente dentro de su corto rango de acción. Afortunadamente os encontráis suficientemente lejos para que las armaduras no se vean afectadas.

Violentamente, aparece un chisporroteo que precede la vuelta al espectro visible de una Uriel ligeramente temblorosa. De espaldas a vosotros, aprieta su mano izquierda contra su brazo derecho que a su vez sostiene un rifle. A un par de metros también se hace visible el endiablado artilugio responsable de su reaparición: una aparatosa granada EMP, similar a la empleada por los soldados del Escuadrón Alpha en DN-II.

- Maldita sea, esa es Uriel ? URIEL !!! Estamos aquí - le gtité a la operativo -

- Esas granadas EMP me suenan a escuadrón Alpha, qué diablos hacen aquí ? -

Pregunté con cierta confusión. O bien los rebeldes de Khoral las habían robado o el propio escuadrón Alpha había encontrado la base... en un mal momento.

El piloto ajustó levemente sus gafas con la mirada dirigida hacia Connor y Nexus.

—Me la trae floja. Ahí tenemos lo que queríamos, ¿no? Pues cojamos a la nena y larguémonos de aquí.

Rápidamente corrió hacia la posición de la fantasma con la pistola preparada en la mano.

—¿Estás bien muñeca? —le preguntó cuando estuvo a su lado mientras permanecía atento a los movimientos de la zona abierta.

Entre la confusión del momento veo como Uriel resurge con su últimamente habitual aspecto nada saludable. - Joder, como le gusta a esta mujer resurgir de los escombros... pero después de todo lo que lleva, la verdad es que es dura la chavala.

- ¿Qué ha pasado aquí? - Le pregunto a la operativo y continuo diciendo - Bueno pues si Uriel está bien, podemos ir hacia el sector suroeste, que es donde dijo Kerrigan que se situaran las tropas de defensa.