Partida Rol por web

Aferro la culata del revólver con resolución y gruño:

- Me juego vuestro culo a que son esos puñeteros nazis, probablemente hayan mordido más de lo que pueden masticar ¿vamos?- digo, con una mueca feroz.

Lucius se para en seco y retrocede trastabillando hasta quedarse junto a Alison - Q-Q-Q-... ¡No estamos solos!

Al oir el grito dejo por un momento de respirar, mi corazon se acelera y me imagino lo peor. 

-Casi hubiera sido mejor estar solos. No se que demonios pasa, pero ese grito no me ha gustado nada. Tened las armas a mano, intentaremos avanzar sin ser vistos. Tenemos que descubrir que ha sido eso antes de que nadie nos vea- con un gesto le indico a Norman que estoy preparada para seguirlo, en mi mano llevo mi pistola lista para ser disparada. A mano, por si la necesito llevo la daga que encontre en el bazar. 

Gabriel echa instinticamente la mano hacia la empuñadura de su arma mientras mira hacia la dirección de los disparos y antes de que pudiera decir nada Allison comienza a dar ordenes.

- Os sigo de cerca, iré cerrando la fila vosotros abrid los ojos por lo que pudiera ir delante.-

En fila india avanzais por las calles secundarias de la antigua ciudad. A medida que os vais acercando os dais cuenta de que muy cerca d eaquí se está librando una verdadera batalla; gritos, disparos, humo y un inquietante sonido seco, como de piedra sobre piedra que no lograis identificar.

Fianlmente llegais hasta la base de una gran casa donde os encontrais con una escena inimaginable: cuatro hombres ataviados con uniformes militares de camuflaje ártico y armados hasta los dientes están parapetados tras los muros de una casa semiderruida. Están lanzando granadas y barriendo con ráfagas de ametralladora algo que se encuentra oculto tras la nube de polvo y humo de las explosiones. En el suelo yacen dos d esus compañeros, uno atravesado por varios dardos metálicos y el otro horriblemente desmembrado.

De la nube de polvo surgen dos criaturas nunca vistas antes por ojos humanos. Miden casi tres metros de alto y su aspecto es vagamente arácnido. Sobre cuatro patas articuladas descansa un cuerpo bulboso, que termina en un torso semihumano con cabeza insectoide, con varios ojos saltones y fuertes mandíbulas. Sobre su cuerpo llevan lo que parece ser una armadura de combate formada por gruesas placas de metal. Como armas, sujetan en sus brazos dos picas terminadas en ganchos y una serie de pequeños tubos que actuan como lanzaderas de dardos de mecanismo desconocido. Una de ellas está gravemente herida por las explosiones y la sbalas y en su cuerpo puede apreciarse la sangre que mana abundantemente; Pero a pesar de eso, ambas avanzan sin titubear, como autómatas con el único propósito de acabar con sus enemigos.

Lucius se agacha, pálido, junto a Alison - Dejémosles que se maten entre ellos - susurra - Todo será más fácil

Mi cuerpo me pide sentarme en un rincón y fumarme un cigarro mientras los nazis y los bichos se zurran, pero...

- No sé... esos tipos al fin y al cabo son casi humanos. Y no me refiero a los de ocho patas. No podemos dejar que se los carguen así. Además... podrían saber cómo salir de este sitio.

Despues de horas pensando que eramos los unicos en la ciudad me doy cuenta de que estaba equivocada. No solo esta la criatura de la celda, ahora nos encontramos entre dos fuegos, en medio de una batalla que no esperaba. Quienes son los buenos y quienes los malos? A quien debemos ayudar? Tal vez lo que dice Lucius sea lo mas sensato, ocultarse y esperar.., o no? Las dudas y las preguntas vuelven a llenar una vez mas mi mente. 

-No se que debemos hacer, esos robots..., mirad como han dejado los cuerpos de los de la ametralladora. No me gustaria acabar asi- miro a Norman visiblemente preocupada- Tu tienes experiencia en esto, has sido militar. Norman, dinos que hacemos porque la idea de meterme en ese tiroteo me produce escalofrios. 

- Y si, sencillamente, intentamos dar un rodeo?- comenta Gabriel - No me seduce la idea de enfrascarnos en un tiroteo, mirad a esos tipos, son sin duda bastante mas avezados en el combate que nosotros a excepción de Norman, y los están machacando.- Dice echando un ojo a la cruenta escena - Meternos en esa refriega sería de locos- termina bastante convencido.

Mientras discutís vuestro proximo movimiento, uno de los militares es alcanzado por dos dardos que siegan su vida al instante mientras su mano muerta dispara la última ráfaga al aire. El monstruo en por estado logra atrapar por una pierna a otro soldado que chilla de dolor y todavía suspendido en el aire, echa mano de su cinturón de granadas y las hace estallar a pocos centímetros del cuerpo de la criatura. La explosión destroza a ambos.

Ahora es una sola bestia contra dos hombres que disparan desesperadamente mientras retroceden hacia vuestra posición. las balas parecen afectar al monstruo pero éste posee una resistencia inmensa y sigue avanzando mientras recarga su lanzador de dardos. Los hombres maldicen en alemán.

-Vienen hacia aqui!-susurro en voz baja al ver que los soldados se dirigen hacia donde estamos- No se que pensareis vosotros, pero yo lo tengo claro. Prefiero esperar y ver que pasa, si puedo evitarlo no pienso meterme en ese tiroteo. Gabriel tiene razon, es de locos enfrentarse a esa cosa- Con las ideas muy claras miro a los demas, no disponemos de armas que puedan combatir a ese robot, y los soldados van mejor armados que nosotros, si tienen que acabar con esa maquina que lo hagan ellos, pienso mientras observo la escena. 

Aferro con tanta fuerza mi revólver que los nudillos adquieren un tono ceniciento.

- El problema es que vienen hacia aquí... Espero que no te equivoques, Allison ¡Agachad la cabeza y escondeos!

Antes de ocultarme, intento ver si alguna de las metralletas de los soldados muertos resulta alcanzable. Sólo con este revólver no puedo hacer mucho... 

Lucius está blanco, respirando nerviosamente. A la llamada de Norman, se agacha poniéndose en posición fetal. Se le oye murmurar - Q-q-q-que n-no vengan, q-que no v-vengan....

Gabriel imita a sus compañeros y trata en la medida de lo posible de mantenerse oculto de la vista de los alemanes y de los robots que los están masacrando, mientras en su mano sostiene el pequeño revolver que por momentos le parecía de lo mas inutil.

Viendo que la situación os sobrepasa no podeis hacer otra cosa que esconderos, parapetados tras un muro bajo y esperar a que todo pase. detrás de vosotros los disparos y las voces casi apagan el sonido monstruoso del extraño ser que avanza sin cesar. Muy pronto un alarido surge de la garganta de uno de los hombres, que calla para siempre dejando solo el sonido de un arma. Están tan cerca que podeis oír el sonido de los casquillos cayendo al suelo y los pasos arácnidos del monstruo.

De pronto los disparos cesan y dejan paso a un gorgoteo agónico. Después se hace el silencio y unos segundos después, el cuerpo destrozado del militar vuela por encima del muro y cae justo ante vosotros; Sus ojos abiertos os miran desde el otro lado mientras su cuerpo, roto en un ángulo imposible va tiñendo el suelo de rojo.

La criatura resopla y parece quejarse detrás de vosotros. Sin duda está herida pero no sabeis hasta qué punto. Lentamente se aleja del lugar y al cabo de unos minutos parece que la zona es segura de nuevo.

Lucius se queda blanco mirando directamente al alemán. Cuando el resto de sus compañeros empiezan a moverse parece que reacciona, dándose la vuelta y conteniendo una arcada rápida. Parece respirar y serenarse lo suficiente para murmurar:

- S-si los a-a-alemanes estaban por aquí es q-q estamos cerca de lo q-que quiera que busquen... y....y que hay otra salida, porque sellaron nuestra entrada t-tras nosotros.

Diría que he visto cosas peores en mis tiempos, pero no demasiadas. Cuando el ruido se pierde en la lejanía me decido a moverme con cautela. Examino los cuerpos buscando armas modernas y municiones... con un poco de suerte podré llevar algo mejor que este revólver. Y visto la clase de bichos que pueblan estas ruinas, nos va a hacer falta artillería pesada.

- Ese equipo es actual... tal vez sean neonazis, o algo parecido. Deberíamos registrar los alrededores, tal vez podamos averiguar de dónde han salido éstos, como dice Lucius ¡Y por el amor de Dios, id con cuidado! Incluso herido, ese bicho puede ser demasiado para nosotros.

Una vez todo ha pasado Gabriel permanece agachado unos momentos con la vista clavada en el cadáver del aleman incapaz de dejar de mirarlo, temiendo que pudieran compartir su destino.

-No-no se que diantres eran esas cosas, pero prefiero no averiguarlo la verdad- comenta - Por donde han entrado estos alemanes?- pregunta - Estos cerdos volaron el techo por donde entramos nosotros, asi que tiene que haber otro acceso por aqui.-

Despues del espectaculo, intento serenarme. No solo estamos perdidos en unas ruinas bajo tierra, sino que ademas estan pobladas de maquinas asesinas dirigidas no se por quien. Alguien ha debido crear esos bichos, la pregunta es para defender que? Y quien los ha creado? Los antiguos pobladores hace millones de años? Confundida retiro un mechon de cabello de mi frente y escucho los comentarios de los demas evitando mirar el cadaver que tengo al lado.  

-No se si son neonazis, pero de que hay otro acceso estoy segura- asiento mirando a Gabriel- Me pregunto cuantos alemanes hay aqui y con cuantas maquinas infernales mas nos vamos a encontrar. Debemos buscar esa salida y extremar las precauciones, no estamos solos y por lo que hemos visto todos estan muy ocupados matandose entre ellos. La cuestion ahora es, por donde seguimos?