Partida Rol por web

Por fin ha nacido, la Profecía se ha cumplido, ese recién nacido, con esos poderes innatos, nos salvará a  todos, Baldur´s Gate no es la mejor ciudad para nacer, pero nadie puede escoger el lugar.

En todos los rincones, aldeas, pueblos y ciudades, todos los bardos han anunciado las celebraciones que se van a producir en la ciudad. Van a atraer a todo tipo de individuos, algunos serán adoradores del Mal otros simples maleantes o vividores y por supuesto personas honradas o simplemente gente que quiere pasarlo bien durante una semana....

Muchas motivaciones, demasiados intereses..... Justo ahora que la Oscuridad comenzaba a crecer.... ¿Sera capaz este recién nacido de vencer?

... Justo al retirarte la hoja de la cara, ves las luces-Por fin llego a algún lugar, y justo ahora que arrecia la tormenta- Costa de la Espada y Otoño.... Mala combinación para realizar un viaje, y siendo a pie, peor aún. Los caminos son cada vez más peligrosos, los asaltadores y maleantes no pierden la oportunidad, son conocedores de lo que va a acontecer en Baldur´s Gate y los caminos estarán repletos de personas indefensas...

Está anocheciendo y el frío y la lluvia no te permiten continuar el viaje. Has tenido suerte y llegas a una pequeña localidad costera y el primer edificio es justo una posada, levantas la cabeza, te protejes la cara con la mano y logras leer el cartel que se mueve alocadamente gracias al viento "La perla Azul".... Vaya nombre para un edificio que parece en ruinas y que no hubieses entrado sino llega a ser por las actuales circustancias..... Por lo menos podrás tomar algo caliente y entrar en calor. Dormir en este sitio ya será otra cosa, es un edificio destartalado y pequeño... Pero ya es hora de entrar...

Abres la puerta, un pequeño rellano está al otro lado y una nueva puerta al fondo, en cuanto abres esta segunda puerta, un golpe de calor te da en la cara, humo, ruido, olor a comida y bebida.... mucho más de lo que se podía esperar antes de entrar. Una mujer se acerca rápidamente a ti con una manta, te cubre con ella y te va guiando hacia un banco en forma de media luna, frente a el, hay una inmensa chimenea, encendida, que desprende un calor más que agradable, crees ver una barra de bar al fondo y alguna mesa en la habitación, pero tampoco te parece mal sentarte en el enorme banco y entrar en calor rapidamente

Mi nombre es  Ely ¿Cual es el suyo?- Te pregunta la mujer mientras te acompaña al banco para que entres en calor- Que quieres beber ¿Vino caliente? ¿cerveza?- La simpática camarera sonríe constantemente y te acomoda en el banco....

Buenas noches, señora. Muchas gracias. Mi nombre es Zed Kendrick. Dijo al verse arropado por la anfitriona.  Algo de vino me vendrá bien, gracias. Contestó a la mujer tras sentarse en el banco ofrecido y frotar ligeramente sus manos para entrar en calor. Aprovechó el momento de espera para echar un vistazo al local y fijarse en las caras y el aspecto de todos y cada uno de los presentes. Acto seguido, retiró su capucha dejando ver algo más que sus ojos verdes. Su piel bronceada, helada hasta el momento, empezó a entrar en calor gracias al fuego de la chimenea. Y sus dedos comenzaron a dejar de proporcionarle esa sensación de entumecimiento.

Ensimismado tras recibir el vino, perdió la noción del tiempo al clavar sus ojos en las llamas. Al tiempo que ahondaba en sus recuerdos...

Gracias. Yo me llamo Proer.- Responde el barbaro a Ely cuando lo recibe. Se quita la empapada piel de oso que deja frente al fuego y acepta la manta que le da la posadera. Vino caliente, estará bien. Y si tienes algo de comida mejor, cualquier cosa me vale.

Proer se desentumece un poco las extremidades, es entonces cuando se fija en el otro cliente de la posada, parece un monje aunque no esta seguro. Buenas noches amigo. Cómo esta el tiempo ¿no?- Le dice al monje en tono amigable. 

Bienaventurada seas Ely, mi nombre es Kroom barbapétra, del clan barbapetréa, a tu servicio. Me  gustaría una buena cerveza por favor. 

Le respondo a la camarera, observando un poco la gente que esta en la taberna.

Eh! Se le escapa al percibir la pregunta del barbaro. Si. Un auténtico problema para el viajero. Dijo a su interlocutor. ¿Sois de por aquí? Pregunta señalando al enano que acaba de aparecer a su lado. ¿O estais de paso?

Gracias Ely, me llamo Bran Badwulf, para un viajero es todo un gusto encontrar refugio tan calido y acogedor como este. Dice el chico al momento de quitarse la capucha, dejando ver a un joven de no más de 25 años de edad, de expresión seria, delgado y con cabello castaño claro.

¿Me podrías dar un poco de chocolate caliente? le dice a Ely, después se acerca a la sala común donde se encuentran varios extraños, situandose a un lado de la chimenea.

Solo de paso.-Respondo al Monje -Vuelvo a las estepas, a encontrarme con mi familia, y voy dando un rodeo. Al oir mis palabras me di cuenta que de verdad estaba dando un rodeo, me encojo de hombros para mi. Supongo que tampoco hay prisa.¿De donde eres tú?- Le pregunto, es entonces cuando veo el enano al que señala. Me suelen caer bien los enanos.

Buenas noches- Saludo afablemente al enano tal como había hecho con el monje, pero cuando entra el chico me limito a hacer un leve gesto con la mano y volverme hacía el fuego. Ojalá me equivocase pero parecía un Mago.

Buenas noches a ambos.

Digo, mientras estoy tomando un vaso de cerveza

A decir verdad, siempre estoy de paso, soy un viajero errante.

- Buenas noches, Ely. Soy el hermano Jullian Corv, a su servicio - respondo a la amable mujer que me guía hasta un banco frente a la chimenea. El calor es de agradecer así que me acomodo y le pido a la mujer un buen copazo de vino que me ayude a entrar en calor. 

- Que el señor de la luz* os proteja en esta noche oscura- digo bendiciendo solemnemente a los presentes en el banco.

Un paso mas y estare con una comunidad humanaPenso antes de coger el valor necesario mientras agarra su hoja de muerdago y salir de las lindes del bosque.
Para ella la lluvia no era ningun problema, pero sabia que ese milagro podria acarrea algun tipo de fiebre que no estaba muy dispuesta a pasar, por lo que busco cobijo.
P..er..la AzulLa palabra salio de sus labios, confusa, ya que hacia dias que no habia necesitado pronuncia voz alguna. Gesticulo con fuerza su boca para adaptar de nuevo sus musculos faciales. Mientras hacia muecas divertidas se dirigio a la puerta y con valentia la abrio, si dejar de aferrar sus muerdago que colgaba de su cuello.
El sonido, el calor, el gentio, fue abrumador. Tanto y tan de golpe le dejo sin aliento, asustada, que solo pudo encogerse de hombro, como un cervatillo temeroso.

Cita:

Una mujer robusta, amable y sonriente se le acerco con una manta seca, que desprendia mil oleres fuertes, diferentes, a saber cuanta gente se la habia puesto. Pero en ese momento no importaba. Sin decir nada mas, se dejo abrazar en la manta y le devolvio las palabras con una leve sonrisa y un asentamiento a lo que al parecer le habia ofrecido.
La encamino entre la gente hasta un gran banco donde los viajeros se sentaba para secarse enfrente de una gran chimenea.
Un grupo, que habian llegado hace poco, pues su ropas aun caian gotas de agua, estaban enfrascado en una conversacion. Se sento en el lado mas pegado a la pared. Se dejo apoyar y solto su mochila. Se quito con delicadeza las plumas que colgaban a un lado de su pelo blanco azulado. Se desenredo la larga trenza y saco un peine de hueso de su mochila.
Mientras se peinaba musitaba una suave y atrayente cantico con los ojos perdidos en la danza desenfrenada de las llamas.

Se comienza a escuchar el ruido de una mesa arrastrándose....- Ningún hombretón va a ayudarme?- Comenta mientras trata de acercar una gran mesa hacia vosotros para intentar colocarla entre vuestro banco y la gran chimenea- Venga hombre que sino, no os podre traer la bebida- Sonríe alegremente mientras se queda parada en mitad de la sala esperando que alguien se levante para echarle una mano -Mary, en cuanto pongamos esta mesa trae todo lo que te he dicho!!!!- Grita hacia la barra del local.

La posada comienza a llenarse, y en un pequeño rincón sobre una plataforma poco elevada (un solo escalón) 4 personas suben unas sillas y unos instrumentos y comienzan a tocar. Más ruido, ambiente, y olor a comida. El calor es cada vez mayor y las ropas comienzan a secarse. 

A vuestro lado se acomoda un humano con las ropas empapadas, sucias y malolientes... Seguramente sea un guardabosques, porque en su cinto se puede ver una espada corta, un arco y una hacha de mano están colgadas en su espalda. Su pelo largo hasta los hombros, moreno y completamente empapado, oculta su rostro, pero puede apreciarse que esta helado de frío, le tiemblan las manos, las cuales aferran fuertemente la manta y se encoje para entrar en calor.

Cuando se sienta el extraño humano que por su apariencia parece ser un guardabosque, levanta sutilmente la mano como para hablar con el, pero el tiempo que se paso sola en el bosque le hace retroceder a la vergüenza de que pudiera cometer algun fallo de lo que los humanos y los altos elfos llaman etiqueta.

Con gusto! Jaja- Digo levantándome para ayudar a la posadera. -¿Donde la coloco? ¿Entre los bancos? Pregunto mientras levanto la mesa.

Lo cierto es que no me había fijado en la mesa, pero siempre estaba encantado de ayudar. Sobre todo si es gente sencilla. Haz lo mejor de la mejor forma que puedas. Pienso mientras sonrió a la mesera.

Ya era hora!!! muchas gracias Proer, vamos a ponerla enfrente vuestra y así os traigo las bebidas- Gracias a la ayuda del bárbaro la mesa queda instalada en muy poco tiempo. Rápidamente las bebidas son servidas. El vino fuerte, caliente y muy oloroso, la garganta se caliente muy rápido en cuanto baja por ella. El chocolate humea, quizás demasiado, tanto es así que el cuenco está envuelto en un trapo para así poder cogerlo con las manos. Y para Koor trae una enorme jarra, muy decorada y con una tapa, seguramente es más de 1 litro lo que contenga esa jarra-Espero que te guste Koor, esta cerveza nos la traen desde el monasterio/fortaleza enano de Hummer- En cuanto la pruebas notas el gran sabor de esta espesa cerveza, no apta para paladares humanos, esta cerveza, este olor, este sabor, no es normal, seguramente es una de las mejores que has probado y esa espesura, la forma en la que se queda la espuma en el bigote... Es una obra de arte enana ¿Qué demonios hace una cerveza así en un lugar como este?

Se gira hacia Quelenna, levanta ligeramente la cabeza, se descubre el rostro, dejando ver unos ojos profundos, unas enormes ojeras, labios agrietados por el frío y la humedad, está pálido, parece enfermo-Dama, elfa...-Debe parar de hablar, parece cansado-El bosque ya no es lugar seguro, están regresando, cada vez son más...- se detiene, tose una primera vez y en la segunda escupe un buen puñado de sangre, con una mano trata de taparse la boca, mientras con la otra se aprieta el costado izquierdo, pone los ojos en blanco y se desploma al suelo....

La música cesa, la gente se calla de inmediato y todos miran hacia vuestras posiciones....

El mago, al ver al barbaro traer una mesa grande al centro, sabe que ya es hora de probar ese delicioso chocolate caliente que hace unos minutos se nota su exquisito aroma en el ambiente.

A algunos metros de la chimenea, nota a un guardabosques y una elfa platicar, cuando de repente el hombre se desvanece... al parecer algo le hizo la mujer, o el hombre tenía problemas para recuperarse de su viaje.

¡¡RÁPIDO!! ¡¿HAY ALGÚN CURANDERO POR AQUÍ?! ESTE HOMBRE ESTA MAL... grita acercandose al hombre desplomado mientras le pregunta con un tono serio y firme a la elfa: ¿Qué le has hecho a este hombre?

Sobrecogida la elfa se levanta agarrando con su mano libre la mochila.
Por todos las ramas del dios arbol, no le toqueis. Dejarme hacer
Se acerca apresurada a unos centimetros del y le observa antes de acercarse.

Te acercas al guardabosque, su mano en el costado tapa una fea herida, es un enorme tajo, puede ser de una espada corta o quizás algo aún más grande. No es una herida normal, escupir sangre... Aprecias como las venas del cuello están ennegrecidas , hinchadas, el cuerpo del guardabosque comienza a temblar... O actúas rápido o morirá.....

No cuando yo estoy aquí

Rápidamente me levanto y le hago una imposición de manos al guardabosques, con la intención de que no se muera, o, por lo menos, que le quede un hálito de vida para poder darnos una pista de lo que le ha pasado.