Partida Rol por web

Maquiavelo - La Balanza del Poder - 1454 AD

Mundo Diplomatico

Cargando editor
13/03/2017, 13:43
Federico III de Habsburgo- Austria

Nos, Sacro Emperador del Imperio Romano Germánico, remitimos esta misiva a Su Majestad Carlos, rey de Francia, representado por su leal siervo, René d'Anjou, Conde de Provenza.

Sólo señalaros nuestro deseo de mantener en nuestras fronteras del norte el mismo estatus que existe ahora. Temo que ambos tenemos cosas de las que ocuparnos. Trataremos de lograr que Milán esté ocupada con otros asuntos.

Que el Altísimo os guarde.

Cargando editor
13/03/2017, 13:45
Federico III de Habsburgo- Austria

Nos, Sacro Emperador del Imperio Romano Germánico, remitimos esta misiva al duque y principal entre los condottieros de Milan, a Francesco I Sforza.

Lo que nos preocupa no es tanto que deseéis o no tomar nuestras tierras, tema sobre el que pocas dudas abrigamos, como la facilidad en la que olvidáis vuestras propias promesas. Esperamos que dicha actitud cambie, puesto que la confianza es, rodeados de tantos enemigos, una de las pocas cosas que son realmente más valiosas que el oro.

Dicho lo anterior... tal vez nuestros ejércitos podrían apoyar una entrada de vuestro ejército en Trento en Verona, mientras que con vuestro ejército de Cremona tomáis Bergamo. Posteriormente, desde Berona, podrías apoyar mi movimiento desde Carinthia a Frisia. Supongo que con sus flotas tratará de atacar alguna de nuestras posiciones esta misma primavera, con lo que podría ser el momento de atacar sin que lo espere.

Además, con vuestras fuerzas de Pavía y Milán os aseguráis, si es que no confiáis en mi palabra, que no habrá ataque por nuestra parte. Y nuestro posterior movimiento de Carinthia haría que nuestras fuerzas dejaran sólo en la frontera norte un ejército cada uno. Lo que es bastante acertado.

Pero dependemos de vos. Y os escuchamos. Si estáis de acuerdo, tras ese inicio, sería cosa de seguir evidentemente.

Que el Altísimo os guarde y quedo a la espera de vuestras noticias.

Cargando editor
13/03/2017, 13:53
Federico III de Habsburgo- Austria

Nos, Sacro Emperador del Imperio Romano Germánico, remitimos esta misiva a Su Majestad, Alfonso I de Nápoles, glorioso vencedor de Tunez.

Primeramente, permitidnos remitiros nuestro pésame por la peste que ha atacado vuestra capital. Realmente esperamos que vuestros ciudadanos se repongan y que las mieles de vuestros éxitos sirvan para limpiar cualquier tragedia con la que el Hado os haya castigado.

También nosotros nos congratulamos de finalmente haber trabado diplomáticas relaciones con quien tanto bien ha hecho en la lucha con el infiel aun cuando, os lo debo reconocer, vuestra toma de la Ciudad Santa, nos causa zozobra y quebranto. Son vuestras fuerzas numerosas, y vuestro intento de tomar el Mediterráneo, limpiando el mismo de las galeras turcas no nos causa pena, sino alegría y hasta gozo.

Por eso me resulta incomprensible que nos aféeis nuestra conducta cuando, precisamente, es el dux quien, despreciando nuestras promesas de amistad, ha tratado, primero, de enfrentarnos a ambos, asegurando que vos dijisteis que nuestras fuerzas le atacarían, y luego, se ha apoyado en vuestro enemigo, el turco, para tratar de debilitar nuestras legítimas aspiraciones en Croacia.

Tememos que os hayan podido informar erróneamente. Por ello os informo que tanto el turco como el veneciano han llegado a un acuerdo, precisamente, para tratar de formar coalición contra vos. Que fue ese acuerdo el que nos trataron de imponer, forzando con su movimiento a nuestras tropas a no tomar Croacia, a pesar de como le habíamos prometido al dux, no atacar con nuestras fuerzas a sus tierras natales, a pesar de la peste que le había asolado.

Si nuestro deseo hubiera sido atacar al dux, no habría sido Croacia, sino otras tierras el objetivo de nuestros actos. Pero tal no era. Repetidas veces dijimos al dux que ibamos a tomar Croacia, pero él, confabulado con el turco, realizó esas acciones que habéis visto. O si no, ¿por qué el sultán hubiera entrado en Dalmatia solo para abandonarla?

Pensad en ello, y veréis que os hablamos desde la razón y el corazón. Reflexionad en quien consideráis aliado, porque el dux es una serpiente traicionera, cuyo acto en Croacia fue traición para con nosotros.

Que el Altísimo os guarde, nos, esperando gozar de vuestra amistad,

 

El emperador Federico.

Cargando editor
13/03/2017, 15:03
Francesco I Sforza - Milán

Al Sacro Emperador,

Nos congratula que al fin hayáis elegido enemigo, y que no seamos nosotros. Como podéis ver, nuestras tropas están más que listas para afrontar una ocupación sin límites de los territorios venecianos. Que Vos hayáis tenido esta misma idea y que os parezca bien es, para nosotros, motivo de alegría sin fin.

Ahora mismo nos pilláis en mal momento, pero en cuanto podamos, echamos una mirada al mapa y pasamos a la Ofensiva.

Si es para enfrentarse a Venecia, podéis contar con todo nuestro apoyo.

Siempre a vuestro lado, aunque no os lo parezca,

Francesco I Sforza.

Cargando editor
13/03/2017, 16:00
Alfonso I de Nápoles

Estimados amigos,

De la reciente carta de Francesco infiero que el poderío papal le abruma y tiene tareas más urgentes que atender.

De Florencia no me ha llegado misiva alguna, por lo que imagino que Lorenzo no está por la labor...

Así quu dejaremos esta iniciativa aparcada para mejor ocasión. Sólo espero que no sea demasiado tarde para alguno de nosotros...

Con amor,

Alfonso Rey

Cargando editor
13/03/2017, 16:05
Alfonso I de Nápoles

Mi buen Emperador,

Agradecemos vuestra rápida respuesta y el afable carácter de vuestras palabras.

Bien entiendo que vuestra enemistad con Venecia es profunda. No podemos confirmar si el veneciano es fiable aliado o serpiente venenosa, como afirmáis. Hasta el momento su trato con nos ha sido impecable, por lo que no levantaremos nuestra mano contra él (algo que, por otra parte, poco beneficio puede aportarnos).

Nuestras pasadas acciones en la sede de Pedro son inexcusables, y ya hemos tomado las medidas adecuadas para enmendarnos.

Respecto al Turco... Quisiera saber si estáis dispuesto a presionarlo. Las tierras de Bosnia, Dalmacia y Herzegovina están aguardando la entrada de vuestros ejércitos sin presentaros dificultad alguna. Podemos prometer que respetaremos vuestro derecho sobre esos territorios. A cambio, os suplicamos que coordinemos nuestras acciones contra las fuerzas de Mehmed.

¿Qué decís?

Dios os guarde,

Alfonso Rey.

Cargando editor
13/03/2017, 16:13
Federico III de Habsburgo- Austria

Nos, Sacro Emperador del Imperio Romano Germánico, remitimos esta misiva al duque y principal entre los condottieros de Milan, a Francesco I Sforza.

Quedamos, pues, a la espera de vuestras noticias, y de las novedades de futuros movimientos. Recordad, si precisáis de nuestra ayuda, tratad de avisarnos con tiempo, puesto que muchas son los problemas a los que nos enfrentamos, y no podemos asegurar movimientos para mañana en coyunturas tan volátiles.

Contad, sin embargo, con que no atacaremos, como ya os dijimos, sin previa provocación. Y ya sabéis nuestras opiniones.

Que el Altísimo os guarde y quedo a la espera de vuestras noticias.

Cargando editor
13/03/2017, 16:17
Federico III de Habsburgo- Austria

Nos, Sacro Emperador del Imperio Romano Germánico, remitimos esta misiva a Su Majestad, Alfonso I de Nápoles, glorioso vencedor de Tunez.

Seremos francos en nuestra respuesta: depende de Venecia. Si Venecia nos ataca, imposible será para nos, tal como sería nuestro deseo, presionar al turco.

Por el contrario, si el dux retoma con nos las buenas relaciones, y dirige sus ansias expansivas fuera de nuestras tierras, sí podríamos apoyaros y coordinarnos para eliminar al infiel de nuestras tierras.

Que el Altísimo os guarde, y quedamos a la espera de vuestras noticias.

Cargando editor
13/03/2017, 16:22
Alfonso I de Nápoles

CARTA ABIERTA

A todos los Príncipes de Italia,

Nápoles ha cometido una terrible falta. Nuestros ejércitos han entrado en la Ciudad Santa de Roma, acción impía que ha acarreado una terrible hambruna a nuestra capital, Nápoles. Se han tomado las medidas necesarias: ajusticiamiento de los responsables en nuestra Segunda Flota, que a estas horas arden en el infierno, y unas misas en todas las iglesias napolitanas.

Además, os informamos a todos de que, en penitencia, abandonaremos Roma tras la primavera, si nada ni nadie nos lo impide.

Lleno de contricción se despide,

Alfonso Rey.

Cargando editor
13/03/2017, 16:23
Alfonso I de Nápoles

Al Emperador y al Dux,

En conversaciones con ambos he sabido que vuestras mutuas rencillas os obligan a enormes gastos en armas y en almas. Esas rencillas os sumergen en una lucha estéril y os impiden actuar más allá.

¿No quisiérais acabar con vuestra enemistad? Me gustaría mediar para que se alcanzase esta paz. Por ello, me comprometo firmemente a que, si hacéis la paz y cualquiera de ambos la quebranta, Nápoles corresponderá al voto que aquí y ahora hace para apoyar a aquel de los dos que haya sido agredido por el otro.

Grandes beneficios pueden resultar para los tres de esta entente.

Aguarda ansioso vuestra respuesta,

Alfonso Rey.
 

Cargando editor
13/03/2017, 16:43
René d'Anjou - Francia

Respetado emperador,

Todavía asustado por el poder desplegado por Milán en el Norte y Napoles en el mar no puedo más que estar de acuerdo en respetar nuestras fronteras.

Cargando editor
13/03/2017, 16:45
René d'Anjou - Francia

A Lorenzo de los Medici señor de Florencia,

No puedo más que observar como su flota primera persiste en mantenerse en Mar de Ligurian. No veo como le puede ser de utilidad estratégica, con los problemas que tiene en tierra, gastar sus recursos en esa flota.

Por otro lado esa casilla me resulta muy importante para intentar defender, probablemente sin demasiada esperanza, las islas del mediterráneo Norte del coloso en que se ha convertido Napoles.

Le agradecería que retirase su flota de ese mar, a cambio le prometo usar mis flotas (salvo que fueran barridas por el Napolitano) para apoyar su lucha en tierra en al menos tres estaciones diferentes. Creo que es un acuerdo provechoso para ambos: a mi me permite luchar en paz por el mediterráneo y a usted disponer del apoyo naval que pueda necesitar sin soportar el coste de una flota.

Esperando urgentemente una respuesta, le saluda

Rene de Anjou, Conde de Provenza y enviado plenipotenciario del Rey de Francia para Italia.

Cargando editor
13/03/2017, 17:38
Mehmed II Fatih | Turquía

Estimado Pío III

Yo de vos, exigiría a Nápoles los 2 ducados de su tesoro en concepto de daños y perjuicios a cambio de perdonarle.

Luego si queréis le perdonáis o si queréis continuáis la guerra con él. Si perdonáis a un traidor, os volverá a traicionar, pero eso es cosa vuestra.

Yo continuaré la guerra hasta el final.

Mehmed II Fatih Sultán del Imperio Otomano y Califa del Islam.

 

Cargando editor
13/03/2017, 18:43
René d'Anjou - Francia

Infiel pero respetado amigo.

¿Qué tiene planeado para su flota en Thyrrheian Sea?. Más que nada porque el Napolitano (que con 5 flotas me resulta bastante intranquilizate) la puede eliminar este mismo turno.

Si no tiene una idea mejor permitame que le aconseje tomar Capua. Creo que cogerá al napolitano sin que lo espere y si mis negociaciones con el Florentino prosperan el próximo turno podríamos intentar empujarle hacia el sur entre los dos.
 

Cargando editor
13/03/2017, 19:25
Francesco Foscari - Venecia

A Alfonso I de Napoles,

Vuestra actitud solo suscita suspicacias en todos aquellos que leemos vuestras palabras, querido Alfonso.

Primeramente nos tanteáis a Lorenzo y a mí para confabularnos contra el papado para, poco después, enviar una carta abierta declarándole la tregua y prometiéndole devolverle su territorio.

Después os proponéis como intermediario y garante de una posible tregua entre Austria y Venecia, dando por sentado que Venecia debe olvidar el ataque austriaco sin compensación alguna.

No sé qué deciros, la verdad, pues quizá el siguiente mensaje también traiga un cambio de parecer y una nueva y peregrina oferta.

Cargando editor
13/03/2017, 20:16
Mehmed II Fatih | Turquía

 

Habéis regalado el Mediterráneo a Francia y ya se acerca surcando las aguas hacia tus costas.

Y no viene solo pues como podéis deducir está aliado con Austria que avanza por el otro flanco hacia mis queridas tierras.

Túnez es vuestro y os podéis quedar con él puesto que, aunque la recuperase, yo ya no lo puedo defender ante Francia. Túnez produce 3 ducados. Podéis cederme territorios que produzcan 3 ducados en total y terminamos la guerra para que podáis hacer frente a Francia. Pensad qué territorios estáis dispuesto a ceder.

La única razón por la que estoy dispuesto a firmar la paz para que Francia no se convierta en un gigante. Y desde luego no pienso hacerlo si no me resarcís de la toma de Túnez.

 

Cargando editor
13/03/2017, 20:19
Mehmed II Fatih | Turquía

Estimado René.

Me alegra que hayáis decidido atacar al perro Rey de Nápoles. Espero colaborar en dichos ataques, sin embargo, ese movimiento que me proponéis, ¿cómo podría sorprender a Nápoles?¿Acaso creéis que el Alfonso I no contempla esa posibilidad?

Es cierto que desde Tyrrhenian Sea amenazo muchos lugares y Nápoles no puede protegerlos todos. Es una casi una cuestión de azar que mi flota avance justo a un lugar que quede vacio.

Por otro lado. ¿Cómo váis a convencer a Florencia de que os ayude en una guerra exterior cuando se encuentra estrangulado por el Papa? O mucho me equivoco o la única opción de Florencia es que entre Venecia y Nápoles neutralicen las fuerzas del Papado. ¿Por qué querría Florencia debilitar a Nápoles? Que Florencia colaborase contra Nápoles es algo que desearía enormemente pero no entiendo la lógica del asunto. Por favor, iluminadme al respecto.

En otro orden de cosas, me resulta evidente que Francia y el imperio Austro-Hungaro son aliados. Le felicito y celebro que estén en tan buena armonía. Así mismo, si el emperador Federico entra en mis tierras, entenderé que lo hace con vuestra aprobación. Si Francia y Turquía van a colaborar, Austria debe respetar mis fronteras.

 

Cargando editor
13/03/2017, 20:44
Alfonso I de Nápoles

Mi buen Francesco,

Veo que algunos de mis últimos actos requieren una explicación, pues no quiero que pasen por muestras de un comportamiento errático.

Ante vuestra tibieza (vos al menos habéis contestado) ante mi propuesta para castigar a este falso Papa por sus pecados, ¿qué debo hacer, enfrentarme a él en soledad? No puedo hacerlo, con tantos frentes ya abiertos, pues tanto el Turco como los franceses codician nuestras posesiones. Por eso prefiero estar a bien con él; o al menos, que lo parezca; aun tenemos tiempo para actuar, en el centro de Italia, si vos así lo decidís.

Esa misma razón me ha llevado a terciar entre Venecia y los austríacos, a riesgo de parecer un entrometido. Con vuestra espalda libre podríais centraros en la campaña papal. No os pido que olvidéis la cuestión dálmata, sólo que no se convierta en la obsesión que os hará fatigaros contra Austria sin obtener gran beneficio; como yo contra el Turco, es difícil que ninguno de los dos consigáis la victoria a corto plazo si una tercera fuerza no interviene, mientras que las tierras en las que el Papa campa a sus anchas están pidiendo a gritos un libertador...

Espero haber explicado mi conducta. Si queréis una mayor claridad, allá va: pactad una tregua con los austríacos (si la incumplen contaréis con mi apoyo incondicional) y ataquemos al Papa unidos esta misma primavera. Comprendo que no lo hagáis sin el compromiso de Austria, y comprendo también que no confiéis en Maximiliano. Dicen que la fortuna auxilia a los valientes...

Pensadlo,

Alfonso Rey

Cargando editor
13/03/2017, 20:57
Alfonso I de Nápoles

Mi buen Mehmed,

No esperaba recibir más misivas vuestras, y menos después del trato que dispensásteis a mi último mensajero. Pero en Nápoles, aunque pasamos un poco de hambre, sabemos tratar a los embajadores extranjeros.

¿Queréis tierras que produzcan ducados? Tomadlas vos mismo: ahí tenéis Cerdeña y Córcega. No me opondré a vuestra conquista de esas tierras, al menos por el momento, aunque comprendería que no me creyéseis, y entiendo que vuestras fuerzas son demasiado menguadas para ello. Mientras vuestras acciones se dirijan contra esas islas o contra Francia, os aseguro que vuestra flota en el Tirreno no será atacada por mi parte. Creedme cuando os digo que prefiero sarracenos y no gabachos en esas islas. Alternativamente, podéis intentar abandonar la región por el Estrecho de Mesina.*

Pero entended que no puedo ceder a vuestros chantajes...

Admirado,

Alfonso Rey.

PD: Notad que hay otras costas libres en el mar, notablemente Roma, que Dios mediante abandonaré en primavera...

Notas de juego

*Pero me parece que para eso tengo que darte paso libre, y es sólo en invierno, pero por mí no hay problema.

Cargando editor
13/03/2017, 21:23
Mehmed II Fatih | Turquía

Respeto vuestra decisión.

No obstante no creo que me quede en Tyrrenian, pues estoy seguro de que René de Anjou desea visitar la ciudad de Nápoles y ¿quién soy yo para interponerme en su camino?