Partida Rol por web

Avanzas por el pasillo y abres la primera puerta a tu izquierda. Se trata de un diminuto despacho con una mesa, un ordenador y una silla. En la pared hay una estanteria con archivadores ordenados por años y al fondo hay una ventana que da a la terraza del restaurante.
A traves del hueco para las piernas de la mesa verificas que no hay nadie ocultandose detras.
Cuando te giras para seguir con la siguiente puerta aparece alguien por la bifurcacion del pasillo. Se trata de un tipo enorme, con la cabeza rapada y tatuada casi por completo. Sujeta con un brazo a una chica de apenas veinte años, aprieta su cuello con el antebrazo de modo que la chica no puede zafarse.
En la otra mano lleva una escopeta que rapidamente apunta hacia ti.

- ¿Quien demonios eres tu? ¿Otro maldito policia con prisa por llegar a la tumba?

Cierro de nuevo la puerta y me dirijo hacia el exterior de la cocina.

- Veamos como le va.

Digo como explicacion a Hidra.

Antes de que termine la frase el gordo ya he saltado hacia la siguiente habitación, la cuya puerta está casi enfrente de mí.

No es un clon, solo un deshecho de la sociedad. Cada bala de este rifle vale más que diez como él.

Caigo en la otra habitación dando una voltereta y me alejo de las paredes, ya que no proporcionan cobertura alguna. Me cuelgo el rifle y saco la pistola mientras busco una mesa o algo que pueda usar de barricada.

Vamos a jugar.

Relajé mi posicion, asintiendo a las palabras de Oleg. Alli no había nada, mejor subir arriba donde estaba Shadow.

- De acuerdo, pero no dejemos de estar atentos. - Murmuro algo desconfiada por no haber hallado aun a nadie.

En vista de que no hay nada de interes en el piso inferior decidis encaminaros al piso superior para comprobar que esta haciendo Shadow.
Oleg sale y, al ver que Hidra no le sigue, se gira para ver que retrasa a la mujer. Justo antes de salir la futura policia ha observado algo extraño dentro de la camara frigorifica.

Debajo de uno de los montones de carne empaquetada el suelo parece ser diferente. Si bien el color y el material es el mismo esa pequeña zona parece mucho mas nueva que el resto de la camara.
Intrigada por este hecho Hidra mueve la montaña de carne para descubrir la zona de suelo nuevo. A priori parece producto de algun tipo de obra o reforma, pero disimulado dentro del suelo veis un tirador y unas bisagras que indican que se trata de una puerta.
Oleg regresa a la camara y apunta con su pistola hacia la puerta, Hidra tira hacia arriba de la pesada puerta metalica para descubrir una entrada similar a la de una alcantarilla. Una escalera de mano anclada a la pared desciende varios metros hasta lo que parece ser el inicio de un oscuro pasillo.

Mientras tanto no escuchais nada del piso superior desde hace unos minutos.

Adoptas la forma de tu enemigo mientras entras en una enorme sala llena de mesas, sillas y ordenadores. Calculas que el tipo orondo esta tras la esquina noroeste de la habitacion, asi que te ocultas tras una mesa que cubra esa zona y la puerta.

Mientras espera a cubierto no ocurre nada, no oyes pasos ni disparos. De repente escuchas la voz de una mujer, deduces que se trata de la rehen que esta usando el gordo como escudo humano.

- ¡Ayudeme! Su arma no tiene balas, tiene que...

La frase termina abruptamente en un sonido gutural.

Sorprendido por el hayazgo de Hidra regreso a la camara con la pistola preparada, y cuando abre la puerta y vemos el pasillo, sin dejar de apuntar sonrio a la chica.

- Buen ojo. luego vuelvo a mirar al pasillo Yo diria que a nuestro amigo se le da bien trabajar solo, asi que... ¿bajamos?

Antes de que retrocediéramos, volví a echar un rápido vistazo a la cámara antes de que ésta se cerrase, dándome cuenta de que había algo extraño, descubrí una entrada secreta.

Oleg pareció agradado por el descubrimiento de esa entrada, mucho mejor verlo agradado que con malas pulgas, en un criminal estar de mala leche se debía notar mas. Lo miré cuando dijo que nuestro compañero se las apañaba bien solo, ¿pero eso como lo sabíamos?, desde ese ruido no sabíamos que había pasado, a lo mejor estaba en problemas.

- Eso no lo asegura nadie... ¿Puedes comunicarte desde aquí con el?, ya sabes... proyectarle uno de tus pensamientos preguntandole si está bien. Si es asi que de un par de golpes en el suelo. Bajaremos cuando me asegure, no solo por el bienestar de nuestro compañero, sino por el nuestro propio, si le hubiera ocurrido algo, ese "alguien" podría sorprendernos por la espalda.- Le comenté inspeccionando esa entrada antes de bajar.

Observe a la chica divertido. En el fondo sabia que no iba a dejarlo, y lejos de molestarme me agradaba. Siempre es positivo confirmar que los "chicos buenos" son tan previsibles.

Lamentablemente no puedo contactar con alguien a quien no veo. Pero puedes subir a buscarlo si quieres, yo vigilare este lugar. Hice una pausa intencionadamente larga antes de añadir O si temes lo que pueda haber arriba, puedes quedarte aqui mientras yo subo a buscarlo. Me incorpore y me encamine hacia la puerta de la camara sin esperar a que respondiese.

Oleg me miraba como si hubiera contado algún chiste, su sonrisa delataba que se estaba divirtiendo, y yo no podía dejar de estar nerviosa, nunca antes había acumulado tanta tensión sobre los hombros hasta ese momento.

- Entiendo... - dije algo decepcionada a la explicación de su poder, pero era lógico, si no tenía contacto visual no podría mandarle esos pensamientos. - Y no tengo miedo, me entreno para eso. - Mentí de una forma que pensé que sería bastante convincente. Estaba algo asustada, pero era normal para una novata como yo. Debía tener mas confianza en mi misma, no todo el mundo tiene poderes para poder defenderse.

- Iré yo. - Le dije mientras lo sujetaba del brazo suavemente para que se detuviese, sin ningún tipo de brusquedad que lo hiciera reaccionar de mala forma. 

- Si todo va bien ahí arriba, bajaré enseguida, en el caso que no sea así, te haré una señal, espero que tus oídos estén en perfecto estado. - Dije dirigiéndome hacia las escaleras de arriba, con mi arma por delante de mi, tenía que encontrar a Shadow.

Mi sonria aumento ante las palabras de la chica. Por lo menos tenia lo que hay que tener, quiza incluso hubiese sido una buena recluta para mi organizacion, mi antigua organizacion en realidad.

- Mis oidos estan bastante bien. Y andate con ojo, creo que ese amigo tuyo es partidario de disparar mucho, pero de pensar poco.

Aunque mis palabras no transmitieron ninguna preocupacion, ni en realidad ninguna emocion respecto a ella o al otro, no por ello eran menos sinceras. No me veia liquidando a un grupo de Clones en solitario.

Me quedé vigilando la zona, mirando a Oleg sin decir nada sobre su comentario. Sabía de sobras que fuesen criminal o no, muchos de los entendidos de armas, de aquellos tan preparados que han llegado a dormir con una en la mano, eran de gatillo facil, tan solo esperaba que Shadow no fuese uno de ellos.

Allí me quedé esperando al regreso de Oleg o a su señal. Esperaba la primero...

¿Sin balas? Esto no puede ser tan fácil... Si es un señuelo, solo espero que el kevlar aguante.

Dado que el gordo no parece tener ganas de aparecer por el marco de la puerta soy yo el que me acerco a ella. Cojo aire y me asomo de golpe con el arma preparada apuntando a las partes expuestas de la bola de grasa.

-¡¿Cómo que mi arma no tiene balas?!

Cuando vuelves al pasillo no sabes quien esta mas sorprendido, o la chica por ver a su secuestrador duplicado o el gordo al verse a si mismo amenazandose.
Tu sorpresa, aunque menor, tambien es desagradable. El tipo ha cambiado su posicion y ahora se oculta tras la esquina del pasillo. Sujeta del pelo a la mujer, que no para de llorar, y apenas puedes ver unos centimetros de su rostro asomando por encima de la cabeza de su rehen. Por encima del hombro de la chica asoma la escopeta cuyo cañon no deja de seguirte.

- Tu no eres policia, eres uno de esos tipos raros. Tira el arma y puede que no te mate.

Subes las escaleras siguiendo los pasos de Shadow.
Una vez arriba cruzas la puerta pateada por tu compañero, la huella es visible.
Ante ti se extiende un breve pasillo que gira a la izquierda. La unica iluminacion es el escaso Sol que entra por las ventanas, hay fluorescentes en el techo pero no ves ninguna llave que los encienda.
Avanzas hasta la esquina y te asomas hacia el Norte. Ves algunos cuadros con fotos del establecimiento y puertas a ambos lados. Casi al final el pasillo se bifurca.
Las paredes son de madera prefabricada, huecas y fragiles. Las paredes exteriores logicamente son de ladrillo y cemento y posiblemente alguna habitacion contenga alguna columna para soportar el techo.

Pero lo que te interesa esta en el pasillo central. Junto a la primera puerta a la derecha hay un tipo gordo armado con una escopeta. Apunta hacia el Norte, hacia la bifurcacion. Alli ves a una chica de apenas veinte años. Esta llorando y parece haber recibido algun golpe, su cabeza esta echada ligeramente hacia atras. No tardas en comprobar el motivo, alguien detras suyo la sujeta por el pelo y utiliza a la mujer como escudo humano.
Apenas puedes ver parte de la cara del hombre, pero jurarias que se trata del mismo tipo que hay en mitad del pasillo apuntandole.
Sobre el hombro de la chica asoma una escopeta que cubre todo el pasillo. El tipo habla desde detras de la chica.

- Tu no eres policia, eres uno de esos tipos raros. Tira el arma y puede que no te mate.

Las cosas han cambiado, y parece que para bien. El gordo ahora se oculta tras la esquina, ocultando todo su cuerpo tras una fina pared de madera que no resistiría ni un puñetazo. No digamos ya una bala.

-Mi nombre es Shadow. -Digo recuperando mi aspecto.

Apunto a la parte oculta del cuerpo del hombre y pruebo la resistencia de la pared aprentando el gatillo repetidas veces hasta que el hombre caiga al suelo.

Me quedé petrificada, nunca me hubiera esperado encontrarme con lo que tenía delante. Dos hombres que juraría que eran... ¿el mismo?, y el que tenía mas lejos tenía a una chica como rehén. Para colmo... se había dado cuenta de mi presencia... en cambio, no había señales de Shadow. ¿Que podía hacer?.

Continué apuntando sin hacer caso a su amenaza, mirándolo fijamente mientras daba un golpe en el suelo como si estuviese frustrada, así con suerte podría llegarle el sonido a Oleg.

- Libera a la chica y dime donde está mi compañero, tras eso bajaré el arma. - Fruncí el ceño mostrando seguridad, aunque estaba inquieta, no sabía como saldría aquello.

Un pasillo de finas paredes, un orondo tipo con una escopeta, una rehen y otro hombre similar que le apunta con su arma.
Desde el principio del pasillo Hidra ve la situacion y de sobra tiene claro que no se va a resolver con facilidad.
Repentinamente el hombre que hay en mitad del pasillo dice algo que reduce la confusion de la futura policia.

-Mi nombre es Shadow.

Hidra, que habia empezado a decir algo al secuestrador, ve como el hombre se transforma en su compañero y dispara contra la pared tras la cual se oculta el tipo orondo.
Pese a que la pared ha sido atravesada no parece que vuestro enemigo haya sido alcanzado, lo cual desafia algunas leyes de la fisica.
Sin inmutarse el enorme tipo tira del pelo de su rehen y choca la cabeza de la chica contra la pared, inmediatamente cae al suelo aturdida por el fuerte impacto.

Con una sonora risa retrocede y lo perdeis de vista tras la esquina.