Partida Rol por web

Darden te observa, sonríe casi como esbozando curiosidad ante tu pregunta.

- Veo mi buen señor que no es muy asiduo a las costumbres de los cambiaformas, no es de extrañar, el mundo gira, la noche es tan fría y tan vasta que oculta demasiados secretos para ser aprendidos en cuestión de una vida o una no vida… - vuelve a sonreír con una especie de ansias por enseñar -  …usted sabrá buen cainita, que Caín algún tiempo atrás no fue otra cosa que un ser humano cuya maldición recayó sobre él y sobre toda su estirpe, es decir, ese hombre paso a ser de mortal a otra cosa más poderosa, es como funciona nuestro mundo, existen seres que son otra cosa y pues…Selene es una de ellas, un espíritu poderoso que nos brinda el beso de la Rabia al nacer en este mundo…son cosas complejas difíciles de explicar en una sola noche mi buen Rannulf…mi contraparte, Mutchkins, no es otra cosa más que un loco obsesionado con ella…y con muchas otras cosas menos agradables – suelta una muy leve carcajada – si bien, cuando estoy al mando yo, la capacidad de comunicación con otros seres me es más sencillo, sin embargo he de admitir que Mutchkins es un excelente luchador sin hablar que, de lo que no tiene de cuerdo lo tiene de rastreador e informante…sé que los cainitas son muy recelosos con respecto a sus dominios y sus asuntos, no soy nadie para inmiscuirme en ello, sin embargo, estoy dispuesto a negociar varios secretos de Erebo a cambio de una alianza con usted, como Ratkin cuento con un deber encomendado directamente con la mismísima Selene, deber que se ha visto opacado ante mi atención sobre algunos menesteres que me han impactado notablemente – mira hacia el cielo casi como si estuviera esperando la aprobación de alguien o algo para continuar – pero he de admitir, que si bien, los secretos de esta ciudad serian de agrado para los míos, debe de ser precavido señor Rannulf…muy precavido, saber sobre lo que esconden las heladas neblinas de Erebo pueden traer terribles consecuencias para usted, y para los suyos… - fija su mirada en ti, con unos ojos que pasaron de una tonalidad café a una escarlata brillante - … ¿Desea que continúe? – sonríe casi maliciosamente -

El encuentro con Mutchkins se estaba volviendo interesante, Athanasivs veía la oportunidad de obtener la ayuda del Ratkin aprovechándose del evidente interés erótico que le movía por Selene.

-Si pudiera obtener una prenda de Selene... sería una golosina que Mutchkins no podría resistir, sus bragas serían un acierto asegurado. Por otra parte tengo que asegurarme de que se las doy a él, no a Darden, este segundo quizá se mantenga más sereno y no funcione...

y saber que el ratkin se involucraba en varios asuntos (no solo en los de Selene, aunque sus recados tuviesen prioridad), abría la posibilidad de colarle gotas de la sangre de Athanasivs, quizá ofreciendole alimentos sabrosos que contengan gotas en el interior... muchas ideas se le pasaban a Athanasivs por la mente.

-Mutchkins seria un perfecto explorador y rastreador en tareas de inspección del sistema de alcantarillado, una lástima que tenga una parte serena de si mismo, quiza los vicios le hagan perder del todo el juicio y quede sólo Mutchkins...

-El conocimiento es abrumadoramente infinito, como el universo y las estrellas amigo Mutchkins, continua por favor, el riesgo no debe de estar nunca en la mente de un hábil explorador.

Darden sonríe malicioso nuevamente.

- Todos tenemos una naturaleza que nos caracteriza señor Rannulf, usted es un descendiente de Caín mismo, su naturaleza le dicta beber vitae de cualquier ser viviente para sobrevivir…la de los hombres rata es la de mentir para salir adelante, así que tenga cuidado señor Rannulf, mucho cuidado con mis palabras, tendre que mentirle con la verdad, y decirle la verdad con una mentira, ya que los ratkin somos asi y Erebo nos invita a hacerle caso a esa naturaleza – suelta una leve carcajada mientras se dirige hacia una pila de basura que usa como asiento –

Saca su cuchillo y comienza a entonar canticos en idiomas obscenos y se corta su antebrazo para soltar un chorro maloliente de sangre toxica y para abrir sus ganas de hablar.

- La Camarilla apenas sabe nada sobre lo que pasa aquí señor Rannulf, existen túneles que llevan a mundos oscuros, mundos que envuelven terribles verdades y que solo unos pocos manejan, la misma princesa de esta pútrida ciudad ni siquiera sabe que está protegiendo una sede donde se llevan a cabo terribles actos donde tratan de fusionar genes de cambiaformas, humanos y si mi querido Rannulf…cainitas entre ellos – suelta una leve risotada - …tiene un nombre clave, no recuerdo cual, pero su base de operaciones es bajo aquella oficina cuya fachada es la de… - calla, levanta la mirada, sus ojos bailotean nerviosos y con una sonrisa que deja ver sus dientes delanteros más prominentes que los demás dice: -…sígame, ¡rápido! –

Comienza a correr hacia el norte con una agilidad casi inhumana, no acorde a su aspecto rechoncho y maltrecho.

Tanto corren que se alejan un poco de la ciudad para llegar a unos paramos cubiertos de nieve y árboles que rodean el cuerpo de un ser tambaleante.

- Oh bella Selene, nos has dejado ser testigos del abrazo, del abandono, gracias Selene – sonríe con un fuerte chillido de por medio – vaya, vaya señor Rannulf, yo aquí lo espero, los secretos le esperaran, pero uno de los de su tipo lo necesita -

Detectar mentiras cuando dice: ``La Camarilla apenas sabe nada sobre lo que pasaLa Camarilla apenas sabe nada sobre lo que pasa aqui´´

Detectar mentiras cuando dice: ``tratan de fusionar genes de cambiaformas, humanos y si mi querido Rannulf…cainitas entre ellos´´

Correr para seguirle el paso:

-¿Qué haces aqui? imagino que no tienes frío, ¿Te hace sentir mejor mirar al cielo y esperar que salga el sol?

Te levantas mareado, malhumorado, con ganas de destruir todo cuando sientes el paso firme de un hombre quien extrañado te mira y te habla:

- ¿Qué haces aquí? imagino que no tienes frío, ¿Te hace sentir mejor mirar al cielo y esperar que salga el sol? -

Su voz era recta y rasposa, te giras y notas su figura de Adonis y sus ojos tan celestes como la figura espectral de una muerte apacible que ha llegado y no se ha ido.

- Tranquilo señor Rannulf, el sol no saldrá dentro de un mes en esta ciudad – otra voz se hizo eco tras ese extraño hombre, era una voz chillona, molesta, de esas voces que uno encajona como irrepetibles – permítanos presentarnos recién abrazado…mi nombre es Mutchkins y este de aquí es el gran señor Rannulf, conocedor de los secretos y amo de Mutchkins  – suelta una vulgar risotada aquel rechoncho ser, cuyos dientes frontales sobresalían de los demás, como si de una rata humanoide se tratara -

- Tranquilo señor Rannulf, el sol no saldrá dentro de un mes en esta ciudad – Darden hablo mientras se hacia presente desde atras de ti – permítanos presentarnos recién abrazado…mi nombre es Mutchkins y este de aquí es el gran señor Rannulf, conocedor de los secretos y amo de Mutchkins  – suelta una vulgar risotada  -

— ¿Quién coño son...? ¿Qué me hicieron? —dije, mientras sentía un infierno rugiendo en mi estómago. Algo clamaba por... sangre.

Permaneció de pie en silencio, mirando al desorientado varón, su pálido tono de piel indicaba que quizá seria de procedencia nórdica, o tal vez...

-Y bien, ¿que es lo último que recuerdas? un ratoncito me ha dicho que no ha sido tu mejor noche

— Aléjense... ¡Aléjense! —Un rugido salió de la garganta del hombre y sus ojos, inyectados en sangre, se dejaron ver perfectamente a la luz mortecina del callejón.

-Dices que se alejen, pero ¿quien debería hacerlo? - dejo de hablar por un momento - ¿Deberian alejarse tus miedos? no, ya nunca te abandonaran, de ahora en adelante te acompañaran cada noche.

-¿Deberían alejarse tus dudas? no, cada decisión que tomes traerá grandes consecuencias a medio y largo plazo, ¿y si debería haber hecho...? ¿y si quizás...? jamas dejarán de perseguirte tus pensamientos.

-¿Tu vida anterior o la voz interior? tampoco se marcharan nunca, o bueno, puede que alguna vez si, pero ahora no deberías pensar en eso.

De nuevo permanece en silencio y te observa

-Hoy la luna te ha invitado a caminar, no le hagas el feo, pero primero tienes que estar preparado para poder dar la talla, encuentra un lugar discreto y seguro donde puedas reincorporarte, aguantar la...ansia, tambien formará parte de tu primera prueba, volveremos a vernos.

Hace un gesto a Mutchkins, en señal de que se va.

Athanasivs no era un protector incondicional ni un asesino en serie espontanéo, más bien en función de si fluya de forma habitual actuaba con frialdad y si algo le cruzaba los cables sacaba su otra cara, la actitud impulsiva e insolente del joven vástago le cabreo mucho, mucho.

Agarró con fuerza al valiente hambriento
``el cementerio esta lleno de valientes´´ pensó, aunque si lo liquidara no quedaría un cadaver al que dar cristiana sepultura.

-Entiendo que tengas sed, lo que no entiendo es porqué aún no he acabado contigo, debes de tener algún ángel de la guarda, incluso en tu nueva no vida... creo que te llevaré ante unos amigos, y lanzando al aire la moneda decidiremos la forma de despedazar tu cuerpo, si cae de canto te prometo por mi honor que me encargaré de que vivas.

-¿Me acompañas, Darden? el espectáculo será digno de verlo al menos una vez en la vida.

Erebo, 6 de enero, 02:50

-9 ° Celsius

Segunda noche del Sol de la Medianoche

Lo que alguna vez fueron vestigios de una ancestral herencia natural, se convirtieron en leves susurros que te invitaron a cerrar los ojos, así lo hiciste, estabas cansado, muerto literalmente, sabias lo que te había ocurrido y sabias que ahora te tocaba continuar con esta maldición que Gaia veía con tan malos ojos, sin embargo, muy en el fondo, sabias que quizá era parte de un plan mayor, sabias que servirías a ella desde las sombras como un hijo que no desea hacerse conocer, pero un hijo que igual ayuda a su madre desde lo lejos y a costa de no tener más casi relación alguna con sus otros hermanos.

Estabas muerto, lo sabias, pero tus oídos aun funcionaban y te pusiste a escuchar desde un sueño muy leve mientras sentías que tu cuerpo era arrastrado y levantado de aquí para allá con unos brazos astillosos e incomodos.

Erebo, 6 de enero, 02:50

-9 ° Celsius

Segunda noche del Sol de la Medianoche

No hubo tiempo de ninguna respuesta, aquel recién abrazado cayó desplomado en el suelo como si hubiera muerto nuevamente, Mutchkins se acerca y lo olfatea.

- Los cainitas se hacen polvo al morir, este está muerto, pero no muerto bien muerto, sino…bueno, usted ya sabrá señor Rannulf – lo toma en brazos y te indica – venga, si de por ahí alguien nos ve con un cuerpo a rastras, podría crearnos muchos problemas, sígame, por las alcantarillas –

Muy cerca estaba una entrada a las mismas, donde Mutchkins arrastra al cuerpo y lo lleva como si de un costal de papas se tratara.

- Tranquilo señor Rannulf, no hace falta que me guie, se dónde está la entrada a su refugio, recuerde que Mutchkins sabe todo de la ciudad y la ciudad sabe todo de Mutchkins – dice mientras pisoteaba las aguas servidas como si de charcos de aguas termales se trataran -

La conversación durante el trayecto de ida era tranquila y despreocupada, pero un momento Athanasivs quedó callado, ese tal Mutchkins decia saber muchas cosas, y para sopresa era cierto, sabía donde se encontraba el recóndito refugio de Athanasivs que tanto le costó construir, preparar y ocultar...

-¿Debería liquidarlo a él tambien? dejar vivir a una pequeña amenaza puede volverse gravemente en mi contra en un futuro...

Durante estos momentos Athanasivs ignoró las palabras de Mutchkins y los gritos de dolor del recien creado, pero volvió a conectar con el entorno al adelantrarse en las alcantarillas, siguió de cerca al cambiaformas observando sus técnicas de orientación en el laberinto subterráneo.

-y dime buen amigo Mutchkins, ¿que te llama más la atención de este oscuro lugar? veo que sabes moverte muy bien por cualquier sitio, independientemente de su hostilidad o dificultad del terreno...

Dejó caer preguntas restando importancia al tema que le preocupaba, pero este pensamiento no le abandonó, el refugio tenia varios niveles y la duda que le quedaba a Athanasivs era hasta que nivel de profundidad habria averiguado el cambiaformas.

-Mi sala de meditación es mi lugar de descanso y donde bajo la guardia... si este engendro la ha encontrado y se lo dice a otros... será mi perdición... debo acabar con él rápido, esto se está empezando a complicar ¿y si es aliado de los nosferatu y me lleva a una emboscada...?

Pensamientos perturbadores y continuados acompañaron a Athanasivs durante el trayecto.

Erebo, 6 de enero, 03:05

-9 ° Celsius

Segunda noche del Sol de la Medianoche

Tras varias vueltas y un obvio sentido de orientación basado en el olfato de aquel cambiaformas, llegan tras varios kilómetros de puras construcciones subterráneas y laberínticas que escondían la entrada al refugio, Darden solo caminaba muy tranquilamente mientras varios focos titilaban en completo estado de abandono.

- Mutchkins es un experto en recaudar información y en conocer los secretos de un lugar, es lo que le dije señor Rannulf – su voz esta vez era más calmada y rasposa, era obvio que esta vez era Darden el que hablaba – yo por mi parte se quién me conviene como aliado y se quien no y como llegar a ellos, en el mundo de los Ratkin, el que tenga más conocimiento es el más poderoso, pero es sobrepasado con creces aquel que tenga más humanos destruidos, nosotros nos propagamos por este mundo tratando de expandir la peste y la muerte de los que dañan a la madre tierra y créame señor Rannulf, la idea de un asedio Sabbat se acerca mucho a mi idea de eliminar a los malditos que destruyen a Gaia…porque ¿Es eso lo que harán no? –

En casi un santiamén, llegaron en la reja que daba acceso a la entrada de tu refugio.

- ¿Son esos sus amigos señor Rannulf? – dijo mientras señalaba con la cabeza la figura de cuatro individuos parados frente a la entrada de hierro -

Caminó con paso firme al recorrer los últimos metros hasta la reja que llevaba al refugio.

-No me lo puedo creer... definitivamente esta alimaña nos ha encontrado... tengo que actuar rápido y sin fracasos.

Examinó la circunstancia actual.

-Mi mano diestra está ocupada sujetando al hambriento, con la izquierda agarraré al malnacido cara rata y lo degollaré a bocados.

-No... aún no le he visto en una huida real y en condiciones de correr para sobrevivir, es probable que sea rápido y con la falta de movilidad se escape y la situación empeore.

-Primero extrangularé al neonato hambriento, lo haré con naturalidad para que no parezca que tengo más intenciones, y cuando esté cerca de la alimaña, estaré libre de cargas para acabar con él.

-No... es muy astuto, no verá como algo sin importancia el hecho de que liquide sin más al neonato, y menos despues de lo que dije, de que su muerte la decidiría junto con el resto de mis compañeros, y que su ejecución sería todo un espectáculo...

Plof. Un simple sonido de algo cayendo al agua resonó en los alrededores.

-No puede ser, ¿ya están aqui? iba a acabar con todos los mugrosos seres que deambulan por este lugar, y al final he acabado en una trampa llevado por un medio rata?

Al oír las tranquilas palabras de Darden, afinó sus sentidos con especial atención, más que en cualquier otro momento de la noche.

-Las que tomamos determinan nuestro destino Darden.

Dichas palabras tenían otro sentido que sólo desde la psicosis se podría interpretar.

-Cállate de una vez, cálmate.. y piensa friamente, este ser sentía por lo que me contó una gran admiración y deseo por Selene, si es asi es esperable que no quiera acabar con todos nosotros.

-y ¿que hay de Selene mi buen amigo Darden? anteriormente la habeis mencionado expresando vuestro aprecio por ella.

Antes de que siquiera puedan ser vistos por las pocas luces de aquel túnel, Darden se voltea y te mira con un gesto el cual, por primera vez notas, el de una sonrisa inocente ante tu confusión.

- Imagino que Mutchkins no te ha explicado correctamente o usted no ha entendido señor, Selene es simplemente un espíritu, algo que no podemos tocar o ver, pero si sentir nosotros los cambiaformas, especialmente el día que sucede nuestro primer cambio -

-Oh, entiendo.

La sorpresa cayó como un jarrón de agua fría, a fin de cuentas el cambiaformas no se refería a la vampira Selene, y por tanto... las tesis que que indicaban confiar en Darden se desvanecieron, desde ese momento Athanasivs le vigilaría muy de cerca..