Partida Rol por web

8 de enero, 2018

Cuarta Noche del Sol de la Medianoche

07:48 hs

Ambos suben al vehículo, Frederick le indica a Martin que lo lleve hasta lo que parecía ser su nueva adquisición, rápidamente el vehículo se pone en marcha hacia aquel destino.

En cualquier lugar del mundo, el solo debería empezar a calentar, pero, ese no era cualquier lugar, era Erebo y ambos elohim ya habían comprobado el nivel de particularidad que tenía aquel lugar.

Al llegar al edificio, no parecía la gran cosa, sin embargo, por dentro se notaba su alta calidad en cuanto a limpieza y servicio, ya que, sin conocerlos, notas que los empleados eran muy amenos y corteses con todos por igual.

Era buen momento para escoger qué camino seguir, por una parte, el doctor Novak debía hacer turno por la tarde, pero no dormir podría afectarle a su cascara mortal, así que podía quedarse con Frederick en aquel lugar o marcharse hacia su hogar.

Apenas llegamos al hotel lo observé como si mirase cualquier estructura, sin embargo la cálida bienvenida de los empleados me hizo notar que fue una buena inversión.

Saludé cordialmente a todos mientras avanzaba.

-La mejor habitación por favor, desayuno completo para tres y la contraseña de wifi por favor- dije mientras me quitaba el abrigo y los guantes.

-Janos, me gustaría que te quedaras aunque sea a desayunar y hablar sobre nuestros siguientes pasos, puedes quedarte a dormir también si gustas-

Janos dedicó un momento a la curiosidad que le suscitaba que Knox hubiera pedido desayuno también para su conductor, pero pronto tuvo cosas más importantes en las que pensar. Habían ocurrido muchas cosas y aún tenía en el bolsillo la muestra que había tomado del icor de la criatura la morir.

- Me quedaré a desayunar, pero luego iré a descansar a casa. Así podemos cambiar impresiones. Hay algunas cosas que me contó ese oficial de policía que creo que te interesará saber. -

El doctor desayuna con movimientos rápido y eficientes, si bien tras acabar se acerca al mueble bar y saca una botellita de whisky la cual sirve en un vaso con hielo. Se recuesta en un sillón y se relaja esperando a que sea Knox el que inicie el intercambio de ideas y pensamientos.

Me quité el saco y una vez desayunamos le dije a Martin que esperase afuera mientras revisaba mi correo electrónico.

-Alana tenía muchas propiedades, este hotel ya es mío pero los trámites para lo demás llevarán tiempo y debo de hablar con el gobernador para que siga manteniendo la fachada...- una vez terminé también me serví un whisky, y me senté frente a Novak.

-Los magos no me gustan o mejor dicho, este grupo de magos no me gusta, ese tal Allan parece creerse la gran cosa, estar por encima de todos por su magia o lo que sea, claramente es el líder del grupo pero es un grupo desorganizado, además hubo algunos garous metidos en el medio en el combate contra esa cosa que no terminé de entender bien que era y a que había ido y todo esto de Amalgama...es muy extraño, aún sigo pensando que negociar con la estirpe de Caín podría ser mas beneficioso-

Janos dio un trago corto a su bebida mientras evaluaba las palabras de Knox. Dejó que el whisky danzara por su boca, para tragarlo lentamente, saboreándolo. Al menos tenían Johnnie Walker Etiqueta Negra en el mueble bar del hotel, cosa que era de agradecer.

- Me gustan los Magos tanto como a ti. Si nosotros no supimos qué hacer con nuestro poder cómo confiar en que un mortal con sus limitaciones lo haga mejor. Lo único que puedes hacer al respecto es tratarlos como aliados, y hacer que sigan nuestras indicaciones, pero por voluntad propia.

Tratar con Cainitas dices, bueno, si hubiera alguno puede que fuera una opción, pero me parece que están todos con perfil bajo o en franca huida. Quizás ese grupo del Sabbath, si consiguieras localizarlos, pero como carne de cañón seguramente, poco más.

El oficial que fue allí estaba presionado por los Vástagos. Amenazas sobre su familia y esas cosas. Quizás sea buena idea tomar un testigo sobre esa opresión, un comportamiento más cercano y amable. Todos van a pasar al Otro Lado algún día pero no tenemos por qué hacer su paso aquí más miserable de los que es. Supongo que atajar la fuerza que se quiere hacer con Erebo pasa por un acto de ese tipo, hacer algo mejor ¿no crees? -

El Doctor se recostó en su sillón buscando una postura cómoda. Estaba algo cansado y si quería rendir en su turno debería irse a dormir en más bien tirando a poco tiempo. No se quedaría demasiado.

-En eso tienes razón, la reunión organizada por Alana funcionó mal desde el vamos por no indicar un punto en común o no estar dispuesta a ceder nada, creo que comenzaré a tomar control de las propiedades y contactos como te dije antes, la clave es el alcalde, me dará acceso a todos los demás seres sobrenaturales- me quedé callado unos segundos recordando el rostro del anciano - parecía un sujeto reacio pero todo mortal desea algo, le ofreceré un pacto y con eso me haré con la información, organizaré otra reunión anunciando el cambio de liderato y sin humanos de por medio, a mi me da lo mismo si los garous quieren destrozar un hotel y recuperar su territorio, mientras podamos detener lo que se cierne contra este lugar me basta- lo que me dice acerca del oficial de policía no me toma demasiado por sorpresa y asiento a sus palabras - por tu trabajo tienes más contacto con ese mundo, puedo encargarte esa tarea entonces? Trata de hacer apasible la estadía de los mortales en este mundo y ve que puedes averiguar, trata de no trasnochar tampoco, tu cascara mortal podría agotarse...-

Mavet apura su vaso sin esfuerzo, como el que está acostumbrado al intenso sabor del whisky. Se dirige luego a Knox brevemente.

- No subestimes a ese alcalde. La misma Alhana parecía tratarle con cautela, es posible que sea más que un simple mortal. En cuanto al hotel puede ser el lugar que alberga los problemas a los que nos enfrentamos. La prioridad sería acabar con esa amenaza según mi parecer.

Pero tienes razón, será mejor que me vaya a descansar. No debemos forzar nuestras cuerpos mortales. Yo me ocuparé de esos asuntos con la policía cuando tenga algo de tiempo. Si necesitas dar conmigo este es mi busca. No tengo teléfono móvil pero puedo llamar al tuyo. -

Con un gesto de despedida Janos se dirige hacia la puerta, la cual traspone tras escuchar cualquier respuesta por larte de Knox. Después sale al frío del exterior envuelto en su abrigo. Una vez en la calle las alas del inframundo le llevaron raudo a su casa, donde pudo al fin dormir un rato. 

8 de enero, 2018

Cuarta Noche del Sol de la Medianoche

-17°

09:48 hs.

Asiento a las palabras de Mavet y busco entre mis bolsillos para darle un fajo de billetes y luego anotarle mi número.

-Comprate un teléfono móvil y di en recepción que te pidan un uber para ir directo a tu hogar, cuándo quieras venir solo avisame- dije entregando el fajo de billetes y mi número anotado- a pesar de que podemos comunicarnos mediante nuestros dones no se hasta que punto eso sea seguro con magos en los alrededores, además te será útil para hablar con otras personas, nos vemos hermano, descansa bien- dije despidiéndolo.

8 de enero, 2018

Cuarta Noche del Sol de la Medianoche

-17°

10:00 hs.

Mavet ya se encontraba saliendo del ascensor cuando unos gritos alertan sus sentidos, varios empleados del hotel comenzaron a correr hacia el elevador, buscando subir a él algunos, mientras que otros subían por las escaleras.

No pudiste entender exactamente por qué hasta que logras notar las figuras, se trataban de hombres, o, una suerte de hombres, completamente deformes y con escamas en vez de piel normal, miraban con sus ojos casi tan grandes como platos, completamente ambarinos e inexpresables, contaban con unas bocas enormes los cuales albergaban largos dientes y tan afilados como cuchillas.

- Criatura -

Eran tres, dos realmente grandes, de unos dos metros de altura, mientras que otro era más pequeño y escuálido, el cual logro subir por las escaleras persiguiendo a los empleados.

Los otros dos, se encargaron de atacar a todos los inocentes que se encontraban cerca, desgarrando la carne de sus víctimas en trozos que se asemejaban a telas rasgadas y humedecidas por la sangre que brotaban de las heridas.

8 de enero, 2018

Cuarta Noche del Sol de la Medianoche

-17°

10:00 hs.

Adramelek al despedirse de Janos, se dispone a recostarse, lanzando todas sus pertenencias que podrían resultar en pequeñas molestias para su cascaron mortal, tales como llaves o su teléfono.

Te fijas hacia el cielo oscuro y luego bajas tu mirada hacia las calles, no tardas en percatarte de que algo no andaba bien, varias personas corrían despavoridas buscando refugio de lo que parecían ser unos hombres que los atacaban horrendamente.

- Criatura -

Sales de la habitación y escuchas varios gritos, eran los empleados del hotel que subían por las escaleras, detrás de ellos había un hombre, o, una suerte de hombre, completamente deforme y con escamas en vez de piel normal, miraba con sus ojos casi tan grandes como platos, completamente ambarinos e inexpresables, contaba con una boca enorme el cual albergaba largos dientes y tan afilados como cuchillas, era pequeño y escuálido, lograba escalar por las paredes como si de una especie de insecto se tratara, tenía grandes manchas de sangre en sus garras y en su boca.

Janos deja el teléfono con el que estaba hablando con la Vástago Aurora y se hace un corte en el antebrazo con el bisturí que siempre lleva en su chaqueta, lo cual crea un conducto para hablar con Vedrana, la espíritu espía, que porta así mismo un afilado cuchillo.

- Córtale la garganta a ese pequeño que va por la escalera. -

Era algo que el espíritu podía hacer contadas veces al año, pero Janos creía que dejar ese cabo suelto asesinado por el hotel justificaba su petición.

Luego Mavet tomó el control cambiando la carne de Jnaos por la esencia del celestial que habitaba en su interior, y por una vez en años no se contuvo y sacó toda la rabia que el Pozo había plantado en él, manifestando su Forma apocalíptica con todas sus características. En cuanto estuvo listo, se aprestó a caer sobre los monstruos asesinos.

-MARTIN!- grité llamando a mi guardia de confianza para que hiciera su trabajo de custodiarme hacía afuera, de ser posible hacía el auto, mientras tomaba rápidamente mis cosas y abrigo para volver a salir de allí, seguramente iba a tener que combatir contra aquella criatura, si eso pasaba esperaba que el caos fuera lo suficiente como para que los mortales no se percataran...

Mavet intenta acercarse a las criaturas muy lentamente, utilizando sus capacidades celestiales para lograr aquel acometido, pudo pasar fácilmente detrás de una de ellas, sin embargo, la otra logro verlo, por lo que, con un grito gutural, como la de un hombre ahogándose logro alertar a su compañero, por lo que ambas criaturas se colocaron en posición de combate para intentar acabar con el elohim.

Gritas a Martin, sin embargo, este no aparece, por lo que estabas viéndote en la terrible situación de luchar tu solo contra aquel ser.

La criatura, lanza un rugido agudo y gutural, sus dientes se hacen ver y se dispone a saltar para atacarte con sus garras.

Sin embargo, algo lo detiene en el aire, algo que era invisible por unos instantes, algo que lo hace dar varias vueltas ahí frente a ti y que luego le abre la garganta con una herida tan profunda que se podían notar varios borbotones de sangre.

Ese algo se materializo por unos segundos en una espesa humareda que luego tomo forma de una mujer con un cuchillo, era Vedrana, la esclava de Mavet quien al parecer fue enviada para ayudarte.

Vedrana poco a poco se inmaterializa nuevamente y desaparece por completo.

Los espíritus de Mavet son muy útiles.

Tras mi pensamiento comencé a correr hacía la entrada, buscando a Mavet con la vista y luego el auto, aunque claramente iba a tener que manejar él.

Tanto que cobran y no están cuándo se los necesita...humanos.

Al ver como la criatura muere a manos de Vedrana, bajas rápidamente por las escaleras, esquivando los cuerpos desmembrados de algunos huéspedes y empleados por igual, se notaban las heridas causadas por las grandes garras de aquellas criaturas, así como algunos fueron separados por la mitad victimas de mordiscos voraces.

Al llegar a la planta baja, notas que Mavet había cedido a su forma apocalíptica, se trataba de un caído que se asemejaba a una sombra con cientos de telas lóbregas que flotaban a su alrededor, Mavet intentaba acercarse a un par de esas criaturas, pero mucho más grandes y menos agiles que la asesinada por el espíritu.

Sin embargo, es descubierto y comienza un combate encarnizado contra ellas, Mavet usaba sus cuatro extremidades para poder detener los ataques de aquellos seres.

A pesar de haber sido descubierto eso no arredró a Mavet. Podía haber dedicado sus habilidades especiales para tratar de acabar con las criaturas o bien haberse retirado al Otro Mundo, pero opto por defender a los humanos que allí se encontraban ante el asalto de las criaturas que parecían salidas de un relato de Lovecraft.

Había abrazado su lado más oscuro y detuvo los envites de sus enemigos con sus múltiples extremidades mientras propinaba un garrazo a la más lenta de las dos. Estaba en desventaja numérica pero eso nunca había echado para atrás a Mavet. No obstante esperaba que Knox hiciera una oportuna aparición, no sabía cuanto podría aguantar.

Notas que Knox baja raudamente por las escaleras, pero tuviste poco tiempo para reaccionar a esto ya que aquellas criaturas habían comenzado a atacarte con sus zarpas afiladas.

Con tus brazos logras detener ambos ataques y alcanzas a dañar a una de ellas con tus garras, lo que le causa una herida considerable.

Afuera del hotel, pudiste notar como el que era guardia de Knox disparaba a diestra y siniestra a otro grupo de criaturas con su pistola.

Una de las criaturas intenta atacarte de nuevo, pero al no medir correctamente sus pasos, asesta otro golpe a su compañero que recientemente fue herido causándole una herida casi mortal que lo deja casi incapacitado para luchar.

Por lo que Mavet pasa a tener solo a un enemigo frente a él.