Partida Rol por web

Le da un par de palmaditas al chico, a quien jamás se había imaginado así de tímido, ni de amable, por ser el millonario designado de Storybrooke. 

¿Olivia Hausser? ¿La secretaria de Dom? - preguntó sorprendida - No la habría visto como una revolucionaria... ¿Y ese Killian quien es? No me suena ni en pelea de perros... - pensó un segundo, pero su mente confirmó sus palabras - ¿Podemos expulsar a alguien de la revolución? - bromeó en cuanto escuchó el nombre de Samantha - Rita tampoco tengo idea quién es. A Wolf si lo conozco, bueno saber que está de nuestro lado. Entonces Zach y Dylan... que puta rabia me dio esa cabrona hoy... mira que defenderlo - dijo con ira en su voz, pero cuando se percató respiro profundo y siguió hablando normalmente - ¿Tú eres el líder? Eso tiene sentido... Por eso me ayudas con todo. Y no me parece que necesitemos a alguien con más energía, un líder puede delegar, ¿sabes? Hacer todo no es su función principal. Eso me recuerda, Antye, Wendy, persona pelirroja en el sótano, está de nuestro lado también. Ella y Zach están dispuestos a ayudar en lo que sea. 

Había estado bastante callada mientras las otras chicas hablaban y aunque ella no había dicho mucho también había recibido un abrazo, al parecer la chica quería demasiado a esa capa y se alegraba de encontrarla, así que Elsa sonrió ladeando levemente la cabeza. Iba a presentarse pero Olivia ya lo hizo por las dos, para pedirle después a la chica que la dejara quedarse en su casa. — Oye... No es necesario si no se puede... Volveré al hostal de la Abuelita... — Se encoje de hombros levemente. Le daba algo de vergüenza tener que quedarse en casa de alguien así sin más, y tampoco quería molestar.

Erick frunce los labios cuando insultas a Dylan. Pero opta por callarse y seguir caminando. James continua hablando contigo - Ya los conocerás mañana, vendrán a la mansión- se encoge de hombros- delegar está bien, pero hay que tener paciencia para ser un líder y yo no la tengo - se mete las manos en los bolsillos- hablando de la pelirroja, ¿qué ha pasado ahí abajo? 

Estaba escuchando a una de las chicas, que una de ella, no tenia sitio donde pasar la noche, me ofrecí a dejarle el sofá de mi casa.
Si no te importa dormir en un sofá cama... A veis ayudado a mi amiga...Me dais confianza creo que soy buenas personas...

Al escuchar la confesión de Zack, Wendy guarda silencio y sin decir nada deja que el chico vaya por la comida. En ese lapso, la joven se levanta y comienza a recorrer la pequeña habitación meditando.

Concluye que tal vez llevó a cabo tal acto cuando le quitaron el corazón, pues si bien recuerda esa maldición obliga a su dueño seguir órdenes que vayan en contra de su moral, incluso arrebatar la vida con un daño severo a tal órgano. <<Tal vez por eso al verme dijo que le prometí alejarme de él>>. Según el cuento, la Reina de Corazones no tiene sentimientos por perder dicho elemento y se le consideraba loca, aunque claro... cualquiera perdería la cordura con una pérdida de esa índole- ¿Habrá tenido Zack su corazón antes de que fuese demasiado tarde?

Pero aún así hizo algo malo. Su pecho se revuelve, como si aquello le doliera un poco. <<Debí conocer al doctor o... ver lo que pasó>>. La última idea la hizo estremecerse y piensa en Peter, esperando que no cometiese un acto similar; pero rememora que el chico comentó que tal vez esté aliado con la Reina Malvada, otra villana del mundo de los cuentos. <<La Reina de Corazones, la Reina Malvada... Sólo faltaría que estén involucrados Maléfica y otras malas personas>>. Sin embargo, todos tienen motivos para actuar en contra de las normas sociales... ¿Envidia?

Entonces escucha que alguien toca a la puerta y le dice que entre, pues piensa que se trata de Zack. Al reafirmar su sospecha, Wendy sonríe en agradecimiento aceptando lo que se le dio. Al verlo alza una ceja, pues siente que ha comido eso por un largo tiempo; mas no le toma mucha importancia y parte el emparedado a la mitad. Le tiende un pedazo al chico mientras ella da una mordida al otro.

-Anda, no he visto que comas.

Cuando haya aceptado o rechazado el emparedado, la pelirroja suspira y lo mira directamente a los ojos.

-¿Estás.. arrepentido?

Encantada! le dije tanto a Elsa como a Olivia. Luego Olivia me pidió que si Elsa se podía quedar en mi apartamento.

Era una petición muy extraña, yo era una desconocida para Olivia, y ella para mí, y aún así me pedía el favor de que alojara a otra desconocida. pero el hecho de que me hubiera buscado para darme la caperuza y su reacción, me decían que si sabía lo de mi licantropismo. y si de verdad sabía qué era, es que le tenía mucha confiaza a esta caperuza, a que yo no me la quitara, valoraba poco la vida de Elsa o quizás era una trampa para cazarme. También estaba la opción de que realmente fuera muy inocente, de que no supiera nada y de que simplemente quería ayudar a Elsa. Aunque parecía improbable que fuera la última, tenía la sensación de que sí sabía algo.

Mmmm.... dude un momento en mi respuesta. No me conocéis de nada.  No es que me importe que se quede, tengo una casa muy grande y estoy yo sola, ya que mi compañero de piso se marchó. Pero no creéis que es un poco extraño que una desconocida le pida a otra desconocida que si puede alojar a una tercera desconocida? sonreía para quitarle importancia al asunto y no parecer una estúpida. Y más que importarme por mí, en realidad me importaba por Elsa, no sabía hasta que punto podía confiar en esta caperuza y lo último que quería era hacerle daño a alguien. Bueno, también estaba la posibilidad de que fuera una trampa, pero siempre que alguien supiera lo que yo era, existiría esa posiblidad. Estoy muy agradecida por lo de la caperuza y ya os he dicho que estaba en deuda con vosotras, si quiere quedarse es bienvenida. Una promesa era una promesa. No me quedaba otra. Estaría despierta toda la noche y no me quitaría la caperuza para nada. Y no sólo por miedo a hacerle daño, si no también por miedo a que ella me lo hiciera a mí.

Fue entonces cuando Mariam ofreció su sofá-cama. suspiré aliviada, lo prefería así. Sabía que esta maldición no me dejaría vivir tan normalmente como en realidad me gustaría y que eso me separaría de muchas personas y haría que muchas otras quisieran matarme, pero esto era yo y tenía que aceptarlo. tenía que ser cauta y no dejarme llevar por las emociones, era mejor estar sola.... Bueno, problema resuelto entonces, jejejeje les dije a las chicas. y que te trae por este pueblo, Elsa? le pregunté a la chica algo curiosa, intentado cambiar de tema.

Tras escuchar la oferta de las dos chicas de prestarle su casa, se quedó bastante sorprendida, no llegaba a creer que fueran tan amables en aquel lugar y aunque ella quisiera no molestar para ser honestos, su dinero no servía aquí y no podría pagar otra noche en el hostal, así que necesitaba quedarse en casa de alguien aunque no quisiera. Suspiró mirando a ambas y aunque consideraba la oferta de la mujer morena, prefería aceptar la de Eileen por el asunto que Olivia le había planteado. Si se quitaba la capa, se convertiría en una bestia... Debería cuidar de que no lo hiciera. Y además, ella parecía preferir seguir sola, era lógico, pero Elsa quería ayudar aunque pudiera estar en peligro, ella era valiente. — En realidad. Si tienes una casa grande y estás sola... Me encantaría hacerte compañia Eileen. Agradeciendo mucho tu oferta — Desvía su mirada a la morena. — Si Eileen está de acuerdo, creo que iré con ella. — Sonríe a ambas, incluso a Olivia por hacerle el favor de pedirlo, ella no habría sido capaz. — Muchas gracias a todas de verdad... — Murmura para luego dirigirse a Eileen. — La historia del por qué estoy aquí es muy larga... Podría contartela de camino a tu casa, si la oferta sigue en pie y si no te parezco lo bastante molesta como para cancelarla, claro. — Ríe tras la pequeña broma para ser amable. — Y te ayudaré con las tareas de casa, no habrá problema conmigo, si es lo que te preocupa. — Se encoje de hombros dejando caer las manos sobre sus costados con una sonrisa.

No mucho... - dijo volviendo a encogerse de hombros - Después de lo que dijo el chico en la torre, decidí darle una oportunidad, y pensé que si podía recobrar un sentimiento de él, quizás podrían volver los otros. Mi especialidad es el odio, así que no me costó mucho sacárselo... y cuando vi que podía recuperar eso, supe que podría recuperar el resto. - todo esto lo dice mirando al suelo mientras habla, no era de los que consideraran sus logros una razón para vanagloriarse. Más aún, le daba bastante vergüenza admitir que algo había funcionado - Luego se mostró preocupado por la chica, y cuando me dijo que podía estar en peligro, la llame para que viniera. Hablamos un poco, me mostró un libro donde salía yo con un tatuaje fantástico y mi historia original, y luego la chica se encontró el corazón de Zach en su mochila, a quien convencimos de que se lo volviera a poner. Está destrozado, el pobre. Entre lo de Sebastian y que estaba enamorado de la pelirroja pero ella ni lo recuerda...

Zach sonríe de forma amplia cuando le das la mitad del sandwich. Niega con la cabeza y su sonrisa no desparece - no, para ti entero. Con eso no tengo ni por donde empezar- en cambio cuando le haces la última pregunta, la sonrisa se esfuma. Ves como se diriges hacia la ventana y cierra las contraventanas, tapando el cristal. Sin darse la vuelta comienza a hablar- esta noche va hacer mucho frío. Te he buscado una manta y algún pijama abajo, pero no había nada. Lo siento, temo que vas a pasar algo de frío hoy- se vuelve hacia ti y esta vez se sienta delante tuya. Te mira a los ojos y suelta un largo suspiro- si, claro que me arrepiento...

Wendy tuerce la boca sin enojarse cuando Zack le rechaza parte del emparedado, pero lo deja en el plato por si al chico le apetece más tarde y también deja la mitad de la leche. Con su estómago satisfecho y ya un poco descansada, la pelirroja observa cuando cierra la ventana y se posa frente a ella. La joven sonríe en alivio y pone su mano en la cabeza de él.

-No importa, la chamarra es bastante caliente y si paso frío sólo es por hoy.. -pone su frente en la de él y suspira-Creo que la señorita Hyde ha visto tu arrepentimiento y es bueno que lo estés. Eres bueno, Zack, por eso te ayudan... no creo que pueda perdonarte, pero el hecho de que aún estés aquí indica que los corazones de ambos no se han corrompido.

La pelirroja alza la vista y relaja sus hombros, luego toma el vaso de leche y se lo tiende.

-Toma... y tengo otra pregunta... ¿Sabes quién o quiénes son los causantes de todo esto?

Coge el vaso de leche y niega suavemente con la cabeza- a parte de quienes ya te dije, no sé nadie más. Lo siento no serte de más ayuda- mueve un poco el vaso, mirando como el contenido mancha el cristal - no sé hasta que punto tienes razón...

Bebe la leche de un trago y deja el vaso sobre el suelo. En silencio te mira esperando a que le digas algo o que le eches. 

-Todo lo que dijiste ha servido, Zack. Muchas gracias. Y creo que es mejor pensar en algo bueno que malo...

Wendy deja escapar un suspiro y se deja caer en la cama. Le está quitando el tiempo al chico con preguntas. Seguramente él quiere descansar y no ser molestado. Quedándose así, la pelirroja cierra los ojos.

-Si gustas irte... ya no te molesto más. Gracias por todo, Zack.

Su voz no se escucha cansada, pero se relaja en esa posición. Se percata que su cuerpo le exije descansar, pero no lo demuestra.

-Me molesta no recordar nada acerca de nosotros... como Antye no sabía de mis hermanos, de Williams, de la maldición... y ahora, se que Hook está aquí y no se si sea aliado o enemigo, estoy lejos de casa, no se qué tipo de peligros hay, mis hermanos desaparecidos, Peter tomando malas decisiones y... te olvidé. Me cuesta verle lo positivo, por ello..... perdón, ya divagué, debes descansar.

Escuchas como se acerca hasta ti y notas como con suavidad comienza a acariciar tu cabello - todo saldrá bien, ya lo verás... Williams recapacitará y volverás a estar con tus hermanos. Sobre tus recuerdos... bueno la magia existe, quien sabe si se puede recuperar. Pero eso ahora no importa, ya te lo dije, la prioridad son tus hermanos.

Se queda en silencio durante unos pocos minutos y deja de acariciar tu pelo - no me molestas, tú nunca me molestas... me quedaría aquí contigo hasta que te quedases dormida- escuchas que suelta un leve suspiro- pero, si... debes descansar, no te molesto yo a ti, debes estar muy cansada. 

El hombre enarca una ceja - pues tardaste para no ser gran cosa- medita sobre aquel libro- me gustaría ver ese libro si es posible. Debe ser algo atener en cuenta... Pero después hablamos sobre ello, ya estamos llegando.

Efectivamente ya se comienza a divisar la casa de Sebastian. En las otras casa, no hay luz, es como si todos ya se hubiesen ido a dormir.

Claro, no creo que tengan problema...  

Al llegar a la casa, uso su llave para abrir y tras decirles que esperaran en el living, fue directo a la habitación donde lo habia dejado.

Finalmente prefirió quedarse en mi casa, aún a pesar de que estaba claro que no me sentía muy cómoda con ello. Quizás y después de todo sí que sabían lo mío y tenían planeado algo, eso o estaban locas.

Sonreí lo más natural que pude. claro, mi oferta sigue en pie. y no te preocupes por las tareas de la casa, tampoco es que pase mucho tiempo allí, por lo que está todo más o menos limpio. Además, esta misma mañana estuve limpiando algo.

Era ya tarde, hora de cenar y acostarse. nos vamos cuando quieras y así me cuentas esa historia tan larga. Sonreí, ante todo educación.

Le di dos besos a Olivia y dos besos a mi amiga. Que descanséis. Si descubro algo sobre las manzanas te lo haré saber. Le digo a mi amiga.

Olivia da unas palmaditas feliz - ahhh eres un encanto Eileen- da unos pasos hacia atrás- bueno yo me voy, mañana tengo que madrugar mucho y... eso, ¡gracias! - dicho esto se da la vuelta y se va. 

Llegas a la que era la casa de Sebastian. Consigues ver una luz encendida, por lo que supones que Raphaelle estará dentro. La casa es grande, de dos plantas, con un pequeño jardín delantero. 

Cuando llegas a la habitación y enciendes la luz, él sigue ahí donde lo dejaste. Cuando avanzas un poco hacia él, chocas con una cómoda haciendo caer un libro. Ves como el libro tiene una hoja suelta. Cuando la coges, no puedes evitar leer lo que pone encima.

Sebastian, te ofrezco esta información ya que creo que puede ser vital. Hay motivos para creer que Crystal Eriksen es en realidad Maléfica. Esa mujer siempre ha sabido disfrazarse bien. No confíes en ella o estarás perdido, es una bruja muy, muy peligrosa.