Partida Rol por web

Stan abre un ojo y ve que el rostro de Peter está desencajado.

-¿Que ha pasado? ¿Que te ha dicho? ¿Se ha muerto?

Una vez he acabado de recoger y amontonar en un mismo sitio los restos del naufragio me acerco a mis compañeros, estoy bastante cansado y mi aspecto mojado y lleno de tierra no es bueno. Parece que hay bastante revuelo al lado del cuerpo inerte de Peter, a la vez que bastante sangre. Stanley está preguntando que es lo que ha pasado y yo pregunto lo mismo.

Que ¿como ha ido doctor? ¿va a salvarse? ¿esta muerto?

-Eso ya lo he preguntado yo...

Miro a Statley con cara de pocos amigos, visiblemente cansado por el esfuerzo de arrastrar los objetos que ahora se encuentran el la playa, sin decir nada vuelvo a mirar al grupo en espera de una contestación.

- Si, ha muerto. En paz.

Spade se acerca por segunda vez a la nota de la palmera y procede a leerla.

-¡¡Joder!!- digo en español, en las ultimas semanas había visto morir a 3 de mis compañeros y para colmo, eran algunos de los mejores hombres, en cuanto a cualidades marineras de la tripulación, si esto seguía así dificil sería volver a gobernar un barco. Aunque claro de momento no teníamos barco...

Mierda.. joder.. - esta vez Vargo no se ríe.. más bien su faceta és seria y enfadada, no se había visto así desde la muerte de los dos anteriores compañeros..

La Capitana observó la muerte de Peter con el corazón encogido, sin mediar palabra pero con los ojos prestos, observando cada gesto. Cuando finalmente expiró su último aliento, agachó la cabeza y suspiró, cubriéndose la cara con una mano.

Maria, Crow, sel Berenice...y ahora Peter. Esto era de locos. Levantó la mirada, viendo a su tripulación hundida. Se acercó al cuerpo interte, se arrodilló y pasando la mano por su frente. Murmuró algo y levantó el rostro levemente.

Será mejor darle la sepultura que se merece. Aquí solo lo condenamos a los carroñeros... No era la primera vez que veía a de los suyos morir, pero siempre se le encogía el alma, puesto que siempre murieron a su servicio. Se levantó y observó el lugar. ¿Logragrían salir vivos?

Stan pasó la mano por la cara del pirata dejándolo con los ojos cerrados y el rostro sereno.

Después se puso en pie.

-Si... será mejor que empeceis a cavar un agujero para el holadés.- dijo, dirigéndose a Markus y a Vargo. Una vez dicho eso fue hasta la orilla, donde se lavó las manos con el agua salada. Después recogió los pocos enserés que tenía en su puesto de vigía, que estaba varado en la arena.

Se acercó hasta blanquita, que mordisqueaba un manojo de algas y cogiéndola de la cuerda volvió a camniar hasta el doctor, que parecía impasible ante la muerte de su... paciente.

-¿Que dice ahí? No me digas que la isla está habitada...- comenzó a leer el mensaje...- "Memo..." vaya, creo que era un mensaje para Peter...

Spade se acerca a la nota, la cual está garabateada con algún tipo de tinta roja que al parecer, no se ha borrado con el agua.

"Cuidado con los monos. PD.: No mires hacia arriba." reza la nota colgada de la palmera.

El lugar en donde os encontráis en una larga playa con algunas palmeras distribuidas al azar en todo su largo. Más allá, hay una especie de bosque, justo hacia el centro de la isla. El bosque se extiende hasta donde alcanza la vista, cerrando la playa hacia la derecha y hacia la izquierda.

No parece haber, desde donde estáis, algún camino que se interne en el bosque, sin embargo, en ese momento, podéis ver como muchos pájaros, que estaban tranquilos comienzo fruta en los árboles, salen volando hacia el este asustados.

Stan mira hacia arriba, a la palmera

Elisabeth mira incrédula la muerte del maestro artillero. ¿De verdad había muerto? Parecía increíble no escuchar su voz durante tanto tiempo. Suspira... y aún de pie en la arena, con las manos en su cintura, al sol, espera a que su ropa y su cabello se seque para poder sentirse más cómoda.

Escucha las conversaciones de sus compañeros, pero no les presta demasiada atención. ¿Qué iba a hacer ahora? Tenía que encontrar al pirata Supremo... y está claro que en esa isla, no iba a encontrar nada.

Stanley mira para arriba...

Un coco cae hacia abajo...

El coco lo golpea en toda la frente haciendo que Westen caiga despatarrado en la arena de la playa, con los brazos abiertos y dos remilinos negros en los ojos.

Una risilla comienza a escucharse entre las hojas de la palmera.

Un compañero había muerto. Eso solo significaba para Coraline menos protección y más trabajo y peligro. Nada más. Porque ¿para qué iba a ser hipócrita y ponerse triste si ni siquiera había mediado una palabra con el muerto?

También suspira y se estira, sin llegar a bostezar, se seca la ropa arrugándola y observa que hacen los demás.

Cuando a Stanley le cae un coco en la cabeza y cae al suelo, no puede evitar una risa que intenta tapar con la boca. Pero la risa se le corta al oír la risa proveniente de la palmera.

Se acerca con cuidado y con el lobo al lado. ¿Quién anda ahí? Pregunta cautelosa.

Do-do. Do-do. Dice un pájaro mientras baja a picotazos un par de cocos más, y uno de ellos le da en la entrepierna a Stanley.

Después, el pájaro baja aleteando hasta el suelo y comienza a picotear uno de los cocos para beberse su contenido.

Mientras tanto, algunas cajas llegan a la costa donde os encontráis. Las tres cajas que llegan allí, están completamente cerradas, por lo que no tenéis ni idea que puede haber en su interior.

Stan sigue en el suelo, ahora además de dolor de cabeza tiene dolor de huevos.

Dos de las cajas estaban repletas de plantas de amapola, objetos inútiles que para poco servirían en una isla desierta, en cambio en la otra caja, está llena de comida y algunas pistolas, las cuales parecen no estar humedecidas. Una buena caja, si señor.

En la isla no había un alma, ni tampoco ningún sonido. Sólo escuchabáis el suave sonido de la brisa pasar por las hojas de las palmeras.

El Do-Do comienza a caminar alrededor de Westen, mirándolo con ojillos graciosos mientras va dando saltitos cada dos o tres pasos.

A lo lejos, se puede ver el frondozo bosque de palmeras y demás árboles, los cuales no permiten ver mucho más alla de la playa. Justo en lo que parece ser el centro de la isla, una montaña se alza por encima de la vegetación.