Partida Rol por web

Ganosant y Sadonna se enfocan en apagar los fuegos de Merebor. Ganosant usa su capa para apagar el fuego de Merebor.

Melzir sigue ardiendo con más intensidad.

Os fijáis en que la extraña figura del palco ya no está.

Me acerco corriendo hacia Melzir y utilizo mi capa para apagar las llamas.

Bael extingue parte de las llamas que rodean a Melzir, el anciano no se mueve.

El demonio vuelve a aparecer a vuestro lado.

"Si quieres algo bien hecho... tienes que hacerlo tu mismo." - El demonio agarra a duras penas con sus 6 brazos el espadón. Parece que pesa demasiado para él.

Al ver cómo el demonio agarra la espada no dudo ni un segundo y me lanzo en su dirección para arremeter contra ella. Ataco con toda mi fuerza hacia su torso.

Bael atraviesa el torso del demonio, pero este sonrie.

"¿Crees que soy un ser mortal que depende de la carne?" - Dice con una voz femenina.

El demonio empieza a distorsionar su sonrisa.

"TE EQUIVOCAS." - Su voz cambia a una muy grave y que os provoca terror.

La criatura ataca y el espadón cae muy cerca de la cabeza de Merebor. 

Al ver que me ataque no ha hecho mucho efecto decido cambiar de postura y estrategia por lo que me giro rápidamente y ataco a los brazos en los que sostiene la espada.

Bael corta 1 brazo del enemigo demoníaco. Este vuelve a reir macabramente.

Ignoro el pasillo a mi derecha y avanzo apresuradamente por el puente hacia el edificio del que sale la niebla,

Ganosant arremete contra el demonio intentando cortar una de sus manos, pero falla.

El demonio rie ante el inútil intento de Ganosant.

"¿CON ESOS ESTÚPIDOS ATAQUES PENSÁIS DETENERNOS? VUESTRO MUNDO ARDERÁ COMO TODOS LOS ANTERIORES, JAJAJAJA..."

El demonio levanta el espadón.

Cruzas el pequeño puente sin peligro alguno y continuas por un estrecho pasillo. Cuanto más avanzas, más fuerte suena un zumbido.

Avanzas por el pasillo, sientes que tu objetivo final está cerca. A partir de cierta parte, el camino por el que vas se convierte en unas escaleras de piedra en forma de caracol que ascienden a lo más alto del edificio. Asciendes hasta llegar a un lugar cuya entrada es en forma de arco.

Una gran sala se presenta ante vosotros.

Hay dos niveles de altura, la planta baja tiene una fuente vacia, en el interior de esta un cristal flota y libera la niebla roja que has estado viendo todo el tiempo. Emite un zumbido a la vez que expulsa niebla de su interior.

A tu izquierda hay unas escaleras que llevan a la parte superior, esta solo contiene libros en estanterias y un palco que da a la fuente.

En el nivel superior hay una lucha, varios demonios armados con espadones atacan a un grupo de encapuchados, no distinguís quienes son debido a la diferencia de altura y a que las criaturas demoníacas bloquean vuestra visión.

Ves al demonio de la anterior ilusión sujetando un espadón ardiente que está a punto de impactar en tus aliados. Melzir está inmóvil a tu lado y Merebor también, pero el último más alejado de ti, cerca de Bael, Ganosant e Yzmodan, el demonio de la ilusión.

El demonio está a punto de asestar un golpe devastador sobre Bael y Ganosant, cuando de repente una figura aparece por el palco.

Le reconocéis indudablemente como el mesías oscuro.

El mesías empieza a murmurar palabras.

"¡Ivr pr'tuhm leq zam!"

Unas cadenas doradas salen del suelo y se incrustan en la piel del demonio impidiendo que realice su golpe. Este deja caer el espadón y empieza a derretirse.

Al ver lo que ocurre no dudo ni un momento y corro para coger el espadón que está en el suelo para atacar con furia al artefacto que se encuentra en la fuente.

El mesías se apoya en el balcón, parece cansado.

Bael agarra el espadón demoníaco, sus manos empiezan a arder. Sin pensarlo mucho, se dirige al cristal con la intención de destruirlo.

El espadón se incrusta en el artefacto y se empieza a agrietar.

El demonio sigue derritiendose, ya casi ha terminado de desaparecer.

"¡SOLO SOIS PEONES PARA EL GRAN EMBAUCADOR!"

Finalmente se disuelve y las cadenas desaparecen. Los demonios que había en la parte de arriba también.

Melzir dijo que tenía una forma de salir de aquí por si todo salía mal... esa forma de salir está en la bolsa que lleva siempre.

Lanzo una bendicion sobre bael, esperando que le ayude