Partida Rol por web

Asher se pone a silvar mientras el resto del grupo pide voluntarios para hacer saltar la trampa.

Helen manipula la puerta secreta y sale corriendo, a los pocos segundos la nube se empieza a formar en el techo de la cueva y empieza a perseguir a la picara que corre como una loca.

La puerta secreta permanece abierta, dentro solo hay una estantería con una media docena de libros.

Truvio ayuda a Quarion a materializar su plan.

- Cojamos todo lo que podamos, rápido. ¿Alquien puede dedicar su tiempo a mirar si hay algo escondido en alguna parte? Helen es la ideal, aunque está un poquito ocupada. No elegimos demasiado bien el cebo.

- Aaron, manten la nube controlada. Si necesitas ayuda me avisas.

Mientras Helen corre de un lado hacia otro por el dungeon, perseguida por Aaron que murmura cosas raras mientras intenta mantenerse concentrado en la nube, Quarion y Truvio saquean la estantería secreta.

Con sus ultimas fuerzas Helen vuelve a la sala, donde Quarion y Aaron vuelven a desactivar la trampa.

La habitación queda silenciosa, en un estado similar al que el grupo la encontró excepto por la pequeña pila de libros en el suelo y la ladrona exangüe tirada a unos pocos metros de distancia.

Diario personal de Aaron

Al final tanto hacer el imbécil con la trampa dio resultado. Encontramos los documentos contables del Gremio, que demostraban que habían sido financiados por el rey. Genial. Por si no fuera suficiente enfrentarse a un ser extraplanario de poderes cósmicos, añadimos al monarca del reino a nuestra lista de enemigos.

Decidimos avanzar hasta los líderes del Gremio, algo bastante más terrenal y supuestamente asequible. A pesar de que Helen asegura haber puesto la máxima atención, fuimos sorprendidos por una deva, una orca y un mago. La deva nos contó una historia peregrina que estuve a punto de tragarme, pero al final resultó ser una psíquica humana que confundió nuestras mentes. Y pensar que he caído en un truco tan viejo... Menos mal que Quarion fue más elocuente.

Durante el combate subsiguiente nos emboscaron un par de cosechadores adicionales. El resultado fue el habitual: Truvio intentando cosas que no le salían y estuvimos a punto de morir pero al final prevalecimos. Mención especial para el enano Nogrod; parece justo la pieza que necesitábamos en el grupo.

PS: el mago logró huir.

PS2: la "deva" nos contó una historia acerca de una invasión de ogros que, aunque puede ser mentira, convendría investigar.