Partida Rol por web

Alzo la mano y lanzo un proyectil de fuego que hace una marca oscura en el suelo a los pies de uno de los hombres

Ultima advertencia

Cargo la ballesta y espero a que William se mueva, ya que no tengo línea de visión.

- ¡Para cataclismo el que se os viene encima imbéciles! William, necesito que te hagas a un lado.

William no se acaba de creer lo concurridas que estan las alcantarillas de esta ciudad. Con razón se está mejor fuera de ellas.

Encogiendose de hombros William se desplaza a un lado mientras coge su arco y lo tensa. En un principio pensaba decir algo, pero al final simplemente apunta al que ya está herido y falla estrepitosamente.
Lo cual le cabrea bastante.

Mierda.

Vuestra tanda de proyectiles no es precisamente atinada. Hasta que llega Hendrick y...

Al dejarme William línea de tiro, avanzo para ocupar el sitio donde estabay disparo al hombre que tengo enfrente.

- Muchas gracias William. ¡Enseñemos a esos dos como nos las gastamos!

El virote impacta en el pobre humano que aún así aguanta estoicamente...

De nuevo saco el otro hacha arrojadiza de que dispongo, y vuelvo a arrojarsela al mismo de antes.

El hacha del enano tumba al tipo más cercano, mientras el otro os mira con odio.

-¡Bajad aquí, miserables, no he visto a nadie tan cobarde jamás!

Ni yo a nadie tan estupido

Respondo mientras le enseño sonriente la ballesta

Maedros Tolre mira al guerrero que queda, y sonrie. Si, su táctica no es muy imaginativa, pero es muy útil. Evitar que los enemigos puedan atacar, implica asegurar la victoria.

La cara del tipo no parece volverse más estúpida... pero es que ya es difícil. De todas maneras, no se mueve.

Molesto todavía por el fallo anterior, William sigue refunfuñando. Y para acabarlo de arreglar vuelve a fallar una vez más contra el tipo que está solo.

Será posible. Estoy por bajar con ese tipo y usar la espada, está claro que con el arco hoy no es mi día.

El ranger trata de recordar si ha tendio algún día más así, y por desgracia recuerda un asalto a una guarida en el que casi gasta un carcaj entero sin apenas alcanzar a nadie.

Con un bostezo y un mohin de aburrimiento coloco un virote en la ballesta

Sabes, esto es extremadamente estupido, y si lo haces por tu dios, destruire tu alma antes de que puedas reunirte con el

Hablo mientras apunto cuidadosamente y suelto un virote que se clava en su pecho a la altura del corazon

Podrias rendirte, peor no lo vas a tener

La figura del hombre se le hace algo borrosa a Klatet, pero al escuchar el grito del hombre después del último disparo, el oráculo decide esperar por si su pobre habilidad con proyectiles fuera innecesaria.