Partida Rol por web

Estaba escondido detrás de Blancaflor, por lo que no me enteré de lo que pasó con el guarda, aunque tras un vistazo veo que está hecho carne picada. Un brazo por aquí, una pierna por allá, un dedo... Un espectáculo, vamos. Al ver la mirada incrédula de Blancaflor bajo un poco la mirada.

-Ehmm... Sólo te estaba limpiando el vestido, nada más.-digo en voz baja excusándome.-Un momento, esa es Verne, ¿no?

-Pe... pero... ¿como es posible?- la chica estaba totalmente asombrada. Habían estado a punto de morir, todo para alcanzar un sitio al cual se tenía fácil acceso si tan sólo se seguía el recorrido turístico del lugar. Blancaflor no sabía si indignarse o ponerse a llorar por ello. Al final se decidió por hacer lo más práctico: ni lo uno ni lo otro, volver atrás y retomar el pasillo de los turistas. Si se apuraba daría alcance a Verne y a Claus en un abrir y cerrar de ojos.

Antes de encaminarse hacia allí miró a sus compañeros con impaciencia. -Vamos! la salida es por allá, no perdamos más tiempo por favor!

Gregroy se quedó estupefacto al ver a sus compañeros aparecer por el otro lado del pasillo.

-Esta sí que es buena. Dijo. ¿Entonces ya hemos terminado con lo que sea que teniamos que hacer aquí? Le preguntó a Claus. Viendo el aspecto de Verne, el zombie decidió que sí, que ellos ya habían finiquitado el problema. Pues en ese caso, será mejor que no vayamos. La atención al cliente de este lugar me está empezando a crispar los nervios.

Dicho aquello, el no muerto envainó su espada, y se movió para acompañar a Blancaflor.

—Me da a mí que este sitio ya ni atención al cliente, ni nada... De todas formas, tampoco esperaría mucho. Ni el jefe atendía a razones.

Tras decir esto, indico a mi hámster que nos vamos. Después, digo a todo el mundo— Ahora que hemos terminado aquí, tendremos que celebrar esto como está mandado... A ver si los bares y tabernas de la zona se portan.

Todavía me estremezco ante el beso de Blancaflor

Me beso...quiere decir que me tiene en cuenta y que puedo ser considerado su héroe...eso, soy su héroe; ni mas ni menos

Muevo la cabeza para salir de la ensoñación y miro al resto

Sssi, creo que nussstro trabajo essssta terminado en esssste lugar. Losss guardiassss son muy poco consssssideradossss con lossss visssssitantessss

digo mientras me toco la herida de la lanza, lo cual recuerda que la mitad inferior de mi cuerpo esta llena de sangre

Bifidus, tienes una pinta horrible ¿Qué os ha pasado? ¿Como se os ocurre ir por ese peligrosísimo pasillo? Te haré una poción sanadora en la taberna ¿Y no habeis encontrado mis pantalones? Bueno, seguro que dando unos remiendos a esta cortina me vale de vestido, marchémonos antes de que se den cuenta que esto no forma parte de su espectáculo, igual no a todos les parece bien.

Verne, recoge su conejo blanco, lleno de calvas en su pelaje que gruñe y da patadas a la muchacha, se echa al hombro su maletín momento en el que la cortina casi cae, recogida de nuevo por su mano. Verne ya camina saliendo del castillo, a paso corto y torpe arrastrando tras de sí dos metros y medio de cortina morada y polvorienta

Volveis a encontraros todos reunidos y deshaceis el camino rodeados de turistas que parecen bastante contentos de todo el espectaculo, sobretodo los viejos que echan de vez en cuando miradas disimuladas a Verne, y revisan las fotos que han hecho. No se ve al pobre guía, pero suponeis que le habra dado una taquicardia o algo al saber la desaparición de su amo.
Con bastante facilidad llegais a la puerta, pues los guardias que esperaban a fuera han dejado las armas y salido por patas, sabiendo la facilidad que un pueblo oprimido suele recibir a sus opresores cuando estan en minoria. Cerca del puente reconoceis a una figura calva con su nariz de aguila que os saluda, Phil, al menos uno de ellos, aunque suponeis que el primero que conocisteis os espera:- Vaya se os ha dado mejor de lo que esperaba y solo una herida grave... ummm no esta muy mal, aunque debería mirarselo, no creo que dejar un reguero de sangre sea bueno para su salud.- Se empieza a rebuscar entre los bolsillos de su tunica negra y saca un pergamino que empieza a desplegar:- Tengo un mensaje para vosotros de la princesa.- Una imagen pequeñita de la princesa sale del pergamino y con vos dulce os dice:- Elegidos sois mi última esperanza... Los magos han comprendido el peligro de vuestras acciones y han empezado a levantar un ejercito de muertos vivientes, tener cuidado y ser valerosos, mi querido Phil os dira hacía donde debeis dirigiros, por favor tener cuidado pues los magos ya están sobre vosotros...-

Al volver a reunirse todo el grupo, Blancaflor se acerca a Verne y le tiende un hatillo con sus ropas. -No pude recoger tu mochila pues casi me matan un montón de flechas y otras cosas así cuando lo intenté- la muchacha no recordaba exactamente lo que había pasado ya que todo se había sucedido demasiado rápido. -No creo que sea buena idea que te cambies aquí, pero en cuanto estemos en la taberna podrás volver a vestir como antes. ¡Pobre conejito! ¿Qué le ha pasado?- sin embargo, la respuesta no llegó inmediatamente. La llegada de uno de los Phill interrumpió la conversación. Nuevamente traía noticias de la princesa odiosa y otra vez se presagiaban enormes problemas.

-Buf, lo que faltaba... por suerte Gregory podrá entenderse con esos ejércitos... incluso hasta los organiza y todo!

Una vez todo estuvo aclarado, el grupo al completo se dirigió a la salida. Había sido un final feliz para todos, aunque Gregory se preguntaba que clase de final había sido el suyo: La princesa estaba más cerca de ser rescatada, el gnomo iba a tener su macrobotellón, los viejos del lugar estaban alegres con la imagen de Verne...

Ensimismado como estaba, no reparó en la presencia de Phil hasta que este comenzó a hablar, y asintió a Blancaflor cuando esta hizo referencia al ejército de muertos vivientes.

- Efectívamente. No se puede ir levantando a la gente de sus tumbas así, tan alégremente. Algo me dice que esos magos deben de tener enchufes en el gobierno para poder hacerlo en tan poco tiempo, ya que el papeleo que conlleva todo esto se suele hacer insoportablemente largo. Dijo el zombie. Hummm... es más que posible que esos asalariados tengan algún contrato de dudosa legalidad, podría servirles de ayuda si me escuchan y ese es el caso.

Recoge la ropa de las delícadisimas manos de Blancaflor - Oh gracias gracias, espero no haberte puesto en un apuro por recogerla - Levanta un poco al conejo en sus brazos - Aasimov ha tenido que.... - Phil aparece, con nefastas noticias para nosotros........

Necesito hacerme un pergamino de esos para mí.... - murmura ensimismada Verne viendo la imagen, la conversación acerca de lo que le ha pasado a su hermano, el pequeño conejito blanco al que le falta pelo por todas partes y bufa sin parar muy molesto, queda para más tarde, tal vez Blancaflor pueda tener una conversación con él ella misma, al fin y al cabo, las doncellas más auténticas son capaces de hablar ellas mismas con los animalitos felices del bosque.

Entre los pensamientos de Verne se ha desvanecido la conversación de la princesa - ... Los magos están sobre vosotros...

Verne mira hacia arriba, curiosa, más que alerta.... sin haber entendido una palabra de lo dicho

—Sí sí, todo eso está muy bien —digo a la imagen de la princesa que sale del pergamino, que más o menos es de mi talla— pero ahora, antes de eso, tenemos un asunto pendiente de extremanda urgencia. Me temo que lo de los magos tendrá que esperar... ¡Celebrar nuestra victoria es ahora primordial!

Tras la exclamación, abro mi maleta, saco un par de botellas, y pego un lingotazo a una de ellas mientras le paso la otra a mi hámster. Tras esto, comienzo a bailar una canción* que sólo suena en mi cabeza... De momento.

Phil cierra el pergamino y mira un momento a Ziffbong Claus con reproche antes de decir:- Si tienes bebida al menos rulala... Que no sabes la caminata que me he dado para daros el mensajito de marras.- Coge una de las botellas y le pega un lingotazo bueno:- Bufff directa al higado, ya noto como pide clemencia el cabroncete... Por donde ibamos así, me temo que al derrotar al amigo vampiro, ahora habeis perdido el factor sorpresa como quien dice, y os esperaran con ganas de pelea. El proximo mago, es un cultista loco de la orden de la sardina con patas, intentamos infiltrar algunos de mis primos en la orden... ya sabeis para despejaros el camino, pero no se porque siempre eran descubiertos *1 - Rascandose la cabeza os dice:- Ahora tendreis que pasar la cienaga de los malditos, un lugar un poco siniestro, pero nada para unos chicarrones como vosotros... y damiselas aguerridas, claro.- Volviendose al camino que sube al castillo sale corriendo mientrás que se despide con la mano:- Que tengais suerte ¡¡¡ELEGIDOS!!!-

Bueno....debemossss cruzzzar essse la cccienaga essssa

Digo mientras veo como Phil se va

hacccia donde esss esso? 

digo mientras miro a los alrededores

¡Qué importa! ¡¡Vamos al cubil de los meados o a alguna otra taberna a celebrar nuestra victoria !! - J.Verne le quita otra botella a Ziffbong  y sale corriendo también, en dirección a la taberna en la que estuvieron, dispuesta a darlo todo, tras los primeros pasos da un trago a la botella, y  sin más remedio, lo escupe de nuevo - Bwaaaj qué es esto... ¿Aguarrás? - Leyendo la etiqueta de la botella - Por todas las zanahorias . Vamos a beber algo no-tóxico

-¿Que hemos derrotado al vampiro? Preguntó Gregory. A bueno, si eso. Yo no me he enterado de nada salvo de una atención al cliente indignante, pero si nuestros compañeros dicen que se ha acabado la fiesta.

El no muerto miró a su alrededor y al ver el macrobotellón organizado se corrigió a si mismo.

-Vaya, ya veo que en eso también estoy equivocado. La fiesta acaba de empezar. En fin, no hay nada malo en tener una hora de bocadillo en la jornada laboral... se encogió de hombros al decir aquello. Esperadme, que recojo la pierna del suelo, y me uno a la conga. Ya habrá tiempo de buscar la ciénaga esa.

-Totalmente de acuerdo- Blancaflor estaba harta de las pretensiones de la princesa cautiva. Ya habían sufrido muchos inconvenientes por su culpa, no tenía derecho a venir a exigir que se pusieran en marcha apenas acabada la batalla. Ellos se merecían un descanso y aunque no le gustaba demasiado el gnomo borrachín, por una vez pensaba darle la razón. -Vamos en busca de una taberna decente donde beber hasta hartarnos y conseguirnos nuestros propios problemas!- Y hasta tal vez tenga chance de probar mi hacha... aunque primero tendré que pedirle a Babylon que me enseñe como usarla.

Pronto veis como desaparece Phil, para tener unos cuantos miembros de madera se mueve bastante rapido. A pesar de que esperabais fuegos artificiales o algo parecido al llegar a la aldea, veis gente ceñuda y quejandose de que pasara ahora con el servicio de basuras o que los jovenes tenian más respeto cuando andaba en activo el vampiro o toda esa clase de chismes que utilizan para quejarse de cualquier situación un poco innovadora. En el pueblo hay unas cuantas tabernas para darse la fiesta por lo que sería solo escoger alguna de ellas y disfrutar un poco gastando los pocos dineros que teneis en emborracharos hasta no conoceros...

Sigo al grupo el último, rezagado. Soy consciente de la mirada que nos dedican algunos aldeanos y no puedo evitar bajar la cabeza. Desde luego, tabernas hay para dar y regalar, sólo había que escoger una y aunque no tuviera precisamente las ganas y los ánimos de emborracharme, quizá encontraría alguna Gloria por las tabernas.

-Chicos, ¿a qué taberna vamos a ir?

Seguimos al hámster de Claus hasta una taberna en la que, para nuestra buena suerte, hay bastante jolgorio y regocijo por la muerte de la mano opresora, algunos ya especulan sobre quien será el nuevo alcalde de ésta ciudad ya que todos los candidatos que habían ido pasando fueron invitados a cenar por el conde y no volvieron, lo que deja una duda acerca de quien será su sucesor.

El estupendo equipo mercenario de Verne&Company se lo pasan en grande, la coneja consigue pasar al otro lado de la barra, y mezclando alcoholes, pis de trol y uñas de hada-guarra consigue crear unas bebidas espirituosas que permiten ver al paraíso a todo aquél que bebe una sola copa.

Incluso Blancaflor que querría haberse limitado al sorbito de vino es engañada para tomar una de esas bebidas que inoculan en su mente que debería intercambiar prendas de ropa con Ziffbong. Verne por su parte terminó subiendo a unas habitaciones con siete muchachotes morenos y fuertes que dijeron le enseñarían a jugar a un juego típico de éste pueblo, y con un par de botellas entre manos desapareció toda la noche.

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..... A la mañana siguiente bajaría las escaleras con el extraño tablero de un juego típico de este pueblo

La fiesta ha estado bien, al menos lo que recordais nebulosamente, desgraciadamente ese periodo a pasado y ahora os toca avanzar por el camino que lleva al pantano donde está el proximo mago. Es la mañana siguiente y como habeis bebido suficiente alcohol como para arder si os acercaran una cerilla arderiais como teas, en cuanto fisicamente os encontrais con la lengua de trapo, los ojos rojos( en el caso de Bifidus aún más rojos) y cierta tendencia a pedir silencio por lo de sentir que teneis una campana en la cabeza. La mayoria, por que Claus se ha despertado de buen humor y va enfrente vuestro con su apreciado hamster que parece estar bastante contento, el que su montura tumbara a varios pueblerinos que prostestaban horca y hacha en mano por la desaparición de su bienamado conde le ha puesto de buen humor. Habeis dejado ya hace unas horas el pueblo, y os estais adentrando entre los retorcidos arboles que llevan al pantano...