Partida Rol por web

Vale, había fallado, ¿y qué? Aunque a veces pareciera lo contrario, Vortex era humano. Los humanos se equivocan. Y seguro que incluso los alienígenas también. Al fin y al cabo habían habido varios intentos de conquista del planeta Tierra y ahí estaban los humanos, resistiendo, tercos como una mula. Igualito que Vortex.

Saliendo a toda velocidad de entre la pared, la entidad gravimétrica hizo retumbar los túneles con su carrera, comparable a la de un rinoceronte cabreado, envuelto en polvo y restos de piedra. Sin detenerse en ningún momento pasó ahora más cerca de los mercenarios, golpeando con potencia inhumana...

-¡Espera a que me aparte, Vortex! -dio el arqueólogo poniéndose a cubierto.

Ale, todos a darse tortas con los malos. Me tocaría a mí encontrar la forma de bloquear ese camino… A ver si con una barra de hierro por ahí tirada o algo… esperaba que hubiera una solución no tecnológica para esto… Pensaba mientras adoptaba mi aspecto normal que era mi lado listo.

El dardo mágico de la maga impacta en el que va corriendo a avisar a sus compañeros cayendo al suelo instantáneamente. Vórtex sale del agujero y comienza un ataque en cadena que tumba a cuatro enemigos KO pero falla en el último ataque aunque queda al lado del pobre mercenario que ve como un ente gravimétrico se va a enfrentar a él.

Montana se pone a cubierto pero el peligro pasa rápido, de esta Vórtex acertó en su movimiento. Fae revisa la estancia y podría tirar tuberías y mover algunos palés que están dispuestos para subir al vehículo que tienen preparado. Con su poder de telekinesis no será difícil hacer eso aunque puede que solo ganéis tiempo ya que no sabéis si podrán tumbar lo que pongáis de barrera. 

Los palés parecen ser de billetes usados del EROC, varios millones de dólares por palé. Estáis viendo en esa estación al menos unos mil millones de dólares tirando por lo bajo.

Mire a un lado, a otro. Había mucho con lo que trabajar y montar una buena barricada. Luego le echaría mano a alguno de esos fajos. Seguro que con la confusión no se notaba y el dinero le vendría de perlas para pagar parte de la deuda de estudios que aún tenía que pagar; una pequeña recompensa por salvar el día o al menos por haberse jugado el pellejo.

Concentró todo su poder en los palés, tuberías paredes, cascotes, e incluso el vehículo que tenían preparado para juntarlo todo en una explosión de poder que creara una barricada que detuviera a los que se marcharon. Si tenían armamento pesado podrían reventar aquello, pero si no, iban a tardar un buen rato.

Fénix decide sacar su verdadero poder a relucir y lograr en un impresionante momento trasladar por el aire desde un pequeño vehículo hasta tuberías y trozos de pared de hormigón armado para taponar el túnel. Los mercenarios no podrán pasar a no ser que usen explosivos y eso es algo peligroso para ellos ya que no saben si la estructura podría soportar el peso.

Parece que la situación está controlada, pero ahora quedáis a solas con tanto dinero...mucho dinero. Un palé de esos os garantizaría vivir tranquilamente el resto de vuestros días a todos vosotros. Ahora disponéis de al menos 10 minutos, porque es posible que tengan otro acceso disponible o logren abrirse camino. ¿Qué haréis en ese tiempo?

─Buen trabajo. Ahora... habría que ver a dónde conduce ese túnel, ¿no? Yo apuesto por un submarino. Si es el caso, creo que podré encargarme de él... ─dijo simplemente la entidad gravimétrica.

Encargarse de un submarino suponía un reto interesante: aguantar la respiración, la presión, moverse bajo el agua a buena velocidad, conseguir entrar o tener la capacidad de dañar el submarino desde el exterior... Y Vortex no había comentado nada sobre ninguno de esos "problemillas". Tal vez no lo fueran para él. Visto lo visto, tal vez no fuera tan descabellado.

─¿Vosotros qué vais a hacer? ─preguntó antes de dirigirse pasillo más allá, en busca de su submarino.

Si bien Vortex podía parecer el más poderoso del grupo, lo que estaba claro es que no era su líder.

- Yo te echaré un cable Vortex, y luego creo que cogeré algún fajo de billetes si no os parece mal... - comenta el joven - Pero antes acabar con estos tipejos...

Un par de fajos de billetes ya habían ido moviéndose disimuladamente hasta Fenix quien se los estaba guardando. Ahora otro par volaron hasta Parkour, quien lo tenía tan fácil como cogerlos al vuelo.

- No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy. – dije encogiéndome de hombros sin darle más importancia – La deuda universitaria me lleva ahogando literalmente varios años. – dijo a modo de explicación.

- Yo iba a explorar un poco por aquí, pero te sigo. Me mantendré a distancia para no estorbarte – y para que no me den las balas que reboten en ti…

-Vortex, cuenta conmigo para repartir estopa. Casi muero por decimoctava vez hoy y se me está inflando la vena ya. -Montana chequeó la batería del látigo y vio que aún le quedaba energía para freír a unos cuantos malos.

Al ver cómo sus compañeros se metían los fajos de billetes en los bolsillos, no dudo en imitarles.

-Las expediciones en busca de la Tierra Hueca no se financian solas...

Queda claro que esta misión será la que os financie los viajes o caprichos de los próximos meses o años. De pronto escucháis unos aplausos. Un hombre con barba y que parece vestir una armadura tecnológica posiblemente militar sale por un hueco por el cual pensaban pasar toda la mercancía para llevarla al submarino.

Sigue aplaudiendo y no se acerca a vosotros en ningún momento, es más no parece tener ninguna actitud agresiva hacia vosotros.

- Podéis coger lo que queráis, hay de sobra para todos. Lo único que debéis hacer es marcharos y santas pascuas... - parece que quiere comprar vuestra "retirada". 

Mira a Vórtex, Fénix y las magas; parece obviar a Montana y Parkour.

- Vosotros cuatro sois muy interesantes, ¿habéis pensado en trabajar en la seguridad privada? Tendríais un buen sueldo y numerosas ventajas si decidís aceptar el trabajo. Nunca trabajaríais en vuestro país eso sí, para evitar las dichosas comeduras de tarro morales...

A su lado se acercan varios cánidos, parecen lobos árticos de pelaje blanco. Contáis al menos 3 pero podría haber más.

No son lobos árticos, parecen Aenocyon dirus (Lobo Terrible coloquialmente). Pero en teoría están extintos desde un mínimo de 4000 años; te fijas en que parece un experimento genético ya que posee una musculatura más fuerte que los lobos actuales pero parecen ser muy ágiles y los extintos no lo eran tanto.

- Eh, no creo que fuera un estilo de vida que fuera conmigo, gracias. – respondí. No estaba segura ni de que me fuera este estilo de vida de hacer de supeheroina fuera de las urgencias del hospital.

- ¿Hay posibilidad de que te convenzamos de que te entregues sin oponer resistencia? Preferiría que nadie resultase herido, pero aquí el amigo suele tener otras ideas respecto a los malos, ¿sabes? – por supuesto el amigo era Vortex y los malos era el aspirante a Chuck Norris.

El amigo estaba ya "calentito". Aquella noche le habían disparado con armas automáticas, hecho estallar cosas en la cara, gafado sus teleportaciones, poseído y ahora venía un jefe de final de pantalla con un ego que había aparecido varios segundos antes que él en la habitación.

Para cuando la pelirroja acabó su discurso, el aspirante a Chuck Norris ya estaba volando atraído hacia la mano extendida de Vortex y la entidad gravimétrica estaba adoptando una posición de bateador de beisbol. Ni se molestaba en mantener cierto juego de piernas por si las cosas se torcían y debía esquivar un golpe. A fin de cuentas, ¿qué iba a tener que esquivar un tipo inmune a las balas?

─Hola... ¡y adiós!

Tengo dinero y no me suelo preocupar de los problemas de los demas mortales. Arqueo una ceja mirando al barbudo y como suelta su bonito discurso.

- A mi marido no le gustaria - replico con una sonrisa, aunque realmente no le importaría mucho.. Ademas yo no soy americana, trabajar aqui no me importaria mucho. Iba a contestarle cuando como siempre Vortex piensa con el puto culo en vez de con la cabeza. Lleva una maldita armadura y puede que su nucleo explote hiriendo a la gente, pero al señor soy invulnerable le importa una mierda. Me concentro para crear una ilusión uqe contenga a los perritos

Vortex atrae a Kruger que se ve sorprendido por esa acción, ya que no se la esperaba. Por suerte para su supervivencia parece que dispone de algún escudo energético pero aún así la hostia es para grabar y enviar a algún programa de televisión.

El villano sale volando y termina impactando contra una pared, aterrizando sobre un palé que amortigua un poco la caída. Lo suficiente para sólo dejarlo inconsciente.

Al quedar inconsciente sus cánidos que hasta ahora permanecían tranquilos se vuelven agresivos, podéis observar como su color cambia de un blanco polar y se mimetizan con su entorno desapareciendo en pocos segundos a vuestra vista. Parece que van a atacaros pero ahora mismo no podéis verlos.

Ups. Eso significaba problemas. Me concentré en generar un escudo a mi alrededor que pudiera proteger a quien quisiera ponerse a mi lado, pero reservandome energía suficiente para lanzar un golpe contra uno de los perros y lanzarlo contra el otro. 

Como siempre Vortex no piensa en las consecuencias de nada. 

-Cerrad los ojos - replico mientras me concentro en crear una explosión de luz para cegar a los perritos del norte que se pueden mimetizar con el entorno, por que seguro tienen genes de camaleon mezclados con su ADN. 

Fénix se da cuenta que no ha sido su mejor acción, su escudo es muy débil aunque peor es su disparo que parece que logra acertarse a sí misma en uno de sus pies. Por suerte sólo cojeará hasta que se recupere.

Kristjana lo hace un poco mejor pero no lo suficiente, su rayo cegador no es tan poderoso como en otras ocasiones aunque por un par de aullidos parece que algún lobo estaba mirando hacia ella. Pero el resto parecen seguir moviéndose hacia vosotros esperando el momento idóneo para atacarlos.