Partida Rol por web

La jefa sonrió y le acarició el pelo a Sara.

Tranquila cielo, si lo deseas mañana podemos hablar. Hoy estoy lago atareada por el incidente. Tendré que mandar lechuzas y otras cosas. Comprendo que estés preocupada...Mañana estaré más libre y podré responderte todas tus preguntas con calma, ¿si?

Luego esuchó a Sofía y no pudo evitar una suave risa, agradable al oído.

Estas hadas... Sin decir nada más, sacó su varita y tras un grácil gesto de muñeca, dió un golpecito con la punta de la varita en la cabeza de la chica. Automáticamente el pelo volvió a su color natural. ¿Así mejor?

Sofía se toca la cabeza como si intenta palpar algo que ya no tiene.

Su cara se ilumina y sonríe ampliamente.

¡Gracias, profesora!

Sonrio complacida a la profesora y asiento vigorosamente, la profesora era de lo más amable.

Claro, quedamos para mañana entonces, ¡muchas gracias! luego miro a Sofia con su look habitual No se yo cual te quedaba mejor... digo con una risita divertida dejando a las claras que es una broma.

Había permanecido algo apartada, pensando en lo que había dicho la Directora y nuestra Jefa de casa, cuando al fin Sofía recupera su color de pelo. Me acerco un poco, y digo: Bueno, pues ahora que parece que todos los problemas personales están más o menos solucionados... ¿qué os parece si nos organizamos un poco y buscamos a Sara Carbonés? Así, además de ahorrarle trabajo a la profesora Montano, podremos hablar con ella y ver cómo está.

Le dirige una mirada asesina a Sara Lago que en cuestión de segundos vuelve a mirar a las dos chicas con cariño.

Sí, eso decía yo desde hace siglos. Vamos. ¿Vienes, Salo? ¿A dónde vamos? ¿Volvemos a nuestra Sala Común de momento?

Escucho la conversación de las chicas con la jefa de nuestra casa, incluso en momentos tan tensos es toda amabilidad y queda para hablar mañana con Sara y le devuelve el pelo a la normalidad a Sofía...Es curioso que ya me había acostumbrado a verla con el pelo azul, su pelo natural era también de un color muy bonito.
Me obligo a dejar de pensar en su pelo y me centro en la conversación.

Sí, creo que lo mejor sería ir a la Sala Común a arreglar un poco el desastre causado por las hadas. Además es un buen sitio para empezar a buscar a la otra Sara.

Escuchando y mirando atento a sus compañeros de casa algo mas relajado tuvo que preguntar.. - ¿Que ha pasado en nuestra sala? - la formulo extrañado, sin tener ni la menor idea de que había pasado allí

Oigo a Andrés preguntar...
-¿Que ha pasado en nuestra sala?

Creo que fue justo al irme yo, ya que cuando yo fuí estaba todo en tranquilidad... Pero algunas chicas de nuestra casa cuando entraron vieron que las hadas habían hecho de las suyas en nuestra sala. A los gatos les ataron cascabeles que sonaban como ladridos, así que cuanto más corrían espantados más se asustaban. Sigo con cara de resignación Fuí a quitarle el cascabel a mi gato y vi la sala común, toda patas arriba por que los gatos se subían literalmente por las paredes a causa del miedo.Y parece ser que cambiaron la ropa interior de armarios, la de los chicos en los armarios de las chicas y vicebersa. Así que tocará poner toda la ropa interior de los chicos en un sillón y la de las chicas en otro, y cada cual cogerse lo suyo...

Malditas hadas

Abrió los ojos de par en par - genial... pfff... jodidas Hadas... - dijo malhumorado nuevamente por lo que le acaban de contar - pues nada...como ya habéis dicho abra que ir a la sala a organizar todo el tinglado... ¿Vamos?

Sí.

Deseosa ya de salir del Gran Comedor (XD), Sofía se encamina hacia el Hall.

Vale, vamos para allá

Gracias chicos, tampoco es necesario que la busquéis en grupo pero si la veis hacedme ése favor. Nos vemos Os sonrió y se fue, dejando tras de sí el rastro de olor a canela.

Siendo la razon que refeire , decido ir con el grupo a la sala comun . Mi gata aunque no tiene cascabel y no se assusta facilmente de las cosas , no el gusta el caos y se habra escondido.Y siendo de las pocas cosas que tengo que proteger me levanto y voy con ellos.

Me uno a la comitiva que parte hacia la Sala Común.

A ver cómo se encuentra Luna...

Sofía va directo a la mesa de Ravenclaw donde ya está preparado un suculento manjar.

Llego junto con Sofía y me siento frente a ella, con una montaña de comida entre los dos...

Jamás hubiera pensado que existía tanta comida en el mundo!! ¿Crees que pasara algo si ceno solo chocolate?

Sofía se ríe ante el comentario de Salomón.

Jajaja, ¿y realmente quiere llenar tu estómago sólo de chocolate cuando hay tantísima comida aquí? Aun así, no deberías hacerlo, Salo - sigue sonriendo - tienes que comer sano. Hay que cuidar del cuerpo para cuidar de la mente.

Dirige la mirada hacia la entrada del Gran Comedor.

Tardan... Aún hay muchos sitios, pero.. Por si acaso les guardaremos algo de comida. - y saca un pañuelo de su bolsillo.

Instintivamente, le sirve un muslo de pollo y zumo de calabaza y se sirve ella misma también con algo de ensalada, siquiera sin mirar su plato y sigue parloteando - Espero que Sara Carbonés se haya calmado, que... - luego se da cuenta de lo que ha hecho y se para mirando a Salo con cara de culpabilidad. - Vaya, lo siento.. Yo... Perdona, ni siquiera te he preguntado qué era lo que te gustaba...

Vaya, lo siento.. Yo... Perdona, ni siquiera te he preguntado qué era lo que te gustaba...

Miro sonriendo la comida que -casi instintivamente- me había servido Sofi...

Tranquila, tampoco hubiera sabido que responderte. La mitad de la comida que hay servida nunca la había visto, y la otra nunca la había probado. Este zumo de naranja tiene muy buena pinta... Le pego un trajo al zumo y se me cierran los ojos al notar un sabor muy diferente del que me esperaba... ¿Este zumo es fermentado o algo? Tras eso cojo el trozo de carne y le doy un mordisco mmmm, ta'bueno ¿que es? mmmm cuando me lo acabo cojo otro trozo y le hecho por encima un poco de chocolate fundido. Había pasado toda mi infancia babeando sobre los escaparates de las panaderías, mirando los dulces, tartas, flanes y helados que nunca me podría permitir... y ahora tenía la oportunidad de poner al dia mi estomago.

Asi también está bueno Le digo con una sonrisa a Sofi y luego me quedo mirándola Gracias por explicarme antes lo del Dementor, me encanta oirte hablar sobre esas cosas, sabes tanto, eres un pozo de sabiduría mágica.

Sofía se queda unos segundos mirando a Salomón cómo le echa el chocolate fundido por encima. Estaba preguntando qué era... ¿Cómo había sido su vida hasta ahora? De repente, en la cabeza de Sofía se arremolinan mil preguntas acerca de él. Pero Sofía siente que aún no es el momento, sobre todo cuando siente aún una especie de muro transparente que les separa.

Sofía nunca había tenido problemas en hacer amigos, ni en que se abrieran con ella. Pero este chico tenía algo, que le atraía fuertemente y a la vez hacía que no pudiera avanzar más a partir de un punto. Tiempo. Quizás, el tiempo respondiera a esa pregunta. Quizás debía esperar, cuando él estuviera preparado para confiar su historia en otra persona. Esperaba que esa otra persona fuera ella.

Tras unos segundos de breve vacilación, Sofía vuelve a sonreír. - ¿Verdad que está bueno? Aunque eres la primera persona que veo que le echa chocolate fundido en un muslo de pollo. No, espera.. Vi una vez a mi abuelo echarle sobre la carne de pato, jajaja. El zumo es de calabaza. Es muy común en este mundo. No es tan ácido como el zumo de naranja (que lo hay igualmente), y desprende un sabor dulzón que no llega a ser del todo dulce.

Ella también coge su muslo de pollo con algo de picante, tras acabar con su ración de ensalada. - Qué va, no soy para nada un pozo de sabiduría, jajaja. Simplemente, éste ha sido mi mundo desde nacimiento. Cualquiera te lo podría haber explicado igual. - Muerde un trozo de pollo y lo traga. Tras un sorbo de zumo, añade: Cualquier duda, ya sabes. Espero que te lo pueda contestar a todo lo mejor posible. Éste es tu mundo, a partir de ahora, que nada de sorprenda.

Acaba su plato, y coge un trozo de tarta de chocolate.
- Hmmm, chocolate... A mí también me encanta el chocolate. Jeje, pero deberías probar más cosas. A ver, a ver... - Sofía mira por la mesa buscando algo. - Por ejemplo, ésto. - Coge un trozo de tarta de arándanos, lo parte con el tenedor y le acerca a la boca de Salomón. - Prueba. - Esperando a que Salomón se lo metiera en la boca, mira de nuevo hacia la entrada y susurra. - Definitivamente, les tendré que guardar algo. ¡¡Anda, come!!