Partida Rol por web

Estaba claro que el droide no iba a ser de gran ayuda. Aquello estaba atestado de gente, tal vez fuera más conveniente buscar algún humano más receptivo..... o... mejor... una humana.

Aldor buscó con la mirada alguna camarera. Seguro que con una propina estaría dispuesta a ponerles en contacto con alguien que pudiera conducirles hasta el nivel 1313.

- Dadme unos minutos - digo a mis compañeros mientras me alejo en dirección a la barra.

Me acerco a ésta buscando un taburete cercano a alguna de las camareras que, ajetreadas, invierten su tiempo en preparar toda clase de bebidas imaginables. Por otro lado, resulta lógico, allí concurren todo tipo de personajes de la más diversa índole y, por tanto, de gustos muy variados.

Cuando una de las camareras más atractivas se me acerca, me dirijo a ella:

- Cariño.... serías tan amable de servirme una cerveza agárica? 

Espero a que me sirva para añadir:

- Por qué no te tomas algo conmigo? Yo invito... Hace mucho que no veo una cara bonita con la que hablar...

Te acercas a la barra y llamas la atención de una camarera. Esta se detiene junto a ti preguntándote que quieres.

Te sirve la bebida y le haces la proposición.

- ¿Qué dices? ¿Ves alguna bailarina Twi'lek aquí? Creo que te has equivocado de local - te dice torciendo el gesto algo disgustada con tu propuesta -. Son diez créditos - añade mientras extiende su mano hacia ti.

Vuestro compañero se acerca a la barra y llama la atención de una camarera humana, le sirve una copa y este le hace un comentario.

Al instante veis que la camarera tuerce el gesto en forma de disgusto y extiende la palma de la mano pidiéndole dinero.

Estando parada frente a la puerta, Talya se sintió estúpida. ¿Realmente esperaba llamar y esperar amablemente a que alguien abriese a una figura embozada en una armadura de combate?

Pensó en sus alternativas. Quizá lo más fácil hubiera sido intentar acceder de otro modo y buscar las pruebas directamente. Quizá lo que debería hacer sería tirar la puerta abajo.

A la cazarrecompensas le pareció que le castañeaban los dientes. Le hubiera gustado que le dispararan allí mismo. Una situación de la que poder salir por la fuerza y la habilidad. Una situación en la que no fuese su equilibrio emocional lo que estuviese en juego. Nada la asustaba más que eso.

Levantó una mano para llamar al timbre, pero se quedó congelada antes de completar el movimiento.
 

La respuesta de la camarera la esperaba. La gente no era muy dada, al menos no de primeras, a soltarse con el primer que le hablaba....

- Si hubiera querido la compañía de una  Twi'lek,me hubiera dirigido a ella, no te parece? he cruzado media galaxia para hablar y tomarme una copa contigo... nada tienes que perder.....

Mientras hablo con ella, mis manos aferran la jarra de cerveza sin llevármela a la los labios esperando a que ella se decida.

Podéis ver como Aldor continúa charlando con la camarera, que espera con cara de enfado y la mano extendida a que le pagué la bebida y respondiéndole a lo que Aldor le está diciendo.

La camarera te mira levantando una ceja.

- Venga paga tu consumición y vete tan rápido como puedas - te apremia la camarera desde detrás de la barra ya malhumorada.

Te quedaste congelada, o quizá solo tuvieras la sensación que el tiempo lo había hecho a tu alrededor antes de tocar el timbre, pero no lo tocaste.

A pesar de que no llamases a la puerta, esta se desliza hacia tu izquierda y puedes ver la silueta de un hombre con ropas formales que mira al interior del piso.

- ¡Cariño! - grita mientras la puerta acaba de abrirse -. ¡Me acaban de llamar de la oficina, tengo que salir, volveré en un par de horas!

No es tu padre, ni tu hermano, ni nadie que conozcas, le ves la cara cuando se da la vuelta y se dispone a salir. Al verte se detiene de golpe sorprendido, no esperaba a nadie ahí.

- Perdón, ¿nos conocemos? - te pregunta algo titubeante.

Te das cuenta que el hombre está acostumbrado a ver gente con casco, pero está algo asustado por la forma del tuyo, que no es, ni de lejos, parecido al de un soldado de asalto, ni ningún miembro del ejercito Imperial.

Cohibida por la sorpresa y la decepción, la joven tarda unos segundos en recomponerse y contestar.

Perdone, yo... Ah... Lo siento, me he debido de equivocar.

Pero cuando ya se preparaba para marcharse, inquirió:

¿No es esta la casa de Conrad Vassan?

Sys-Kain permaneció alerta. Intentaba leer las intenciones de la camarera. ¿Era dinero lo que buscaba y le desagradaba que Aldo no se proporcionase o era algo más? Tampoco era lo que se decía un trandoshano social (su idea de ser agradable con alguien era más bien no dispararle con su carabina), así que se quedó en un discreto segundo plano por si había problemas en el horizonte...

- ¿Perdón? No, claro que no, esta es mi vivienda, mi nombre es Luca Prastee, no conozco ningún Vassan - te contesta amablemente -. Ahora si me disculpa...

El tal Luca te aparta educádamente y se dirige al turboascensor que acabas de dejar cerrando la puerta de su vivienda tras de sí. Mientras espera a que el ascensor llegue notas como te va mirando de reojo.

Repasas mentalmente tus pasos, y sí estás en esa vivienda que había sido tu hogar hasta que te marchaste a causa de la muerte de tu hermano, aunque habían pasado unos años, quizá se hubieran mudado a causa de sus actividades.

Ves a Aldor agarrando la jarra de una cerveza con una mano, identificaste hace un rato que lo que quería tu compañero/protegido era ligar con la camarera, por lo que oíste mientras se dirigía a la barra. Sabes que las relaciones entre humanos de diferentes sexos no son muy diferentes que las de los tuyos. Así que, por la cara que pone la camarera, parece que el intento de Aldor la ha molestado y está intentando recibir el pago de la bebida como una forma amable de "echar" a tu compañero/protegido del local.

La verdad es que era divertido ver actuar a Aldor, tenía curiosidad por ver como manejaba la situación, por lo que mientras seguía bebiendo con sus compañeros de mesa, de reojo controlaba a su "socio". Poco a poco imaginaba que la situación se iba a ir complicando, y mejor ver quien daba la talla desde el principio.

Justo volvió a pasar otro droide camarero de los que no querían ayudarles a alcanzar el nivel 1313.

-Oye mecánico, trae otra ronda para los tres.

Aunque probablemente estuviese empezando a sufrir delirios, Talya contempló la posibilidad de que aquel tipo le estuviera mintiendo. Decidida a no dejar que el rastro se enfriase, se preparó a seguirlo en la distancia.

Esta claro que mis encantos no han conseguido ablandar a la camarera así que, de perdidos...., le formulo la pregunta como sí tal cosa; con un pequeño deje de urgencia y necesidad en mi tono.

Mientras saco el dinero para pagar mi deuda le pregunto:

- Verás, necesito llegar al nivel 1313, quizás podrías ayudarme?

La camarera recoge el dinero y se te queda mirando cuando cambias el rumbo de la conversación.

- Tsk, me parece increíble tanta tontería para preguntarme como se llega a un nivel de la capa del planeta - dice sorprendida la camarera -. Tienes aerotaxis y lanzaderas civiles que hacen el trayecto a cualquiera de los niveles cada día, y ahora, será mejor que te pires, ya tienes lo que querías.

La camarera se da la vuelta ignorándote, metiendo el dinero en la caja y atendiendo a otro cliente en otro punto de la barra.

La camarera relaja el rostro ante un nuevo comentario de Aldor junto con la recepción de unos créditos que vuestro compañero saca del bolsillo.

Ella le dice algo más y se separa de Aldor poniéndose a atender a otros clientes.

Aquella era una de esas veces en las que Aldor se sentía como un estúpido. Su intento de flirteo con la camarera para conseguir información había quedado en un absoluto chasco; y no por haber fracasado en él precisamente, sino por la respuesta recibida:

- Tsk, me parece increíble tanta tontería para preguntarme como se llega a un nivel de la capa del planeta -dice sorprendida la camarera -. Tienes aerotaxis y lanzaderas civiles que hacen el trayecto a cualquiera de los niveles cada día, y ahora, será mejor que te pires, ya tienes lo que querías.

Con ella en la cabeza se reúne con sus compañeros.

- Creo que deberíamos de coger una lanzadera y adentrarnos en el nivel 1313... aunque, claro, primero deberíamos de buscar a la cazarrecompensas para que se una a nosotros.

Por cierto.. me debéis diez créditos - digo guiñándoles el ojo a mis compañeros.

Aldo llegaba con cara fustración, para a continuación explicarles la forma de llegar al nivel 1313.

-Jajajaja, ALdo piénsalo por el lado positivo ahora sabemos lo fácil que es llegar. En cuanto al dinero no te preocupes, lo descontamos de los beneficios totales y arreglado. Pero si prefieres jugar a doble o nada en una partida de Sabacc estaré encantado.

A continuación Azo se levantó, revisó que llevaba todo encima y dijo:

-Bueno equipo estamos listos, vayamos a por esa lanzadera. La cazarecompensas confío en que aparezca allí. No somos sus niñeras y si ha decidido abandonar es su problema.

Se giró para observar con detenimiento la perplejidad personificada en la cara de Aldor. Después de escuchar las explicaciones del contrabandista, bufó una sincera carcajada, sin malicia alguna. 

Garr igual que tú en cuanto a mujeres, nunca le hacen caso ... farfulla para a continuación volver a pegarle un lingotazo al brandy Coreliano.

Mientras se levantaba Azo, el wookie se dió cuenta de lo rápido que había pasado el rato en la cantina, al contrario de lo que pensó en primer lugar. Gustosamente hubiera aceptado jugar una partida de Sabacc con los allí presentes. 'Compañía agradable para compartir unos tragos' pensó mientras se levantaba de la mesa y asentía ante las palabras de apremio del piloto.

Sí, vamos a por esa lanzadera, gruñó.